Nunca es tarde para amar capítulo 7
Ella se subió rápidamente a su coche porque no tenía mucho tiempo para su trabajo, cuando llego con Eduardo a su casa solo se limitó a darle de comer y lo dejo con la niñera para cuidarlo. Solo tomo sus papeles de la clase que preparo en la mañana, abordo nuevamente su coche y salió con mucha prisa
NUNCA ES TARDE PARA AMAR CAPÍTULO 7
En el capítulo anterior:
Eduardo puso fin a la indiferencia con su vecino Alejandro, quien había tratado de ganar su amistad por semanas y varios intentos para acercarse a él. Aunque el resultado siempre solía ser el mismo, Eduardo tenía una coraza alrededor de su persona y no dejaba que cualquier compañero se acercara a él. Durante el mes pasado su comportamiento cambio con Alejandro, todo comenzó a raíz de su encuentro con Mauricio y la ayuda que le brindo para enfrentarlo. Incluso tuvo que compartir un castigo con Alex, la oportunidad de venganza no la dejo pasar el último día de detención y Eduardo se vio inmiscuido en el problema nuevamente.
Su plan termino por frustrarse como la vez anterior pero su suerte lo abandono, la directora no dejo pasar por alto su infracción y hablo con su madre para expulsarlo.
Posterior mente pasó un mes desde todo el incidente en la primaria, Alejandro se levantó más temprano que Eduardo, corrió hacia el baño para orinarse y luego regreso a su cuarto a buscar su uniforme. Se ducho rápidamente en su baño, dado que su madre le preparo el desayuno con tiempo y se estaba enfriando conforme los minutos pasaban. Eduardo se levantó con una diferencia de tiempo considerable, tal fue esta que cuando se retiraba para la escuela y este apenas estaba desayunando e incluso lo vio por la ventana subirse a la camioneta con su madre.
Cuando termino de comer sus alimentos se fue con Alexandra, quien después se retiró a su trabajo en el despacho y mientras Mónica viajaba con su hijo. Escucharon sobre la llegada del circo SOLEIL a la ciudad, se le ocurrió convencer a Mónica de asistir a dicho lugar e invitar a Alejandro para acompañarlo. En la escuela le dijo durante las clases con la esperanza de animarlo, no tuvo que decir mucho por tenía la idea de ir y su Alexandra no accedería a dejarlo solo. Esta noticia le cayó como anillo al dedo, hicieron equipo durante las clases por la maestra.
En el receso con su amigo Jesús le comento de la invitación de Eduardo, este tuvo un poco de envidia pues quería asistir con el e incluso le prometió traerle un recuerdo. El resto del día pasó tranquilamente con las clases, sus madres lo recogieron en la entrada y Alexandra le otorgo el permiso necesario para acompañar a Eduardo. Mónica se apresuró en dejar a su hijo de vuelta a casa, le dio de comer para marcharse a su preparatoria para dar clases y pidió permiso en su trabajo con tal de salir una hora antes.
Cuando termino de dar clases a sus alumnos, solo les dejo una actividad para salir y se disculpó con ellos por marcharse antes del horario habitual. Recogió a su hijo en la casa con Alex, quienes se encontraban listos para el circo e ilusionados con la idea de asistir a ver la función. Alejandra les dio las indicaciones de último momento de cuidarse, no desobedecer las indicaciones de la madre de su amigo y no causar más molestias a sus anfitriones. La mayoría de la gente fue a ver los animales del circo, las calles lucían abarrotadas de personas ansiosas de entrar y no había espacio para estacionar su carro.
Durante varios minutos dieron vueltas en círculos para hallar un lugar, bajaron del auto agarrados de las manos y caminaron hacia las taquillas donde vendían los boletos. Dentro del circo todo lucia iluminado con luces de colores, apenas las gradas se llenaron de personas y los vendedores hicieron su aparición con todo tipo de chucherías. Eduardo pidió una palomitas con mantequilla, Alex le compraron una manzana acaramelada y refrescos para los tres. La función comenzó con el director del circo dando la bienvenida, los animales acompañados de sus entrenadores y acróbatas profesiones haciendo sus números.
