Pajillero con suerte, el 11.
Relato de como un agraciado desconocido pajillero se folló a mi esposa en la cabina de uno de los más conocidos Sex-shop de Madrid.
Es una noche calurosa de un fin de semana de verano en Madrid, mi mujer Frida, llevaba un tiempo queriendo cometer una de sus noches canallas de las que tanto me excitan siempre con mi consentimiento. Cenamos no muy copiosamente pues el calor no invita a ello y prestos a dar un paseo, me tenía intrigado varios días pues me había insinuado que para esa citada noche haría una de sus morbosas locuras pero no me había soltado prenda de cuáles eran sus intenciones acentuando aún más mi calentura por la expectación generada en mí de lo que iba a encontrarme. Esa noche apostó por un vestido de tirantes de gasa extremadamente sexy con estampados florales y muy veraniego, con un escotazo de vértigo por donde sobresalían sus enormes tetas y como tres o cuatro dedos por encima de sus rodillas era la altura de ese vestidito luciendo sus poderosas piernas bronceadas y un muy sexy detalle dado el tejido del citado vestido de gasa, al no ser ceñido pero llevar un cinturón por encima de sus caderas, dibujaban su aguitarrada silueta pese a superar ya los 40 años, adivinándose el uso de un tanga pues como mencioné ese tejido suelto hacían que ambos glúteos, redondos y prieto,s temblaran en su decidido caminar con un compás hipnotizante con la sensual música de sus zapatos de tacón como testigo para todo aquel que anduviera tras ella por la calle.
Al acabar la cena, y sin soltar aún prenda, al poco de iniciar el paseo me sugiere visitar un sex shop próximo que habitualmente solíamos acudir pues varios de sus juguetes sexuales los adquirimos allí y tampoco me sorprendió que lo hiciera con el pretexto de comprar gel lubricante. Al entrar, obviamente fue centro de atención de los allí presentes por motivos lógicos, no es muy usual ver a una mujer en ese tipo de sitio, menos aún una dama tan sexy como lo es Frida y ahí fue donde empecé a atisbar algo de luz a mis dudas de lo que tenía preparado. Se aproximaban las 11 de la noche y ella dialogaba de manera muy sensual conmigo acariciando vergas gigantes de látex, los machos presentes entraban y salían de las numerosas cabinas bien para ver strippers o para desfogarse con una peli porno en soledad pero con cierta distancia y prudencia, las miradas lascivas hacia ella eran inevitables, al igual que mi erección que por aquel momento acuciaba ya mi bragueta. LLegado un momento, determinó poner fin a mi intriga pidiendo que colaborase con ella.........
FRIDA (F): " Cariño, tengo un cometido para ti, sabes que nuestro número de la suerte es el 11, este lugar está infestado de machos desesperados por eyacular, así que llevo varios días dando vueltas a la cabeza que hoy que es día 11, se aproxima las 11 de la noche quiero que te vayas a la cabina número 11 para que el pajillero de turno que vaya a entrar a esa cabina le ofrezcas el regalito de follar conmigo mientras tú lo supervisas.... harías eso por mí??? ".
RICKY (R): " Joder mi amor, eres maravillosa, te va a dar igual el tipo que sea??? sea un viejo de 70 o un pajillero tímido de 19???? , me pusistes como una moto, acepto tu desafío, esperemos que no le entren las dudas por el ofrecimiento, yo no lo dudaría jajajajajajaja".
Me aproximé raudo a la altura de la cabina número 11 que estaba en ese momento con la puerta abierta y desalojada, tenía una luz cálida pero tenue con una amplia pantalla para visionar porno, un sofá como de dos plazas de color rojo y un rollo grande de papel, para limpiar lo que se manche obviamente en una mesa baja era el decorado de esa cabina. Por aquel entonces, mi esposa Frida como a unos 20 metros más o menos de mí de distancia, conversaba con dos moscones que se le acercaron al verla sola con un divertido coloquio pues se escuchaban las risas de los tres de vez en cuando en lo que se aproximaba un hombre muy mayor, serio en su mirada de unos 70 años, venía directo hacia mí, un escalofrío me recorría la espalda, será este viejo verde el que entre en la cabina 11? será este el afortunado?, llega a mi altura, agacha la mirada y pasa de largo entrando dos o tres cabinas más allá. Respiro aliviado, no me convencía mucho ese señor para que fuera el afortunado pero sin pasar ni un minuto de esta acción, de nuevo se aproxima otro señor mayor, quizás más joven que este último, tendría sobre unos 60 años, un señor de apariencia normal, típico hombre con incipiente calvicie, panza cervecera, camisa de manga corta a rayas blancas y azules con pantalon corto azul y zapatillas veraniegas, éste, con un poco más talante me da las buenas noches educadamente y bingo ¡¡¡¡ se dispone a entrar en la cabina 11. Sin titubeos cuando se disponía a cerrar la puerta me dirijo hacia él...........
