Nuevo Génesis (2: El Experimento)

Nuevo Génesis Capítulo 2: El Experimento Los planes secretos de Gendo comienzan a hacerse realidad con la ayuda de Rei y Asuka saldrá con Touji en una cita.

Nuevo Génesis Capítulo 2: El Experimento

-¿Me mando llamar comandante?

Rei Ayanami permanecía en pié delante de la mesa del despacho de Gendo Ikari, vestida con su plugsuit color blanco esperaba a lo que tuviera que decirle.

-Si Rei, como sabrás este experimento es realmente importante y quiero estar seguro de que realmente entiendes cuáles son tus obligaciones en este.

Le dijo el hombre sentado al otro lado de la mesa.

-Si comandante, lo haré lo mejor posible.

Tras su promesa la joven piloto abandonó su despacho mientras el hombre la seguía con la mirada, confiado en que no le defraudaría.

Mientras tanto los dos compañeros pilotos de Rei estaban en clase. Asuka charlando con su nueva mejor amiga, la delegada Hikari Horaki, y algunas chicas más de su curso, Shinji estaba junto a Touji y Kensuke los tres amigos miraban hacia donde estaban las chicas y parecían discutir algo en voz baja.

-¿En serio se lo vas a preguntar?

Quiso saber un emocionado Kensuke.

-Si, lo dije y lo haré.

Respondió Touji seguro de sí mismo.

-Te vas a llevar un chasco...

Shinji estaba sentado en el pupitre con la cabeza apoyada sobre sus brazos sin parecer muy animado.

-¡No seas así Ikari! Al menos si le dice que no nos reiremos mucho.

Dijo el de gafas.

-¡Hey! ¡Creía que estabas conmigo en esto!

Se enfadó Suzuhara alzando un puño y apretando los dientes.

-Y lo estoy, lo estoy.

Se apresuró a decir moviendo las manos.

-Solo que quiero saber cuándo se lo vas a pedir.

Cambió de tema el muchacho.

-Pues... supongo que el próximo cambio de clase, ahora está con sus amigas.

Dijo el chico del chándal con cierto nerviosismo. Shinji y Kensuke intercambiaron miradas cómplices.

La primera clase pasó aunque nadie le hizo mucho caso al profesor, la mayoría de los alumnos estaban intercambiando mensajes privados hablando sobre lo que iba a pasar a continuación. El rumor de que Suzuhara le pediría a Sohryu para salir se extendió como la pólvora y se cruzaban apuestas sobre lo que sucedería, sólo Shinji y Hikari no quisieron participar por dignidad y Touji y Asuka no se enteraron al ser los protagonistas.

Finalmente el momento llegó, la campana sonó y el profesor se marchó del aula, rápidamente y sin dejar tiempo para que las amigas de Asuka fueran a junto de ella, Touji Suzuhara corrió hasta su pupitre y se inclinó sobre ella apoyando sus grandes manos en la mesa.

-Sohryu, ¿quieres salir conmigo?

Preguntó de manera directa, sin contemplaciones, intentando que no le temblase la voz y parecer serio.

Asuka se le quedó mirando, iba a decirle que no de manera seca y algo despectiva, pero un pensamiento cruzó su cerebro y miró para Shinji el cual estaba a su vez mirando hacia ellos, una sonrisa traviesa apareció en los labios de la alemana para después llevar su atención de nuevo al chico que le pedía una cita.

-Claro, me apetece mucho, ¿me recoges a la tarde en la puerta del instituto?

Respondió con una sonrisa encantadora.

-¿Eh? Si claro...

Suzuhara pareció aturdido por lo que acababa de suceder, no se esperaba una respuesta afirmativa tan clara y volvió lentamente a su sitio. De camino se dio cuenta de que había quedado con la chica más deseada de clase y una sonrisa boba apareció en su rostro.

En cuanto se oyó la respuesta de Asuka la clase entera estalló en un alboroto de comentarios sobre lo que acababa de pasar, Kensuke agitaba los brazos celebrando la victoria de su compañero y Shinji estaba con la boca abierta aún sin creérselo.