La noche resulta épica para los chicos, quienes se divirtieron mucho con los animales y los números presentados en el espectáculo. Una vez acabado todos los números regresaron a su casa, estaban muy cansados con toda la diversión y apenas estaban en sus hogares se durmieron.
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Alejandro se despertó temprano feliz de haber cumplido su sueño, ahora tenía de amigo a Eduardo después de mucho batallar y hacer de todo para ganar su amistad. Se despertó temprano con muchas ganas de hablar con él, pensó que sería buena idea invitarlo en el receso y comer su refrigerio con Jesús. Así aprovecharía para presentarlos uno con el otro, dado que las veces anteriores que se encontraron no fueron las mejores y ahora las circunstancias los favorecerían. Sería una forma de darle gracias por haberlo invitado al circo, se dio un baño rápido para quitarse el sueño, se arregló lo más formal posible con su uniforme y corrió a saludar a su madre en la cocina.
Alex: buenos días mami linda! Muchas gracias por darme permiso ayer
Madre: buenos días hijo! No tienes que agradecer solo cumplía mi promesa
Alex: mami te quiero mucho
Madre: yo a ti Alex
Alex: mami me sonrojo
Se acercó para abrazarla fuertemente, solo que no le alcanzaba sus hombros y su madre se tuvo que agachar para facilitarle su acción de agradecimiento. Eres la mejor mama del mundo, no pude haber pedido mejor persona y prometo que hare las cosas fáciles. Le dijo a Alexandra mientras la tenía cerca, sabes Alex desde tu nacimiento me has llenado de una felicidad indescriptible y cada día te quiero mucho más hijo. Cuando me entere de mi embarazo no pude contener mis lágrimas, sabes intentamos varias veces hasta que llegaste tú y me hubiera gustado tener más hijos pero mi trabajo no me lo permitió. Siempre contaras con mi apoyo incondicional, estoy orgullosa de tener un hijo tan bueno y hago mi mayor esfuerzo para estar contigo.
Alex: mira mama no llores mas
Alexandra: tu padre también te quiere mucho pero lo demuestra mucho porque su trabajo lo mantiene ocupado, veraz apenas se enteró de que estaba embarazada se preocupaba mucho por mí y compro un sinfín de cosas para bebe. Aunque no tenía idea de que serias un niño muy lindo por eso compro cosas de niña, has visto la fotografía de nosotros en el cuarto.
Alex: varias veces la he visto mami
Alexandra: fue tomada el día de tu nacimiento en el hospital
Alex: enserio mami?
Alexandra: por eso la conservamos en ese lugar para recordar porque trabajamos
Alex: me vas a hacer llorar mami
Alexandra: sécate esas lágrimas para desayunar
Alex: está bien mami
Alexandra: háblame de la función del circo
Alex: estuvo increíble vi muchos animales, payasos y personas saltando en el aire
Alexandra: te refieres a los acróbatas
Alex: así se llaman
Alexandra: ese es el nombre correcto de su trabajo
Alex: pues yo no lo sabía
Alexandra: que animales viste?
Alex: monos, jirafas, caballitos, leones, osos, cebras….
Alexandra: me hubiese gustado llevarte yo misma
Alex: la próxima vez será mami
Alexandra: como era el lugar
Alex: parecía una casa muy grande con escaleras largas
Alexandra: me alegra que te divirtieras hijo pero date prisa en desayunar
Alex: si mami
Eduardo apenas se estaba levantando de su cama en la casa vecina, su plan había salido mejor de lo imaginado y había tenido una noche espectacular con su nuevo amigo. Ahora solo debía conservar su amistad pues realmente le agradaba Alex, parecía un poco injusto compararlos con los demás y resaltar sus cualidades de su persona. Aunque ningunos de ellos lo hacía sentir tan seguro, parecía como si hubieran sido elegidos por el destino y su encuentro no hubiera sido una simple casualidad. Salió de la habitación para comprobar la hora exacta, tenía pocos minutos para alistarse para la primaria y su madre se veía apurada con su desayuno.
