Padres Forzosos VI (pillados)

PADRES FORZOSOS VI (pillados)

*HAY UN ERROR EN EL ÚLTIMO RELATO, YA QUE DIGO QUE ES STEPHAN, PILLA A SU PADRE Y A SU TIÍO, CUANDO ES ESTE EL QUE PILLA A SU HERMANO Y AMIGOS.

COMIENZO LA HISTORIA CORRIGIENDO QUE ES MICHAEL, EL QUE VUELVE A SU CASA.

-          ¡Papá…! – oímos la voz de mi hijo Michael en la puerta del salón.

Los cuatro nos giramos hacia la voz. Yo con un nudo en el pecho al reconocer la voz de mi hijo. No era para menos.

Nos encontró a Fernando (el pizzero) desnudo y de rodillas lamiendo el suelo, mientras que mi mejor amigo, Joy, le estaba follando a pelo, y mi hermano (su tío) y yo (su padre) estábamos mirando, desnudos, cachondos y metiéndonos manos mirando la escena.

Fui a acercarme a mi hijo, pero este salió corriendo por la puerta como alma que lleva el diablo. Le vi salir por la puerta de la cocina de camino a casa de su amigo.

• ¿Qué he hecho? ¿Cómo es posible que esto haya pasado? - dije girándome hacia el trío que, aunque no follando si que seguían desnudos y con las pollas a media asta.

• No te preocupes, hermano. Es algo…

-¿¡ Qué no me preocupe ¡? Me estás diciendo, ¡¿qué no me preocupe ?!- le dije gritando como un puto loco- Mi hijo, un adolescente, acaba de pillar una orgía en la que se encontraban un extraño, un amigo de su padre, su tío y su propio padre. ¿Y aún así me dices que no me preocupe? ¡Tú estás gilipollas! Y mira lo que has conseguido. Ya me he arrepentido de haberos invitado a venir, y eso que no lleváis aquí ni 12 horas.

Subí corriendo a mi cuarto, desnudo como estaba, intentando asimilar lo que había pasado, y de que manera podría hablarlo con él y sus hermanos. ¿Pero que he hecho? ¿Cómo no he tenido más cuidado? Me tiré a la cama, nervioso y llorando. Daba mil vueltas a la cabeza, y no sé como, me quedé dormido.

En el piso de abajo, Fernando comenzó a vestirse.

-          Lo siento, tíos. La verdad que estaba siendo una pasada, pero comprendo la situación. Siento que haya pasado esto. Yo me voy. Ya te preguntaré si se ha arreglado la cosa. Ojalá que no hubiera acabado así, porque me gustaría volver a veros. Y no le tomes en cuenta las palabras a tu hermano, yo habría dicho lo mismo- dijo haciendo una caricia a mi hermano que estaba sentado en el sofá con la cara entre las manos.

-          No te preocupes. Ha sido mi culpa. Ya te avisaré si la cosa se soluciona o si necesitara hacer noche en algún sitio que no sea la calle- levantó la mirada con una fingida sonrisa.

-          Adiós- se despidió Fernando

-          Adiós- se despidieron ambos de este.

-          ¡Qué putada! - dijo Joy. Se que no ha sido culpa de nadie, y a la vez de todos. ¿Cómo se nos ocurre montárnoslo en el salón con los niños a 10 metros? Pero fue sin prepararlo, y como comprenderás en esos momentos no se piensa con la cabeza.

-          Ya lo sé, joder. Pero es mi hermano, es la persona que más quiero en mi vida, y son sus hijos. MIS SOBRINOS. Que les amo con locura….Joder , joder , joder…-decía dándose manotazos en la frente y apoyando la cabeza en el respaldo del sofá.

-          ¿Crees que deberíamos ir a buscarle a la fiesta? - preguntó Joy inocentemente.

-          Creo que no. Es mejor hacer como que no ha pasado nada. Mañana, con la cabeza más despejada, hablaremos con él. Además tiene que estar su padre delante, sino si que me mata directamente. Me voy a dormir- terminó de decir Jesse yendo a su cuarto desnudo, con ese culazo duro meneándose al caminar y la polla manchando de precum y saliva sus muslos al ir chocando contra ellos.

Aún con el susto, Joy no pudo evitar elogiar el cuerpo de su amigo. De rememorar todo lo que había ocurrido, y aunque no era el momento, ni iba a hacer nada, su polla se puso dura. Y así, con toda la sangre en su entrepierna, se fue también a dormir. Pasó por el cuarto de ambos, los cuales habían dejado las puertas abiertas y pudo ver como los dos hermanos dormían igual. Boca abajo, dando la espalda a la puerta, con una pierna ligeramente flexionada, lo que hacía que, entre las piernas, por debajo del culo, se apreciaran los huevos y el capullo de ambas pollas.

