Otto súbete a la báscula

Tengo hora con el médico. Según mi madre es la última visita al pediatra antes de cambiarme a un médico de cabecera o como se diga, es decir, al médico de los mayores. Menudo palo, con el médico ese que por lo menos tiene 60 años, y encima tengo que ir solo, mi madre no puede acompañarme, no puede salir del trabajo, no sé qué de unos pedidos que tiene que pasar antes de las vacaciones

Otto, súbete a la báscula

Tengo hora con el médico. Según mi madre es la última visita al pediatra antes de cambiarme a un médico de cabecera o como se diga, es decir, al médico de los mayores. Menudo palo, con el médico ese que por lo menos tiene 60 años, y encima tengo que ir solo, mi madre no puede acompañarme, no puede salir del trabajo, no sé qué de unos pedidos que tiene que pasar antes de las vacaciones… ‘que mi jefe me echa a la calle si no los entrego’… y todas esas cosas… yo de mayor quiero trabajar para mí mismo sin tener que estar pasando cuentas a un jefe que me esté tocando las pelotas a todas horas

Llego diez minutos tarde, llamo a la puerta, 3º 5ª, me abre una mujer.

Hola… que tenía hora con el doctor Sánchez

Sí pasa

Me hace entrar, me lleva directamente al despacho donde está la consulta del médico; por el pasillo pasamos enfrente de la habitación donde normalmente está la gente esperando; no veo a nadie, no sé, estará todo el mundo de vacaciones

Me dice que me siente, cierra la puerta del despacho y se sienta al otro lado de la mesa… no veo al doctor Sánchez… ¿quién es esta mujer?

Coge un boli.

¿Tu nombre?

Otto Saiz

¿Cómo? ¿Oto?... ¿cómo se escribe, tal como se pronuncia?

No, con dos tes, o te te o

Sainz

No, Saiz, sin la ene

Lo apunta con el boli en un folio blanco que tiene encima de la mesa. Abre una cajonera del escritorio, busca algo, saca un portafolios que lleva mi nombre mientras me va diciendo:

Verás, el doctor Sánchez ha empezado las vacaciones un día antes y yo le sustituyo hoy; tú eres el último paciente del día, así que después de tu visita yo también empiezo mis vacaciones, que tengo unas ganas ya

Qué cabrón el médico, así que se ha ido de vacaciones un día antes… y sin avisar… bueno mira, después de todo por lo menos no voy a tener que verlo más, incluido hoy.

Abre el portafolios y va leyendo para sí misma.

Bien, según esto tienes pendiente la última revisión antes de que te pasen a un médico de cabecera… con la edad que veo que tienes ya te tocaba ¿no?

Ehhh… sí… no sé

Vuelve a guardar el portafolios en la cajonera y apunta algo que no consigo leer en el mismo papel en el que antes escribió mi nombre.

Vale, pues vamos a empezar; te desnudas detrás del biombo y luego te subes a la báscula para pesarte.

Joder, lo que menos me gusta cuando vengo al médico, tener que quitarme la ropa, y encima delante de esta mujer que no conozco… con el otro por lo menos tenía algo de confianza… mal rollo

Me meto detrás del biombo. Va, que solo será un rato y pa casa. Me saco la ropa y salgo. La doctora se ha sentado en la silla donde yo estaba antes, solo que la ha movido del sitio y la ha puesto justo enfrente de la báscula.

Te he dicho que te desnudaras – me dice mirándome e inclinando la cabeza y la vista como señalando a mis calzoncillos

¿Qué?... ¿me está diciendo que me quite también los calzoncillos?... ¿pero…?

Eeehhh… pero con el doctor Sánchez no

Vamos muchacho que no tengo todo el día… es tu última revisión y si te digo que te tienes que desnudar del todo, te desnudas del todo... venga, ya me has oído

Pam, lo menos me he acabo de poner colorao… ostias, no me lo puedo creer… que me voy a tener que quedar en pelotas delante de esta tía… joder

Me vuelvo a meter detrás del biombo… ¿pa qué?… si total me verá ahora… me bajo los calzoncillos, me lío y por poco me caigo…. ‘hola nen, bienvenido a esta mierda de situación’.

Salgo como puedo de detrás del biombo… los pasos con más vergüenza que he dado en mi vida… mirada rápida a la doctora y cabeza abajo… de refilón veo que está con las piernas cruzadas, lleva una bata blanca de médico de esas con botones por delante de arriba abajo, y no debe ser muy larga porque así sentada se le ha subido bastante por encima de las rodillas, sobretodo por la parte interior de las piernas donde a partir del último botón la bata se abre.