Empezare a arreglarme para llegar un poco temprano, sirve que podía entregarle su bastón luminoso y hablar con Alejandro para conocer más de sus gustos. Se dio un baño rápidamente en la ducha, se puso el uniforme de la escuela y se apresuró a desayunar en el comedor. Mónica no recordaba haberlo visto tan feliz en el pasado, se sentó para hacerle compañía y preguntarle sobre el motivo de su actitud.
Mónica: buenos días hijo! Noto algo inusual en tu persona
Eduardo: buenos días mama! Porque lo dices
Mónica: estás listo antes de la hora de costumbre
Eduardo: tenía ganas de llegar primero a la escuela
Mónica: no me engañas con eso
Eduardo: está bien me atrapaste quería entregarle su recuerdo a Alex
Mónica: es verdad hace un rato lo vi cuando buscaba algo en el auto
Eduardo: vez tenía la razón
Mónica: solo da prisa para salir un poco antes
Eduardo: solo espérame unos minutos
Alejandro salió en la camioneta con Alexandra, seguidos de sus vecinos para tratar de alcanzarlos y el tráfico estaba particularmente concurrido este dia. Los autos avanzaba lentamente con los conductores molestos, algunos tenían un largo camino por recorrer y otros posiblemente llegarían tarde si la situación continuaba. Había amanecido la mañana con nubes grises seria grandioso si lloviera, me encantaba salir durante la lluvia de pequeña y correr sintiendo cada gota de agua empapar mi cuerpo. Pensaba Mónica mientras recordaba las vacaciones en su infancia, extraño aquellos días de diversión sin límite y mis amigos de la escuela.
Sin embargo con mi familia he vivido muchos grandes momentos de felicidad, decía estos mientras admiraba a su hijo en el asiento y jugando con el bastón luminoso. Tardaron un poco más que de costumbre para llegar a la primaria, Eduardo abrazo fuertemente a su madre y salió corriendo directo a su salón. En el aula se encontraba Alejandro con otros de sus compañeros, camino hacia el con la intención de saludarlo y entregarle su recuerdo que olvido en el auto ayer.
Eduardo: buenos días Alex! Sabes olvidaste tu bastón luminoso en el auto
Alejandro: buenos días Eduardo! Es cierto más tarde lo recogeré en tu casa
Eduardo: pensé en traerlo a la escuela
Alejandro: muchas gracias tomarte la molestia
Eduardo: no fue nada amigo
Alejandro: quiero invitarte a desayunar conmigo
Eduardo: no me gustaría incomodarlos
Alejandro: para nada eres bien recibido
Eduardo: está bien iré contigo
Después de entregarle el recuerdo que compro en el circo, se fue a sentar cerca de sus amigos y ellos no dudaron en interrogarlo sobre su comportamiento. El trataba de justificarse lo mejor posible, aunque en el pasado no le agradaba la compañía de Alex y ahora de repente había cambiado mucho con él. Aunque ellos no se conformaban con una explicación simple, insistieron con el asunto hasta hallar su respuesta y Eduardo no estaba dispuesto a ceder fácilmente para dejarlos ganar. En algún momento tendría que decirles la verdad de su amistad, estaba claro que serían bajo sus propias condiciones y haría a su debido tiempo sin presiones.
Jorge: creí que no te caía bien el chico nuevo
Eduardo: solo no lo conozco
Santiago: actúas muy extraño con
Alberto: desde su llegada has cambiado mucho
Eduardo: eso no es cierto
Jorge: durante el campamento lo defendiste en un pelea e incluso te castigaron con el
Eduardo: porque me pareció una buena acción
Santiago: entonces como justificas la pelea en los baños
Eduardo: pura simpatía
Santiago: entonces porque no le hablaste el día que llego
Eduardo: somos vecinos por eso es inevitable no hablar
La maestra venia entrando al salón dispuesta a darles su clase, empezó por cerrar la puerta del aula para evitar interrupciones y saco su lista de asistencia de sus portafolios. Los alumnos se acomodaron en sus pupitres pero Eduardo se alejó un poco, no quería seguir contestando preguntas incomodas de sus amigos y justificando cada una de sus acciones con ellos. Lo bueno que desayunare con Alejandro y Jesús, así evitare verlos de frente y conoceré más sobre sus amistades de él.