-¿En serio vas a salir con Suzuhara?

Hikari se había acercado a la mesa de la alemana para preguntarle en voz baja por lo que todos acababan de ver.

-Si, ¿hay algo de malo?

Respondió esta tranquilamente.

-No sé, es sólo que es un chico muy maleducado y rudo.

Dijo mirando a Touji de reojo.

-Tranquila, sé lo que me hago, si se intenta aprovechar sabré detenerle los pies.

La chica intentó calmar a su amiga pero se dio cuenta de que durante todo ese rato tenía sus ojos clavados en el chico con el que acababa de quedar.

Después de clase Asuka y Shinji salieron rumbo a la base de NERV donde tenían que pasar unas pruebas de sincronización, las primeras para la pelirroja. Rei también tenía que pasarlas pero desde la mañana estaba en la base.

-Rei, vamos a empezar dentro de poco con la primera fase del experimento, ¿estás preparada?

Preguntó la doctora Ritsuko a la joven piloto que continuaba vestida con su plugsuit.

-Si doctora Akagi.

Asintió muy calmada.

-Si tienes alguna duda sobre si hacer lo que te pidió el comandante dímelo y buscaremos otra manera.

Ofreció la mujer teñida de rubio.

-No, por mi está bien.

La chica callada y tímida estaba convencida de hacer lo que le habían ordenado.

-Es tu elección, ya te avisaremos cuando tengas que actuar.

Tras esto la mujer de bata blanca se marchó.

Mientras tanto Shinji Ikari estaba en el puente donde estaba parado el recién llegado EVA-02. Había sido trasladado desde Alemania en avión y llegó aquella misma mañana.

-Le pega bastante...

Comentó en voz baja fijándose en el color rojo del Evangelion de Asuka.

-¿Te gusta mi EVA? ¿A qué es bonito?

Precisamente la chica apareció por el túnel de acceso vestida en el ajustado traje de piloto color rojo, haciendo un eco metálico a cada paso que daba. Se paró al lado de su compañero y contempló orgullosa a su EVA.

-¿Por qué has quedado con Touji?

Le preguntó directamente sin esperar.

-¿Qué pasa? ¿Te molesta eso?

Preguntó a su vez con una sonrisita maliciosa.

-No pareces el tipo de chica que salga con alguien como Touji.

El Tercer Elegido arqueó las cejas. La alemana no respondió, tan solo le miró con una sonrisa de desprecio y se fue a realizar su prueba ya que había pedido ser la primera para llegar a tiempo a su cita, Shinji suspiró.

Asuka hizo su prueba sacando unos datos muy superiores a los de los otros dos pilotos, lo que hizo que su ego aumentara y estuviera haciendo bromas sobre su mayor capacidad de pilotar, bromas que ni Shinji ni Rei tomaron en cuenta.

Al chico le parecía que su compañera de pelo azul estaba muy callada, más de lo que de costumbre ya que generalmente siempre intercambiaban saludos y le contestaba preguntas que hiciera aunque fuera con monosílabos. Pero esta vez no abrió la boca y se marchó antes de que la piloto del EVA-02 saliera de la cabina de simulación.

Después de Asuka fue turno de Shinji y Rei que realizaron su prueba juntos a petición de Ritsuko, según ella para ahorrar tiempo. Cuando los datos de los dos quedaron registrados se les permitió salir y cambiarse.

Ya en los vestuarios Ikari seguía dándole vueltas a la cabeza al asunto de Asuka y Touji, pulsó los botones en las muñecas del plugsuit y este se despresurizó permitiéndole bajarlo hasta la cintura, se sentó en una banca como cansado.

-Está bien, así Touji descubrirá que Asuka no es como parece.

Reflexionó en voz alta sin darse cuenta de que había alguien muy cerca de él, cuando levantó la cabeza vio a Rei completamente desnuda a un par de metros.

-¡¡¡Ayanami!!!

