Nuevo Génesis (4: El Afrodisiaco)

Nuevo Génesis Capítulo 4: El Afrodisiaco Un afrodisiaco traido por Kensuke provocará que dos de los personajes tengan la tarde de sus vidas.

Nuevo Génesis Capítulo 4: El Afrodisiaco

-¿Nos vas a decir que estás haciendo?

Preguntó Touji a su amigo Kensuke.

El chico de gafas estaba sentado en su pupitre mientras manipulaba una lata roja de refresco de cola con unas pequeñas pinzas y un tubo de pegamento, tenía la lengua afuera y un extraño brillo en sus lentes.

Desde que había llegado a clase se había dedicado a eso sin decirle nada a sus dos amigos que le miraban de pie por encima del hombro con curiosidad.

-¡Ya está!

Gritó el chico mientras alzaba los brazos con los puños cerrados en señal de victoria.

-Has conseguido volver a poner la anilla a una lata de refresco...

Dijo Shinji pestañeando poco impresionado.

-No señor piloto, aquí no hay refresco de cola como pudiera parecer por su aspecto exterior.

Kensuke apretó celosamente la lata y hablaba en voz baja como si quisiera guardar un gran secreto, sus amigos se acercaron para oírle bien.

-Aquí hay un líquido marrón y burbujeante, muy parecido al contenido que debería tener, pero se trata de un proyecto secreto desarrollado por la filial química de NERV.

Susurró con un brillo en sus ojos como cuando hablaba de armas secretas.

-¿De dónde lo has sacado?

Quiso saber un sorprendido Shinji.

-Fue en una visita al laboratorio de mi padre.

Confesó el chico de gafas.

-Eso no está bien.

El piloto negó con la cabeza.

-No te preocupes Ikari, se trata de un desecho, un proyecto descartado por que salió mal. Se suponía que estaban investigando un suero de la verdad pero lo que consiguieron fue un potente afrodisiaco, esto hace que cualquier persona se sienta atraída de forma salvaje por la primera persona que vea.

Explicó de forma convincente.

-¡Wow! Eso suena genial.

Touji sonrió de forma pervertida y se frotó las manos imaginándose la de cosas que podía hacer.

-No estoy tan seguro...

Shinji alzó una ceja.

-Bueno Touji cuando digo que cualquier persona se puede sentir atraída por cualquier persona es bastante literal, si se le da este líquido a un chico y por casualidad a quien primero ve es otro chico se sentirá atraído sexualmente aunque no sea homosexual.

La explicación de su amigo hizo que Suzuhara pusiera cara de asco.

-¿Y qué pretendes hacer con ella?

El joven piloto preguntó como si estuviera interrogando a un peligroso criminal, este empezó a reírse de forma traviesa.

-Por supuesto sólo se puede hacer una cosa, la meteré en la máquina de bebidas.

Aclaró su perverso plan.

-Ni hablar, eso es algo de muy mal gusto, pero lo hablamos luego.

Shinji se mostraba reacio a que su amigo gastara una broma de tal calibre, pero no pudo seguir hablando porque el profesor acababa de entrar al aula, así que se dirigió a su mesa mirando de reojo a Rei que estaba como de costumbre mirando por la ventana.

Pensó en que si le diera ese afrodisiaco a la chica todos sus problemas acabarían. No podía dejar de pensar en ella, habían hecho el amor por dos ocasiones en los vestuarios de NERV, pero ella le había rechazado de forma fría cuando le había pedido salir en una cita normal.

Cerrando los ojos, suspirando y negando con la cabeza desechó tales pensamientos, él no era así.

Cuando llegó la hora del almuerzo vio como sus dos amigos salieron corriendo de clase, parecían tener mucha prisa así que temiendo que hicieran una barbaridad él también se puso rápido de pié y salió corriendo tras ellos.

-¡Bruto!

Escuchó gritar a Asuka detrás de él, al parecer debido a su prisa la empujó pero no tenía tiempo de disculparse si quería parar a los otros dos chicos.

Por suerte para el joven piloto consiguió llegar justo cuando empezaban a manipular la máquina de refrescos para meter dentro el falso.

-¡Pa... Parad!

Gritó faltándole el aliento por la carrera.

