Papá y Mamá
Nunca pensé que ayudaría a mis padres sexualmente
Me llamo Javi y ahora tengo 45 años. Vivo solo desde hace unos años que me separé de mi mujer por problemas de entendimiento entre ambos en muchos ámbitos de la vida.
Me describiré. Soy bajito de 1,65 más o menos peso unos 115 kilos soy gordo pero fuerte mi barriga es dura y apretada, mis brazos fuertes y duros mi culo enorme y firme y unas piernas muy fuertes también aunque soy gordo me intento cuidar mucho en el gimnasio. MI polla es normal y mis huevos grandes y apretados. Y un ligero vello por todo mi cuerpo.
Esta historia comenzó hace muy poco tiempo y a partir de ese momento mi vida sexual y mental cambió por completo.
Mis padres me tuvieron muy jóvenes mi madre se quedó embarazada muy joven y se casaron. Su vida siempre ha sido ejemplar ya que se quieren mucho y mi infancia fue maravillosa ya que siendo joven mis padres todavía lo eran y salíamos muchas veces juntos y me sentía muy cómodo con ellos.
Hará como dos meses mi madre me llamo muy triste. Me dijo que le gustaría verme y hablar conmigo ya que últimamente la relación con mi padre no iba muy bien.
Quedamos en un bar de la ciudad y allí apareció ella, es bajita gordita con una preciosa barriga y un precioso culo duro y una preciosas tetas muy grandes, su cara denotaba tristeza y eso me afligió mucho. Era verano y llevaba un vestido muy liviano que marcaba su cuerpo gordito y voluptuoso perfectamente.
Hola mamá- le dije
Hola hijo- contestó
Que ocurre? - pregunté
No sé por donde empezar hijo mío. Las cosas con tu padre no van bien desde hace unos meses. No me he atrevido a decirte nada antes por no preocuparte.- explicó ella
Pero si siempre ha ido todo muy bien entre vosotros, sois un ejemplo de matrimonio feliz.- dije yo
Ya no es el mismo está triste quizá por que se ha jubilado, está siempre muy serio y apenas hablamos y ni siquiera me toca en la cama y ya sabes que tu padre es un hombre muy activo sexualmente y hacíamos el amor a diario.- dijo ella
No se mamá quieres que hable con él? - pregunté yo
Me gustaría que vinieras unos días a casa y que comprobaras tú mismo como se comporta, yo he intentado hablar con él pero me dice que no le pasa nada, quizá tu presencia le ayude a reaccionar y a contarte que le ocurre.- habló mi madre
Como quieras mamá yo ahora estoy de vacaciones así que me puedo ir unos días a vuestra casa con la excusa de que me ahorro un dinero y lo disfruto con vosotros, te parece? - le dije
A mi madre le pareció bien y decidí que ira el viernes ósea en dos días. Mis padres vivían en un pequeño chalet a las afueras con piscina incluida lo cual ayudaba a soportar el calor en verano.
Llegó el viernes y aparecí en casa de mis padres a media mañana. Mi madre me abrió la puerta y me llevó a mi antigua habitación deje mis cosas y me dijo:
Ponte el bañador y bajemos a la piscina, tu padre está allí.
Así lo hice y bajé a la piscina y allí estaba mi padre tumbado en una hamaca. Tiene 67 años y es como yo pero en mayor. Mas bajito que yo debe medir 1,60 y pesar lo mismo que yo, calvo y con una barriga enorme y dura unos pechos increíbles unas piernas macizas y un culo que casi no le cabía en el bañador uno de esos pequeñitos de nadador profesional que marcaba un enorme bulto entre sus piernas. Había visto a mi padre desnudo muchas veces ya que mi familia siempre ha sido muy liberal y nunca nos escondíamos de nada y sabia que tenía una buena polla bastante gorda y sus huevos eran mas grandes que los míos.
