Orgía total final

Hola soy Adán, el semental hijo incestuoso de la gran puta Eva. Hoy me toca a mí relatar la celebración del 51 cumpleaños del pedazo de hembra que es mi madre. Os recuerdo que tengo 25 años y soy hijo  de mi abuelo, es decir, a mi madre la preñó su padre.

Hoy miércoles 22 de septiembre, mi putón de madre cumple 51 tacos muy bien llevados, está buenísima, nunca he visto  una hembra tan atractiva, buena y exuberante como ella y mira que a mi edad ya he estado con muchas mujeres bellas y muy buenas.

Después de recogerme en la Uni junto a mi compañera y mi  profesora polludas, llegamos a casa donde nos esperan mis hermanos y hermanas y mis abuelos. Todo lo tienen organizado, mi hermana Pepa, la preñada, se dedica a eso.

Al entrar nos encontramos con mi hermana Pepa casada de 30 años preñada hasta las trancas con un simple short de licra y su correspondiente top dejando su bombo al aire. Está buena la puñetera desde que está preña.

También está mi abuelo/padre Adán y mi hermana pequeña María que está vestida de putita con tacones, medias blancas con liguero y un corsé del mismo color intentando dar un poco de forma a su cuerpo plano y sin tetas a pesar de sus quince años.

Todos se acercan a mi madre que sigue vestida con un traje de chaqueta con falda ceñida a su culazo, y le van felicitando por su 51 cumpleaños dándole un morreo cada uno.

Eva: pero aquí falta la abuela.

Pepa: la abuela está en tu cama, es que llevamos toda la tarde aquí preparando esto y la vieja se ha calentado  y mientras venias hemos pasado todos por su cama para follarnosla. Ahora está terminado Andrés.

Eva: todos?, pero si la única que follaba con los demás era la pequeña viciosa María.

Pepa: ya mamá pero hoy todo ha cambiado, no sé si es por mis hormonas del embarazo que no he podido resistirme a meterle mano a la abuela, bueno y a los demás también.

Mi madre se va a la habitación de matrimonio que tiene y se encuentra a su hijo mayor negro de lado metiéndole el descomunal cipote que tiene hasta el fondo en el coño de la abuela, la cual está en pelotas con sus carnes gorditas y blancas y por si fuera poco se ha traído uno de sus dos perros y mientras su nieto golpea con fuerza sus nalgas “plas, plas, plas” la vieja le chupa el nabo que le ofrece semen a raudales.

Eva: pero bueno, mamá! No podías haber esperado a que viniera para mi fiesta de cumpleaños zorra?

Paloma; ah, ahh, ahh, perdona hija pero es que tardabas mucho y el cucho me  puso muy cachonda. Me han follado todos, lo sabes?

En esos momentos mi hermano se corre dentro de la abuela y mamá le da una bata para que se la ponga, la vieja sólo lleva puestas unas medias marrones con ligas.

Eva: madre, y mis hijas cómo te han follado?

Paloma: la chica como siempre metiéndome sus brazos en mis agujeros y Pepa que me ha  tocado por primera vez me ha comido el coño.

Nos vamos al  comedor y nos sentamos a comer y beber el suculento menú que ha preparado mi hermana Pepa. Mamá les cuenta mientras tanto el rodaje de la película de hoy y la follada con la profesora y la compañera de la Uni.

Cuando terminamos de comer mamá me elige a mí por haberle hecho el regalo de mis mujeres con polla.

Se levanta, me quita la camiseta y me besa como nadie sabe hacerlo, por supuesto  mi polla ya esta tiesa restregándose con su pubis.

EVA: desnúdame como tú sabes hijo, disfruta de mis carnes.

Me agacho y lo primero que hago es desabrocharle la falda y quitársela para dejar al aire sus columnas de muslos que sujetan su amplio culo.

María: estás guapísima mamá hoy con esa lencería.

Acerco mi cara a sus bragas oliendo su protuberante coño

Adán: ummh cómo te huele el higo!

Eva: lo he trabajado hoy mucho hijo.

Le bajo las bragas dejándola exhibirse ante los demás en cueros de caderas para abajo con esos muslazos enfundados en esas medias de red negras. Se los acaricio, delicioso, carne de hembra jamona y madura.

Le sobo las nalgas.

Abuelo: el culo es lo que  me gusta más de ti hija mía.

Yo: pues a mí lo que me pone más son las piernas de tu hija.

La siento y me recreo sobando sus piernas de arriba abajo, no hace falta quitarle las medias, se las rompo fácilmente al ser de red. Por último termino lamiéndole los pies.

A continuación me releva el abuelo Adán, mi padre, que se mete literalmente entre los dos enormes hemisferios del culo de la gran puta. Se lo huele.