-¡Ah, maldita sea Ikari! ¡Déjanos en paz, tan solo es una inocente broma!

Se quejó Touji que ya había forzado la puerta de la máquina expendedora de refresco para meter en ella la falsa lata con el potente afrodisiaco.

-Jugar con los sentimientos de los demás no es ningún tipo de broma.

Con una mirada decidida se acercó a ellos y les quitó la peligrosa lata dejándola sobre una de las mesas donde se sentaban a comer los alumnos. Los tres empezaron a discutir, el piloto intentaba convencer a sus amigos de que desistieran, y los otros dos peleaban por insistir en que sólo era una bromita sin importancia. Tanto tardaron que empezaron a llegar otros alumnos.

-Míralos... gritando como bárbaros.

Le dijo Asuka a su amiga Hikari mientras negaba con la cabeza y mantenía sus manos en su cintura tras haber dejado sobre la mesa su fiambrera y una lata de refresco de cola peligrosamente cerca de la otra.

-¿Qué estarán hablando? No se les oye.

Comentó la delegada de coletas, los tres chicos estaban muy cerca los unos de los otros y murmuraban entre sí haciendo muchos aspavientos con los brazos.

-Mejor nos vamos a comer al patio.

La alemana recogió su comida y tomó una de las dos latas para irse a almorzar a otra parte seguida de su amiga.

-De todas formas ya llegaron los demás.

Kensuke suspiró al ver que el salón se llenaba de alumnos para disfrutar de su tiempo de recreo y se rindió al igual que Touji.

-Esto me lo llevaré para tirarlo.

Sintiéndose ganador el joven Ikari esbozó una sonrisa y cogió el refresco que quedaba sobre la mesa, salió al patio y lo abrió derramando su contenido en una de las fuentes para que se fuera por el desagüe. Mientras sus dos amigos miraban la escena con cara de pena pegados a la cristalera.

-Vaya, es curioso, hasta tenía olor a refresco de cola.

Tras el incidente del afrodisiaco las cosas volvieron a la calma y tras tres horas de clase de informática la jornada escolar terminó para alegría de los estudiantes a excepción de tres. A los pilotos les tocaba ir directos a la base de NERV, últimamente les estaban pidiendo muchas pruebas de sincronización. Asuka y Shinji llevaban unas caras muy largas, pero Rei iba seria como siempre.

Como era su costumbre el chico se dirigió a los vestuarios donde se cambió su ropa escolar por el difícil de poner pero cómodo plugsuit. Luego se dirigió a la sala de simuladores donde junto a sus compañeras realizó los test oportunos. Estos largos periodos de tiempo solo y en silencio le ayudaban a reflexionar sobre su vida y los acontecimientos que la rodeaban, pero también eran muy aburridos.

Nada más salir de la cabina de pruebas el joven piloto volvió a los vestuarios donde por tercera vez en poco tiempo vio que le esperaba Ayanami. Él se quedó quieto, de pié, sin dirigirle ninguna palabra. La chica se acercó a él y rodeó su cuello con sus brazos, juntaron sus cuerpos y labios, pero Shinji no abrió la boca mientras intentaban besarle.

De forma bastante ruda el chico separó a la piloto mirándola severamente usando sus manos para empujarla con bastante fuerza.

-Ikari, hazme el amor.

Le pidió la chica peli azul con su voz anodina de siempre.

-¡No Rei, no me entregaré de nuevo a ti si no sientes nada por mí, no me usarás!

Le gritó con mezcla de enfado y de dolor, ella insistió en abrazarse a él y besarle pero la rechazó una vez más esquivándola y apartando su mirada.

-Por favor, vete...

Ayanami se quedó mirando al chico durante unos segundos pero se retiró en silencio tal y como le pidió.

Rápidamente la muchacha tomó uno de los ascensores que la habrían de llevar al nivel donde se encontraba el despacho de su superior Gendo Ikari para informarle de su rotundo fracaso. Al abrir la puerta vio que él y la doctora Ritsuko estaban en una reunión.

-Discúlpenme, regresaré en otro momento.

La piloto hizo ademán de irse.

-No Rei, quédate, vuelves pronto.

Ayanami obedeció la orden del hombre y entró por la oscura habitación hasta posar marcialmente delante de la gran mesa de roble al lado de la otra mujer.