A su lado estaba mi madre que ya tiene 65 años y llevaba un bañador entero que marcaban su figura de una manera muy especial ya que su barriga y su culo se marcaban mucho y sus tetas apenas se podían mantener dentro del bañador.
Os he de decir que siempre me han gustado las mujeres gordas. Mi exmujer se parecía fisicamente mucho a mi madre y también me fijaba en algún gordito ya que me considero bisexual aunque me tiran más las mujeres pero algún trio he hecho con alguna pareja hombre y mujer gorditos.
Hola papá.- saludé a mi padre
Mi padre se levantó y con una preciosa sonrisa me abrazo y me dió un beso en la mejilla. La verdad es que noté algo especial en su abrazo y en su beso muy cercano a mis labios.
Hola hijo que alegría verte. Estás muy guapo y moreno.- dijo él
Me sorprendió también su afirmación pero no le dí mayor importancia ya que mis padres siempre han sido muy cariñosos conmigo.
Cuantos días te quedas? - preguntó.
Si no os importa estaré una semana ni os cansais antes de mi. - dije con tono de broma.
Genial hijo, te puedes quedar todo el tiempo que quieras. - apostilló mi padre
La verdad es que se le notaba muy contento y no paraba de mirarme de arriba a abajo lo cual me sorprendió ya que mi padre nunca lo había hecho antes. He de decir que la figura de mi padre también me gusta ya que es el tipo de hombre que me gusta.
Pasamos unas horas en la piscina bañándonos y charlando los tres de manera muy amena. Mi padre no paraba de ponerme la mano en la pierna a la menos oportunidad que tenía y a mi me resultaba agradable incluso a veces me las acariciaba de manera disimulada llegando a veces a tocar mi paquete. Aquello si me extraño un poco pero nunca pensé en nada malo.
Mi madre se fué a hacer la comida y nos quedamos mi padre y yo solos en la piscina.
Decidí no perder tiempo y ataque el posible problema que me había dicho mi madre con respecto a mi padre.
Papá me dice mama que te nota muy raro y muy bajo de moral. Ocurre algo entre vosotros?
Mi padre se quedo sorprendido ante la pregunta tan directa.
Bueno no estamos pasando nuestro mejor momento hijo mío.- contestó
Me ha dicho mama que ni siquiera hacéis el amor. Perdona mi atrevimiento papa.- seguí con el interrogatorio.
Es verdad hijo no tengo ganas de nada y veo que la pobre sufre pero no es su culpa.
Papa que ocurre por favor, dímelo.- inquirí yo
Mi padre se quedo un poco pensativo mirando con unos ojos muy distintos a los de siempre. Yo le puse las manos en los hombros en señal de cariño y él me las cogió con una ternura enorme. Sus enormes manos acarreaban las mías y fué bajando por mis brazos hasta llegar a mi cara. Yo no paraba de sorprenderme incluso bajé mi mirada y fué cuando vi que su bulto en el bañador era enorme y se marcaba su erección perfectamente.
Sin más volví a mirarle a la cara y sin mediar palabra me besó en la boca. Yo me quedé perplejo y sobre todo porque noté que su legua luchaba por entrar en mi boca. Sin saber porque yo abrí la boca y nuestras lenguas se juntaron y empezamos a acariciarnos sin pudor. Mi polla empezó a tomar dureza aunque mi cabeza me decía que aquello no estaba bien pero la lengua de mi padre se movía como hacía mucho tiempo no sentía. Em pesó a acariciarme mi pecho y mis pezones que ya estaban duros como piedras bajo por mi barriga hasta que llegó a mi polla que ya luchaba por salir del pequeño bañador. Yo le imité en todos sus movimientos y por fin llegué a su enorme rabo que ya se salía por la parte de arriba del bañador.
Pero de repente paró y se apartó de mí.