Abuelo: cómo te huele a mierda guarra.

Eva: como a ti te gusta padre cerdo, méteme la lengua

Su padre le mete la lengua en el agujero del culo y automáticamente mi madre escupe por el coño un chorro de líquido blanco y espeso que empieza a ensuciar el suelo. Mi hermana Pepa ya está preparada con la fregona para ir recogiendo.

Mi  madre, la muy cochina se tira un pedo en la boca de su padre sabiendo que eso le pone la polla setentona dura.

Abuelo: hija puta marrana!

El abuelo se retira y lo sustituye la abuela, la cual le quita la chaqueta.

Paloma: joder hija traes el sujetador lleno de semen.

Eva: si, viniendo para aquí me han empapado dos tías con pollas que me ha presentado tu nieto.

La abuela se quita la bata y se sienta en las piernas de su hija lamiéndole todas las tetazas lamiéndole el semen reseco a la vez que le estruja la masas colgantes de mi madre, las cuales empiezan a lanzar ya chorros de leche.

Mi hermana María se acerca a ella y se amorra a uno de sus tremendos pezones, el otro se lo deja a la abuela. Es un placer ver como la gran puta amamanta a la vez a su madre y a su hija.

Eva: así, guarra estírame el pezón y la teta todo lo que puedas.

Dice mi madre mientras vuelve a escupir jugos por su coño.

Por último se acerca mi hermano negro ya desnudo con el pollón que tiene colgando casi hasta las rodillas, aparta a la abuela y a su hermanita y se sienta sobre sus muslazos, le coge la cara, le aparta el pelo.

Mi madre sabe lo que quiere, saca la lengua roja y larga de la que cuelgan babas y mi hermano se le traga entera en su boca con esos labios gordos negros que tiene de negro. Se morrean durante un rato y a mi hermano se le pone la polla empalmada.

Andrés se pone de pié y mi madre abre su bocaza tragándose aquella anaconda poco a poco.

Abuelo: ten cuidado Andrés, a ver si vas a asfixiar a tu madre. Mirad como se le hincha el cuello.

Abuela: no te preocupes Adán ya has visto otras veces tragarse la polla del burro hasta casi el estómago, esta tía es capaz de meterse todo lo que  le echen dentro de sus agujeros. Es una bestia

Mamá se saca el cipote de mi  hermano y me llama a mí.

Eva: ven para acá hijo, que te voy a ordeñar a ti primero por el regalo que me has hecho y porque veo que tienes los huevos hinchadísimos.

Mamá me desnuda y me pone a cuatro patas en el suelo, se sitúa detrás de mí y me coge el pito tieso sacándolo entre mis piernas. Me agarra mis gordos huevos a la vez que me menea la picha larga, le echa babas para lubricarlo todo.

Llama a la abuela para que le ayude a ordeñarme.

Eva: tráete esa jarra mamá.

La abuela me ordeña como a su vaca mientras mi madre se mete mis gordos testículos en su bocaza. Luego se dedica a lamerme el culo.

Eva: me han dicho tus amigas con polla que te gusta que te enculen maricón. Es verdad lo tienes muy abierto. A ver vamos a hacer una prueba.

Mi madre empieza a meterme dedos hasta que consigue meterme su puño en mi recto. Eso me da tanto gusto que empiezo  a correrme soltando tanto esperma que lleno la jarra que sostiene mi abuela hasta la mitad.

Paloma: madre mía, ni mis perros echan tanto semen, en verdad tu Adán es un semental.

Mi madre me saca la mano del culo y coge otra jarra dándosela a la abuela.

Eva: toma madre, llénala esta con la leche de mis tetas mientras yo termino de llenar la de mi hijo con la leche de mi coño.

La abuela ordeña a mi madre primero una ubre, luego otra. Y ésta se sienta en el sofá haciéndose una paja meneándose su clítoris gigante como una pollita con una mano y con la otra se mete un dedo en el agujero de su uretra.

Explota en un escandaloso orgasmo llenando la jarra entera de líquidos blanquecinos que salen de su vagina y la otra con la leche de sus tetonas.

Nos sentamos todos un rato y nos bebemos los machos un vaso de leche de las tetas de Eva, mientras las hembras se beben toda la jarra de la mezcla de mi semen con los caldos de mamá.

A continuación Pepa propone a su abuela intentar alargar el cipote de mi hermano negro y batir el record de 60 cms.

Para ello lo tumban en el sofá y mientras la preñada se sienta en su cara restregándole su peludo coño hinchado llenándoselo de mocos, la guarra de la abuela le come el gordo capullo a la vez que le frota el tronco.