-No pude cumplir con la misión.

Se disculpó ante su ineficacia.

-¿Por qué?

La pregunta sonaba cargada de desilusión.

-Ikari no fue receptivo.

Explicó con palabras frías y vacías pero sin ocultar la verdad.

-¿Insististe?

Parecía que el hombre estuviera a punto de gritarle, las palabras abandonaron la boca como escupidas y hasta Ritsuko le miró de reojo temiendo lo peor.

-Si...

Respondió Rei en calma, el silencio se adueñó del despacho durante interminables segundos de tensión.

-Está bien, vístete y regresa a casa a descansar.

El ruido de los pasos de la peli azul alejándose fue audible hasta que abandonó la instancia, dejando de nuevo a los dos adultos solos.

-Finalmente tu hijo no quiere seguir tus planes y eso que ni siquiera se ha enterado de lo que pasaba.

la doctora Akagi había estado deseando echarle en cara al comandante el fracaso de su proyecto desde el primer momento en el que lo había planteado ya que no había estado de acuerdo con usar a los dos jóvenes pilotos en ese experimento.

-Vuelve al trabajo Ritsuko, a partir de este momento me ocupo yo de todo.

El hombre de barba y gafas se recostó en su butaca como meditativo.

A Shinji le había parecido raro cuando justo antes de salir del Geofront la teniente Ibuki le avisó de que Ritsuko quería verle en su despacho, así que el joven deshizo sus pasos hasta la oficina de la doctora y llamó con los nudillos a la puerta.

-¡Adelante!

Se escuchó desde dentro y el piloto entró.

-¿Quería verme doctora, ocurre algo con las pruebas?

Shinji tenía miedo de tener que repetir de nuevo el tedioso proceso aunque normalmente solían avisarles por megafonía.

-No, las pruebas salieron bien, siéntate por favor.

Ritsuko le recibió sonriente sentada en una silla, con sus largas y femeninas piernas cruzadas y enfundadas en medias oscuras. Con una mano le señaló la silla en frente a ella y el chico tomó asiento expectante.

-Dime Shinji, ¿cómo te sientes?

La mujer rubia soltó la pregunta tratando ser lo más amable posible.

-¿Eh? Bien supongo... ¿por qué me lo pregunta, se trata de algún test psicológico?

Quiso saber el chico ya que la pregunta le había parecido muy personal.

-En absoluto, sólo tengo curiosidad y preferí preguntártelo a ti directamente antes que a Misato.

Ella estaba serena y tranquila, sabía que la situación del joven piloto era delicada.

-Por ejemplo, dime como estás de ánimos y esas cosas, ¿sientes mucha presión por estar aquí?

La doctora esperaba algún tipo de confesión sobre lo que había pasado con Rei y así poder ayudar a Shinji, este se quedó pensando unos segundos.

-No, todo está bien.

Dijo con una suave sonrisa y se levantó para marcharse. Ritsuko sabía que ese comportamiento era esquivo.

-Shinji espera.

El chico ya estaba con la mano en el pomo de la puerta cuando la doctora lo llamo, él se giró y vio a la mujer caminar hacia donde se encontrada. Sus cuerpos quedaron muy juntos, ella le miraba como si se estuviera pensando mucho algo y el joven se puso algo nervioso sonrojándose.

Cuando los labios de la científica se pegaron a los suyos Shinji enrojeció del todo y sus ojos se salieron de sus órbitas.

-¡E... Esto no está bien!

El Tercer Elegido se asustó y salió corriendo torpemente del despacho de la mujer que le intentó besar, la doctora Akagi suspiró frotándose la frente con una mano mientras pensaba en cómo se le había ocurrido tal idea.

-¡Está gente está loca!

Pensó nada más llegar a casa, muy cansado, había hecho todo el camino corriendo aunque no sabía muy bien porque, era su costumbre huir de sus problemas. Recuperando el aliento apoyó la espalda contra la puerta de la casa y estuvo unos minutos quieto para recuperar el ritmo normal de sus respiración, luego suspiró y se sentó en el sofá del salón. Casi en el mismo instante oyó que alguien llegaba a casa.

-¿Por qué ibas corriendo como alma que lleva el diablo? Te vi adelantarme en la calle quince.

