Orgía Familiar

Esta es la fantasía que había querido realizar y ahora no solo es una realidad, por el momento solo puedo acordarme que estamos encamados los seis, mis hermanas y nuestros esposos y ahora quiero contra lo vivido la primera tarde que lo hicimos

En casa tenemos un juego de esos eróticos, donde terminas acostándote con casi todos, estaríamos todos juntos en la sala compartiendo y bebiendo, de antemano les cuento que nuestros espositos no son muy modelo pero tampoco son un espanto los tres aguantan, así estaríamos charlando todos en mesa redonda, pero a Juan le entra la curiosidad por lo del juego y llega a mi mente ese juego picante y atrevido,

nuestros hombres, no se veían muy seguros, tal vez por evitar ver a sus esposas hacer cosas que solo hacemos con cada esposo, sin embargo se les notaba en la Mirada esa malicia por probar de nosotras, Juan y Manuel miraron a Claudia como se mira a una mujer a punto de penetrarla, ella es muy apetecida, no solo por ellos, sino por todos, ella es la mas culona de las tres y a demás es muy femenina, algo que enloquece a los hombres.

Seguimos bebiendo y casi a las 11 pm ya un poco ebrios, se les notaba a

Liliana y Claudia hablaban con sus esposos o tal vez ellos tratando de convencerlas a ellas, pero en fin.

• Porque mejor no traes tu jueguito y vemos a ver que pasa, contestaron ellas con aprobación de sus esposos.

La verdad se que a ellas no les disgusta la idea, porque sienten y piensan al igual que yo, al cuerpo se le debe dar gusto y porque no algo de variedad.

Allí estábamos sentados en mesa redonda e intercalados Juan, Claudia, Raul, yo en el medio, Manuel y Liliana así ninguno tendría a su pareja al lado y eso sería lo más interesante

Avanzando en el juego fue como mis cuñados me demostraron como besan, el primero fue Manuel el hombre es algo brusco y besa fuerte, en cambio Raul tiene mas paciencia y sabe disfrutar de un beso, un choque muy grande se siente al besar a los esposos de tus hermanas y lo mismo ver como Juan besaba a Liliana y a Claudia, es algo indescriptible una mezcla de celos y lujiria.

Entonces llego algo mas fuete que los besos, Raul debia escoger a alguien para similar un 69 y eligió a Claudia, todo se puso tenso pues sus respectivas parejas asombradas y excitadas no podían resistirse a seguir en el asunto, así entonces se colocaron en posición y aun vestidos mi hermana y mi cuñado, que también es el de ella, se ubicaron en medio de la sala, él se tumbó en el sillón y ella se le encaramo se veía como movían sus cabezas simulando chuparse el uno al otro,

Así continuo la noche, avanzábamos y seguíamos ,en una ocasión Liliana le tuvo que hacer sexo oral a mi esposo, lo mismo Manuel me chupo los senos en una de esas penitencias y en fin todo siguió tan caliente que no aguantábamos mas las ganas de tener sexo libre y desordenado.

Al fin el ganador del juego fue Raul y como el que gana manda, el resto de la noche, el ordeno que nosotras nos desnudaramos bailando, por mi parte le baile a él, Liliana a Manuel y Claudia  a mi esposo, a medida que nuestras prendas caian de nuestros cuerpos, se veía como crecían sus vergas en el pantalón.

Acabado el baile y desnudas por completo Raul ordeno que fuéramos al cuarto de la cama mas grande, que nos vendáramos los ojos y nos tumbáramos en ella, fue entonces cuando supe que empezaba lo mejor de la noche, Me tendí en el medio de mis hermanas, tensas y con la respiración agitada recibimos la siguiente orden, levanten las piernas, dejando nuestra vagina libre, y empecé a sentir unas manos extrañas en mi vientre, no supe que pasaba con Liliana y Claudia, pero se escuchaba  como daban gemidos corticos, luego mas intensos , no me quede atrás pues estos hombres comenzaron a complacernos y no se si a ellas les sucedería lo mismo, pero mi amante de turno comenzó a chuparme entre las piernas no supe quien había sido aquel que chupaba mi clitoris y lamia los labios de mi sexo alternando con su lengua, adentro y afuera.