Súbete a la báscula

Lo hago. Me mira de arriba abajo y apunta algo… trato de mirar a todas partes menos a ella, pero noto que me sigue mirando y apuntando cosas en el puto papel… sigo rojo como un tomate

Joder… lleva sin decirme nada un rato… o eso me parece… y yo aquí en pelotas encima de la báscula a un metro sin saber ya cómo ponerme… que esto acabe cuanto antes por favor... por hacer algo miro para abajo a ver qué marca la báscula, y en el camino tropiezo mi vista con el escote de su bata y con todo lo que deja ver de sus piernas… vuelvo a subir la vista rápido

Ohh, ohh… mierda, no… ¿pero qué…? no puede ser… no joder, esto no… ¿se me ha empezado a poner morcillona?… ostias… pam, ahora sí que se me ha puesto rojo hasta el dedo pequeño del pie… me vienen calores… sí sí, eso que estoy notando ahí abajo es lo que parece, y lo malo es que no hace pinta que vaya a quedarse así

Trato de disimular cruzando las manos por delante para taparme… con el pedazo de día de playa que hace al otro lado de esa ventana por la que me querría tirar echando ostias de aquí

Si no dejas de moverte no podré acabar la exploración, así no puedo comprobar si tienes torcidos los hombros y la cadera… pon los brazos a los lados del cuerpo y recto de cara a mí

Casi me echo a reír de los nervios… eso, recto es lo que se me está poniendo a mí

Se levanta, estira los brazos, me pone una mano en cada hombro y mira del uno al otro varias veces… que siga así levantada y no se agache más por favor, porque sino va a ver que se me está poniendo dura del todo

No, mierda… se vuelve a sentar… me pone las manos una en cada cadera… me la debe estar viendo en primera línea… más vergüenza no puedo estar pasando… dioosss… me suelta y escribe en el papel.

Parece que no tienes la espalda desviada… y otra cosa extra que ya sabemos - me apunta a la polla con el boli - es que de momento tampoco tienes disfunción eréctil

Echo una mirada rápida hacia abajo… efectivamente… apuntando al techo que estoy

Disfun qué… pero que me está contando… ¿cómo se me ha podido poner dura aquí y ahora?

A ver… sesenta yyy cinco kilos

Se ha echado hacia delante para mirar la báscula y otra vez le he visto el escote sin querer… esto no ayuda

¿Practicas deporte regularmente?

Eeehhh… sí… fútbol

¿Comes de todo, pescado, fruta, verdura?

Eh… sí

¿Fumas?

no

¿Bebes? Supongo que no a tu edad

no, no

Se vuelve a levantar, se pone a mi lado y mueve algo detrás de mí… noto que algo me toca la parte de arriba de la cabeza… me va a medir la altura

Veamos… metro sesenta yyyy nueve… bien

Vuelve a sentarse y a apuntar algo en el papel. Con una mirada rápida veo que ha cruzado las piernas y que ahora la bata se le ha subido bastante más arriba que antes… esto tampoco ayuda

Bájate de la báscula y acércate, ponte de espaldas a mí que te voy a auscultar

Y ahora me a ver también todo el culo en primer plano… me bajo y con el movimiento mi polla tiesa rebota arriba y abajo… me doy rápido la vuelta… qué calores me están volviendo a subir… de repente noto sus manos en mis caderas que me arrastran obligándome a dar un paso atrás… pasan unos segundos interminables… por fin pone el aparato en mi espalda y me pide que respire hondo… trato de concentrarme en la respiración a ver si así me calmo un poco y se me baja… cambia la posición del aparato unas cuantas veces

Bien, date la vuelta que te auscultaré el pecho

No, mierda… lo hago despacio… joder… sigue sentada y de refilón veo que ahora su escote queda a un palmo de mi polla… de nada sirve respirar hondo… sigo apuntando al techo… intento tirar el culo un poco para atrás sin que se note

Sigue respirando hondo

Me pone el aparato en diferentes partes del pecho y escucha por la especie de auriculares esos… si antes se me hacía interminable, ahora es que el reloj no corre ni patrás

Por fin acaba y agacha la cabeza para escribir algo. Echo otra mirada rápida hacia abajo… vuelvo a encontrarme con su escote, esta vez mucho más de cerca… y más abajo la bata se le ha subido ya tanto que en medio de sus piernas… ¿creo ver algo negro?… mierda, levanta la cabeza y me mira… joder ¿me habrá pillao mirándola?...

Tienes las pulsaciones un poco altas… pero bueno… tal como estás ahora – otra vez me apunta a la polla con el boli - podemos decir que es un poco normal ¿no?… por cierto, veo que en el pene tienes frenillo ¿tienes algún tipo de molestia cuando se te pone en ese estado ooo… cuando te masturbas?

Me acabo de quedar en blanco

Me refiero a si cuando te echas la piel para atrás te duele porque te estire.