Le dijo Asuka recién llegada a casa cargando con su cartera aún, al chico no le sorprendió porque después de las clases y de ir a la base solía quedar con Hikari para ir de compras o pasear.

-Creí que me había dejado el gas abierto...

Fue la excusa del joven piloto ya que ni en broma le iba a comentar a su compañera de piso lo que le había sucedido con la doctora Ritsuko y mucho menos aún lo de Rei. Para su alivio pareció que la chica le creyó y no le hizo más preguntas, así que él se disculpó y se fue a tomar una ducha.

-Es más raro...

Comentó entre dientes Asuka mientras abría la nevera buscando algo de beber pero se encontró con que estaba medio vacía de no ser por una gran cantidad de cerveza.

-Gracias Misato.

Dijo entre dientes irónica y recordó que en el almuerzo no se había bebido su refresco, así que buscó en su cartera y sacó una templada lata de cola aunque tenía tanta sed que no le importó que no estuviera fresca, la abrió y prácticamente la bebió de un solo trago.

-¡Puagh! ¡Esto estaba malísimo!

Se quejó la pelirroja poniendo mala cara y sacando la lengua fuera.

-Me he olvidado la toalla.

Anunció Shinji saliendo del baño descamisado, con su torso desnudo brillando del sudor y tan solo con los pantalones negros escolares puestos.

-Mmmm.

Asuka le miro atentamente mientras caminaba, era como si su mirada estuviese filtrada con un velo nebuloso y veía al chico muy atractivo.

-Estás muy guapo.

Dijo suavemente con una sonrisa y retirándose con la mano derecha un mechón de anaranjado pelo.

-¿Qué has dicho?

Pensando que había escuchado mal el joven piloto se detuvo mirando hacia su compañera.

-He dicho que estás muy guapo.

Sonriéndole de forma seductora se acercó a él y apoyó sus manos suaves sobre el pecho desnudo de Shinji que tragó saliva y ruborizó al sentir el contacto.

-Es... ¿Una broma?

Preguntó muy avergonzado y confuso por la actitud de la chica.

-No, para nada.

El susurro de la chica directamente a su oído unido al movimiento de su dedo índice por su delgado torso solo hizo que Shinji se pusiera más y más nervioso. Justo cuando pensaba que la broma había llegado a su punto máximo Asuka hizo algo que él jamás esperaría, le abrazo por el cuello y le besó.

Los labios de la alemana eran especialmente suaves y el chico se dejó llevar por su calidez entrecerrando los ojos y tomándola por la cintura, pero recordó lo que había pasado con Rei y con la doctora así que volvió en sí y la separó mirándola a los ojos para pedirle que parara.

-Te quiero.

Dijo ella con una sonrisa boba antes de poder el piloto decirle nada, y como llevado por una pasión desmesurada la abrazó contra él para besarla con mucha pasión.

-Mmmmm.

La lengua de Shinji entró invasora en la boca de Asuka y la enroscó con la suya mientras sus manos manoseaban su trasero como queriendo degustar a la pelirroja antes de diera marcha atrás. Pero ella no parecía querer para tampoco, sus besos succionaban la boca de él intercambiando salivas y sus manos exploraban la espalda de su amante.

-Asuka, no sabes cuánto te he deseado desde que te vi...

Confesó el Tercer Elegido ya desprovisto de cualquier tapujo mientras lamía el cuello que la chica le ofrecía.

-¡Oh, yo también te deseo!

Le gritaba ella. Shinji estaba encendido al poder acceder al jardín prohibido que era el cuerpo de la pelirroja y de un tirón que hizo saltar los botones de su camisa la abrió descubriendo su sujetador de lencería rosa que tapaba sus senos y los realzaban. El muchacho miró directamente a sus atributos femeninos relamiéndose.

-Ten cuidado con el sujetador, me lo compré hace poco.

Shinji se emocionó ya que dentro de esa advertencia estaba implícito que ella quería que se lo quitara.

-Claro Asuka, tendré cuidado.

Le dijo sonriéndole muy sonrojado y agitado, con la ayuda de ella le quitó la prenda íntima para dejar al aire sus senos de tamaño más grande que el de las demás chicas de su edad, firmes, suaves y con pezoncitos color rosa suave.

