Otro fin de semana con mi tia

Un fin de semana con mi tía (fotos reales)

El sábado, hace un par de semanas, me llamo al móvil mi tía invitándome a quedar en su casa, ya que su marido y las niñas iban a quedarse en una finca a las afueras de la ciudad.

A ella casi no le gusta ir porque van cada ocho días, así cualquiera se aburre. Yo le dije que listo, pero que no nos fuéramos a aburrir en esa casa, que hiciéramos algo en la noche, salir a bailar, o comer, o cine.

Hice una semi – maleta, empaque una pantaloneta para baño, dos camisetas y un jean, y por si las moscas, una cajita de condones que se me habían quedado sin utilizar.

Así pues que salí de mi casa a eso de la 1:30 de la tarde y llega a su casa pasados 20 minutos. Cuando llegue, ella se encontraba en pijama, aseando la casa, ya que las empleadas tenían salida o descanso ese fin de semana. En pocas palabras, estabamos solos, y con los antecedentes que teníamos de anteriores encuentros me imaginaba en que iba a terminar todo.

Hola señorita! – la salude con un gran abrazo

Hola niño, como estas? Llegaste temprano – respondió

Si, para no dejarte sólita

Ja ja ja , aprovechemos que llegaste temprano, te cambias y me ayudas con el aseo – Dijo como si nada.

Juuuuuuuuuuuaaa, olvídalo, yo vine fue a pasarla bueno – le respondí con una gran sonrisa

Por eso querido, yo se que la vas a pasar bueno, ayúdame a lavar un baño, si quieres yo te ayudo, lo lavamos juntos.

Listo, pero eso nada mas, ok? – le dije

Bien, anda cámbiate

Subí a la segunda planta y lleve mi maleta al cuarto de huéspedes, descargue y me cambie, ese cuarto me trae buenos recuerdos, (Relato: La canita al aire de mi tía), y dentro de mi, pense: "Que bueno sería follarme a tía en su propia cama. Pero bueno, era un pensamiento pasajero.

Baje, mi tía tenia una pijama enteriza, le daba hasta un poquito antes de las rodillas, color blanca, solo dejaba ver las marcas de su ropa interior y no tenia brasier. Al ver esto, mi pensamiento retorno de nuevo: "Me la tengo que follar en su cama".

Bueno, me vas a ayudar o no? – Me dijo

Si dale, que tengo que hacer

Vamos al baño principal, solo es que me ayudes a regar el agua mientras lo limpio.

Ok – (fácil no?)

Empezamos a lavar el baño, cosa aburridora, pero para hacerla mas amena, mientras ella lo refregaba con jabón, con la manguera le moje la cola, de inmediato me miro con cara de furia y me dijo: "Nooooo, no molestes me da frío" y yo le dije: "Ahh no seas aburrida" – y la seguí mojando hasta que estallo en risa y se abalanzo sobre mi buscando la manguera para mojarme a mi. Mientras forcejeaba la acerque a mi y le dije: "Así es que te quería, muy cerca de mi" ella respondió _ "Te habías demorado" y de repente nos besamos.

Pasados tres minutos de besarnos paramos y seguimos con las labores de aseo de la casa, ya que después de besarnos me dijo: "Cuando acabe de hacer todo el aseo, seré tuya" - No podía perder oportunidad, además que estaba muy deliciosa.

Ella es, para los que me leen por primera vez, una mujer de aproximadamente 1.68 cm, piel canela, cabello algo largo negro, tiene 36 años y esta riquisima, juzguen ustedes mismos.

Eran las cuatro de la tarde y ya habíamos terminado de asear la casa, así que pedimos algo de comer y subimos al cuarto de ella a charla y ver algo de televisión mientras llegaba el domicilio.

Pasada media hora llego el domicilio, comimos en la habitación de ella y nos quedamos viendo televisión en su cama. Yo todo el tiempo estaba pensando en follarla y follarla en su cama y la miraba y me la imaginaba encima mío.

