Paciente 113

Las nuevas tecnologias avanzan...

Me desperte poco a poco, una luz blanca me cegaba y varias batas blancas merodeaban mi camilla, parecía que solo había pasado un segundo desde que me presté a esa nueva prueba médica.

  • Felicidades paciente 113, todo a salido según lo esperado. Creo que puede funcionar. Mi compañero le explicara todo en unos minutos.

Hacía tres semanas que el Doctor Kiriakov se cruzó en mi camino. Acudí a él debido a mis problemas con las mujeres. Acababa de cumplir 65 años, jubilación y nueva vida, una buena paga pero no tenía el favor del sexo opuesto. Tenía que desfogarme a mi mismo desde hacia casi 20 años. Desde que mi mujer se murió en un terrible accidente no había tenido roce carnal con ninguna mujer, y no sería por no intentarlo. Mi cuerpo no es apetecible, lo sé. Los kilos me vencían y el poco autoestima me desaliñó por completo.

El Doctor Kiriakov me convenció para someterme a una experiencia piloto que curaría todos mis problemas, no tenía nada que perder y firmé mi consentimiento. Viajé a Moldavia para la intervención definitiva y aquí me encuentro ahora.

  • Le hemos implantado la nueva tecnología, tiene que quedarse unas horas aquí y mañana a la mañana saldrá su avión. A su llegada, visite al Doctor Kiriakov, le estará esperando y le activará e inaugurará su nueva vida.

Cuando pude levantarme me acerqué al espejo. Seguía siendo el viejo feo y gordo de siempre. Mis dos cicatrices en las sienes, única novedad en mi cuerpo.


A mi llegada al aeropuerto, cogí mis maletas y mi taxi directo a la consulta del Doctor Kiriakov. Era temprano, no había pacientes y solo el apuesto médico ruso estaba en el piso.

  • Bienvenido 113, como se siente

  • Como siempre, la verdad, cansado del viaje pero no noto ningún cambio

  • Paciencia, siéntese

Tomo asiento delante de su mesa donde una caja de smartphone con letras grandes "paciente 113" me espera.

  • Las mujeres caerán rendidas a sus pies, es lo que usted buscaba y durante lo que le quede de vida podrá disfrutar. Los cirujanos moldavos le han introducido dos chips en el cráneo y este smartphone será el que los active mediante una aplicación. Si voy muy rápido me puede cortar cuando quiera.

  • Entiendo, continúe

  • Si enciende el dispositivo, verá la aplicación 113 al abrirla e introducir sus credenciales se activará el chip y usted podrá controlar el pensamiento de la mujer que el smartphone capte y usted seleccione. Una vez se sincronice, el texto que usted escriba será lo que se le pase por la cabeza a la mujer y podrá así condicionarla. Alguna duda...

  • Eso es imposible... cualquier mujer

  • Solo la que tenga consigo un smartphone obviamente, salga a la vida real y pruebe. Mañana me cuenta. Si no folla hoy... será que su problema es más grave...

Mi escepticismo era muy alto, me encontraba en el rellano del edificio del Doctor Kiriakov con el smartphone apagado en la mano. Lo encendí y entré en la aplicación. Introducí las credenciales que el doctor me había dado y noté en ese momento una pequeña descarga en mi cuerpo. "Joder, igual funciona" pensé.

Eran las 9 escasas de la mañana, domingo... la calle estaba desierta. No sabía a donde ir.

Lo probaría con la primera que pasase o seleccionaría un poco el material?, esa era la duda. Para probar me valdría cualquiera el caso era saber que funcionaba.

El smartphone vibró. Una notificación de la aplicación apareció. "Elsa, 10m". Me giré a mi izquierda y vi a dos policias que se acercaban por la acera. Efectivamente uno era una mujer.

Pasaron a mi lado hablando entre ellos sin percatarse de mi presencia. Escribí rápido en el movil mientras los seguía "me pica el culo". La chica inmediatamente se rascó su trasero disimuladamente. "pudo ser casualidad, tendré que probar con algo mejor". La chica empezó a silvar la sintonía del Bueno, el Feo y el Malo y me di cuenta de que el Doctor Kiriakov estaba en lo cierto. Funcionaba.