(R): " Buenas noches amigo, disculpe un instante, verá, no sé como hacerle esta pregunta, Ve usted a aquella mujer de allí que conversa con esos hombres????...
SEÑOR MAYOR, DIEGO (D): " Coño como para no verla, sinceramente no sé que hace ese tren de mercancías en un lugar como este, está que se rompe de buena".
(R): " Le voy a hablar sin rodeos, no pregunte como ni porque, simplemente tiene que contestar un si o un no, en vez de ver una película porno y matarse con dos buenas pajas en la hora que va a estar en la cabina se la follaría usted a ella??? ".
(D): " Tú estás de coña? venga ya por favor".
(R): " Le estoy hablando absolutamente en serio, sin preguntas, solo pasar a la cabina y follar, eso si, yo tengo que estar delante, ella es mi esposa".
Diego que así se llamaba ese señor no daba crédito, tan sólo le adelanté que eramos una pareja liberal y le comenté por encima la fantasía de mi mujer Frida con respecto al número de nuestra suerte que era el 11 y que obviamente también si él accedía a sus pretensiones sería también su número favorito. Sus ojos como platos se le salían de sus órbitas, se había presentado en el lugar exacto y en el momento exacto para follar con una mujer que parecía una actriz porno según me decía atónito el bueno de Diego sin quitarle ojo a mi mujer Frida, antes de acercarme a ella para acceder a la cabina sin levantar muchas sospechas y en un momento en el que el dependiente estaba ocupado le advertí de nuevo a Diego que no había preguntas, solo follar a lo que él me respondió moviendo afirmativamente su cabeza varias veces. Así que una vez los presenté a ambos nos introducimos en la cabina y cerramos con su pestillo y aquello fue coser y cantar.
(F): Así que Diego, te habías visto en una situación así alguna vez?, espero que te portes como un buen machote y disfrutemos de un buen polvo los tres".
(D): ! Jamás me había visto en mis 62 años en algo parecido, tan sólo te digo que nunca he tomado una pastillita azul para empalmar mi polla ni falta que me hace mi reina. te lo voy a demostrar".
Diego me miró como pidiendo la venia , yo se la acepté inclinando mi cabeza y agarró de ambas manos a mi mujer, poniéndose un poco de puntillas para acercar sus labios a los de Frida por aquello de su mediana estatura y los taconazos que calzaba Frida esa noche, ese señor literalmente le había tocado la Primitiva sexualmente hablando, iba como rutina semanal a desfogarse con su pajote viendo porno y de buenas a primeras iba a merendarse a una jaca como lo es mi esposa con mi visto bueno tan sólo por el denominador común del número 11. Después de varios piquitos con los ojos cerrados, Diego viendo que la cosa iba totalmente en serio a continuación colocó sus manos brevemente por su cintura para en un tris levantar lo poco corto de este vestido de gasa que llevaba Frida para amasar con firmeza su culazo propinando los primeros azotes a medida que de los piquitos iniciales, sus besos ganaron en intensidad y ambas lenguas tenían una lucha de poder a poder que ya a criterio perdido, fue asomando también al cuello de Frida, bajando con violencia los tirantes de su vestido cayendo al suelo éste ya con lo cual en ropa interior negra y tacones se dispuso la puta de mi esposa para que ese viejo disfrutara de su premio que no era otro de cambiar su paja semanal por un polvo con Frida.