Mientras tanto, en casa de Jimmy.

-          Oye, Jimmy, ¿dónde hay birras? -preguntó Stephan quedándose de piedra al ver al mujeriego de su hermano, de rodillas comiéndole toda la polla a su mejor amigo acompañado de Steven- ¿Pero que cojon…? - comenzó a gritar este

Su hermano se levantó corriendo para taparle la boca a su hermano, la cual le olía a polla de una manera bestial. El capullo de D.J rozó el muslo de Stephan dejando un ligero reguero de babas y precum.

Cuando D.J notó que su hermano se había relajado, le quitó la mano de la boca y comenzó a explicarle, pero antes…

-          Te huele la mano a polla, cerdo- le dijo escupiendo en el suelo.

-          Oye, tú, pijito- le dijo Jimmy no escupas en el suelo.

-          Pero es que….

-          ¡Callaos los dos, gilipollas!, que nos van a oír fuera.

D.J comenzó a explicarle a su hermano lo que había pasado. Le contó todo desde el probador de la tienda. Mientras, Steven que seguía muy cachondo viendo el cuerpo de sus dos amigos desnudos y el de un tercero marcando pollonaco en el speedo, comenzó a acariciar la polla de Jimmy, que aunque algo relajada, seguía un poco contenta.

• Anda que avisáis, cabrones. Lo único que me deja esta tía es acariciarle las tetas por encima del bikini, que iba a caer un pajote esta noche flipante. Y vosotros aquí de fiesta - dijo Stephan.

-A eso le pongo solución- dijo Steven- que sin darle tiempo a nada, le bajó el bañador hasta los tobillos y se metió su polla en la boca hasta dar con la nariz en su pubis.

-Joooooder….fue lo único que salió de la boca del segundo trillizo.

Y su hermano le volvió a tapar la boca, pero en esta ocasión usando su lengua.

Ambos hermanos comenzaron a besarse como amantes reencontrados. Nunca podían haber imaginado ese placer al sentirse tan unidos.

Si es verdad que el nudismo entre ellos, verse empalmados, inclusive alguna paja conjunta se habían hecho, pero esto era otro nivel.

Al ver esto, Jimmy se unió a la pareja de hermanos y comenzaron un beso a tres, que se coronaba con el cuarto en cuestión, Steven, de rodillas dándose un manjar de pollas.

Estaba en la gloria. Tenía a tres sementales, con tres pollas ( muy diferentes entre ambas ) para él solo. Chupaba, lamía, acariciaba, pajeaba, succionaba….iba alternando de una a otra. La visión era esplendida. 4 Adonis, desnudos, jóvenes, con las hormonas a flor de pie disfrutando de sus cuerpos, de sus vidas, de sus pasiones sin miedos y sin frustraciones. Sólo dejándose llevar por el placer.

D.J cogió de los hombros a Steven y le llevó al sofá, le tumbó en el cerco de este levantando sus piernas, y poniéndose de rodillas comenzó un beso negro que hacía que el agujerito de este palpitara como si tuviera vida propia. Su hermano gemelo se sentó en el cabecero del sofá y le metió la polla en la boca, rellenando así su otra cavidad. Viendo esta escena, se encontraba Jimmy meneándose la polla a la par que se estiraba de los huevos disfrutaba del trío que se habían montado sus vecinos con su compañero de equipo.

Al ver que D.J se ponía a 4 para comerle mejor el culo a su amante, Jimmy vio la oportunidad de acercarse al culazo de su amigo, al que, sin saberlo este, llevaba siendo el protagonista de sus pajotes hace meses.

En cuanto sintió la lengua de su amigo buscando su interior a través de su culo, D.J elevó la cabeza para dejar escapar un gemido de placer como pocas veces había sentido. Se encontró con la mirada de su hermano trillizo disfrutando de la mamada de su colega. Ambos se miraban, podían ver el deseo en su interior acompañado de cariño, de hermandad. Florecía el amor que se tenían como hermanos, unido a la pasión que sentían como hombres.

Los dos sonreían entre gemidos. Stephan se inclinó sin sacar la polla de la boca de su nuevo “amigante” y en una posición de Tetris, comenzó a besar a su hermano de nuevo. Se fundieron en uno solo a la par que sus amigos disfrutaban de sus cuerpos. Pero para ellos dos, no existía nadie.