Aquello parece que va a reventar, está enorme. Mi hermanita maría se encarga de medir con una cinta métrica.

María: todavía mide 50, esperad os ayudo.

María le chupa el ano al negro metiéndole dedos dentro. Pepa se corre en su boca dándole abundantes flujos y la abuela le mete la lengua dentro del agujero del glande.

El monstruo sigue creciendo.

María: ya mide 60 pero no crece más.

Eva: espera, os ayudo.

Mi madre se agarra un pezonazo y riega a mi hermano con su mágica leche todo el pollón, la polla, para finalizar metiéndoselo en el ano y llenarle el culo por dentro.

María; ostias mamá, ha batido el record, 66 cms.

Todos aplaudimos la azaña.

Luego el abuelo caliente perdido agarra a su nieta pequeña y le hace que le coma los pies.

María: abuelo qué te gustan la guarrerias!. Pero con migo no tienes problema, soy una cochinona.

Una vez que le deja limpios los pies  al viejo, mi hermana le come la polla poniéndosela como una piedra,  se echa en el suelo se abre las piernas a tope y le dice.

María: fóllame viejo, así, hasta el fondo. Aunque parezca una niña tengo un coño muy hondo.

Adán: hija se la gran puta, eres tan caliente como tu madre cuando tenía tu edad. Me voy a correr, me salgo.

María: no abuelo, préñame, hazme un hijo-tío, que aunque parezca mentira ya ovulo, tengo 15 años.

Mientras tanto mi madre se abre de muslos en el sofá y nos pide fisting a todos por todos sus agujeros.

Mi hermano Andrés le mete los 64 cms en el culo interminable de su madre.

Adán: joder mamá, me ha costado metértela un montón. Tienes llenas las tripas.

Eva: si hijo,  llevo sin cagar desde antes de ayer, estoy estreñida, pero ya ves me cabe tu estaca junto con la mierda que tengo  dentro.

Mi hermano se corre dentro de ella haciendo que le suavicen los intestinos.

Ahora la abuela le mete un puño  en el coñazo a su hija, mi hermana Pepa otro puño mas en el mismo agujero, grande es el coño de mi madre.

Yo le meto un pié en el culo sintiendo el semen de mi hermano mezclado con la caca de mamá.

Y Pepa, la muy bestia le mete su pie hinchado por el embarazo en la bocaza de mi madre, le entra entero.

Por último María se encarga de meterle el dedo meñique en su meato.

El pié de Pepa hace que mi madre se lo saque y vomite todo lo que ha comido y bebido, pero más pronto vuelve a tragarse el pie de la embarazada hasta el fondo y la gran puta explota en un orgasmo múltiple, que hace que los ojos se pongan en blanco y se agite como una posesa, lanzando chorros de leche por las tetas y de flujos del coño entre las manos de la abuela y mi hermana Pepa.

Cuando saco mi pie de su culo está lleno de mierda, cosa que soluciona mi cerda abuela lamiéndomelo hasta dejármelo limpio.

Cuando Eva se recupera ayuda a mi hermana Pepa a pajear a los tres machos.

Pepa: mamá, quiero que me duchen de semen estos machos.

Eva: madre, tráete el perro, que vamos a empapar a esta preñada.

Pepa me menea la polla a mí y al abuelo y mi madre pajea al negro y al perro. Todos se corren sobre el cuerpo de mi hermana llenándole la cara, la boca, las tetorras, el panzón y los muslos. Mi madre mientras la pajea metiéndole dedos en su coño llegando hasta el útero.

Pepa: mamá, para que me vas le vas a hacer daño al bebé!. No , no pares, me corrooooo….

Mi hermana Queda hecha un asquito pero la guarra no se lo limpia, se desnuda y se queda con su preñando cuerpo cubierto de esperma.

De esa forma mi hermano Andrés de nuevo empalmado le introduce su estaca en el culo hasta el fondo.

Pepa: ahhh, hijo de puta me revientas, me vas a hacer abortar.

El negro reacciona y le saca su pollón y a cambio le echa al perro que la encula quedando enganchado con su bola en la empapada preñada que vuelve a correrse.

Hacemos un descanso y tomamos una copa, son las doce de la noche, es el cumpleaños de mamá, llega la hora de la tarta. Todo está planeado.

Eva se tumba bocarriba en la mesa del comedor y entre mi hermana Pepa y la abuela la embadurna todo su cuerpazo con tarta de bizcocho, nata y fresas. De la cabeza a los pies, incluso metiéndole trozos de el culo y el coño.

Los seis nos ponemos a su alrededor y poco a poco, como cerdos nos comemos la tarta directamente de las carnes de mi madre, ella también come cogiendo trozos de su cara. El abuelo se ocupa de comerse lo que ella expulsa del culo, y la abuela le saca lo del coño.