Esto no está bien hijo, no sé que me ha pasado, perdoname.- dijo muy avergonzado
Te he visto tan guapo y tu cuerpo es precioso y no me he podido resistir hijo mío.- siguió
A ver papá que pasa? Nunca te habías comportado así y yo no sé como me he dejado llevar pero a mi ver tu cuerpo también me gusta ya sabes que los gorditos y gorditas me encantan pero nunca pensé que te gustaran los hombres. Dije yo
Mi padre se me quedo mirando muy fijamente y empezó a contarme.
Mira hijo hará unos 4 meses estaba en el vestuario de la piscina municipal ya que hasta verano voy siempre a nadar y estando en la ducha entro un hombre de mi edad muy parecido a mi quizá un poco más alto pero también con una barriga enorme y unos pechos brutales y duros coronados por dos pezones enormes, un culo increíble y una polla y unos huevos dignos de admiración. Yo nunca me habría fijado en él pero cuando se estaba enjabonando se puso muy cerca de mi sin parar de mirarme y vi como se enjabonaba aquella polla dura y sus huevos y seguía hasta su ojete y todo mirándome con una cara de deseo increíble. Yo me quedé paralizado sin saber que hacer ya que no se porqué aquello me empezó a gustar. Entonces se acercó y me empezó a enjabonar mis tetas mi barriga mi polla mis huevos, me dió la vuelta y me enjabono mi espalda y mi culo incluso metió un dedo enjabonado en mi ojete y aquello ya me desató por completo hijo mío. Me dí la vuelta y empecé a besarle y tocar todo su cuerpo y agarré su polla llena de jabón y el la mía y empezamos a pajearnos con furia mientras nuestras lenguas no paraban de moverse en nuestras bocas y notaba su barriga contra la mía y cogí sus enorme huevos y el siguió metiendo un dedo en mi ojete hasta que le llene la mano con un corrida como hacía años no había tenido. Yo seguí pajeandole hasta que sentí su corrida en mi mano y en mi polla. Sin decir nada se separó de mi se acabo de duchar y se fué dejándome a mi en un estado de shock tremendo. Como pude me terminé de duchar me vestí y volví a casa sin parar de darle vueltas a la cabeza. Desde entonces solo tengo deseos con hombres como aquel y cuando te he visto todo se ha encendido en mi sin ni siquiera pensar que eres mi hijo. Te pido perdón hijo mío pero no se que hacer y tu madre está sufriendo mucho. - Me contó medio llorando
Yo solo pude abrazarle con todo mi cariño y decirle que esto debería hablarlo con mamá ya que les afectaba a los dos.
No, ni se me ocurre, que pensaría de mi? - me espetó
Pues que todos tenemos momentos de dudas sexuales y estoy seguro que ella lo entenderá aunque le cueste te quiere demasiado como para no ayudarte.
No sé como podría enfocarlo hijo mío.- me dijo medio llorando de nuevo.
Fué entonces cuando se me ocurrió una idea que me podría meter en un lío tremendo y necesitaría de mis mayores dotes de persuasión para que aquello saliera bien y mis padres volvieron a ser felices aunque yo saliera perjudicado. En el fondo era engañar a mi madre para que mi padre no tuviera que afrontar esa situación por si solo.
Así que puse en mi marcha mi plan que antes le había relatado a mi padre y le pareció bien.
Hablé con mi madre y le conté el problema y le dije que podríamos intentarlo cuando ella intentara hacer el amor con mi padre que yo entrara y le sirviera de estímulo para que mi madre pudiera volar a disfrutar del sexo con mi padre. Por supuesto no le conté que mi padre también lo sabía ya que ese era el plan con mi padre que mi madre no supiera todo sobre el tema.
Pasarón un par de días en los que todo fué normal, piscina, comidas, siestas y mucha tranquilidad.
Esa noche yo me fui a dormir pronto para que mi padre pudiera intentar seducir a mi padre y poder poner en marcha mi plan.
Al cabo de un par de horas empecé a escuchar unos pocos ruidos en la habitación de mis padres y supuse que mi madre había empezado el juego. Me levanté completamente desnudo y la verdad un poco excitado por la posible situación que me iba a encontrar.