-Me encantan tus tetas Asuka...

Le dijo suavemente mientras con sus dedos las acariciaba suavemente al salir de su camisa abierta aún con el uniforme escolar puesto. Sus yemas acariciaban la suave piel de sus senos y rozaban los pezones de la muchacha como queriendo abarcar cada centímetro de su superficie lo que le produjo una erección notable en su entrepierna.

-Mmmm cariño, hagamos todo lo que quieras.

Declaró ella muy mimosa mientras echaba su pecho hacia delante para que parecieran más grandes. El piloto alzó sus ojos para mirar los suyos azules viendo el cielo abierto.

-Ponte de rodillas... y chúpamela.

Entre la orden el chico tuvo que tragar saliva, tímido como era y aún sabiendo que la muchacha le deseaba y se había comprometido a satisfacerle le daba reparo esa posición. Ella le guió un ojo traviesa y se puso de rodillas lentamente para luego desabrochar sus pantalones y bajarlos junto su ropa interior.

Su pene erecto miró al techo mientras le daba al aire y la alemana lo cogió cariñosamente con su mano derecha llevando su glande a los labios y besándolo.

-¡Ahhhh!

Su pene estaba a punto de reventar de la excitación, ver a la orgullosa chica de rodillas ante él para darle placer le causaba una agradable sensación mezcla de gusto y poder, su verga palpitaba y la joven se la introdujo hasta la mitad en la boca.

Cerró los ojos con las mejillas ardiendo, para ella era un manjar el sabor a masculinidad y empezó a hacerle una intensa mamada. Lentamente metía y sacaba su polla de la boca, lamiendo su glande y apretando sus labios para rozar su tronco de tono moreno que pronto se humedeció de la goteante saliva de ella.

-Si... sigue así... ah...

El joven Ikari acariciaba la fogosa melena de la chica que le estaba practicando sexo oral. Ella retiró por completo su miembro de la boca y lo pajeó mientras lo lamía de arriba a abajo, su saliva salpicaba boca y mentón de ella mientras resbalaba de su pene goteando al suelo, con una mano masajeaba con mucho cuidado los testículos de él completamente desprovistos de vello.

-¡Mmmmfff!

Shinji pasó sus manos por su rostro para intentar aplacar el calor que su cara mientras su cuerpo entero estaba bañado en sudor que se derramaba en gotas por su tersa piel cayendo hasta su ombligo. Mientras tanto Asuka seguía complaciéndole chupando su polla, haciendo un ruido de succión que era parecido al que hacía cuando tomaba un helado de hielo y que tantas fantasías del chico había inspirado.

-¡Me corro!

Gritó con todas sus fuerzas y sacaba contra la voluntad de la muchacha su verga de la boca de ella para eyacularle en la cara cinco espesos chorros de semen caliente.

-¡Ah!

Con los ojos cerrados la piloto los recibió en su cara con una sonrisa sintiendo el esperma caer sobre su nariz, mejillas y pelo.

-¡Buf!

Shinji apoyó su espalda contra la pared y suspiró largamente de placer, su pene palpitaba aún erecto por la reciente corrida y en su punta había una gota blanca. La alemana le miraba divertida aún de rodillas mientras se limpiaba la cara con sus dedos llevándoselos luego a la boca para no desperdiciar nada del fluido seminal. Sus ojo brillaban azules mirando con devoción al chico que acarició su cabeza.

-Genial... pero ahora quiero devolverte el favor, ¿qué tal si te sientas en el sofá?

Le dijo guiñando un ojo.

-Por ti lo que quieras.

Se puso de pie y trotando como una chiquilla por el campo se sentó en el sofá pensando en que querría hacer ahora su compañero. Este se acercó a ella totalmente desnudo con una sonrisa y se arrodilló. Como había dicho le iba a devolver el favor, recogió su falda hasta su cintura viéndole sus bragas rosas que de inmediato bajó hasta sus tobillos. Para su sorpresa al hacerlo vio un hilillo de líquido transparente que se pegó a la tela de la ropa íntima desde su sexo. Su pubis estaba depilado de forma meticulosa en forma de triángulo invertido de pelo naranja.

-Vaya, no sabía que cuidaras tanto esta... parte de ti...