La tarde estaba oscura, con ganas de lluvia y hacia frío, y de repente se me ocurrió decir: "Esta tarde esta como para una paja" mi tía me miro y me dijo "que dijiste, repite, no te escuche" yo le dije de nuevo "Que esta tarde esta buena para masturbarte con esta cama toda caliente" y me respondió "Y porque no lo haces? Hazlo yo veo" – yo no lo pense mucho, me baje la pantaloneta que llevaba puesta y me quede con mi camiseta y las medias, y comencé a tocarme pero sin dejarla de ver a ella, mi tía mientras yo me masturbaba, miraba mi miembro como crecía a medida que agitaba mas mi mano.

Se ve que lo disfrutas, en que piensas mientras te masturbas – pregunto

Pienso en vos, en como sería tirar contigo en tu cama matrimonial – le respondí

Tienes muchas ganas de saber como follo con mi marido o que?

Pues si, me gustaría saber que tanto le haces – respondí

Ella me miro, y me dijo: Quiero hacer algo loco, saca la cámara y el trípode que se encuentra en mi closet. Me subí los pantaloncillos y salí corriendo a buscarla, no lo podía creer, se quería sacar foticos la muy puta.

Regrese de inmediato e instale todo, ella se encontraba sin su pijama y solo tenia en ese momento unas tangas blancas diminutas, prendí la cámara y la programe para que sacara fotos cada 30 segundos.

Ella había recogido el cubre lecho y todo esta listo para una faena de sexo. Ella me llamo con el dedo y me dijo: "Ahora soy toda tuya" , me puse encima de ella y la bese, sentía una gran excitación en ella, parecía otra, estaba muy caliente. Yo aproveche y mi miembro para ese momento se encontraba super full, así que lo restregaba sobre su tanga y la respiración de ella tomaba mas fuerza, no aguante mas, me quite todo, menos las medias que no encontraba como quitármelas, ella me lanzo sobre la cama, se quito sus tangas y se puso sobre mi, me beso, me besaba el pecho, luego bajo poco a poco hasta el ombligo, le pasaba su lengua de forma espectacular, llego al principio de mi verga y comenzó a lamer mi miembro, le pasaba la lengua por el tronco y la cabeza, hasta que la metió toda en su boca. La sacaba, la saboreaba como si

fuera un heladito, su lengua se veía espectacular, y yo? Yo me estaba reventando.

Así pasaron unos minutos y luego empezó a besarme de nuevo por el ombligo, mientras con su mano me masturbaba lentamente, me besaba el pecho y llego a mi boca, me dio un beso monumental, su lengua recorrió toda mi boca. Con su mano ubico mi miembro en su vagina, se sentó en ella lentamente y bajo. Cabalgo por un lapso de 10 a 15 minutos con una lujuria total, parecía una puta. Mientras ella me montaba, yo solo atinaba a besar sus tetas y agarrar su cintura y gran culito. La presionaba mas a mi, sentía como mi miembro llegaba hasta lo mas profundo de su conchita, la cara de ella lo decía todo, los ojos cerrados y sus labios mordidos pro los dientes daban cuenta de lo bien que lo estaba pasando.

Acabo encima mío y se recostó durante un rato en mi pecho, yo pasaba mis manos sobre su espalda y sus nalgas y pasado un tiempo sentí unas ganas incontrolables de ponerla en cuatro y darle por atrás. La hice a ella a un lado quedando boca abajo y yo encima de ella, refregaba mi miembro por la ranura de su culito, ella empezaba a respirar algo cortada de aire, entendió lo que quería y se puso en posición de perrito, para ese entonces yo ya me encontraba a millón, así que la penetre por su vagina y mientras lo hacia, agarraba sus nalgas, le daba pequeñas palmadas y con agarraba sus senos por debajo. Durante bastante tiempo estuve así, para un momento y ella, movía su culito de una forma brutal, movía su culo de arriba hacia abajo y mi miembro parecía que se quebraba, fue tal la excitación que me hizo correr dentro suyo de una forma espectacular.

De esa manera terminamos nuestra sesión de sexo de sábado, el domingo es otra historia aparte.

Espero les guste... para hacer otro relato.

Perro.