Como impulsado por un resorte se puso de pié, alarmado por la desnudez de la chica cuando pasó la sorpresa se fijó en su cuerpo pálido y delgado, sus pequeños pechos de pezón rosa y su pubis con escaso vello azulado. De forma instintiva giró la cara avergonzado y se tapó con una mano.

-¡No deberías andar sin ropa por ahí, y mucho menos si hay gente!

Le recriminó su actitud, pero ella le tomó la mano con la que se cubría el rostro y se pudo frente a él, poniendo sus propias manos sobre el pecho del chico.

-¿Ayanami?

Sonrojado y aturdido la miraba a la cara, ella acercó sus labios a los del joven y empezó a besarlo de manera algo torpe, él simplemente reaccionó moviendo los labios, saboreando a su compañera.

Muchas veces en la soledad de su habitación el chico se había masturbado pensando en que follaba con Ayanami, pero lo que estaba sucediendo en esos momentos era tan solo posible en sus fantasías, se preguntó incluso si se habría desmayado dentro del simulador y todo eso era un sueño pero el tacto de las manos de Rei bajando por sus costados hasta tomar el uniforme de piloto para bajarlo le sacó de toda duda.

La chica se arrodilló mientras desnudaba de todo a su compañero dejando a la vista su pubis sin vello púbico y su pene algo abultado por la excitación del momento.

-Ah....

Shinji creía necesario decir algo pero sólo escapó un gemido de su boca mientras con los dedos índice y pulgar de su mano derecha Ayanami masturbaba su glande.

Su pene fue creciendo poco a poco hasta alcanzar su tamaño máximo, era de tamaño medio, no muy ancho, de textura suave y liso con la cabeza despejada.

Rei lo agarró firmemente con su mano derecha, cerrando sus dedos alrededor del tronco, sintiendo su dureza y calor, sin más comenzó a lamer la punta como si fuera un helado. El chico parecía derretirse ante los lametones de la pequeña lengua de la muchacha que dejaban un hilillo de saliva entre su boca y el glande y él solo acertaba a acariciar su suave pelo azul esperando que aquella agradable sensación nunca acabase.

-Chúpamela Ayanami.

Susurró el piloto mientras miraba hacia abajo y con una mano dirigía su miembro a la boca de su compañera haciendo que se tragara algunos centímetros de su erección.

Ella comenzó a mover la cabeza de atrás hacia delante haciéndole una buena mamada, rozando con sus labios el firme pene de este y lubricándolo con su saliva. Sus ojos rojos miraban atentos la cara de Shinji lo que hacía que este aún estuviera más excitado.

-Ah, ah, ah...

Jadeando el chico tomó con su mano derecha la nuca de la peli azul mientras que apoyaba la zurda en su propia cintura comenzando un movimiento rítmico de caderas para introducir más de su verga en la boca de ella, aunque no quería ser demasiado rudo ya que podría atragantarse.

Mientras chupaba Rei sentía sobre su cara las gotas de sudor de su compañero que resbalaban por su delgado cuerpo hasta caer en la cara de ella y el pene de él, a su vez ella jugaba con sus imberbes bolas. Lo que estaba haciendo sólo lo hacía por orden de Gendo y aunque no tenía experiencia ni había recibido entrenamiento en el sexo lo hacía bastante bien llevada por la intuición.

-¡¡¡Me corro!!!

El Tercer Elegido no pudo aguantar más y muy sofocado apretó ojos y dientes mientras su polla comenzó a lanzar chorros de caliente semen. Ayanami al sentir la primera oleada en su boca se apartó del susto, recibiendo el resto de la corrida en su cara, con lamparones largos y cálidos del esperma resbalando por sus mejillas y nariz, bajando hasta su cuello.

-¡¡¡Uf!!!

Suspirando Shinji se dejó caer sentado sobre la banca, con su pene flácido aún goteante de semen descansando de la eyaculación. Tras un rato miró a la chica que aún seguía de rodillas, mirándole fijamente con el semen sin limpiar en su rostro.

-Mmmm...

Él creía que era necesario decirle algo sobre lo que acababa de pasar, pero no encontraba palabras. Finalmente fue ella quien habló.

