Obsesión otoñal

Después de dejarles descansar vuelvo al ataque con mis relatos de experiencias reales que me han proporcionado tanto placer como dolor, momentos de satisfacción plena y ahora....

OBSESIÓN OTOÑAL

Ya he compartido con los lectores que hace tiempo dejé de ser un jovencito, sin embargo, me encuentro en plenitud, vigor y disposición para disfrutar lo que la vida me ofrece.

Hace ya un año comenté de un romance inesperado (remitirse al relato si desean tener más detalle), el caso es que aquel hermoso muchacho Eddí a quien me siento muy ligado por nuestros constantes y sobresaltados encuentros, se ha convertido en mi obsesión otoñal.

Cada oportunidad que tenemos de estar juntos, nos besamos con pasión intensa, los lugares de encuentro son: la casa de un amigo en Saltillo, los privados de los Baños Capri en Monterrey, ocasionalmente mi casa, cuando mi primo con quien la comparto no se encuentra en la ciudad o bien un buen hotel; el caso es que disfrutamos nuestra cercanía, sin embargo, no hay planes de hacer vida juntos por un importante detalle: la diferencia de edades; le llevo algo más de 17 años, compartimos el placer del sexo intenso hombre-hombre, pero la música, el cine, las costumbres, son muy diferentes.... él es hijo de familia y yo he vivido solo mucho tiempo, totalmente independiente, mundos diferentes.

Nos comunicamos diariamente vía e-mail, nos escribimos versos muy románticos e inéditos en los que volcamos todo lo que sentimos mutuamente, en ocasiones muy eventuales coincidimos en el Messenger, charlamos por horas, sobre todo en la noche, nos contamos cada cosa que seguramente los dos terminamos deslechados, es decir, nos calentamos tanto por esa vía que nos masturbamos cada cual en su sitio.

El encuentro más reciente, el 18 de julio, ha sido la convivencia más prolongada: pasamos 10 horas juntos... fue una delicia, tengo la estadística completa de cuántos besos, cuántas cogidas mutuas, cuantas mamadas y cuántas cosas nos dijimos e hicimos.

Una de ellas fue que yo llevé conmigo una cinta de medir y tomé su gran verga como maniquí: 21 cm. de reata consistente, dura, recta, cabezona, un glande enorme, no está circuncidado, su prepucio cubre y descubre esa rica protuberancia que permanentemente deja escurrir líquido preeyaculatorio dulzón, riquísimo; sopesé sus enormes huevos peludos, tomé la medida de la circunferencia de su tallo recto y de la gran cabeza... acto seguido le propiné la primera mamada de la tarde..... no eyaculó, tiene una fuerza de concentración, un control sobre sus reacciones que se dedica a hacerme feliz, a esperar que yo termine junto con él.... es un muchacho que quiero y a quien deseo conservar cerca de mí por el tiempo que nos reste de vida...... Se ha convertido en mi obsesión. No puede pasar un día en que no extrañe sus comunicados.... según me dice, él siente lo mismo, pero cada uno estamos conscientes de que no deseamos estar todo el tiempo juntos porque el sabor de nuestros encuentros es el toque de deleite en nuestra relación.

La tarde a la que me he venido refiriendo, tomamos algunos tragos, nos excitamos al máximo, hicimos un tremendo 69, pero en un momento dado, se le ocurre meter su verga en el vaso de su bebida y luego dármela a mamar..... ¡Qué delicia!, nunca había hecho yo algo similar..... repetimos la acción varias veces, los dos.

Yo nunca lo he penetrado, según comentábamos no es su fuerte, prefiere el 69, los besos y deleitarme con su verga en las más descabelladas posiciones, pero a la hora del 69 empezamos a jugar con nuestros culos, a ensalivar y penetrar con dos y hasta tres dedos y esa ocasión, al meterle tres de mis largos y gruesos dedos por su delicioso culo, sus nalgas se erizaron notablemente, sus gemidos pedían más e intenté meter un cuarto dedo, pero me detuve cuando le escuché pedirme que me detuviera, que no aguantaba más.

Se acostó de espaldas a la cama y su preciosa verga como un mástil se erguía hacia el techo y fue cuando tras propinarle una rica mamada la dejé brillosa de saliva que se combinaba con sus líquidos previos y entonces me senté encima...... fue un dolor-placer combinado que me hizo sentir mucho más cariño por él, en tanto que Eddí gemía de placer incontenible..... me pedía que me dejara caer, que sintiera toda su tranca de macho y yo, muy obediente lo hice..... ¡Qué placer tan intenso!, seguí subiendo y bajando sacando su vergota de mi culo hasta la cabeza y luego me dejaba caer hasta sentir sus vellos púbicos en mis nalgas, con la mano izquierda presionaba alternadamente sus hermosos pezoncitos y con la derecha acariciaba sus huevotes, continuando mi entrada y salida de su verga hasta que, sin tocar mi propia verga erecta solté chorros y chorros de mecos sobre su ombligo mientras su vergota explotaba dentro de mi conducto anal llenándome de su deliciosa leche de hombre, aclaro que sus corridas son abundantísimas.... me retiré cuidando de no manchar el edredón de la cama de mi amigo con los jugos que me escurrían por la entrepierna y salimos a darnos un baño reparador. Bajo el agua de la ducha nos aseamos uno al otro, nos besamos, nos volvimos a mamar pero sin eyacular y salimos a convivir un rato con mi amigo.