Dijo Shinji con algo de travesura mientras acariciaba en suave vello púbico de la pelirroja.

-Jejeje, me alegro de que te guste.

Le respondió abriéndose completamente de piernas dejando ver sus labios inferiores abriéndose con el clítoris levemente descubierto.

Al ver el sexo abierto de la chica el joven acercó su nariz para disfrutar de su aroma que le excitó aún más y le animó decididamente a lamer la raja de la muchacha que empezó a gemir al contacto de la lengua masculina.

-Mmmm Shinji... eres un amante genial...

Le piropeó mientras sentía su coño humedecerse no solo por la saliva del joven que seguía disfrutando de comerle los labios inferiores. Tenía la cabeza metida entre sus piernas y succionaba su vulva metiéndole la lengua en la vagina de la mejor forma que sabía.

-¡Ah! ¡Shinji!

Asuka gritaba de placer, el chico japonés parecía un experto y tan solo el roce de los dedos en sus muslos ya la hacía humedecerse. Shinji tenía ganas de masturbarse, su pene temblaba apuntando al techo reclamando atención para descargarse por segunda vez, pero el muchacho quería esperar.

Devoraba su coño con locura, cargando los muslos suaves y carnosos de la alemana con sus manos, moviéndolos a su antojo para lamer y succionar el sexo mojado de fluidos calientes de la chica. Sacó su lengua del cálido interior y con la punta empezó a estimular su clítoris dándole mayor placer.

-¡Mmmm para, si sigues así me volveré loca.!

Avisó Asuka sintiendo que de un momento a otro tendría un orgasmo por la gratificante sesión de sexo oral que estaba recibiendo por parte de Shinji. Su piel ardía y sus destapados pezones estaban duros y sensibles por lo que empezó a pellizcárselos para ponerse más cachonda, la lengua del chico seguía jugando con su perlita y ahora un dedo índice se le unía. De su sexo seguían salpicando fluidos sin detenerse, esos líquidos manchaban el mentón del joven que de vez en cuando se relamía.

-¡Ahhhhhh!

Finalmente la Segunda Elegida sintió una sacudida y gran calor en la entrepierna, se había corrido y se deslizaba sin fuerzas por el sofá mientras escuchaba los ruidos de la lengua de Shinji que seguía devorando su encharcado coño.

-¿Qué tal estuvo?

Preguntó el chico con una tímida sonrisa cuando se dio por satisfecho, se restregaba el brazo izquierdo por sus labios para limpiarse.

-Increíble...

Fue lo único que salió de los labios de la chica alemana que aún sentía en su cuerpo el placer del orgasmo que acababa de tener.

-Ven, vamos a mi habitación a seguir.

Shinji le ofreció una mano para ayudarla a levantarse y ella la tomó agradecida aún débil. Con sus dos cuerpos jóvenes sudorosos ambos se dirigieron al cuarto del chico, por el camino el piloto no se pudo aguantar y besaba la cara y cuello de ella mientras con una mano le magreaba el culo desnudo.

Cuando entraron Shinji ayudó a Asuka a desnudarse por completo, no quería que ninguno de los dos tuviera una sola prenda de ropa, ni siquiera se salvaron los conectores neuronales que la joven usaba a modo de pinzas del pelo. El chico y la chica quedaron del todo desnudos el uno en frente al otro y empezaron a besarse y acariciarse como si no hubiera mañana.

-Ponte en cuatro sobre mi cama.

Pidió Shinji cuando no pudo aguantar más el deseo de entrar dentro de su compañera.

-¿Así?

Ella obedeció sumisa, al joven ya no le importaba que la había llevado a entregarse de manera tan apasionada, iba a poseerla y además sentía algo por él. Se puso de rodillas detrás de ella viendo su culo en pompa, su ano rosa y pequeñito y sus labios vaginales aún húmedos. La tomó por la cintura y acercó la punta de su erecta verga a la entrada de su coño, pero una perversa idea cruzó su mente y subió un poco hasta apoyar el glande en su ano y empezar a penetrarlo con fuerza ayudado de lo mojado de su pene y el sudor del cuerpo de la chica.

-¡Ahhhhh!