Me acerqué a la puerta de la habitación que estaba entreabierta y pude ver a mi padre boca arriba en la cama con su enorme panza y sus preciosas tetas muy duras y a mi madre comiéndole la polla la cual no se acababa de poner dura y de vez en cuando le decía:
No te preocupes amor tómalo con calma que esto acabará poniéndose a tope.
No lo sé.- decía mi padre
Yo ya con el rabo casi tieso decidí que ese era el momento para entrar. Abrí la puerta y mi padre puso cara de sorprendido y mi madre paró de chupársela a mi padre.
- No os preocupéis seguid con lo vuestro me excita saber que mis padres disfrutan del sexo a tope.
Sin mediar palabra me acerqué a la cama y le dije a mi madre si le chupábamos la polla juntos. Mi madre puso cara de extrañeza pero se aparto y yo empecé a chuparle la polla a mi padre mi madre al principio con un poco de reparo empezó a chuparle los huevos a mi padre que empezó a gemir sin decir nada más. Su polla se puro dura al instante. Mi madre me miro con cara de complicidad y había un cierto morbo en su mirada que me acabó de excitar por completo.
Yo seguía tragándome el pedazo de polla de mi padre que ya estaba dura como una piedra, cuando dijo mi padre.
- Ven Carmina que te voy a comer el coño.
Mi madre levantó su gordo y precioso cuerpo y se sentó en la cara de mi padre que empezó a lamerle el coño de una manera salvaje mientras le amasaba sus enormes tetas y mi madre jugaba con los pezones enormes de mi padre.
Ella empezó a gemir a tope mientras mi padre le estaba sorbiendo el clítoris ya totalmente rojo de pasión y jugueteaba con sus enormes tetas y sus enormes pezones.
Yo seguía a mi labor y la verdad es que lo estaba disfrutando. Acariciaba los huevos enormes de mi padre su panza sus piernas incluso llegué a lamer el principio de su ano a lo cual mi padre respondió con un resoplido de aprobación.
Fué cuando mi madre empezó a gritar fóllame Javier que me corro me estás volviendo loca, dijo mientras le llenaba la cara a mi padre con sus fluidos que no paraban de manar de su coño abierto a tope.
Mi padre me sacó su polla de la boca dejó de comerle el coño a mi madre la puso boca arriba le levanto las piernas y de un solo empujón se la clavo entera en el coño mojado y abierto de mi madre. Era un espectáculo ver esos dos cuerpo grandes sudando a tope chocando sus enormes barrigas mientras mi padre se la follaba como un animal, mi madre empezó a pellizcarle los pezones duros como piedras a mi padre mientras él me decía:
Meteme la polla en la boca Javi.
Me subí a la cama y se la metí entera en la boca, empezó a chuparla con frenesí mientras seguía con su brutal follada a mi madre. Ella no paraba de tener orgasmos uno tras otros la polla de mi padre salía y entraba con facilidad y sus huevos estaban empapados de los flujos de mi madre.
Mi padre empezó a resoplar con mi polla en la boca y noté como sus embestidas eran más fuertes signo de que se iba a correr. Aceleró también la mamada y mis huevos se tensaron a tope y le solté una corrida a mi padre en la boca que no le doy tiempo a tragar y le resbala por la barbilla incluso llegando a su pecho y barriga y en ese momento se la sacó y dijo:
Me coooorrrro
Y empezó a soltar grandes borbotones de leche en el coño de mi madre que alcanzo su enésimo orgasmo. Mi padre se agachó y besó a mi madre con los restos de mi leche hasta que su polla salió por si sola del coño destrozado de mi madre.
Ambos se recostaron en la cama sudorosos y jadeantes yo seguía gozando de ver aquellos dos cuerpos sudorosos y felices de haber vuelto a la normalidad aunque fuera con su hijo en medio.
A partir de entonces voy más a menudo a casa de mis padres y mi madre me pidió cosas que nunca pensé que me pidiera, pero será otra historia