Panama (3) final

Rita debe complacer a sus dos jefes y prerarse para el futuro.

Había ya mucha luz en la habitación cuando  el timbre de la habitación  despertó a Rita.

Abre – gritó Héctor desde el baño.

Ella no encontrando rápido como cubrirse tomo una sábana y se cubrió con ella, sujetándola  con una mano.

Era el desayuno – déjelo en la mesa – le indico ella al mesero que aprovecho para ver el espectáculo que tenía delante. – Mejor en la piscina- dijo Héctor saliendo del baño enfundado en un pequeño bañador.

Vamos dale una propina al señor, dijo él con una sonrisa burlona mientras estiraba un billete a la chica quien tuvo que soltar un poco la sábana que la envolvía y dejar ver su seno derecho al mesero.

Comamos – dijo él cuando se retiro el sonriente mesero-

Quisiera bañarme – repuso ella

Te bañaras después – ponte el bañador si quieres.

El bikini era una talla mas chica por lo que le apretaba, incluso se metía un poco en su rajita y dejaba los labios vaginales por fuera.

Desayunaron mientras él hacia remembranzas de la noche anterior y le hacía preguntas incomodas sobre lo que había sentido.

Al terminar de desayunar le hizo acercarse  a él, y comenzó a jugar con el bañador y metiendo las manos hasta el clítoris de la chica. Esto la calentó y se quitó el sostén, que le apretaba dejando los pechos al aire, el hizo a un lado la  tanga y luego jaló los hilos para desanudarlo, quedando la chica totalmente descubierta.

Hizo que la chica se sentara en su pene que ya estaba erecto y lo cabalgara, ella inició el movimiento cada vez más rápido al sentirse más excitada a cada momento y pronto tuvo un orgasmo, que se repitió casi de inmediato cuando él aceleró el movimiento, finalmente él alcanzó el orgasmo, depositando una buena cantidad de semen dentro de la chica y parte en su abdomen. Ella se sorprendió de lo pronto que se recuperaba después de la intensa sesión de la noche anterior.

Ella se dejó caer sobre el cuerpo sudoroso de él y así estaban cuando llamó el timbre de la habitación.

Ve a abrir- ordeno él-

Ella busco algo con que taparse cuando volvió a sonar el timbre-

Que abras- insistió él dándole un fuerte empujón por las nalgas que casi hizo que ella cayera de bruces.

Ella fue totalmente desnuda sin poder protestar y cuando abrió sus ojos no creían lo que veían

Que buen recibimiento – dijo Edwin Gómez – al ver el maravilloso espectáculo al abrir la puerta.

Abrazó y beso y a la chica dejando la puerta abierta, después se empezó a desvestir mientras caminaba hacia la piscina, saludo a su amigo

-Te dije que era buena-

-Sí que lo es- dijo Héctor levantándose para saludar  a su amigo. Ambos entraron en la piscina.

Cuando estaban en el agua, ordenaron a la chica que  llevara algo de beber para los tres y entrara con ellos en el agua para refrescarse. Rita obedeció humildemente.

Cuando los tres estuvieron en el agua los hombres platicaban  mientras bebían y metían los dedos  en los agujeros de la chica que a pesar de no quererlo recibía placer adentro del agua.

Volvió a sonar el timbre, Rita tuvo que volver a abrir totalmente desnuda.  Esta vez era un empleado del hotel que se quedo atónito al ver la forma en que  le abrían la puerta, ella trato de mantener la calma, pues sabía que sus jefes la veían y disfrutaban de su vergüenza,  le pregunto que deseaba  y él dijo que sólo cambiaria las toallas. La chica  esperó totalmente desnuda mientras el empleado hizo su trabajo y todavía le dio una pequeña propina diciéndole –como si no fuera suficiente con la vista- el hombre se retiró con una gran sonrisa.

Cuando regresó donde estaban  los jefes éstos habían salido de la piscina Héctor descansaba sobre una de los camastros pajeandose para levantar la trabajada polla, al llegar Rita  le dijo que le hiciera una mamada para levantar la verga completamente, la chica lo hizo inclinándose sobre la polla, dejando las nalgas hacia arriba lo que Edwin aprovecho por acariciarle las nalgas primero suavemente y luego apretándolas, esto calentó a la chica que se llevó la mano al Clítoris, Edwin empezó a jugar con el ojete de la chica, escupiendo sobre él, metiendo un dedo y otro, Rita ya no sintió dolor pues su agujero estaba dilatado por el tratamiento de la noche anterior empezó a mover la  cadera en forma circular demostrado su excitación. Héctor disfrutaba de la mamada y pronto hizo que Rita abriera las piernas para meterle la hinchada polla en la vagina, mientras Edwin la metía por el culo, así Rita recibió su primera doble penetración. La chica empezó a moverse frenéticamente, haciendo que los dos hombres tuvieran sensaciones deliciosas en sus vergas mientras ella sentía como ambas trancas se encontraban en su interior, alcanzo un orgasmo, y luego otro, sus agujeros se encontraban perfectamente acomodados a los palos que tenían dentro, otro orgasmo coronado con una serie de gemidos llenó de líquido vaginal la verga y los huevos de Héctor, los hombres cambiaron posiciones cuando la chica alcanzó un tercer orgasmo sin que ninguno encontrará problemas para la penetración, casi extenuada con el cuerpo lleno de sudor y después de un cuarto orgasmo recibió casi al unísono la leche de ambos hombres la de Edwin en la panocha y la de Héctor en el recto, ella se desplomó sobre Edwin y Héctor sobre ambos.

Cuando terminaron Edwin le dijo a Héctor –Creo que hicimos una buena inversión-

Luego se dirigió a Rita y dijo sonriendo- Es importante que conozcas INTIMAMENTE  el hotel y al personal para que puedas entretener como se merece  al Señor Fujiyata que nos visita la próxima semana desde el Japón y a otros visitantes en el futuro-.

FIN