(D): Dios mío que locura ¡¡¡¡ jajajajajajajajaja hoy es mi dia de suerte, gracias Ricky amigo por hacerme el hombre más feliz de la tierra y como no gracias también a ti zorrita que te voy a dar lo tuyo delante de tu esposo, verás como te folla el viejo este".
(R): " Es toda tuya Diego, disfrútala y folla con ganas porque probablemente no te veas en otra así":
Sin dilación, sentó a Frida en el sofá y con ambos tacones apoyados de manera muy sexy en la mesita baja, apartó el tanga a un lado escupiendo y recogiendo sus propias babas alternando en varias ocasiones el depilado coño de Frida para la ocasión introduciendo varios dedos en su coño, se le notaba que el pajillero de Diego había visto infinidad de pelis porno y actuaba como la ocasión merecía. Urgaba con su lengua el hinchado clítoris de Frida que apretaba la calva de Diego contra su monte de venus mientras se escuchaba el chapoteo de la humedad de los flujos de Frida y la lengua de ese viejo pajillero que por aque momento ya estaba sin el pantalon y los calzones blancos típicos de hombres de su edad antiguos modo slip con abertura en la bragueta advirtiéndole´yo un tamaño de polla standard de unos 14 o 15 ctms, parecida a la mía pero eso si con un tronco más gordo que el que gasto yo. Después de todo era un tipo o muy inteligente o muy generoso pues pausó un instante la comida de coño que le estaba sirviendo a mi dulce putita para que le quitara el sostén y chupara sus enormes pezones marrones que son mi delirio del tamaño de una galleta Maria entendiendo, o bien que era demasiada mujer para él solo o que en un afán de buena voluntad quería verme participar y yo que estaba a mi rollo con mi pajote muy a gusto con asistir a ese espectáculo me ví obligado a participar de él también.
A Frida la notaba hiperexcitada, realmente no lo era por el tercero en cuestión pues era de todo menos atractivo a la vista , ni tampoco calzaba una descomunal polla que pudiera tapar esas otras carencias, supongo que era un compendio de varias cosas: su fantasía que rondaba su cabeza varios días, el lugar como lo era follar en un sex shop que era de las pocas cosas que nos quedaban por hacer y el follar con un completo desconocido que es un plus también. El caso es que no llevaba ni diez minutos y conociendo a la perfección a mi guarra esposa barruntaba que con el hecho de ser comida a la vez por el coño y por sus tetones y como de vez en cuando su cuerpo tenía pequeñas convulsiones su orgasmo se acercaba y creánme que ni mucho menos esperaba que de ese encuentro ella ni tan si quiera fuera a orgasmar pero ya se sabe que el sexo no es como las matemáticas y cuando menos lo esperaba, sobre todo tan pronto llegó el orgasmo......
(F): " QUe bueno, seguid así chupad, chupad, Ricky amor muerde, muerde mis pezones, así más fuerte jodeeeerrr, chupad, no paréis,no paréis,no paréis,no paréis, que me corro, seguid, Diego muerde los labios de mi coño cuando me corra, no puedo más me corro , me corro JODEEERRR QUE ME CORROOOOOOOOOOOO AAAAAAAYYYYYYYYY, UUUUUHHHHMMMMMMMMMMMMM DIOS MORDED MIS PEZONES Y MI COÑO JODEEEEERR QUE BUENOOOOOOOO ":
(R): " Joder Diego estás hecho un macho viril, tan sólo dando lengua has hecho correrse a la puta de mi mujer enhorabuena ella se ha follado a decenas de machos y muy pocos lo han conseguido".
(D): " Verás ahora cuando me la folle, se va a enterar de lo que vale un peine la golfa de tu mujer y de esta cabina no salgo sin partirle ese culazo de puta qu se carga".
Con Frida extasiada aún, Diego se amamantaba de sus tetones dándole tiempo a recuperarse de un inesperado orgasmo que me dejó muy sorprendido así que volví a mi pajote tranquilo dando su espacio al bueno de Diego que cambió de postura para hacerse una cubana con las tetas de Frida que poco a poco iba volviendo en sí pues ya acudía a la llamada del glande de la verga de Diego cuando éste asomaba por ese par de campanas que tiene por tetas Frida. Ese fue el preámbulo de empezar a llevar la iniciativa ella pues se incorporó del sofá e invitándonos a ambos a montarnos encima de esa mesita baja, ella fue mamando de ambas pollas alternativamente en su cómoda posición sentada en el sofá .
