Orgía incestuosa (4)
Mi madre preparó un viaje excelente para continuar con nuestra orgía.
Orgía incestuosa 4
Pasé los días siguientes con normalidad, ante las demás personas, pero yo estaba realmente inquieto. Trate de olvidar que estaríamos solos en Acapulco durante dos noches, en fin espere a que llegara el momento deseado, yo solo esperaba que no fueran mas mamadas las que tuviéramos en ese viaje. Llegó el día de partir al viaje, mi madre había preparado una maleta con toda su ropa para playa y me pidió que guardara la mía en la misma maleta para no cargar mucho, una vez listos nos dirigimos a la estación de camiones en donde partiríamos hacia Acapulco. El camión salía a las 8 de noche y pasaríamos de viaje hasta las 6 de la mañana, muy pesado pero muy esperado.
Mi madre llevaba puesta una falda holgada y plisada, unas medias negras y una blusa floreada delgada. Yo un simple pantalón deportivo de resorte y una playera. Al subir al camión buscamos nuestros asientos que estaban en la parte de en medio. Durante el tiempo que esperaba el camión para partir, vimos que solo había 10 personas además de nosotros, prácticamente el camión iba vacío. El empezar a moverse el camión, mi madre me dijo que nos pasáramos hacia la parte trasera del mismo y que si quería yo podía quedarme solo en un par de asientos para descansar mejor, yo le obedecí pero le dije que mas adelante me pasaría solo. Nosotros estábamos sentados de tal forma que no teníamos a nadie ni atrás ni dos o tres hileras adelante, estábamos prácticamente solos, sin luz. No podíamos ver mas que cuando nos iluminaban los vehículos que venían sobre la carretera.
Mi madre empezó a platicar de varias cosas y en un momento me pregunto si alguna vez había sentido celos de ella y porque, yo no sabía que contestar ya que me había cogido por sorpresa, al fin le platique que en una ocasión, cuando yo estaba chico y vivíamos en una casa en donde compartíamos la recamara, oí, ya entrada la noche y yo durmiendo, una serie de ruidos que venían de su cama, eso me despertó por completo y me levanté asustado y fue cuando la vi que estaba desnuda con uno de sus amigos, el cual también lo estaba, y yo le pregunté que que pasaba y ella se levanto rápidamente tratando de cubrir a su acompañante, el cual se para rápidamente saliéndose de la recamara. Y recuerdo que saliste un momento y regresaste y me pediste que me acostara junto de ti.
Ella me contesto se acordaba de ese momento y que se había asustado y preocupado mucho. Y me pregunto que había sentido, yo le conteste que muchos celos. Pero ella me dijo. Pero si estabas muy chico que celos podía tener, y yo le conteste que no sabía pero que así había sido, también le comente las veces que la había visto cogiendo con sus amigos en la casa, eso le causo un impacto y me pidió que se lo platicara. Yo le comente que en una ocasión, había una fiesta y que después de que se fueron sus invitados ella se quedo con una amiga y dos amigos y se pusieron a bailar y a acariciarse, y en un momento ella se sentó en un sofá y empezó a besar a su pareja hasta que el se quito su camisa y sus pantalones quedándose en calzones y que el empezó a quitarte la ropa hasta que quedaste denuda. La otra pareja hizo lo mismo y empezaron a mamarle la verga a cada pareja. Hasta este momento, mi madre no había dicho una sola palabra y se veía apenada y nerviosa. Yo continué la narración, después el, tu pareja empezó a mamarte la panocha, subiste las piernas en los brazos del sofá y el tuvo forma de hacerlo mejor.
Ella seguía sin decir nada pero note que su mano estaba acariciando, por debajo de su falda, su panocha. Yo seguí diciendo, llegó el momento que tu pareja empezó a acomodar su verga en tu entrada y empujando empezó a moverse y tu también, para esos momento yo ya me había cansado de estar viendo a través de la hendidura de la puerta de la recamara y me fui a la cama y me acosté. Ya no supe mas de lo que sucedió. Mi madre se sentó de lado y me tomó de las manos y me dijo "tu sabes que yo siempre he estado sola, y que de alguna manera necesitaba de algo que la liberara de las tensiones sexuales y me siento mal que tu me hayas visto haciendo eso" yo le conteste que no tenia porque disculparse, que yo ahora lo entendía y que lo único que me daba era coraje de no haber sido yo el que estuviera en esa situación. Ella se sonrió y me dijo que bajara la frazada para que nos cubriéramos un poco ya que tenía un poco de frío, yo no entendí porque me pedía eso y sin mas la bajé y nos cubrimos los dos con ella. Mi madre me pregunto si había algún otra situación en que yo me hubiera sentido celoso.