Maestra: buenos días niños! Comenzaremos las actividades del día de hoy
Niños: buenos días maestra! No podemos dejarlas para otra vez
Maestra: no es posible tal cosa
Niños: están fáciles de realizar
Maestra: si han repasado sus apuntes seguro las terminan pronto
Niños: pero si no lo hemos hecho?
Maestra: entonces les daré unos 10 minutos para hacerlo
Niños: no podía ser un tiempo mayor
Maestra: animo niños la escuela no es difícil si se apuran mientras les explicare la dinámica de la actividad. La actividad será grupal como una lluvia de ideas, sacare una pregunta de una bolsa y la leeré en voz alta para todos pero solo podrá responderla quien alce la mano. Gana el primero que acumule tres respuestas correctas
Niños: cual será el premio a la actividad?
Maestra: dejémoslo al final para decidirlo
Niños: eso está mucho mejor
Maestra: corre su tiempo a partir de ahora
Luego de haber pasado sus 10 minutos de repaso los niños dijeron estar listos, la maestra coloco la bolsa sobre su escritorio y saco el primer papel con la pregunta número 1. Esta pregunta es muy sencilla de contestar sobre geografía: cuantos continentes existen?
Jorge: 6 continentes si incluimos a la Antártida
Maestra: correcto Jorge solo te faltan 2 preguntas
Volvió a meter la mono dentro de la bolsa para sacar la siguiente pregunta: como se llaman los animales que comen carne?
Santiago: carnívoros
Maestra: correcto llevas una respuesta correcta pero que paso con los demás son preguntas sencillas de contestar. La siguiente pregunta es de historia: cuando se inventó la agricultura? No quiero un número exacto más bien uno cercano
Alberto: más de 10 000 años
Maestra: por ahí vas
Jorge: 7 000 años
Maestra: un poco menos
Alejandro: 3 000 años
Maestra: tu estas más cerca por eso es correcta, muy bien chicos va la siguiente: cuando se usa la m?
Lupita: antes de b y p
Maestra: esa es la idea
La dinámica se alargó por 1 hora aproximadamente, varios chicos tenían una pregunta buena pero solo tres tenían dos y requerían una más para ganar el misterioso premio. Dado su reciente espíritu competitivo les planteare una última interrogativa y dice así: cuanto tiempo tarda la tierra en dar la vuelta al sol? Necesito la respuesta exacta y si gana la más aproximada a ella, piensen bien sus palabras porque solo tienen una oportunidad.
Lupita: 365 días
Maestra: incorrecta es un poco mas
Jorge: 366 días
Maestra: incorrecto solo quedas tu Alejandro
Alejandro: 365 días y 12 horas
Maestra: muy bien chico has ganado la dinámica pero quieres?
Alejandro: no había pensado en ello porque no imagine llegar hasta aquí
Maestra: te daré un punto en el examen o puedo justificarte alguna tarea tú decides
Sus compañeros los animaban a elegir el punto extra, las tareas no representaban un gran porcentaje en las calificaciones y la maestra solo veía el conflicto que debía tener Alejandro en su cabeza. Tantas voces de sus compañeros gritándole atontarían a cualquiera, hasta que tomo su decisión por sí mismo y Jorge lo veía con cierta envidia de haber perdido.
Alejandro: elegiré el punto extra
Maestra: lo apuntare en mi lista y tu decidirás el momento para usarlo
Alejandro: gracias maestra
El resto de la mañana continuaba tranquilo con las actividades, sin embargo la tensión en el ambiente no podía desaparecer y Eduardo no dejaba de sentir la mira de sus amigos en la espalda. Sabía que no podían mantener su actitud por mucho tiempo, los conocía desde el preescolar donde asistía él y fueron ellos quienes lo aceptaron en su grupo. Solían discutir pero siempre resolvían sus problemas entre sí, estaba seguro que si les daba espacio lo entenderían y cambiarían su opinión respecto a Alejandro. Durante el receso Eduardo se separó del grupo para desayunar su nuevo amigo, lo acompaño para aceptar su invitación y olvidarse un poco de las intrigas de su persona.
