Papi necesita ayuda

Todos los días se peleas. Nunca pensé que iba a tener que vivir esto. Siempre lo veía en las peliculas o en las series. Pero cuando vi como mi madre se iba a casa de mis abuelos a pasar el fin de semana, descubrí que esta no iba a ser una pelea cualquiera. Durante toda esta semana habían estado peleandose. A esto había que sumarle que esas peleas provocaban que mi madre estuviese peleandose no solo con él, sino que también estaba constantemente intentado generar pelea conmigo.

Desde el viernes las cosas parecián que no iban a mejorar. Para empezar mi madre se fue y dejó todas sus cosas por cualquier lado. Después de arreglar todo lo que ella dejó tirado, mi padre resbaló con una de las bolsas que mi madre tiró en el suelo y tube que llevarlo corriendo a urgencias. Cuando llegamos a casa él se tumbó a descansar mientrás que yo intentaba recoger todo lo mejor posible.

Cuando pensé que iba a pasarme todo un fin de semana cuidando de mi padre, las cosas se empezaron a poner raras. Y todo eso fue debido a que tube que ayudarlo en la ducha. Ya lo había ayudado alguna vez en la ducha, el pobre solía caerse frecuentemente, pero nunca había pasado nada raro. Y con raro me refiero a claramente, a que nunca pensé que mi padre se empalmase mientrás lo duchaba.

Él se pusó muy nervioso y claramente aprovechó el tiempo que le dí, discretamente, mientrás yo fuí a buscar unas toallas para intentar desahogarse. Aunque cuando volví y lo ayudé a salir de la ducha se resbaló y se me cayó encima empapandome en el proceso. La situación fue muy incomoda y con el tiempo podía sentir como mi padre se pegaba ligeramente cuando intenteba levantarse. Al mismo tiempo, también vi como él se quedó mirando fijamente como mi camiseta mojada se convertía en una segunda piel. Cuando vi como esto estaba alargandose más de lo debido, me intenté levantar mientrás él de la forma más rápida que podía se levantaba. Intenté por todos los medios ir a cambiarme cuando estaba de pie, pero sorprendenteme no dejó que me fuese. En todo el tiempo mientras lo secaba no podía sacar de mi vista como su polla volvía a estar en alza y como él no dejaba de mirar mi camiseta.

La situación no mejoró. Escapé rapidamente a cambiarme a mi cuarto y solo me lo cruce en la cena. Cena que hizo que todo se fuese a la mierda. Porque todo empeoró o mejoró, no sabría decirlo, a partir de ella.

En la cena, mi padre decidió que quería beber unas cervezas para relajarse un rato antes de irse a dormir. Pero todo se nos fue de las manos lentamente. Yo no solía beber pero tomé algunas cervezas para acompañarlo. Y cuando ya estabamos más que borrachos, mi padre empezó a contarme cosas de su vida intima con mamá.

• ¿Sabes cuando hace que no follamos, corazón?- dijo mientrás lo acompañaba al sofá a trompicones.

• Más de medio año. Medio año.- dijo una vez sentado.- Ven cariño. Sientate aquí con papá.

Yo no sabía casi ni lo que hacía. Estuvimos sentados mientras él hablaba y yo reía ligeramente por casi cualquier cosa. Con el paso del tiempo me fue dando de cuenta de como él me estaba acercando hasta el punto de que estaba sentada encima de él.

De un momento a otro, pasó de estar hablandome de la falta de sexo con mi madre a estar intentando meter la mano por debajo de mi pantalon corto de pijama. Eso no estaba bien, pero cuando intenté levantarme mi padre me agarró más firmemente, mientrás empezó a besarme el cuello haciendo que me volviese a tumbar encima de él.

• Esto no está bien papá.- dije mientrás abría mis piernas y él me seguia tocando.

• Tranquila corazon. Esto es algo que necesitamos los dos. Llevamos mucho tiempo con mucho estrés.

No sé como lo hizo pero me giró y alli tumbada en el sofá tenía a mi padre presionado firmemente a mi cuerpo. Rápidamente él se quito los pantalones mientras no dejaba de sobarme por todas partes. Con la borrachera que llevaba encima sentía como me estaba quedanda dormida por momentos, por eso cuando cuando quisé darme de cuenta mi padre estaba entre mis piernas masturbandome. En ese momento sin darme de cuenta empecé a gemir suavemente, provocando que él levantase la cabeza y se acercase lentamente a mi cabeza besandome con furía. No tube demasiado tiempo cuando mi padre me penetró y comenzó a darme fuertemente. No sabía que pasaba pero de mi boca solo salían gemidos.

• Papi...Papi...siii.- gemía fuertemente mientrás él me taladraba con toda la fuerza que tenía.

• Sii corazon....sii.- gemía mi padre.

Estubimos toda la noche follando como conejos. No había forma de que parasemos. Pero eso es otra historia.