(D): " UUUUYYYY , UUUUUUYYYY como la chupas que vicio guarra, madre mía que afortunado eres cornudo, que afortunado eres poder tener a esta cerda a tu disposción cuando gustes, no pares sigue chupando, chúpamela más tiempo a mí que este cornudo dispone de más ocasiones que yo en un futuro jajajajaja".
(R):" OOOOOHHHH, OOOOHHHH que ricco amor, así se comen las pollas de dos en dos corazón , sigue no pareeeeesss ".
(F): " GGLLLUUUUPPPP, GGLLLUUUUPPPP, GGLLLUUUUPPPP, reconozco que soy una adicta comer pollas, me fascina, es mi locura devorarlas".
Obviamente, la cachondez y lo inesperado de la situación advertían que Diego potencialmente no era un macho aguantador y que no le iba a sostener dos asaltos a una puta tan experta como lo es mi esposa, sobre todo cuando abruptamente la apartó mientras se la chupaba, razón de que iba a eyacular sin tan si quiera metérsela cuando minutos antes, muy bravucón él, le insinuó que le iba a romper el culo. Así pues, Diego invitó a Frida a ponerse a cuatro patas apoyando sus rodillas en el reposabrazos del sofá para encontrar una postura beneficiosa por la altura de ambos, pidió a Frida, no sé el porqué, que juntara ambos muslos sobresaliendo con esa postura con su culo alzado sus labios vaginales como una apetitosa hamburguesa que el pajillero de Diego rellenó con su aceptable verga con un sorpresivo pollazo hasta sus mismismos cojones que pilló desprevenida a Frida soltando ésta un jadeo de desaprobación.
(F):" UUUUUUUUUUUUUHHHHHHHHHH tranquilo joder, no tengas bulla en meterla que me vas a partir en dos asi ".
(D): " Ya te lo dije antes puta, te vas a enterar de lo que vale un peine y desde el minuto uno te lo voy a dar, que coño tan jugoso y abierto tienes, apuesto que en un cuartel militar no caben tantas camas como machos corneadores se han cepillado este coño.... OOOOOHHHGGGG DIOS QUE RICO ¡¡¡¡¡¡ ".
La presión en mis huevos era máxima y quise dar un paso más, aprovechando el lado opuesto del sofá y el vaivén de las rudas embestidas que le propinaba Diego, ofrecí mi rabo a la zorra de mi mujer que engullía con celo y de camino amortiguaba los ruidosos jadeos que Frida soltaba por el buen hacer en su coño del viejo verde que triunfó esa noche a costa de la dulce putita que tengo por esposa, todo hay que decir, que probablemente sea de los pocos sitios que puedas jadear a libre albedrío pues en las cabinas que teníamos a los lados se escuchaba lo mismo que en la nuestra..... salvo que en la nuestra no era una película sino que era en realidad jajajaja.
No llevaba ni 5 minutos bombeando el coño de Frida cuando Diego se frenó, se apartó levemente y azotando ambos glúteos los abrió a tope e introdujo su cara entre ambos ofertándole un lustroso beso negro en el esfínter de mi mujer que hizo las delicias de ésta por como contoneaba sus caderas al son del movimiento de la lengua de Diego, preludio de lo que había prometido al inicio y era el deseo de partirle el culo. Para ello, me obligó a ponerme debajo de ella haciendo la postura del 69 practicándonos mutuamente un sublime sexo oral que fue el que mi hizo entregar la cuchara a mi minutos más tarde y así estimulando su clítoris con mi lengua de nuevo, nuevo, era el pretexto perfecto para que la polla de Diego atravesara el culo de Frida partiendo por la mitad sus generosas nalgas.
