Odette

Odette, una morena trigueña de 46 años, 1.60 de estatura, 58 kilos de peso, pelo largo, castaño, ojos achinados, color café, tetas peqeñas, tirando a medianas... Una mujer bella, muy bella, llamó a la puerta de una casa rural gallega. Le abrió José, un hombre de 62 años, 1.72 de estatura, de presencia agradable. Al verla con una maleta en la mano, le preguntó:

-¿Qué desea?

-¿Es esta la casa de los Carrilleros?

-Ese es el mote familiar, sí.

-¿Tío José?

-¿Quien eres?

-Odette... la hija de su hermana Herminia... La de Puerto Rico.

-¡Vaya sorpresa! Pasa, pasa.

Se dieron dos besos en las mejillas... después, José, llevó a Odette a la sala de estar.... Se sentaron en dos sillones, y le preguntó:

-¿Qué te trae por España?

-Estoy de vacaciones. He estado en Italia y en Francia.

-Dicen que son muy bonitas.

-Lo son. En Italia lo qué más me gustó fue la Fontana de Trevi. La Torre de Pisa. El Puente de los Suspiros...

-Eso está en Venecia, ¿no?

-Sí.

-En Francia... ¿Estuviste en el museo del Louvre?

-No podía dejar de visitarlo. También estuve bajo la Torre Eiffel. Vi el Arco de Triunfo. El Palacio de Versalles... Vi cosa maravillosas.

-En Galicia tembien puedes ir a la Playa de las Catedrales. Ir a ver la Torre de Hércules...

-A España vine a conocer a la familia de mi madre.

-Pues a tu tía, aquí no la vas a conocer. Nos enfadamos y se fue a la casa de su madre. ¿Dónde te vas a alojar?

-Buscaré un hotel.

-¡De eso nada! Te quedas aquí. ¿Cuántos días traes?

-Tres. Hasta el domingo.

-Soy un pésimo anfitrión. ¿Quieres tomar algo?

-¿Tiene algo frío?

-¿Blanco o tinto?

-¿Vino?

-De casa. El mejor del pueblo. En el mes de Agosto es lo que mejor baja.

-Sorpréndame.

José fue a la bodega y trajo dos botellas de vino tinto... Sacó de la nevera dos bolsas de aceitunas rellenas de anchoas, las puso sobre la mea de la sala de estar... Poco después,  le preguntó Odette a su tío:

-¿Por qué se enfararon usted y la tía?

-De tú.

-¿Por qué te enfadaste con ella?

-Por que no se deja más que una vez al mes.

Odette, era una mujer abierta, por eso le dijo:

-Yo tengo un problema parecido al tuyo. Mi pareja tiene 67 años... pocas eecciones y no las mantiene para mi satisfacción, pero al menos mama bien.

José, fue oír lo de mamar, mirar para aquel bomboncito. Imaginala corriédose mientras se la mamaban, y su polla se puso dura.                               Odette, que vio el bulto en el pantalón de José, le importó una mierda que fuera su tío el que le preguntara:

-¿Y no echas de menos una buena polla dentro de ti?

-¿Una? Tres buenas pollas quisiera. Una dentro  del chocho, otra dentro del culo y otra en la boca. Correrme así me encantaría.

La polla de José comenzaba a mojar su pantalón con la aguadilla que estaba echando.

-Yo sólo tengo una, pero te podría follar durante horas. La tendrías dentro de ti hasta que te hartaras.

-Odette, sonrío, y le dijo a su tío:

-Me gusta la idea. Soy multiorgásmica. ¿Me llevas la maleta a mi habitación?

José se levantó y Odette vio el bultazo cubierto por un gran lamparón que hiciera la aguadilla de la polla de su tío... Cuando José se agachp para coger la maleta, Odette, por detrás, le echó mano a la verga... Se pringó la mano...  Le pareció de una grosura extrema... José se dio la vuelta y besó con lujuria desenfrenada a su sobrina. Odette, abrió la cremallera del pantalón de José... Le sacó la polla y se encontró con un cipote de 22 centímetros, grueso, mojado y tieso como un palo. Lo metió en la boca y comenzó a mamarlo con hambre. José, de pie, en medio de la sala de estar, gozó largo rato de la mamada que le hacía su sobrina. Después le dio la vuelta a Odette, le quitó la falda y las bragas, hizo que se inclinara y le comiói el húmedo chochito y el culo. Odette, le dijo.

-Mi visita a España va a ser lo mejor de mis vacaciones.

