Oye, todo iba bien,dice Anibal mas algo especial

Mi empresa se cambió a otro edificio muy lejos, ya nos veíamos poco. Y después hubo algo que no llegué a entender bien del todo.

O ye. Javier, todo iba bien entre nosotros, yo casi nuevo en ese grupo de hombres, tan abierto, tan sinceros y  agradables, y de verdad tuve sexo casi con todos, con cada uno, pero todos respetaban el secreto y lo anónimio de cada uno. En la cama todo, pero fuera de ella, en la sociedad... hombres comunes y corrientes.

No se nos notaba a ninguno que los hombres nos gustaban.

Eso era lo bueno, tener hombre para el amor y para el sexo, y que eso "del gusto" pasara desapercibido, no supieran otros.

Estaba todo de puta madre.

Y lo que hacíamos era lo normal que los hombres hacen cuando se entreagan al sexo con otro varón.

Que qué era  ???

Bueno. no con todos era igual, cada uno tiene su estilo para hacer gozar al compañero y para gozar él.

Pero no era nada raro, todo lo que se hace.... ver, tocar y tocar... decir lo mucho que  le gustas, y tocas más, mas y mas. y decir lo bueno que está uno... que esa polla te encanta. que tu verga casi le fascina... Y que se la dieras...

Con algunos era más tiempo en las mamadas, con otros más el de besos, besos y besos, con otros mas el tocarse y tocarse por cada una de las partes de esos dos hombres necesitados de sexo y comprensión.

En general antes de querer acabar o correrse... era estar mucho mas de media hora,  casi una hora de magreo, de sentir al otro, de encimarse uno sobre el otro, y luego al revés, y de llegar a una calentura tremenda que ya casi no se para aguantaba, y se hacía necesario el lanzar el semen, tener que hacerlo, de la forma que ellos dijeran... y en el lugar deseado para ello.

Si se quería penetrar, pueés a eso, si se quería con paja frente a la cara del otro, pués eso.

Casi siempre había penetración... y casi todos eran versátiles... "dar y que les dieran", que es lo mejor, ya que los dos llegan a sentir lo mismo, en cada apecto del acto sexual.

El lugar de recibir la leche era preguntado por cada uno.

Si se quería probar el sabor del jugo de hombre se decía... y algunas veces se probaba convinando los dos jugos. Era de boca a boca... en besos ardientes, largos, muy largos... ay, qué sensaciones.

Si quieres saber las veces de "desleche" cada una de las veces de estar juntos te puedo decir que era muy variable. Algunas veces era una sola vez. que era lo menos.la mayor parte de las veces eran por lo menos 2

Después de un rato, casi todos querian sexo de nuevo,  tenían las trancas de nuevo duras... y querían otra vez.

Ah... qué pasión de machos...

Los hubo que en dos o tres horas el acto lo querían tres veces. qué aguante de cabrones. Quiero más, quiero mas.

No faltaron ocasiones en las que al ducharse, ya para vestirse e irse... lo hacían juntos, y claro. se les erectaba de de nuevo la verga, y de nuevo a darle al sexo...

Era un gran y buen grupo de hombres... y todos muy felices de ser parte  de él. Tam abierto y con cojones. pero discretos.

Sexo no le faltaba a uno.

Mas para mi enfado... enorme,  y  de todos...  en mi empresa decidieron cambiarse a otro edificio, que estaba a muchos killometros. digamos... y horss de traslado, en una ciudad tan extensa como esta.

Imposible era negarse... era mi curro, mi trabajo.

Ya no podíamos vernos con frecuencia, y menos a la hora del lunch o de la comida... Ni tampoco nos facilitaba el poder estar juntos en intimidad ya que todos vivian por allá.

A echar madres... a morderse un huevo, y la mitad del otro...

Ni modo...

Ya por mi nuevo lugar no tenía hombre.

Me sentía de nuevo solo, muy solo... y traté de buscar.

Me inscribí en un gran gimnasio que hay por allí, por lo menos ver hombres denudos, en vivo, en los vestuarios y en las duchas.

Había mucha gente, especialmente hombres, y algunos buenísimos...

Un dia, casi yo recién ingreado... vi a una especie de pareja, vestidos de calle. que andaban al parecer conociendo el lugar. Ella guapa, de lindo cuerpo, rubia natural... él con traje y corbata.

Miraban y miraban para todos lados... pero lo que mas miraban era a tios guapos y de cuerpos bellos, no demasiados musculados, sino de buenos cuerpos sin nada de exagerar. No les interesaba ver ni el gym ni los aparatos... lo que querían era ver hombres guapos y bellos, de buenos cuerpos bien hechos, de entre 25 y 30 años.