Y va la tía y mientras me lo está diciendo se echa palante y me coge la polla con dos dedos… del brinco casi me caigo… pam, subidón de calor

Tranquilo hijo

Empieza a tirarme la piel hacia abajo suavemente hasta que la piel ya no da más.

¿Molesta?

Lo tengo todo tan en tensión que solo puedo mover la cabeza negando.

Por fin me la suelta, se lleva la mano al bolsillo de la bata y busca algo mientras me dice:

Bueno… ya que estamos vamos a hacerte una exploración genital para comprobar que todo está dentro de la normalidad para tu edad

¿Qué…? ¿una exploración genital…? estoy flipando… bloqueado… nunca me ha pasado algo así antes… no sé cómo reaccionar

Saca un metro de medir de esos de tela, igual que el que usa mi madre para coser, lo deja encima de sus piernas, se echa hacia delante en la silla quedando sentada en el borde.

¿Abres un poco las piernas?

Me coge de la cintura y me acerca un paso más a ella, su cara queda a un palmo escaso de mi polla, me la mira directamente y… doy un brinco cuando me coge los testículos con sus manos… sí… tal cual… no sé para donde mirar ni cómo ponerme… mi polla también ha dado otro brinco… me los explora con sus dedos, me los aprieta y me los masajea como intentando encontrar su forma… yo qué sé… me empiezan a doler las piernas de tenerlas tan en tensión

Normalmente tengo que pedir a los chicos que se aguanten el pene hacia arriba para poder hacer bien esto, pero en tu caso no hace falta ¿no? él solito ya lo hace… eso que nos ahorramos

No sé si tengo que decir algo… pero tampoco puedo… sólo miro de refilón hacia abajo… no me puedo creer que la doctora me esté tocando así

Me los suelta, parece que ha terminado… y entonces hace un gesto que no sé por qué me choca: se pasa los dedos por los lados de la cara apartándose el pelo… los mismos dedos que hace un momento me estaban tocando los testículos… pero lo ha hecho de forma totalmente natural… como si fuese normal y no le importara lo que antes me estaba tocando con ellos

Y de repente vuelve, pero esta vez sus dos manos van directamente a mi polla… me da un calambre por todo el cuerpo… me la coge con los dedos empezando por la base… me la aprieta un poco… va subiendo y tocándomela poco a poco todo lo largo… como si quisiera saber su forma y dureza en todos los puntos… me empieza a correr una gota de sudor por la frente… tengo mucho calor… llega a la punta… investiga con los dedos la forma del glande y su agujero… uufff!! esa parte la tengo más que sensible… miro de reojo hacia abajo para asegurarme que lo que me está pasando es cierto… sí… la doctora tiene mi polla en sus manos… y me vuelvo a cruzar con su escote… más calor… ahora me la rodea con su mano derecha desde la punta y empieza a tirar hacia abajo despacio arrastrando la piel hasta lo máximo que da de sí, dejándome completamente descubierto el glande… creo que nunca había tenido la polla tan dura… me la aprieta bastante más y me la mueve de un lado al otro como observándola desde todos sus ángulos… afloja un poco y ahora hace el recorrido inverso subiéndome la piel… llega otra vez a la punta… para, pero sin soltarla… y vuelve a bajar y subir otra vez, despacio pero apretándola bastante todo el recorrido… más calambres

Al final me la suelta… el corazón me va a mil… veo que coge el metro que había dejado encima de sus piernas. Tiene la bata demasiado subida y las piernas algo abiertas… lo que antes vi negro ahora me queda claro que son sus bragas… más calores

Bueno, y ahora una cosa que os va mucho a los chicos, mediros el pene

Y al mismo tiempo hace algo que… que… me vuelve a agarrar la polla con su mano derecha y da unas tres o cuatro sacudidas rápidas arriba y abajo… ¿quéee…? ooohhh

Me la suelta y con el metro me la mide, desde donde se unen los testículos a la polla hasta la punta… se mira lo que ha medido

A ver… no está mal para un chico de tu edad

Me noto muy rojo y tengo mucho calor… me tiemblan las piernas

Bien, después de comprobar que físicamente está todo correcto, vamos a hacer una prueba funcional

No sé de qué habla y además me da igual… yo ya estoy perdido en mi calor, mis calambres y el cosquilleo que me recorre la polla.

Se levanta de la silla, se gira y empieza a dirigirse hacia la mesa… le veo parte de sus negras bragas un poco metidas por su culo antes que se colocara bien la bata… dioooss ya solo me faltaba eso… abre un cajón, deja el metro y saca un tubo como de pasta de dientes… ¿y ahora qué?... vuelve hacia mí y se sienta en su silla. Se le vuelve a subir la bata por las piernas hasta arriba del todo. Le quita el tapón de rosca al tubo y se echa un poco en la mano, es como un gel. Deja el tubo en la mesa y se lo esparce bien por las dos manos. Me dice algo de que es una vaselina hiponosequé para lubricar y evitar infecciones… no entiendo nada. Me agarra de la cintura y me gira haciéndome quedar de perfil a ella.