Una vez hemos devorado todo el pastel estamos cachondos de nuevo, sobre todo mamá, ella es un volcán. Seguimos comiéndoles sus sensuales carnes.

Nos la follamos los seis a la vez, veréis. Primero los tres machos, uno por cada agujero, culo, vagina y boca, corriéndonos dentro de ella que no para de correrse

, luego las tres hembras, la abuela le come el coño, María le mete el puño en el recto y Pepa le come la boca y las tetas acabando por poner su coño en la boca de su madre que le agarra la panza de preñada y vuelve a convulsionarse de orgasmos.

Luego mamá folla con cada una de sus manos a la abuela y a su hija pequeña por sus coños haciéndoles correrse.

Ya estamos todos cansados no podemos mas pero la gran puta sigue pidiendo marcha

Eva: mas, dadme más.

Abuelo: ya no podemos más hija.

Eva: el perro que me folle el perro.

Yo le acerco de nuevo el perro y mi madre le chupa la polla hasta ponérsela tiesas. Le ofrece el culo y el can se la mete follandola mientras ella sigue corriéndose meneándose la pipa.

El perro se corre quedando enganchado en su culo.

Mi  madre tira de él y como tiene el culo tan abierto se saca la gorda bola del perro.

Eva: más quiero más!

Andrés: mamá tranquilízate, tenemos que descansar y mañana hay que trabajar.

Eva: pero no ves que mi coño no deja de escupir lava?

Era verdad de su coño salían chorritos viscosos de flujos que caían al suelo.

Eva: tengo una idea, vamos al cuarto de baño a guarrearme mientras sigo corriéndome.

Nos vamos todos al enorme baño del pisazo de mi madre. Lo primero que hace es sentarse en el váter.

Eva: tengo ganas de cagar.

Expulsó en el váter un montón de semen y un mojón grande, gordo y duro.

La muy puerca lo cogió con sus manos y acercando a su madre le abrió el ano y se lo metió todo dentro.

Abuela: ayy, hija, cuánto tiempo hacia que no me hacías esto!

Eva: pues quiero que lo retengas dentro hasta mañana putón.

Abuelo: ya está bien hija de la gran puta, hace años que pactamos que no íbamos a hacer cosas con la mierda.

Eva: jodido cabro si fuiste tú el que me hizo que me comiese su cagada cuando empezamos a follar. Si, un  día me trague con gusto un mojón de mi padre, y después….

Abuelo: te cayas ya, de eso no se habla a tus hijos putón.

Eva: vale padre degenerado, pero si con el pis ¿verdad?

Abuelo: valeee, venga, métete en la bañera. Vamos todos a mear a este zorrón.

Mi madre se mete en la enorme  bañera circular y pone el tapón para que no se escape nada.

Eva: a ver quién es el primero que tiene ganas de mear.

Andrés: yo mamá -

Mi  madre se pone a cuatro patas, se abre el ano.

Eva: hijo de puta, quiero que te mees dentro de mí.

Mi hermano negro mete su morcillona verga en su culo y le suelta una larga meada.

Eva: acompáñame María, sé que tú eres más guarra.

María se mete en la bañera y mi madre le caga la meada que le ha metido mi hermano directamente en la cara.

A partir de ahí, María se encarga de masturbar el clítoris de mi madre, mientras ella se introduce en el culo tres pastillas de jabón y en el coño la escobilla del váter follándose con ella, pero no por la parte de sujetarla, no, sino por la que limpia aunque estuviese sucia.

El abuelo se acerca y en vez de mearse en mamá lo hace en la barriga de preña de mi hermana, la cual se corre por última vez.

Mi madre me pide que me meta en la bañera y sacándose la escobilla del coño me echa una larga meada que yo trago lo que puedo y el resto me ducha del cuerpo.

Luego el negro se acerca y mientras mamá se corre con la escobilla y la mano de María se mea dentro de la boca de su madre la cual se bebe enterita su orina. Y sigue orgasmeando.

Por último la abuela de nuevo  cachonda se mete dentro de la bañera con mamá y Pepa y  María la bañan con dos largos chorros calientes de pis.

Al final se quedan dentro de la bañera las tres más guarras, mi madre, mi abuela y mi hermana pequeña. Las tres hacen una bola de carne que se revuelcan en la orina que hay en la bañera, comiéndose los coños, metiéndose los puños y corriéndose hasta quedar exhausta.

Bueno, mi madre después de ducharnos todos vuelve  a pajearse metiéndose un calabacín en el culo y una berenjena en el coño, por fin se queda dormida.

El volcán se ha apaciguado por  hoy.

FIN