Nunca subestimes a una puta de grandes tetas

Mi pareja sabe desde que empezó nuestra relación que debería compartirme con otros hombres, que lo mío no es la monogamia.

Así que aquí estoy caminando por la calle vestida solo con un vestido de vinílo negro simíl cuero muy corto y ajustado, y tacos bien altos combinando, no llevo ropa interior...nunca lo hago, me gusta que sientan mi "olor a mujer" del cual he recibido varios elogios de caballeros y damas.

Mis tetas apretadas por el ajustado vestido parecen a punto de explotar, nuevas, recien operadas, me parecen enormes, demasiado grandes para mi cuerpo, pero bueno fué a pedido de mi macho el tamaño, lo cual me excitó y me decidí a ponerme dicha talla.

Voy rumbo a un hotel 5 estrellas a encontrarme con 4 caballeros que quieren cogerme toda la tarde. Ni lerda ni perezosa acepté la cita, porque necesito sexo sucio y sentirme la más puta, ya que después de un mes de posoperatorio de mis nuevas tetas, solo me masturbé y la verdad que necesito pijas urgentemente.

Arreglamos el encuentro por mensajes y le dije a mi pareja que no me esperara, que volvería muy tarde, me hice un par de enemas, me depilé completa, me arreglé como nunca y partí rumbo al hotel.

Llego a la habitación y me recibe uno de ellos, entro y están los otros 3 sentados por ahí.

-llegó la puta muchachos!!! jajaja!!! digo casi gritando. Todos rien y al instante se paran y me rodean, de un tirón me bajan el vestido para ver mis grandes tetas al aire.

Las manosean y lamen descontrolados, mientras uno me mete mano por abajo.

-Que hija de puta! vino casi en bolas - dice al notar mi concha al aire, la cual ya tengo bien mojada y caliente.

Me arrodillo para mamar sus vergas bien duras que ya salen de sus pantalones, abro la boca y mientras me agarran del pelo trago lo que me metan. Despues de un buen rato me saco el vestido y me tiro boca arriba en el sillón abriendo las piernas para que me peguen una buena chupada de concha uno tras otro. Después de un buen rato me viene un primer orgasmo tranqui, la verdad que cuando mejor acabo es cuando me rompen el culo, así que me pongo en cuatro para que me culeen bien culeada.

Le pido a un macho que se ponga debajo y a otro que me dé por atrás para que me hagan un concha/culo inolvidable mientras chupo las 2 pijas restantes.

Despues de acabar como buena puta un par de veces, y que los chicos fueran rotando por todos mis huecos, quiero una buena enlechada en cara y tetas, me arrodillo en la alfombra y los señores se van quitando de a uno los preservativos y los ponen sobre mis tetas, el último me mete el condón usado en mi boca y comienzan todos a pajearse a centimetros de mi cara, los chorros de semen son impresionantes y en segundos me hacen un hermoso baño de leche.

Quedé agotada y ellos mucho más, así que para reponernos nos tomamos varios whiskys y una líneas de merca que me reavivaron la calentura. Así estuvimos toda la noche drogandonos y tomando mucho alcohol mientras me cogian como les viniera en gana, usada a más no poder.

De ese hotel me fuí a la madrugada, rengueando, toda abierta y muy sucia y pegoteada. con mi vestidito de cuero y tacos, oliendo a sexo, a semen de macho y a puta callejera, feliz de llevar mi cuerpo y mi deseo al límite.

Llegé a casa y vomité en el baño, quise bañarme y no pude, el cansancio y el sueño me vencieron, solo alcancé a sacarme el vestido y me dormí con los zapatos puestos durante más de un día.