Abre un poco más las piernas

me tiembla todo

Tranquilo, relájate que no te voy a hacer nada malo

Así de lado a ella me la vuelve a agarrar con la mano derecha, y la izquierda la pasa hacia atrás, hacia mi culo… me estoy empezando a asustar… el tacto de sus manos es ahora diferente… resbaladizo. Empieza a tocarme por detrás, mete su mano por en medio, sus dedos buscan y encuentran la entrada, hace un poco de presión con uno de ellos… ¿qué intenta?... esto no me gusta… pero con la otra mano también me aprieta más fuerte la polla y empieza a subir y bajar la mano por ella muy despacio… esta sensación mata a la otra… dioooos ¿me está haciendo una paja una mujer?… noto que hace círculos presionando un poco sobre mi entrada trasera… acelera al mismo tiempo el ritmo de su mano derecha

¿Sabes lo que es el punto G?... ¿sabes que los chicos lo tenéis en el ano?

No puedo ni hablar… acelera aún más el ritmo de la mano que masturba mi polla… más calores y calambres… y cosquilleo en mis testículos… de repente noto atrás que el dedo ha resbalado y ha pasado la entrada… está dentro… me da igual… el movimiento de su mano en mi polla me tiene atontado… no controlo mis sensaciones… me vienen todas de golpe y mezcladas… ooohhh

Me mira a la cara, la miro, otra vez su escote…acelera todavía más el ritmo… me la noto durísima… el dedo en mi culo ya no sé ni donde llega… me viene el calor definitivo

Aaah… aaah… meee… meee

Es lo único que acierto a balbucear… su mano derecha acaba conmigo… me explota todo, el calor, el cosquilleo, los calambres, mi polla

me corro

noto cada una de las sacudidas en las que el semen me sale disparado

noto los músculos de mi entrada trasera haciendo presión sobre su dedo

bestial, increíble, raro… todo mezclado

cesa el ritmo de su mano… saca poco a poco el dedo de atrás… me suelta… se levanta… se coloca la bata

Yo rojo… sudando… con el corazón a mil… todavía no me lo creo

Muy bien, pues todo correcto, ya hemos terminado la revisión, puedes vestirte

Se da la vuelta y camina hacia una pica de lavarse las manos que hay en un lateral del despacho, abre el grifo, se las lava.

Y aquí estoy yo, de pie, sin poder moverme… miro mi polla que aún sigue apuntando al techo y el semen esparcido en el suelo delante de mí.

Venga chico, espabila que tengo que marchar.

¿Pero esto ha pasado realmente o no?... porque para mi ha sido la experiencia más bestial que he tenido nunca, todavía no me he repuesto, y ahora esta tía se comporta como si no hubiese hecho nada… estoy descolocado

No sé cómo pero consigo llegar al biombo, me siguen temblando las piernas, cojo la camisa y el pantalón y me los pongo como puedo, salgo de detrás del biombo.

Muy bien, espero que te vaya bien con tu futuro médico de cabecera

Y estira el brazo indicándome la puerta. No sé qué decir pero… tengo una sensación como si faltase algo, como si lo que acaba de pasar no pudiera acabar así tan fríamente… no sé

Salgo y cierro la puerta detrás de mí.

Otto, estoy hablando por teléfono con el doctor Sánchez, me pregunta que cuándo quieres pasar por su consulta para la última visita que tienes pendiente… pero, ¿no fuiste ya antes de las vacaciones?

Sí mamá… pero ya te lo dije, él no estaba y me la hizo la doctora que le sustituía.

y no veas si me la hizo

Doctor Sánchez, que dice Otto que ya fue antes de las vacaciones y se la hizo otra doctora

Otto, ponte, que dice el doctor Sánchez que no entiende

¿Doctor Sánchez?

Dime Otto

Que ya pasé la revisión con la doctora que le sustituía el día que usted ya se había ido de vacaciones

¿Con quién? ¿una doctora?... muchacho no sé qué quieres decir… yo no tengo ninguna doctora que me sustituya, me fui de vacaciones y la única que quedó en casa fue la chica nueva de la limpieza, que además la muy… nos robó el dinero de las visitas que tuve los últimos días y ha desaparecido, no la hemos vuelto a ver… ¿Otto? ¿Otto? ¿me oyes?...

Mi primer pensamiento… hija de puta, no era doctora, era la de la limpieza!!… mi segundo pensamiento… acordarme de lo que me hizo y lo bien que me lo hizo, y de todas las pajas que me he hecho las últimas semanas pensando en todo lo que me pasó aquella mañana con aquella ‘doctora’.