Paja repentina en lugar público.

Cuando recuerdas lo que no debes, en momentos que no debes.

Hola a todos, siento no haber subido nada en tanto tiempo. Estoy dando los ultimos retoques a la segunda parte de Mi amigo hetero III, mientras espero que os guste este pequeño relato.

Estaba yendo a la uni con el coche como de costumbre tranquilamente con mi música, recuerdo que sonaba una canción antigua de “Plan B”, entonces me vinieron muchos recuerdos de fiestas y borracheras.

Recordando borracheras una se me hizo más presente, una de verano en un chalet de unos amigos donde sin saber cómo, terminé liandome y follando con mi mejor amigo, empecé a recordar como nos comíamos la boca, como notaba su lengua por mi cuello, como le mordía el labio, como me cogia y me apretaba el culo y como notaba su gran pene encima del mío rozandose una y otra vez aun con los boxers puestos.

Cuando llegue a la uni y aparque me di cuenta de la enorme erección que tenía en el pantalón, no podía bajar así del coche y al tocarme la erección por encima del pantalón sabía que no iba a bajar por las buenas.

No me quedaba más remedio que masturbarme ahí en el coche, en el parking de la universidad, ya que sino, no se cuando se iba a bajar la enorme erección que tenía. Para más seguridad, me puse en los asientos traseros ya que los cristales están tintados y tengo comprobado que no se ve nada desde fuera. Me quité los pantalones y pude apreciar una mancha en la punta de mi pene, empecé pasando el dedo en círculos extendiendo más la mancha, cada vez más húmeda y viscosa, haciéndome estremecer. Me baje los boxers y estire de mis testículos hacia abajo haciendo que mi pene pegado a la camiseta se irguiera, con un dedo de la otra mano volvi hacer círculos justo en el agujero para lubricar del todo el glande, empezando a respirar más profundamente por la sensación, provocando que lubricase más, hasta que chorreaba del glande de mi pene hasta la base, en ese momento con dos dedos me baje el prepucio y con el líquido y un dedo me rozaba el frenillo provocando un pequeño gemido.

Ya estaba mas que cachondo así que, de perdidos al río, con todo el liquido preseminal que estaba expulsando lubrique dos de mis dedos y dejando mi culo en la base de los asientos traseros, empecé a pasaros por encima del ano ejerciendo un poco de presión hasta que por el calentón que tenía metí la primera falange de los dos dedos dentro de mi ano, produciendo en mí un gemido de placer que intente ahogar tapandome la boca. Me quite también la camiseta, ya que no la quería manchar, quedando totalmente desnudo, con una mano en mi pene y dos dedos en el culo, empecé a pajearme lentamente a la vez que subía y bajaba mi mano por el tronco de mi pene, poco a poco metía y sacaba cada vez más y cada vez más rápido los dos dedos de mi ano, provocando en mi pequeños gemidos que intentaba controlar y provocando una mayor lubricación de mi pene llegando a producir el típico sonido de cuando te haces una paja con lubricante.

Saque los dedos de mi culo y pase tres por mi plande recogiendo líquido preseminal y llevándolos una vez más a mi ano, introduje los tres de golpe haciendo que tuviese que poner cada pie en un reposa cabezas de los asientos delanteros, de esta forma sacaba y metia los tres dedos de mi culo con mayor facilidad y rapidez, incluso llegando a dejarlos dentro hasta el nudillo y abriendolos en mi interior provocando gemidos mientras seguía pajeandome con la otra mano. Estaba cerca de terminar, así que empecé a meterme y sacarme los tres dedos con mayor rapidez y fuerza, junto con la paja que también aumente la velocidad, provocando un placer que hacía que mis dedos de los pies se encogieran.

Deje mis tres dedos dentro del ano, estimulando mi prostata con ellos y me masturbaba rapido, iba a terminar en cualquier momento y a los pocos segundos empece a gemir - Ahh, sii- no podia contenerme - Joder, me… me voy a…-, y entonces - AHHH, AHHHH- estalle soltando siete disparos de semen blanco y espeso, donde tres de ellos fueron a para a mi cara llegando incluso uno de ellos, debido a que tenía la boca abierta gimiendo, a meterse un poco semen en la boca, los demás cayeron en mi cuello, pecho y abdomen. Me temblaban las piernas y aun seguía con mis dedos dentro de mi culo, ahora había notado la presión de mi ano en mis dedos, seguía contraído del enorme orgasmo.

Mire la hora y había estado 15 minutos pajeandome, me limpie con prisa con papel que tenía en el coche, me vestí comprobando mientras que nadie estaba cerca y por tanto nadie había visto, ni oído nada, y salí vestido y limpio hacia mi primera clase del día.

Estaros atentos a mi Twitter o a mi perfil de Todororelatos ya que pronto podreis disfrutar de la ultia parte de Mi amigo hetero.

También si os ha gustado este relato corto y quereis mas de este tipo o quereis que haga una saga con este relato, dejarmelo en los comentarios.