Asuka gritó al sentir como estaba siento sodomizada y centímetro a centímetro la polla de Shinji entraba en su culo. Este con un ojo cerrado se relamía guiando su falo con la mano derecha hasta que lo tuvo bien metido y comenzó a bombearla apoyando sus manos en la cintura.

-¡Esta es una pequeña venganza por cómo me has estado tratando!

Le dijo jadeando y se inclinó sobre su espalda para besarle con dulzura la nuca y después de ese delicado gesto se dedicó a encularla con energía. Su pequeño ano apretaba la polla del chico que gozaba como nunca de poder darle de esa manera a la orgullosa chica. Si lo supieran en clase se convertiría en el chico más popular del colegio sin ninguna duda.

Asuka se mordía el labio inferior sonrojada y con la cabeza agachada, su pelo largo cubría su rostro y luchaba por no gritar, estaba siendo una sesión de sexo bastante fuerte pero sentía total admiración atracción por el Tercer Niño como ella le solía llamar y no le iba a defraudar con quejar.

Poco a poco Shinji consiguió que sus caderas golpeasen el culo redondo y tierno de la alemana, señal de que la penetración anal era completa, sacaba la verga hasta la mitad y volvía a arremeter disfrutando de la apretada sensación. Mientras la chica iba disfrutando al ritmo de que su culo se acostumbraba y ya no quería gritar, ahora gemía con gusto.

-¿Te gusta? ¿Te gusta que te dé por el culo como me has estado dando a mí y a todos desde que llegaste?

Le dijo con una sonrisa malvada sin dejar de follarla y nalgueándola.

-¡Ah si! ¡No pares!

Dijo ella respondiéndole con sinceridad absoluta. Cerró los ojos al sentir que le tiraban del pelo, el chico la tomaba como si fuera su yegua y su cabello sus riendas. Mientras pasaba su mano izquierda por el vientre de la muchacha, acariciándoselo y subiendo hasta sus senos que se balanceaban, acariciando su cuello hasta llegar a su cara donde le metió dos de sus dedos en la boca que esta chupó con gusto.

Siguieron un rato follando así hasta que Shinji sintió que sus fuerzas se le acababan y tuvo que cambiar de postura a otra más cómoda para él, así que se acostó de lado haciendo que la pelirroja también lo hiciera unidos por su verga y culo ya que no quería salirse de ella en ningún momento. Estando el chico detrás de ella ambos miraban hacia la puerta con la espalda de la joven pegada al torso de el chico.

Aspirando su delicioso aroma la seguía enculando mientras ambos gimoteaban. La alemana giró su sonrojado rostro para mirar a su amante y este la recibió con un beso con lengua que ella siguió con gusto. Una de las manos del chico apretaba su pecho izquierdo, la otra la usaba para mantener la pierna de Asuka elevada y que no le doliera tanto la sodomía.

La pasión creció hasta límites insospechados, tanto que mientras aún disfrutaban del húmedo beso el joven se corrió con su verga metida hasta el fondo de su ano. Estuvieron unos minutos aún pegados hasta que la erección desapareció y se quedaron juntos, abrazados y jadeando.

Cuando Asuka despertó le dolía mucho la cabeza, abrió los ojos y vio el techo, pero algo raro pasaba, era un techo desconocido. El olor del ambiente era cargado y notó bajo la sábana que su cuerpo estaba desnudo.

-¿Qué demonios...?

Se incorporó dejando caer la sábana a la altura de su cintura y se rascó la cabeza. Su pelo estaba sucio y descuidado, se frotó los ojos de las legañas para ver mejor.

-Esta... ¿Es la habitación de Shinji?

Asustada miró a su lado y vio a su compañero de piso, también desnudo durmiendo plácidamente. La chica instintivamente se cubrió con la sábana hasta la nariz mientras abría mucho sus ojos azul cielo y sus mejillas ardían.

-¡Ay dios mío! ¡Dime que no lo hemos hecho!

FIN


La trama para este capítulo se me ocurrió estando escribiendo el tercero, así que no avancé mucho con la historia y preferí recrearme en la trama del afrodisiaco de Kensuke para que Shinji se diera un homenaje con Asuka.

Aún así me pareció que debía incluir la parte del rechazo a Rei para usarlo de puente en el siguiente capítulo que espero tener pronto.

Muchas gracias por leerla.

AsukaHentai.