Y le dije que en realidad había muchas otras situaciones pero que sería muy largo el platicarlas, ella me pregunto si no tenia ánimo y yo le dije que si ella quería lo platicaba, mi madre con una mano agarro mi verga que estaba, para esos momentos, parada y me dijo "hijo, yo te siento como que si quieres platicar" yo le conteste que si seguía platicando me iba a poner muy caliente ya que eran temas muy cachondos, ella solo apreso mi verga y me dijo "sigue que ya se te quitara lo caliente". Durante un rato mas, yo no se que tanto le decía y ella solo liberó mi verga del pantalón y empezó a masturbarme, con la otra mano tomo la mía y me hizo que le empezara a acariciar su panocha y a meterle los dedos en su gruta, todo bajo la cubierta de la frazada.
Yo sin dejar de hablar masturbaba a mi madre y ella hacia lo propio, unos minutos mas tarde, nos venimos simultáneamente yo arrojando una gran cantidad de leche y ella gritando sordamente y diciéndome al oído, "hijo que sabrosa venida estoy teniendo, sigue así, te deseo" sin soltarnos ella la verga y yo su panocha, dejamos pasar un buen rato, mi madre, cuidando de no embarrar la leche en la frazada, saco su mano y empezó a lamer en donde mi leche se había depositado, yo solo podía ver como se llevaba a la boca su mano. Terminó de tragarse mi esperma y me dijo, "casi no escuche tu historia, me la contaras nuevamente en otra ocasión, pero ya estas tranquilo, te gustó?" yo solo le dije que había sido fabuloso que bien sabía como quitarme lo caliente, pero que yo seguía queriendo cogérmela, ella solo dijo "aún no es tiempo, no seas desesperado", ella me invito a que nos tratáramos de dormir un poco para no llegar cansados, yo acepté de mala gana y dormimos casi todo lo que restaba del viaje.
Llegamos a Acapulco, me ahorraré todas las peripecias del traslado, registro del hotel, etc. Sin embargo, en el hotel nos dijeron que solo había una habitación con cama matrimonial, mi madre había reservado una con dos camas individuales, sin embargo ella acepto y no hubo mas problemas. Nos dirigimos a la habitación y rápidamente nos dispusimos a bajar a la playa, mi madre se puso su traje de baño, que para esa época era muy conservador, ya que era de una sola pieza y con un pequeño faldón cubriéndole sus nalgas y su panocha.
Sin embargo, yo la veía muy apetecible y se lo dije. Ella me tomo de la mano y salimos a la playa, después de un rato de estar en el sol, me pidió que le untara un poco de protector solar para evitar que se quemara, yo solo me puse de rodillas y empecé a frotar por todo su cuerpo, aproveche la oportunidad y cada vez que podía le acariciaba sus nalgas o su panocha, sus senos no eran muy grandes pero también recibieron su parte. Mi madre solo decía "estate quieto, no vez que hay mucha gente y te pueden ver" yo evite ser muy explicito y solo cuando veía que no era observado le acariciaba alguna de sus partes.
Un rato después, nos metimos al mar y seguimos jugueteando yo tratando de tocarle sus partes y ella agarrandome la verga, parecíamos unos pervertidos. Un rato después, nos metimos a la alberca y yo le dije que jugaríamos a pasarnos por medio de las piernas buceando, ella acepto y en la primera oportunidad yo me sumergí y al pasar cerca de ella me incorporé besándole su panocha y con mi mano le tocaba el culo, mi verga estaba a mil.
Yo me paré y le dije que mejor no siguiéramos así, ya que no quería otra mamada, ella solo se rió y me dijo que entonces nos asoleáramos un rato más. Pedimos de comer y pronto se obscureció. Nos salimos de la alberca y nos fuimos al cuarto a bañarnos, yo ya no quería seguir su juego, así que le dije que se bañara ella primero y que me había enterado que esa noche se celebraba un baile en la disco del hotel, que si quería ir para que fuera a apartar una mesa. Noto que no quería bañarme al mismo tiempo con ella y solo dijo que si, que le gustaría mucho, que a eso habíamos venido, a divertirnos. Yo me salí y deje pasar un tiempo y regresé. mi madre ya se había arreglado y se había puesto un vestido ligero sin medias, yo no sabia que más había abajo. Nos dispusimos a ir a la disco y al llegar ella seleccionó una mesa que estaba al fondo de la pista, lejos del ruido y de la luz.