-Ikari...

Susurró su nombre de una manera que hizo al chico estremecerse.

-¿Si?

Respondió este con algo de miedo por lo que le querría decir.

-Hagamos el amor.

Justo después de estas palabras la chica de ojos rojos se levantó y se sentó muy cerca de él. Shinji la miró con los labios entreabiertos y las mejillas al rojo vivo y asintió lentamente con la cabeza, la tomó de la cintura y comenzaron a besarse de forma más apasionada que antes.

Sus jóvenes cuerpos se abrazaron, sudados y calientes. El roce de sus pieles excitaba al chico que enseguida se empalmó de nuevo al estar acariciando las curvas de la anatomía de su compañera a la vez que sus lenguas jugaban salpicando de saliva sus mentones.

Desde que la vio por primera vez llena de vendas y heridas sintió ternura por ella, esa ternura pasó a ser curiosidad, y de allí a deseo por tenerla, era muy guapa y con un cuerpo sugerente que el plugsuit no ocultaba, siempre regresaba a casa con una erección si pasaba demasiado tiempo con ella, había algo en Ayanami que le atraía de forma animal, casi antinatural, y ahora la tenía entre sus brazos, dispuesta a que él la hiciera suya.

-Ayanami, ¿me dejas entrar?

Jadeo Ikari y sin esperar respuesta ya estaba separando ligeramente su pierna derecha para observar su sexo relamiéndose. Ella accedió con un gesto de su cabeza y él agarró la base de su pene dirigiéndolo a la entrada de su vagina.

-¡Ah!

Ambos gimieron cuando la polla del piloto entró dentro de su compañera, poco a poco fue deslizándola en su interior, centímetro a centímetro hasta alcanzar una profundidad apropiada. En ese momento empezó a hacer el proceso inverso, disfrutando siempre del roce de sus paredes interiores.

Cuando le hacía sexo oral Rei no había sentido nada especial, aunque le había agradado el sabor tanto de la piel como del semen de su compañero, pero ahora estaba empezando a excitarse. Se puso bastante sonrojada y gemía en voz bajita muy sexy mientras Shinji la follaba lentamente, haciéndola estremecer y mojarse en su sexo.

El piloto era consciente de que la chica se estaba poniendo tan cachonda como él y arremetió con más fuerza pegándose a ella para aplastar sus senos carnosos contra su pecho y lamer su cuello que olía tan bien.

-Mmmmmm.

Ella gimió aún más al sentir la cercanía del cuerpo del chico de piel más oscura que la de ella haciendo un curioso contraste. Él jadeaba bastante cansado por el esfuerzo físico de penetrarla a gran velocidad, haciendo salpicar fluidos y devorando su cuello con riesgo de dejarle marca.

-¡Ayanami, si sigo así me correré de nuevo!

Alertó el joven piloto sin dejar de embestir sus caderas contra las de ella que le recibía de piernas abiertas. El chico estaba bañado en sudor y respirando con dificultad.

-Hazlo... Hazlo donde quieras Ikari...

Le permitió Rei hablando con dificultad, había cerrado los ojos y abrazaba el cuello del chico, este con más fuerza de la que aparentaba tener la sentó sobre sus piernas teniéndola de frente sin sacar su pene de su caliente coño.

En esa posición la tomó de las nalgas y la levantaba y dejaba caer sobre su dura y palpitante verga llena de los fluidos de la piloto que resbalaban por sus testículos hasta acabar goteando en el suelo.

-¡Mmmm me encanta tu culito!

Gemía casi descontrolado mientras clavaba sus dedos en los suaves y tiernos glúteos de su amante. Ella le miraba sonrojada y pegó sus pechos a la cara del muchacho y él los devoró con lujuria pasando la lengua por sus duros pezones y su pálida piel.

-¡¡¡Yaaaaaaa!!!

Sin poder aguantarse más Shinji dejó caer a Ayanami empalándola con todo su pene y eyaculó cuatro fuertes chorros dentro de ella, cuando terminó la tomó suave y gentilmente por la nuca y ambos estuvieron un buen rato besándose con lengua como si fuera la última vez que fueran a estar juntos.