D.J se irguió lo justo para poner su polla a la altura del agujero de su compañero de equipo, el cual desprendía un calor abrasador que al acercar su capullo notó que este entraba casi sin esfuerzo.  Comenzó un bombeo lento para que su mejor amigo no sacara la lengua de su culo. Stephan se puso de pie en el sofá, haciendo que su polla saliendo de la boca de Steven, entrara en la boca de su hermano.

Y así, en un trenecito deforme, 4 jóvenes casi veinteañeros, daban rienda suelta a sus fantasías, a su placer. Sin preocuparse que a menos de 5 metros más de una docena de amigos estuvieran bebiendo y disfrutando de la piscina.

-          Oooohhhh…siiiii….-gemía Steven con la polla de D.J en su interior- las ganas que tenía de tenerte así. Lo quería desde el primer día que nos vimos en las duchas.

-          ¿En serio? - contestó este sacando la polla de su hermano de su boca unos segundos.

-          Pu…pu…es…claaaa…roooo que síiiiiii…consiguió terminar la frase entre el gozo que le producía las embestidas de su amante.

-          Y yo deseaba esto- dijo su amigo, Jimmy, metiendo su capullo entre las cachas de este.

D.J se quedó quieto al sentir las intenciones de su mejor amigo. Le miró sonriendo, y al contrario de lo que pensaron este y su hermano, se abrió las cachas para ayudarle con la penetración.

Empujó un poco a su hermano para que se echara hacia atrás, el cual al ver las intenciones se bajó del sofá para ver como su hermano se tragaba su primera polla por el jardín secreto de su cuerpo.

D.J apoyando su cuerpo sobre el de Steven se abrió las cachas haciendo que la dura , caliente y húmeda polla de su amigo entrara en su cavidad. Sintió un ligero dolor, aún estando muy caliente, pero no le paró ni un momento. Steven, a su vez, hacia pequeños círculos con su cadera para follarse él mismo con la polla que tenía dentro.

Poco a poco la polla de su amigo llegó hasta dentro de todo su ser. Notó el abdomen duro y marcado de este en su espalda. Su calor y su sudor se mezclaban con el suyo propio.

Los hermanos se miraron, sonrieron, y a la par que Jimmy comenzaba unas embestidas cada vez más fuertes, el beso de los hermanos cada vez era más apasionado.

Con cada metida en el culo del trillizo, este entraba más dentro de Steven.

Un momento mágico para los 4.

La pérdida de la virginidad de Steven, el “primer gay “, el desvirgue anal de uno de los trillizos, el despertar de sentimientos y sexualidades nunca imaginadas u ocultas….desaparecieron en este momento.

Un silencio solo roto por el choque de cuerpos desnudos, gemidos, besos, lenguas, babas…El sonido del placer único de cuerpos que disfrutan sin pensar.

Un silencio mágico roto únicamente por los bufidos finales previos a la eyaculación.

-          Me corro- dijo Steven el primero. Llenando todo su pecho de leche espesita y caliente que salió disparada teniendo el culo relleno de polla.

-          Joooder, menuda corrida- dijo Stephan que seguía pajeándose viendo como su hermano era follado- Yo me voy a correr también.

-          Dámela, hermanito. Dámela en la boca, por favor. Déjame llenarme de tu leche- dijo D.J fuera de sí, siendo todavía embestido por su mejor amigo.

Stephan se sentó sobre el cuerpo de Steven mojando todo su culo con la lechada de este, y agarrando la cabeza de su hermano para acercarla a su falo, comenzó un vaivén de su polla tan frenético que el olor de su capullo envolvía el ambiente cerca de la nariz de su hermano.

1, 2, 3 …sacudidas más y metiendo solamente el capullo en la boca de su hermano comenzó a vaciar sus pelotas como si no tuvieran fin. Perdieron la cuenta de los trallazos que salieron de esta, pero la boca de D.J no era capaz de contener todo ese líquido que goteaba sobre la polla flácida de su compañero de equipo. Justo en el momento en el que su hermano vació toda su leche en su boca, como en un efecto dominó, él comenzó a llenar el interior de su amigo a base de sacudidas involuntarias de su nabo.

Gemidos y más gemidos salían de su boca, y algún suspiro del dueño del culo donde estaba vaciando todo ese néctar se escucharon en la habitación.

No recordaba haber disfrutado nunca tanto, ni mucho menos haber sacado tal cantidad de lefa de sus pelotas.