Alex: mira Eduardo este es Jesús mi amigo
Jesús: mucho gusto en conocerte Eduardo
Eduardo: lo mismo digo Jesús
Alex: hoy nos acompañara a desayunar
Jesús: me gusta mucho la idea por cierto quería agradecerte por tu ayuda
Eduardo: sobre eso no tiene que hacerlo cualquiera lo hubiera hecho
Alex: no es cierto lo que dices
Jesús: muchos estaban allí pero ninguno hizo nada
Eduardo: tal vez sea cierto pero eres mi vecino
Alex: eso es verdad
Eduardo: como se conocieron ustedes?
Jesús: fue sus primer día de clases cuando lo vi desayunando solo por eso me acerque a conversar con él, aunque debo decir que se resistió pero lo hice reír y así comencé a ganarme su amistad con el tiempo
Eduardo: porque decidiste hablarle?
Jesús: en cierta forma me recordó mucho a mí
Eduardo: no tienes amigos en tu grupo
Jesús: me relaciono poco con ellos
Eduardo: imagino debes ser difícil
Jesús: y tu como lo conociste?
Eduardo: tal vez te conto que somos vecinos
Alejandro: fue el primer día cuando nos mudamos su madre nos dio la bienvenida
Jesús: entonces deben pasar las tardes jugando
Alejandro: me temo que no es así
Jesús: si están cerca uno del otro
Alejandro: porque antes no hablábamos juntos
Jesús: pues que lastima ya quiera tener de vecino un amigo
Alejandro: por cierto traje tu recuerdo del circo
Jesús: lo recordaste muchas gracias amigo
Alejandro: no me des las gracias a mí
Jesús: entonces a quién?
Alejandro: a Eduardo porque lo olvide en su coche anoche pero me hizo el favor de traerlo para ti
Jesús: muchas gracias por ello
Eduardo: no fue nada
Jesús: como estuvo la función?
Alejandro: increíble me hubiera gustado tenerte allí
Jesús: tal vez la próxima
Continuaron conversando por un rato largo intercambiando información en ellos, ahora conocían más detalles de su vida y tenían una referencia más clara de sus gustos. Después de terminar con sus alimentos de despidieron con un abrazo, Jesús se retiró a su salón del otro lado de la primaria y Eduardo se fue con Alejandro. Las clases siguieron su curso normal sin nada relevante, restaban matemáticas, español, historia y artes. Esta última trataba de culturas en general sobre algunos de los hábitos de las personas, las formas de relacionarse, los idiomas, la vestimenta, sus tradiciones y comida.
Esta clase había sido introducida recientemente como una forma de apreciar el mundo, dados los cambios con la globalización y la etapa donde se encontraban los niños. Aprovecharían sus cualidades para darles una formación integral, no solo aprenderían de su cultura propia y les garantizarían un lugar más ameno para relacionarse.
Maestra: niños esta vez les hablare sobre Estados Unidos de América
Niños: que haremos sobre ello?
Maestra: lo haremos a modo de rompecabezas
Niños: como esta eso?
Maestra: les daré las características del país escritas en el pizarrón de un lado y palabras escritas en papeles para que las relacionen.
Niños: cuales son la características?
Maestra: nombre, clima, símbolo de la bandera, fauna, flora, costumbres, idioma, exportaciones, importaciones, recursos naturales, inventos, personajes importantes, música, etc.
Niños: y las palabras?
Maestra: Estados Unidos de América, templado y caluroso variable según la región, un águila calva, tímalo, trucha, morsa, caribú, foca, alce, zorro, pelicano, bisonte, tuza, turón, piceas, abeto, pino, arce, magnolia, tupelo, ciprés, manglar, artemisa, enebro, yuca, cactus, darse la mano, portación de arma, la caza, la propina, la comida rápida, el baloncesto, el futbol americano, inglés, español, aviones, vehículos, computadoras, medicinas, frutas, verduras, petróleo, celulares, madera, metales, productos agrícolas, GPS, láser, válvulas, abrelatas, cajero automático, desodorante, fibra óptica, teléfono, tocadiscos, Richard Nixon, Abraham Lincoln, Michael Jordán, Michael Jackson, Pop y Rock.