Era un total inexperto en sexo anal, tanto es así que hasta la propia Frida tuvo que acomodar su brillante e hinchado glande en su ano dejándolo ir poco a poco, ella tuvo que indicarle que el tronco de su polla estaba algo seco y que con su misma saliva se lo lubricara hasta que por fin y con más apuros de los esperados le entró entera con bastante trabajo teniendo en cuenta que su tallo era más ancho que el mío aunque de largo como os comenté al principio era tamaño standard. Mientras mi lengua rebuscaba el clítoris de Frida, obersvaba a pocos centímetros de mi vista, los huevos colgones con pelos canosos de Diego como a duras penas aguantaban las embestidas de Frida pues éste se quedó como colapsado cuando su verga entró en lo más profundo de los intestinos de Frida y era ella quien se follaba con su culo la polla de Diego; era evidente, se iba a correr en un santiamen, pero es que yo tampoco me iba a la zaga y los dos agujeros por donde Frida iba a recibir sus respectivas descarga de leche eran más que claros...........
(D): " A mis 62 años me estoy desvirgando de dar por el culo, que sensación más buena joder, PLAASSHHH PLAAAAASSHHHH ¡¡¡ ".
(F): " Jodeeeeerr no me azotes tan fuerte viejo cabrón, te gusta mi culo ehhhh viejo verde?? puto pajillero córrete dentro de él UUUMMMMM que rica polla tienes ".
(D): " No lo dudes putona que lo haré tengo los cojones hasta arriba de leche de eso puede dar fé el cornudo de tu marido que los tiene a vista de pájaro".
Escuchar ese comentario de un vulgar pajillero de como me estaba humillando fue demasiado para mi, Frida acompasaba una dulce mamada con su boca y una de sus manos, de vez en cuando paraba, se azotaba las mejillas con mi polla y continuaba su trabajo, era demasiado hasta que reventé.......
(R): " No puedo , no puedo más cariño, te voy a dar de mi leche caliente amor mio, no puedo me corro ME CORRROOOOOO, ME CORRRRROOOOOOOO AAAHHHHHGGGG AAAAAAHHHHHHHHHHHHGGGGGGGG AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHGGGGGGGGG santa madre de dios que corrida ¡¡¡¡¡¡¡ ".
Frida toleró estoicamente una soberana descarga de leche entre su boca y su cara de mi parte que con celeridad, como si hubiese alli otra gata putona oportunista recogía de sus mejillas el exceso de leche sobrante que no pudo aguantar en la boca para tragárselo como si se lo fueran a robar, Diego, testigo excepcional de primera mano no pudo ya aguantar y su corrida se acercaba.........
(D): " Ojalá esto no acabara nunca, que estrecho se siente dar por el culo, y ni en sueños encontraría un mejor culazo para estrenarme que no fuera el tuya guarra, ya me llega, ya me llega puta lo tengo, lo tengo ahiiiii que buenooooo ME CORROOOOO ME CORRRROOOOOOO ME CORRROOOO ZORRAAAAAAAAAA AAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHGGGGG AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHGGG AAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHGGGGGGGG AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHGGGGG Mi vida que cualzo que te cargas por Dios que buena estas ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡".
El cuerpo abatido de Diego cayó fulminado sobre la espalda de Frida, estuvo así como un par de minutos , yo por la postura en que cayeron ambos quedé aprisionado y hasta que por fin no se incorporó Diego y se despegó de Frida ésta no pudo moverse, cuando ella quiso levantarse, un chorreón espeso, caliente cayó desde su abierto culo hasta mi frente, aunque de manera accidental, ha sido la primera vez en recibir parte de la descarga de leche de mi mujer encima mía. Ella ha probado cientos de pollas siempre con mi consentimiento con machos poderosos, solventes, atractivos, dotadísimos y nunca jamás ni una gota de leche llegué a rozar, es algo superior a mí; e incluso con decenas de machos dominantes que me lo han llegado a pedir de eyacular encima mía y a eso me he negado siempre en rotundo.... mira por donde, un vulgar pajillero sesentón y desconocido fue el que me desvirgó en ese sentido. Mención aparte tuvo mi esposa Frida conmigo, ella sabe que siempre negué a eso y antes de limpiarse ella al ver parte de mi cara con la lefa de otro macho, se acercó y me besó de manera muy apasionada y tal como sacó su lengua de mi boca, morbosamente pasó la suya por mi frente para limpiarla ante la satisfecha mirada de ese afortunado viejo que gracias al número 11 se folló a mi mujer.