Oh

¿Te has preguntado cómo romper el hielo con tu nueva muñeca hinchable?

  • Pasa, pasa, por favor, ponte cómoda. Disculpa el desastre, que está todavía todo un poco manga por hombro, digamos que no pensaba celebrar tan pronto la reinauguración de mi apartamento. Perdona la descortesía, ¿quieres tomar algo, qué te apetece? Cócteles complicados no me pidas que no me aclaro mucho, ¿cerveza? Tengo zumos sino… de melocotón, de tomate, por cierto, leí una vez que el zumo de tomate le da un sabor agradable a..., no, a nada, bueno, déjalo. También lo hay de mango y maracuyá, pero me pareció muy fuerte ofrecerte así de buenas a primeras mi zumo de mango, jejeje… ¿en serio no quieres tomar nada? Bueno, como quieras, yo con tu permiso me voy a tomar una copita de vino y así hablamos tranquilos. Un minuto, enseguida estoy contigo, siéntete como en casa… ¿Qué de qué quería hablarte? Uf, a ver cómo lo digo… No, complicado no es, al menos en mi cabeza no es tan complicado, aunque estas cosas, ya sabes, hay gente que es más delicada que otra para ciertos asuntos… ¿Te estoy asustando? Tranquila, para nada, no es esa mi intención… Entonces…, digamos simplemente que me he encaprichado de ti. Podría decir que me he enamorado nada más verte, pero yo los flechazos… hace años que dejé de creer en ellos. Sí, vale, también lo podría decir así, me has gustado y quería seguir conociéndote, tienes razón, suena mejor, más suave, más mainstream. Aunque  mainstream yo… no sé, ya irás viendo, ya me irás conociendo si como deseo te quedas un tiempo a mi lado. ¿Cuánto tiempo? No sabría decirte, la verdad, dos meses, cinco años qué sé yo…Me gustaría poder decir que estas cosas son eternas, pero, quieras o no, generalmente tienen fecha de caducidad. ¿Ahora sí te estoy asustando, no? Como no dices nada y se te ha quedado esa cara, así a medio camino entre la sorpresa y el espanto…Por cierto, me encanta esa expresión, tenía que decírtelo. Creo que es lo que más me gustó de ti, esa carita, con los ojos tan abiertos siempre, y… Con tu permiso me voy a sentar a tu lado, así bien juntitos… Te decía que me encanta el color de tus ojos, y tu pelo, aunque bueno, con eso nunca sabe uno si es el de verdad, como cambiáis tanto y hoy estáis de morenas, mañana de rubias y al otro de pelirrojas… Sí, ya sé que hay una manera de comprobar el color natural, pero apostaría a que contigo tampoco lo iba a averiguar, ¿verdad? Ahora se lleva así, ya lo sé, qué se le va a hacer, yo personalmente… Sí, jajaja, nada mainstream. A ver, el Amazonas tampoco, pero algo, cuidado, recortado, recién afeitado tampoco, que al final uno acaba pinchándose. Eres una chica valiente… ¿ves cómo al final íbamos a congeniar? Hablando de estas cosas y sigues aquí, aunque continúes con esa expresión… ¿Puedo? Me encanta tu boca, tiene el tamaño perfecto, y los labios, la carnosidad adecuada, hasta el color de tu pintalabios… No sé, es llamativo, como muy primario, a veces yo también soy muy primario, conviene que lo sepas… Ups, ¿qué haces?, si me descuido me muerdes, mira que tragarte el pulgar… No, si me encanta, no quiero ni imaginar cómo será el resto si haces esto con un dedo, pero… ¿No te parece que vamos muy rápido? Todavía no sé siquiera dónde tienes la válvula de inflado.