Orgia con nuestro amigo

Despues de ponerme a cien,mi marido me la mete, mientras se la chupo a nuestro amigo.Me trataban como una puta...!

Hola amigos, os voy a contar otra de mis experiencias con nuestro amigo.

Estabamos una tarde en casa tomando unos cubatas y de charla, aunque yo sabia que como otras veces, acabaríamos liados. Así fue, al cabo de un rato, de charla , mi marido empezó a tocarme las tetitas y nuestro amigo hizo lo propio. He de confesar que me encanta que me toquen las tetas y me las coman dos tíos a la vez, y si uno de ellos es mi marido, me pone mas cachonda.

Les agarre el paquete, los dos penes empezaban a crecer, se los saque del pantalón y empece a masturbarles. Como suele hacer mi marido, nos dejo un ratito a solas, el suficiente para que se comiera mis dos tetitas a la vez, abriendo su boca, chupándolas y mordiéndome los pezones, hasta hacerme daño.

Cuando mi marido apareció, le estaba haciendo una pajita a nuestro amigo. Me puse de rodillas en el suelo y empece a chupar sus dos pollas. Fue maravilloso, siempre quise hacerlo, como en las pelis porno. No olvidéis que cuando estoy muy cachonda, soy un poco putita.

Les juntaba el capullo y las chupaba las dos a la vez, luego mientras masturbaba a uno con la mano, el otro me la metía en la boca hasta la garganta. Mi marido se estaba poniendo a cien y no tardo en ponerme a cuatro patas y empezar a follarme. Yo tenia la polla de mi amigo a la altura de la boca, por lo tanto solo podía ponerme a chupar y chupar. Me la metía hasta dentro, me la sacaba y con mis labios le recorría el capullito. El me agarraba de la cabeza, mientras que mi marido no paraba de follarme y golpearme contra el. Os aseguro que es una gozada, y una vez lo pruebas, tienes que volver a repetirlo.

Notaba mi coño empapado, sonaba cada vez que mi marido empujaba. Estaba a punto de correrme, cada vez me follaba con mas fuerza y yo chupaba mas y mas. Mi marido y yo ,nos corrimos a la vez, pero a nuestro amigo le faltaba un poquito. Después de que mi marido me la sacara, me dedique solo a el, mientras mi marido se acariciaba la polla y nos miraba.

Me encargue de que se corriera a gusto, me la restregaba por mi cara, me la volvía a meter en la boca, hasta que me agarro del pelo y con toda la polla dentro de mi boca, se corrió...,note todo el chorro en mi boquita, se me salía por los lados. No os podéis imaginar la cara de gusto de nuestro amigo.

Así acabamos esa noche, satisfechos los tres y con ganas de descansar. Esta es una de esas noches locas, pero no la ultima.

Besos.