Sólo quedaba uno por terminar, el dueño de la casa. Este seguía dentro de su amigo, pero le quedada poco. Con la corrida de este, su interior apretaba más y más su polla de por sí ya muy dura provocándole un placer indescriptible. Sólo le hizo falta un empujón más para caer rendido sobre el cuerpo de este, con convulsiones de su cadera al soltar todo el líquido de sus pelotas.

Al cabo de unos segundos, la imagen era totalmente abstracta; piernas, brazos, cabezas…en un puzzle sin montar, llenos de sudor, babas, leche…recuperando la respiración y las pulsaciones a su estado normal.

Habían perdido la noción del tiempo. No sabían si habían pasado 5 minutos o 10 horas. Se olvidaron de la fiesta, de la gente y hasta del mundo. Hasta…

-          Pero ,¡ joder ! – vivo en una puta familia desestructurada- dijo Michael al encontrarse el cuadro dantesco formado por los cuerpos de sus hermanos y amigos sobre el sofá.

Estos al oírle se levantaron corriendo, y ocultando sus cuerpos desnudos para que no les vieran los demás si se asomaban. Y Se acercaron a él.

-          Calla, Michel, ¿qué cojones estás diciendo? ¿Qué te ha pasado que estás tan nervioso? Aquí no ha pasado nada.

-          ¡Qué no ha pasado nada! ¡Qué no ha pasado nada! ¿Os creéis que soy gilipollas o qué?

-          No grites- le dijo Jimmy, el dueño de la casa.

-          ¡Qué no…que no …grite! -dijo bajando la voz poco a poco hasta que se echó a llorar.

Ambos hermanos, aún desnudos fueron a abrazarle y consolarle.

-          ¿Qué te pasa? ¿Por qué estás temblando y llorando? ¿Te han hecho algo? - ambos hermanos parecía que lo habían ensayado preguntando a la vez

Mientras tanto el anfitrión de la fiesta, habiéndose colocado el bañador salió a ir despidiendo a la gente, con compañía de Steven. Dejando así a los tres hermanos dentro, a solas.

-          ¿Nos quieres decir que ha pasado? - le preguntó Stephan

-          Pues que…pues que…

-          Arranca- le dijo D.J dándole un golpecito amistoso en la cabeza

-          Qué iba a casa a coger un condón, y al entrar en el salón…

-          Si…- dijeron a la par

-          Vi a Joy, a el pizzero, al tío y a papá….- rompió a llorar

-          ¿Qué les ha pasado? ¿están bien? - se levantaron los dos de golpe poniéndose los bañadores

-          Si si. Sólo qué… estaban desnudos y follando.

-          Queeeeeeee….!!!! – dijeron ambos hermanos sin dar crédito a lo que oían. ¿Estás seguro?

-          Totalmente. Papa y el tío se estaban acariciando de pie, mientras veían como Joy se follaba al pizzero a 4 patas en el suelo. Imagino que estarían masturbándose, sólo les vi de espaldas.

-          ¿Y que pasó?

-          No lo sé. Salí corriendo al jardín, pero no podía venir aquí directamente. Cogí ropa de la cuerda y salí a pasear. No podía hablar con nadie. Necesitaba pensar en lo que había visto. Y luego…

-          ¿¡Luego que?!

-          ¿Luego qué? Pues luego llego aquí y veo que mis dos hermanos, las personas que más quiero en este mundo, a las que les cuento todo, son gays y no me lo habían dicho.

-          Perdón, dijeron los dos a la vez.

-          Sinceramente, no sabíamos. Bueno, no sabemos si somos gays, bisex o fue una circunstancia que lo propició todo. Sólo que ha pasado- dijo D.J

-          Pero…

-          Pero..¿ qué? – preguntó Stephan

-          Lo habéis hecho sin mí. Nunca hacemos descubierto nada por separado. Las primeras erecciones, poluciones nocturnas, porno, pajas…. Y esta vez…Y encima…

-          Arranca, coño. Que vas por fascículos.

-          Que quería deciros que creía que era gay y no sabía como os lo ibais a tomar. Y ahora veo esto- dijo sollozando dejando caer su cara sobre sus rodillas.

Ambos hermanos se miraron por encima del cuerpo del tercero. Le levantaron la vista, y arrodillándose delante de él, unieron sus labios a los de este haciendo un beso a tres de amigos, de compadres, de hermanos, de…

Todo esto se sabrá en el siguiente capítulo.