Niños: son muchas palabras
Maestra: si ponen todo su empeño verán que no
Niños: habrá reglas al respecto
Maestra: ninguna para hacerla más divertida
Cada uno de los niños tomo un papelito tratando de imaginar su lugar, algunos acertaron en la primera ocasión y otros solo se hicieron enredos con su palabra. Aunque la actividad les había parecido más entretenida de lo esperado, viendo a los niños correr para buscar la solución y reírse por el significado de las palabras. Recordó una pregunta que le hicieron cuando iniciaba su carrera, porque decidió ser maestra? su respuesta fue la siguiente: sueño con un mundo con hombres mejor preparados, conocimientos más especialidades, conscientes de su entorno, comprometidos y responsables de sí mismos.
Cuando terminaron las clases Eduardo y Alejandro salieron juntos a esperar a sus mamas, ambos esperaron en silencio su llegada y deseaban haber empezado a convivir desde hace tiempo. Eduardo se disponía a recuperar todas las semanas perdidas, lo invitaría a jugar a su casa toda la tarde y solo tenía que pedirle permiso a su madre pues sabía que no se negaría. Mónica llego con varios minutos de ventaja, su hijo corrió hacia ella para comentárselo y chantajearla de cierta forma para ganarse su voluntad.
Eduardo: mama te extrañe mucho
Mónica: yo también hijo
Eduardo: me alegra tenerte de vuelta
Mónica: que viste en la escuela?
Eduardo: vimos muchas cosas pero me gusta la clase sobre cultura
Mónica: pues vámonos para la casa
Eduardo: quería preguntarte si puedo invitar a jugar mañana a Alex
Mónica: solo si le da permiso su mama
Eduardo: aprovechemos para hacerlo ahora
Justo venia llegando en su camioneta escuchando algo de música, apenas bajo Alexandra para recoger a Alex y no tenía opción debía arreglar la cita de juegos. Buenas tardes Alexandra! Como te ha ido en el trabajo? le dijo Mónica, estuvo un poco pesado porque comencé a revisar mi caso y tengo algunas dificultades con las pruebas. Le dijo Alexandra a su vecina, mi hijo me ha sugerido invitar al tuyo a pasar la tarde con él y quería ver si les das permiso.
Alexandra: si quiere ir pues no veo ningún problema
Alex: yo tengo muchas ganas de ir
Mónica: entonces mañana después de la escuela yo los recojo
Alexandra: me parece bien vecina
Mónica: así quedamos ahora si me disculpa me retiro a casa
Alexandra: no se preocupe que tenga una buena tarde
Ella se subió rápidamente a su coche porque no tenía mucho tiempo para su trabajo, cuando llego con Eduardo a su casa solo se limitó a darle de comer y lo dejo con la niñera para cuidarlo. Solo tomo sus papeles de la clase que preparo en la mañana, abordo nuevamente su coche y salió con mucha prisa a la preparatoria. Aunque tuvo algo de suerte porque el tráfico no está pesado, Alexandra regreso tranquilamente a descansar un poco y hacer algunos pendientes de la casa. La tarde de los chicos paso relativamente entre juegos, Eduardo se pegó a la consola del PlayStation y Alejandro solo contaba las horas para jugar con él.
En la noche cenaron las familias en sus hogares, David padre de Alejandro como costumbre llego tarde y se perdió una cena familiar más por su trabajo. Mónica por su parte prefirió pedir comida más exacto pizza, una vez a la semana consentirse parecía bueno y dado que no tuvo opción pues lo hizo. Después Eduardo se lavó los dientes, se puso la pijama, le dio las buenas noches a su madre y se acostó en la cama a dormir. Alejandro tuvo problemas en conciliar el sueño, David entro a su cuarto para darle un beso de buenas noches y salió cuidadosamente sin hacer ruido alguno.