Pedimos una botella de vodka con jugo de piña, empezó la música y me pidió que bailáramos, se empezó a poner bueno el ambiente y con el alcohol mejor, pasando un rato, llegó un grupo de muchachas muy jóvenes y bonitas, yo las miré y mi madre se volteo y me dijo "mira que bonitas mujeres, si quieres vete a bailar con ellas, por mi no te apures" yo le conteste que la fiesta era con ella y que yo me quedaría a bailar con ella toda la noche.
Después de varias copas y bailar y estar acariciando su cuerpo, en donde mi di cuenta que no tenía pantaletas, mi madre me dijo si estaría bien que nos fuéramos al cuarto, que quería seguir tomando pero solos, yo le conteste que si, tomamos la botella y pedí mas jugo de piña, y nos dirigimos al cuarto.
Ella me pidió que le sirviera una copa mientras se iba a bañar. Yo le serví y cuando salió mi madre del baño solo salió con la toalla cubriéndole el cuerpo, se acerco a la cama y espero a que yo me bañara. Salí, igual que ella solo con la toalla, y me apresuré a tomarme mi bebida, mi madre me pidió que apagara la luz del cuarto porque se sentía mucho calor y que nos acostáramos a platicar, ella ya acostada se quito la toalla y yo hice lo mismo. Bajo la penumbra, por la poca luz que entraba por la ventana del cuarto, pude ver todo su cuerpo desnudo sin que nada estorbara. Yo no pude mas y sin decir nada me apresure a besarle su pecho y a chuparle los pezones de tal forma que ella no pudo decir nada. Yo no podía mas, mi verga estaba al máximo y yo quería cogerme a mi madre.
Casi loco, me empecé a bajar hasta alcanzar su gruta y sin mas la chupe con tanto frenesí que en unos instantes mi madre había alcanzado un orgasmo fenomenal, no decía nada, solo separó sus piernas para que yo pudiera llegar hasta lo mas profundo de su sexo. Seguí chupando y ella me pedía mas, llego el segundo orgasmo y me pidió que parara, que no podía resistir mas, yo seguí hasta que tuvo el tercer orgasmo.
Yo sin tener mas que perder, sin dejar que ella cerrara sus piernas me incorporé y de un solo golpe le metí la verga en su gruta y empecé a bombear locamente, metiendo y sacando mi verga con furia., ella me dijo que no, que no era tiempo, yo no hice caso y seguí bombeando y metiendo mi verga en lo mas profundo de mi madre.
Era el momento que mas había deseado, me estaba cogiendo a mi madre en forma conciente, después de tanto tiempo, la escena que veía era increíble, mi madre se aferraba a mis nalgas y me halaba hacia ella, como no queriendo que me separara o que me metiera mas, no decía nada, solo se quejaba, tenía los ojos cerrados y casi me enterraba sus uñas, seguí metiendo y moviendo mi verga dentro de ella, la sensación era ten fuerte que estaba a punto de venirme, pero yo quería disfrutar mas, así que, haciendo un esfuerzo, me salí de ella y me puse a mamarle nuevamente su panocha, eso causó que mi madre tuviera otro orgasmo, ya prácticamente sin fuerzas para rechazarme, me pidió que se la metiera y que acabara dentro de ella. Yo seguí sus indicaciones y le metí la verga hasta lo mas profundo, para sentir mas la sensación, rápidamente metí una almohada debajo de sus nalgas con la finalidad de elevar mas su sexo y poder entrar más.
Eso, al meter mi verga, hizo que mi madre soltara un grito de pasión y desesperación al verse y sentirse atravesada por completo. Ya sin control, los dos empezamos a movernos frenéticamente y yo sentía como la punta de mi verga chocaba con las paredes de su vagina y yo quería entrar mas pero no podía, era imposible.
Unos minutos mas tarde, sentí lo inevitable, una venida que me hizo moverme más rápido y profundo, mi madre estaba al borde de la locura, llego el momento en que los dos tuvimos un orgasmo al mismo tiempo, solo sentí como las paredes de su sexo apretaban mi verga y mi madre se convulsionaba sin control.