Odette, un poco después, desnuda, le quitó a camisa a su tío... Le chupó las tetillas... Le quitó el pantalón y le volvió a chupar el cipote.... Después se puso a cuatro sobre la alfombra de la sala se estar. José le metió la  polla hasta el fondo de la vagina de su chochito depilado... Comenzó a follarla... Le daba nalgadas... Le acariciaba las tetas y le daba pellizquitos en los pezones... Odette gemía de placer. Empujando con fuerza, José, le preguntó:

-¿Quieres correte así o prefieres correte de otra manera?

-Échate en la alfombra, tío. Quiero follarte a mi ritmo.

José sacó la polla empapada de jugo del chochito de Odette, del que salió un chorrito de flujo que acabó en la alfombra. Odette subió encima de su tío... Lo estaba cabalgando, cuando le preguntó:

-¿Te gustaría encularme?

-Sí.

-Moja dos dedos y métemelos en el culo, cuando el cuerpo me lo pida te pediré que me encules.

-¡Ostias, Odette! Vas a hacer que me corra antes de tiempo.

José comenzó a jugar con sus dedos en el culo de su sobrina.

-Dime palabras malsonantes, tío.

-¡Zorrara, pendejo!

-¡Fóllame duro, viejo cabrón!i

José le dio caña fina.

-¡Guarra, asquerosa!  ¡¡Me voy a correr, coño!!

Odette, que sólo dejaba que se corriesen dentro de su vagina sus parejas estables. Sintió la polla  de su tío latir dentro de ella. Sabía que se iba a correr dentro de su chochito, pero le empezó a venir a ella, y en vez de quitarla sacándose de encima, lo folló con furia. Odette tuvo uno de los mejores orgasmos de su vida, y su tío, el mejor.

Desgraciadamente, mientras se tomaban un respiro, vestidos, Juana, la esposa de José, volvió a casa para hacer las paces.

Al día siguiente, en la cocina y desayunando, le preguntó José a su sobrina:

-¿Quieres venir al monte a cazar conejos con unos amigos míos?

-¿Y voy a cazar los conejos dándoles sustos?

-Te prestarán una escopeta.

-Así, sí. Nunca disparé una escopeta.

La tía Juana le dijo a Odette:

-Como no caces tú uno, ellos nunca cazan nada.

Media hora más tarde, Odette subía a un Land Rover. En los asientos delanteros iban el conductor, un joven moreno, de 19 años,  1.80 de estatura, de ojos azules y atlético y un jovencito rubio de 18 años, 1.70 de estatura, ojos verdes y delgadito. Odette y su tío iban en el asientoi de atrás.

Fueron a un sitio muy apartado del monte. Cuando los 2 jóvenes bajaron del coche y no cogieron las escopertas. Odette, supo que el único conejo que iban a cazar era el suyo... Odette y su tío bajaron del Land Rover... El joven rubio la tomó por la cintura y la besó con lengua, a lo que Odette correspndió chupándole la lengua... El moreno, por detrás, le besaba el cuello y le acariciaba las tetas. José, sonrió a su sobrina, Odette le devolvió la sonrisa.

Poco después (ya estaban los 4 en pelota picada) Odette, agachada, iba mamando las tres pollas, a veces una, y masturbando dos, otras, mamando dos y masturbando una...

Odette acabó echada sobre una manta campera que pusieran sobre la hierba.... Su tío le mamaha el chochito... El rubio le acariciaba y le mamaba las tetas... y el moreno le daba la polla a mamar.

Como el rubio la tenía larga y delgada y el moreno más grande y más gruesa qe su tío, les dijo:

-Morenazo, échate que te voy a follar a mi ritmo... Tú, rubito, serás el que me encule, y  tú, tio, me la darás a mamar.

Allí la única que follaba era Odette. Con el chochito follaba al moreno, con el culo al rubio y con la boca se la mamaba a su tío.

Odette, estaba tan, ta, tan caliente, que al sentir los latidos del moreno corriéndose dentro de ella, lo besó con dulzura... pero luego al sentir al rubio correrse dentro de su culo y a su tío corriéndose en su boca... ¡Zas! Una riada de intenso placer comenzó a recorrer su cuerpo... Retorciéndose de gozo bebió la leche espesa y calentita de su tío...

Odette, se estaba acabando de correr cuando llegó a aquel lugar apartado del monte, una guardabosques, alta, morena... con un cuerpo de infarto, que, escopeta al hombro, les dijo:

-Así que andan prendiendo fuego al monte...

Pero bueno, esa ya es otra historia que quizá cuente algún día.

Se agradecen los comentarios buenos y malos.