Se sentía un gran calor en la habitación los gemidos y el placer aumentaban cada Segundo, solo podia sentir como esa boca me regalaba un delicioso orgasmo, creo que lo mas excitante era saber que estaba con otra persona diferente a mi esposo, que esa otra persona yo la conocía pero al mismo tiempo no sabia cual de mis cuñados fue, una a una nosotras llegamos a nuestro climax  y ahora ellos tendrían lo suyo, esta ves ellos estarían en la cama vendados y nosotras los chuparíamos a ellos.

En eso momento nos descubrimos los ojos y pudimos verlos desnudos, el mas atlético seguía siendo mi marido pero el mas generoso en su sexo era Manuel, me dieron ganas de chupar y lamer semejante vergota, los vendamos, Liliana fue la ganadora de ese trofeo se inclinó primero, yo me incline entonces por Raul y Claudia de nuevo degustaría a Juan. Aquellos hombres no dejaban de tomarnos del cabello y hacer que los cubriéramos, cada uno nos tenia prisionera de sus vergas, nos embestían para no dejar escapar un centímetro de sus penes de entre nuestros labios.

Nos turnamos y esta vez el premio era para mi , estaba frente a la espectacular verga de Manuel Liliana chuparía a mi esposo y Claudia a Raul, pero no me concentre mas en los demás, solo me arrodille para disfrutar de aquella delicia, porque a demás de medir bastante largo también lo era de grueso, lo disfrute tanto que no me di cuenta que el tiempo reglamentario paso muy rápido, ahora cada una complacería a su correspondiente esposo, eso si cuando chupe a Juan sentí que me sobraba boca, por ultimo cada una volvió a su amante inicial al para que ellos con sus vergas brillantes por la saliva de nosotras, nos regalaran el fruto de su extasis.

Me impresiono mucho como Liliana pudo cubrir toda esa verga, como disfrutaba de tragando profundamente y chupando con mucha fuerza, mas me impresiono como el la eyaculó, chorreante por entre su boca y la piel de la verga seguía chupando como hambrienta del semen de nuestro cuñadito. Claudia sacudía la vega de mi esposo contra su lengua un par de veces y luego chupaba, arriba y abajo, arriba y abajo y de nuevo sacude y traga, Juan no contuvo mas sus ganas de derramarla y le chorreo toda la boca y parte del cabello, por mi parte seguía delicadamente chupando y lamiendo a Raul sintiendo su venas hinchándose y listas para darme su regalo, pero no lo recibí en la boca, me levante para recibirlo en mis senos y luego sacudirlo y esparcirlo con su pene.

Que sensación tan orgásmica las tres denudas y complacientes con ellos, lo mejor de todo es que no nos detendríamos.

Luego de un par de vinos nos ubicamos de perrito ofreciendo nuestra vagina a nuestros amantes, esta vez no estaríamos vendadas  ahora si sabríamos quienes serian los artífices de nuestros placeres, empezaron a ubicarse Raul detrás de Monica, Juan  detrás de Liliana y Manuel seria el hombre que me penetraría, y estaba feliz contenta por probar dentro de mi cuerpo ese miembro descomunal grande y grueso.

Liliana disfrutaba de mi esposo, de cómo él le apretaba fuerte sus senos al mismo tiempo que la penetraba, Raul por el contario tomaba por las grandes caderas a mi hermanita, empujándola y haciéndolo gemir por dolor y placer, en cambio Manuel acariciaba la línea de mi espalda, me empujaba suave, así como sus besos. Duramos un par de minutos y se cambiaron de lugar esta ves me penetraría Raul y Manuel a Liliana entonces, Claudia seguiría con mi marido, así continuamos cambiaban una y otra vez, recuerdo que de cinco o seis cambios solamente una vez me penetro mi esposo.

Luego de terminar de esta serie de perrito y luego unas cabalgadas, ellos quisieron que fuera precisamente yo quien les recibiera el chorro de semen a los tres, entonces me arrodille y allí estaban esos tres hombres deseosos de derramarse en mi, Manuel me eyaculo en mi lengua, lego los otros dos.

Después de ese día lo hemos hecho unas tres veces mas, pues se pasa delicioso Si quieres escribirme adelante no tengo inconveniente Lauritaalejita2000@gmail.com

Adios