-Tengo que ducharme.

Dijo Rei mientras ponía los pies en el suelo levantándose de entre las piernas del joven piloto.

-Claro, será mejor que yo también me dé una ducha.

Sonrió él satisfecho mientras veía como se iba la chica con la que acababa de hacer el amor. Muy refrescado se metió en la ducha, y justo cuando se iba a vestir un aviso por megafonía requirió la presencia de ambos pilotos para repetir las pruebas de sincronización.

-Vaya...

Se quejó Shinji pero enseguida se puso el traje de conexión.

Cuando salió de los vestuarios y se dirigió a las cabinas Rei ya estaba en posición, se sorprendió de lo rápido que había llegado pero no le dio más importancia, se subió a la cabina de simulación y se dispuso a pasar un largo y aburrido tiempo haciendo el test.

Una vez terminada la prueba tuvo el permiso para marcharse así que se cambió a la ropa de calle y busco a Rei para hablar pero no la encontró así que se volvió a casa.

Cuando llegó Asuka aún no estaba.

Touji estaba nervioso paseando de lado a lado enfrente la puerta del instituto, vestía una camisa de color azul marino y vaqueros con roturas en las rodillas. La chica con quien había quedado ya se retrasaba media hora.

-¡Rayos! ¿Me habrá dejado tirado?

Se preguntaba temiendo ser el blanco de las burlas de los chicos de su clase si a la mañana siguiente estos se enteraban de que la chica nueva había pasado de él.

Estos pensamientos pasaban por su cabeza cuando a lo lejos vio la inconfundible melena pelirroja de Asuka. Al verla dio un silbido de admiración.

Iba vestida con un elegante vestido amarillo, buen escote sin sujetador, de falda larga hasta algo más por debajo de las rodillas, una gargantilla gris ajustada a su cuello de cisne y un pequeño bolso que colgaba de su brazo derecho a juego con sus zapatos rojos.

-Ya creí que no venías.

La saludo con una sonrisa.

-Disculpa me retrase, ¿a dónde vamos?

Dijo deprisa y sin ganas como si ya tuviera eso ensayado.

-Bueno, pues quería llevarte a merendar, si quieres claro.

Dijo Suzuhara algo extrañado por la actitud distante de su cita.

-Si, tengo hambre.

Respondió secamente mientras sacaba de su bolso su teléfono móvil y lo tecleaba sin hacerle caso a Touji y se ponía en marcha sin esperar por él.

Ambos fueron hasta un pequeño parque no muy lejos de la escuela donde había una cafetería con terraza, allí tomaron asiento y pidieron unos tés y unos trozos de pastel.

-Mmmm ¿y qué tal es Alemania?

Preguntó Touji mientras masticaba un pedazo de tarta.

-No creo que te interese.

Le dijo de manera anodina mientras seguía tocando los botones de su celular.

-Te noto rara.

Dijo seriamente el joven.

-En absoluto. Gracias por la merienda, pero no tengo hambre.

Sin esperar al chico Asuka se levantó para marcharse.

-¿Eh? ¿No acabas de decir qué...?

Confundido Touji se levantó para seguirla porque ya se estaba marchando, pagó rápido y le dio alcance.

-Asuka, me gustaría llevarte a un sitio.

Le propuso este.

-Está bien...

Suspiró la alemana.

Ambos tomaron el tren metropolitano, Asuka quiso saber a dónde iba a llevarla el joven, pero él con una sonrisa le decía que se trataba de una sorpresa, la chica simplemente se encogió de hombros y esperó a que le dijesen que habían llegado.

-¡Me duelen los pies!

Se quejó la piloto mientras caminaban por la acera de una carretera que parecía subir en forma de espiral por una colina.

-Ya verás como merece la pena.

La animó el chico que como estaba acostumbrado a hacer ejercicio le era más liviana la caminata.