Me quede tan petrificado que la policía se salió del ratio de acción de la aplicación, que era corto y me volvía a quedar solo pero más contento que unas pascuas...


No sabía por donde empezar, caminé sin hacer caso a todas las vibraciones que me daba mi movil, lo tenía claro sabía por donde iba a empezar. Me encontraba delante de la puerta de una conocida tienda de ropa, las dependientas siempre me pusieron muy caliente, la duda era si las PDAs que llevaban valdrían para mi dispositivo. Ojeé primero las tres dependientas que habia. En la caja una madurita de unos 40 años, pelirroja, pelo rizado, la cara llena de pecas, unas buenas tetas aunque no era muy guapa. Corriendo por la tienda una jovencita delgada, alta, morena aunque con pocas curvas y la otra rubia con el pelo muy corto y gran culo. Me estaba empezando a poner muy caliente y la encargada de la caja iba a ser la elegida. Abrí mi smartphone y efectivamente aparecia el dispositivo de caja central, me conecté y empecé a ser ella...


"Ese tio que hace ahí plantado con el movil..." pensé mientras continuaba pasando productos por la caja. Instintivamente no paraba de mirarle, una sensación muy rara se apoderó de mi. Comencé a sentir un calor extraño y me ruboricé cuando se cruzaron las miradas. "no se que tiene ese tio que me estoy poniendo a mil, joder", "quiero follarmelo, no puede ser, en mi trabajo, soy la encargada y estoy deseando meter a un tio en el almacén y tirarmelo" "y por encima un viejo cochambroso, como puede ser.. que me pasa"

Llamé por el telefonillo: "Nuria acuda a caja central", cuando mi compañera llegó salí de la caja y mirando fijamente al viejo me dirigí hacia los probadores, donde está la puerta del almacén. Me seguía.

Mi calentura iba en aumento, mi traje de chaqueta negro con camisa blanca no aguantaba mas y mi calentón empezaba a hacerme sudar. Abrí la puerta del almacén y esperé a que el pasara para seguirle detrás, cerrar la puerta y pasar la llave.

Allí estaba delante de un viejo feo gordo y calvo caliente como una perra.

  • Desnudame, le dije

El viejo se me abalanzó y empezó a sobarme el culo y las tetas mientras me besaba con torpeza. Me sacó la chaqueta y me desabrochó la blusa, mi sujetador quedó a la vista pero cuando iba a quitarmelo me paró.

  • Me pones muy burro así como estás

Y acto seguido se sacó la polla, era una polla normal pero estaba totalmente empalmada, me la metí en la boca y empecé una mamada antológica, ya que mi calentón era imparable.

  • Como mamas tía, joder. Metetela hasta el fondo guarra

  • mmmmmh ahggg mmmmmh ahggg no se que tienes que me pones a tope cerdo

  • Quiero follar

  • Aquí mando yo, es mi tienda.

Estaba fuera de mí, no me reconocía pero me lo estaba pasando de vicio. Estaba sacando la puta que llevaba dentro y me encantaba. Me bajé el pantalón hasta los tobillos.

  • Apartame el tanga y come coño, viejo

No aguanté ni dos minutos semejante comida le agarré de los pelos lo levanté, me aparté el tanga y me puse en pompa para que me follase

  • Quieres polla ya eh

  • Sí, metemela joder y follame

La follada fue potente, el viejo se corrió enseguida, creo q ver a una tia como yo en pompa y con mis tetas botando fue demasiado. Me aparté me vestí, abrí el almacén y le dije que se fuera

  • Volveremos a vernos... Carmen, me dijo mientras me leía mi chapa

  • Tu no catas otra como yo en tu vida viejo chocho, te tocó el euromillón. Le dije mientras cerraba la puerta y me alejaba.

Cuando llegué a la caja, no se que pasó por mi cabeza que me volvía hacia el y en la zona de probadores le planté un morreo mientras agarré su mano y me la puse en mi culo. Que horror! había besado al viejo a la vista de la gente. Mi compañera me miró asustada mientras solo acerté a decir "sigue trabajando anda"


Kiriakov era un genio, funciona, me acababa de tirar a la encargada de la tienda de ropa 20 años despues de mi ultimo polvo. Y que manera de debutar, esto promete...

CONTINUARÁ