El hombre de traje llevaba una libretita, y en ella iba anotando no se sabía qué cosas, a veces por indcacion de ella.

Mucho tiempo observando.

Al cabo de unas dos horas, y de ver por lo menos, con cuidado y atención, a mas de 70 u 80 hombres algo cansados estaban, seguramente, se sentaron en un sofá, de recepción.

Ahora tú vas con ellos, y entras a los vestidores, y explicas a los selecciondos que no hayas entrevistado, de lo que se trata, del asunto que nos tiene aquí, le dijo ella a él. Si pudiera entraría yo tambien, pero no me van a dejar hacerlo.

Tu puedes entrar... y los ves desnudos de una vez. Y les dices con clasridad todo.

Ese hombre entró, y encontró a muchos desnudos, otros en paños menores.

Les fué hablando... solo uno por uno.

Solo hablaba por separado con cada uno.

Lo vi tachando algunos en su libreta.

Me vió desnudo... y se digió a mí.

Me dijo : no me conoces.

Lo conozco, lo he visto mirando el gym, sus aparatos, y todo lo de ejercicio que se puede hacer, junto con su mujer.

No es mi mujer o algo de eso... soy su ayudante-- chofer.

Y no hemos venido a ver el gimnasio, sino a hombres, HOMBRES GUAPOS Y DE BUEN CUERPO NORMAL.

Ah... les gustan....les gustan...

A ella sí, de mí no tengo por qué decirle.

Ah... pués diga qué se le ofrece...

La señora, mi patrona, es una gran admiradora del cuerpo masculino, le emociona ver los cuerpos de los hombres, con detalle, con detalle, le encanta ver todo lo de hombres, sabe de eso... es como una "busca talentos", pero en lugar de buscar talentos de la cabeza  busca la belleza en hombres...  Es una empresria, busca hombres que gusten a chicos o a chicas, los selecciona luego de verlos bien y despacio. en su csaa o residencia...

Y entonces... de  los seleccionados envia sus datos a los grandes modistos o creadores de moda, a los que tienen los negocios de exhiibir y vender ropa interior de caballero... que luego se ve en anuncios, en revistas o en pasarelas de todo el mundo.

Ellos confian en el gusto de mi patrona... hombre que ella selecciona hombre que ya es modelo... y gana un dineral el modelo.

Ella busca, encuentra... y los pasa a esas grandes casas sus propuestas, que siempre son aceptadas...

Le pagan a ella su muy buena comisión, ya que es la mejor para seleccionar hombres que en ropa interior gusten a todos... ya sean calzoncillos o bañadores.

Y se venden millones de prendas por todo el mundo...

Gana ella, gana el modelo, ganan los fabricantes... ganas las tiendas... todo el mundo gana.

No tiene ella ningún compromiso con el modelo... que queda libre y soberano para hacer lo que le guste... en su vida... y en lo sexual.

No hay nada de sexo en su negocio o empresa. No hay nada de sexo... es solo descubrir talentos.

Le dije :

Dime qué tengo yo que ver en todo eso  ???

Es que tú eres uno de los talentos que ella ha descubierto... o lo vas a ser...

Escucha...

El domingo te cita en su resdencia  oficina a las 3 de la tarde.

Es para estar unas bastantes horas con ella, y que te vea bien, de todo a todo... junto a otros 9 a los que ya he dicho...

Van a estar todos con ella, todos desnudos... menos ella,

Ella los verá a todos a la vez... desde luego que no va a haber nada, pero nada de de sexo...

Lo que ella desea es verlos desnudos, con calma... y juntos. Con todo al aire...

Conocer si son disciplinados, y saben comportarse en sociedad... sin erectarse, los buenos modelos no se empalman, saben contenerse...

La eeñora les dirá,

Mira, acabo de borrar de la lista a tres... por tener la verga demasiado grande...

En lo comercial vergas demasiado grandes no va... pueden tener algo de censura... mejor normalidad.

Y ya te he dicho... no se trata de nada de sexo.

Ay... está bien, me apunta... y voy.

.

Y ese dia de la cita allá estaba yo... con otros 9 hombres tambien desnudos...

En sillones, en sofás, en la alfombra, en varios lados de una bella habitación, muy bonita... sin hablar mucho...  que hablara ella...

Que era ella la que tenía que decirnos qué hacer...

Ella la única vestida.

Era un buen espectáculo vernos, vernos, no sabíamos que hacer...

Expectación era la palabra adecuada... lo que se sentía podía variar.