Olga

Como, inesperadamente, tube una de las mejores experiencias de mi vida con mi primita valenciana.

OLGA

Hacía ya meses que no nos veíamos, ella estudia en Valencia y yo trabajo en Cartagena, pero ese fin de semana coincidimos en el pueblo, San Vicente del Raspeig, el Jueves había fiesta y ese Sábado habían preparado una fiesta varios de los pubs del pueblo. Mi prima Olga es esa típica chica que llama la atención, rubia con unos ojos claros azules preciosos, con 18 años ya había tenido más novios que yo novias con 25. Es una muchacha que a parte de llamar la atención por guapa, la llama por simpática y cariñosa.

Había estado cenando en casa de mis tíos y fuimos juntos a la fiesta, allí nos separamos, cada uno con nuestros amigos.

A eso de las tres de la mañana nos cruzamos y la verdad que ella iba ya un poco bebida, "no se lo digas a mi padre" me dijo, y yo la dije que podía estar tranquila que no oba de decir nada, que ya tenía 18 años y que ella sabía lo que hacía. La pregunté por su novio y me dijo que lo habían dejado, que era un niño añadió. No se por qué pero aquello no me sorprendió nada, seguro que encontraba otro en cuestión de días.

La verdad que estaba espectacularmente guapa, con un vestido de color azul cielo raso, que la dejaba las rodillas al descubierto. De repente, me agarra de la mano y me lleva a bailar, una canción de estar bien pegaditos. Yo la verdad que nunca había sentido atracción física por mi prima, pero esa noche mi prima estaba espectacular, preciosa y el alcohol la había desinhibido. Me susurró al oído que cuando al iba a llevar a Cartagena para conocer la marcha de la ciudad y la dije que cuando ella quisiera.

Yo noté como al acercarse a mi oído ella frotaba bien sus pechos contra mi y como sus pezones se habían puesto bien duritos, tanto que se les notaba a través del vestido azul, además comprobé que no llevaba sujetador. ¡Vaya tetas tiene la primita! Pensé para mi con mi pene medio erecto. "Tengo que ir al servicio" me dijo, "Me acompañas?" Yo me quedé mirándola fijamente y ella añadió: "Para que me sujetes el bolso" En cierta manera esas palabras me aliviaron y en cierta manera me decepcionaron. Allí estaba yo, esperando a mi prima a la puerta del servicio de mujeres con el bolso. Por fin salió, recogió su bolso y me dio un beso en la mejilla de agradecimiento, al retirar sus labios de mi mejilla nuestras miradas se cruzaron y se quedaron fijas en nuestros ojos, yo no sabía que hacer, no quería retirar la mirada y me daba miedo continuar, pero poco tiempo me dio a pensar por que sin que diese cuenta mi prima había posado sus labios sobre los míos y su húmeda lengua había penetrado mis labios para encontrarse con mi lengua. Medio minuto que me sentí en el cielo, "no debemos" la dije, "somos primos", "lo se" añadió ella, pero no lo pude remediar. Ella se fue y no la vi en toda la noche.

Por la tarde del día siguiente fui a la piscina de mis tios a pegarme un chapuzón, cuando estaba en al piscina llegó Olga, todavía estaba en camisón, se acababa de levantar. "Me pongo el bañador y vengo" dijo, mi subconsciente de decía que me vistiera rápido y me fuera, mi cuerpo me decía que me desnudara y la esperara desnudo. Al final ni una cosa ni la otra, la esperé nadando. Apareció con un bikini rojo, precioso, se tiró al agua y nadó hasta lo más hondo donde yo estaba. "Debemos hablar de lo de anoche" la dije, ella sonrió y se fue al otro lado de la piscina. En esto aparecieron mis tíos y se pusieron a tomar el sol.