Debo aclarar que mi amigo es sumamente discreto, nos proporciona el lugar y convive con nosotros, pero no entra en el juego.... se mantiene a distancia. Yo no sé si haya manera de que nos espíe y se masturbe, a mí no me afectaría, incluso dejo la puerta entornada por si se anima, pero no hablamos al respecto. Tomamos la copa, platicamos, reímos, cantamos, porque Eddí tiene el don de tocar magistralmente la guitarra.....

Esa tarde, estábamos a punto de ir de nuevo a la recámara cuando llega Paco, la pareja de mi amigo.... hacemos las presentaciones y seguimos con otra copa, pero el anfitrión comenta que nosotros dos tenemos una "plática" pendiente y el recién llegado sólo dijo: "Adelante"... y nos encerramos.

Seguimos nuestra sesión íntima besándonos como si fuera la primera vez y cuando le pregunto qué impresión le dio la pareja de mi amigo él me dice: "¿No te enojas si te digo algo?".... le contesté que no y entonces me dijo que él conoció hace unos seis meses, en asuntos de trabajo a un muchacho treintañero muy parecido a éste, que acostumbra vestir de vaquero y que una noche le invitó unas cervezas.... que se les hizo tarde y él se ofreció a llevar a Darío a su casa, que en el camino empezaron a hacer referencias a sus respectivos físicos, que cuando aquél le dijo a mi muchacho que estaba algo gordito, éste le dijo que más abajo estaba más gordito y el otro quiso comprobarlo y sin más ni más le metió mano al bulto..... me confesó que se calentó, que llegaron a la casa de Darío y éste le dijo que nunca se imaginó que existiera una verga tan grande y le pidió que se la mostrara a la luz.... mi muchachito caliente sacó su verga parada y el otro se lanzó a mamarla.... dice que con una maestría increíble, tanto que le sacó todos los mecos en pocos minutos, que Darío se bebió todo su néctar, pero que para cuando esto ocurrió, el otro ya se había desvestido y estaba tan excitado que de su verga escurrían hilillos transparentes..... entonces Eddí lo masturbó..... Hasta allí la confidencia.

Yo estoicamente escuché, pero no dejó de extrañarme que lejos de sentir molestia, me excité y entonces le pregunté si Darío estaría dispuesto para hacer un trío y me contestó que tal vez sí. De esto deduje que no era la única vez que habían tenido un encuentro, pero no quise indagar más.

Seguimos en lo nuestro, pero sentí que había un matiz más caliente en nuestras caricias y disfrutamos tremendamente el resto de la tarde, me cogió cuatro veces más.... cada una soltando torrentes de mecos, en tanto que yo, volví a eyacular una sola vez más pero..... en su cálida boca..... le encanta el sabor de mis mecos.... me estuvo apretando los huevos hasta que constató que no había más leche dentro....... fue una tarde deliciosa.

En el transcurso de los doce días que han pasado desde entonces, vía mail o messenger he tocado el tema del trío y me confiesa que tuvo otro encuentro con "El vaquero", que en esta ocasión avanzaron algo más y ambos intentaron penetrarse, pero que Darío también está vergudo, quizá 18 cm. pero más delgada y menos cabezona, pero que él de plano no aguanta más que la cabeza y que Darío ya le aguantó casi la mitad..... todavía dudo que no se la haya ensartado de golpe, pero me excita que me lo cuente.....

Pues bien, es muy posible que yo vuelva a Saltillo en breves días y él me asegura que tendrá preparado a Darío para hacer el soñado trío, que le gustaría que hiciéramos el triángulo perfecto mamándonos en cadenita y luego que hagamos un sándwich, donde Darío sea el relleno, es decir, que Darío me meta su verga en posición de perrito y él cogerse a Darío, pensando que por la posición y el gozo de estar dentro de mi culo no se niegue a disfrutar la trancota de mi Edddí completita.

Anoche estuvimos en el messenger hablando al respecto y como si fuera yo un adolescente me propiné una puñeta que me provocó una abundantísima emisión de mecos...... hoy hablamos por teléfono y me dice que sueña con que llegue el momento de que disfrutemos en vivo lo que tanto hemos planeado.