Me sumergí para bucear un poco y apareció enfrente mía mi prima, allí, estando sumergido me besó de nuevo. Sus padres, mis tíos estaban arriba, ¿y si nos veían?, todo se me olvidó en ese momento, me daba igual, me gustaba ese beso y continuamos hasta que la falta de oxígeno nos obligó a subir a la superficie. Aparecimos uno en frente del otro, yo me giré y comprobé que mis tíos estaban tumbados y no habían visto nada. Ella me cogió del pecho con sus manos y en eso momento sentí como un estreñimiento, mi pene se puso duro como una piedra en milésimas de segundo, se me notaba todo el paquete a través del bañador y era imposible ocultarlo. Olga se dio cuenta y me susurró "vaya paquete primito", se sumergió de nuevo y me quitó de un tirón el bañador sin que yo pudiera hacer nada para remediarlo. Se metió mi bañador en la parte delantera de la braguita de su bikini, "estas loca" la dije, "con tus padres delante no, nos pueden pillar".

"Quítame tu bañador si puedes" me dijo. Yo la agarré con fuerza un brazo y metí la mano en su braguita para recuperar mi bañador, comprobé que se lo había metido entre las piernas, de forma que al tirar la rozó toda la tela entre sus labios intimos, soltó un pequeño gemido al tirar del bañador. Mi tio levantó la cabeza, "Olga, ¿estas bien?" preguntó, "No te preocupes papa, un pequeño tirón en mi pierna, es que estamos jugando el primo y yo". Mi tio se volvió a tumbar despreocupado. Yo no me había recuperado de la vergüenza cuando Olga se volvió a sumergir, me agarro mi pene con una mano y se le metió en la boca, empezando a masturbarme rítmicamente.

La agarré de los sobacos y la subí a la superficie, "¿Qué coño haces?" la dije, "¿No te gusta?" preguntó, yo no fui capaz de decir nada, ella se volvió a sumergir y empezó de nuevo con su masturbación, yo me fui poco a poco al ángulo de la piscina en el que estábamos ocultos. Ella salía de vez en cuando a coger aire. En una de las veces que salió a respirar la retuve allí, la empecé a tocar los pechos, metía la mano por debajo del sujetador del bikini, pellizcando suavemente los pezones y de vez en cuando les daba mordisquitos por encima del bikini. Mi prima estaba muy excitada, esta vez me sumergí yo, la bajé la braguita del bikini y empecé a meter mi lengua entre sus labios menores buscando desesperadamente el clítoris, al fin lo encontré, pero ya tenía que respirar. Subí a la superficie y mi prima me besó desesperada, "vamos primito, metemela hasta el fondo" me suplico, "todavía no" la dije. Volví a sumergirme y chupando su clítoris suavemente la empecé a meter el dedo por su vagina, rítmicamente lo metía y lo sacaba.

Ella me cogió de los pelos y tiró para arriba de mi, "si sigues así voy a correrme y gritaré" me dijo. La abrí las piernas, me agarró por el cuello en lo que yo me sujetaba al borde de la piscina, vigilando que mis tíos no se reincorporaran. Ella me abrazó la cintura con sus piernas. Y se la fui metiendo poco a poco, empezando un mete-saca rítmico, desde el glande hasta los guevos. Yo la besaba para que no gritara, con los ojos abiertos, siempre vigilando a mis tios. Así continué hasta que entre murmullos tubo un orgasmo, yo todavía no le había tenido. La dí la vuelta, con una mano la masajeaba un pecho, con la otra me sujetaba a la piscina y mientras tanto la penetré por el culo. Poco a poco por que noté que costaba bastante, sin duda por el agua, no quería hacerla daño. Pero ella quería más y más y la conseguí meter toda la polla, tapándola la boca con una mano para que no gritara. Poco llevaba mi polla metida en su culo cuando me pidió que me corriera en su culo y así lo hice. El placer fue inmenso, el morbo increíble, después de besarnos durante un rato más, nos volvimos a colocar los bañadores y salimos a tomar el sol con mis tios.

Al día siguiente me marché para Cartagena y no la volví a ver hasta dos meses después que fue a visitarme, os podreis imaginar lo que pudimos hacer en mi piso, esta vez estando solos………….