En medio de protestas al final llegaron hasta donde Touji quería, un mirador. El mismo desde el cual Shinji había observado la ciudad cuando llegó por primera vez, y como en aquella ocasión estaba atardeciendo. Asuka se acercó hasta el puesto de vista y se quedó mirando la silueta de los rascacielos mientras se agarraba a la barandilla con las manos.

-¿Es bonita verdad? Mucho dicen que es una ciudad muy fría, pero yo pienso que es genial y cómo ves tiene buenas vista.

Explicó Touji detrás de la alemana.

-Puede que algo.

Aunque la pelirroja no pareciera muy impresionada sí que se quedo mirando el paisaje de los edificios y detrás la puesta de sol. Durante un par de minutos nadie dijo nada, no había otras personas y tampoco pasaban coches. El chico se pegó a la espalda de Asuka y la tomó suavemente por la cintura.

-¡¿Qué haces?!

Ella reaccionó de inmediato dándose la vuelta y enfurecida le dio una bofetada muy sonora que marcó la mejilla derecha de él con su mano abierta.

-¡¡¡Ah!!! ¡¿Por qué me pegas?!

Suzuhara se echó para atrás sorprendido y dolorido llevándose la mano a su rostro.

-¡No te atrevas a tocarme de nuevo!

Le amenazó con el dedo índice levantado.

-¡¿Qué demonios te pasa?! ¡Accedes a salir conmigo pero has estado toda la tarde esquiva y muy borde y ahora esto!

Le gritó Touji muy enfadado.

-¡Sólo salí contigo por molestar a Shinji! ¡Jamás saldría con un tipo como tú porque me gustase!

Ella no se quedaba atrás en pegar gritos y le soltó la verdad de repente.

-¡Mmmmm!

Asuka se quedó muy sorprendida y abrió mucho los ojos cuando Touji se abalanzó sobre ella y la tomó de las muñecas para inmovilizarla. Sonrojada intentaba zafarse pero él era más fuerte y la estaba besando a la fuerza, con su lengua le abrió la boca. Ella se sentía sofocada y protestaba pero de su boca no podían salir palabras, solo goteaba saliva de ambos sobre el escote de ella.

Touji no sabía en que estaba pensando cuando asaltó a su compañera, tan sólo pensaba en lo humillado en que se sentía por haber sido usado y que se iba a vengar de alguna manera. La mejor forma que le pareció fue besándola. La agarró y no pensaba soltarla hasta haber probado toda su boca y que ella probara toda su lengua. No esperaba que la chica se resistiera tanto, era delgada y parecía frágil pero tenía mucha fuerza.

De tanto movimiento brusco los tirantes del vestido de la pelirroja se cayeron dejando a la vista sus pechos firmes y abultados con pezón rosa. Touji no perdió oportunidad y soltó las muñecas para dirigir sus lujuriosas manos a los senos recién descubiertos. Había visto muchas tetas antes pero nunca había tocado unas, las abarcó con las manos bien abiertas y las sobó, le parecieron suaves, tiernas y cálidas y algo húmedas debido al sudor de la alemana, entre sus dedos notaba lo rugoso de sus pezones.

Meterle mano le puso tan cachondo que un bulto se formó en su pantalón, mientras Asuka luchaba desesperadamente por alejarse de él la dejó de besar quedando un brillante hilo de saliva entre sus labios y bajó agachándose un poco a lamer y succionar esos pechos que tanto le apetecían.

-¡¿Qué haces?! ¡¿Estás loco?! ¡Déjame!

Le gritaba Asuka muy sonrojada viendo como dirigía su cara entre sus tetas y le golpeaba la espalda con los puños cerrados.

-¡Calla, si te gusta! ¡Se te están poniendo los pezones duros! ¡Por no hablar de cómo vas vestida, sólo una guarra que busca acción iría con un vestido tan escotado y sin sujetador!

Entre lamidas succiones y risas pervertidas el chico le echaba en cara a la pelirroja todo lo que tenía guardado para ella.

Después de forma discreta metió su mano derecha bajo la falda amarilla del vestido y acarició con dos dedos su entrepierna por encima de las bragas notando que estaba algo húmeda. Se puso en pié y aún con las tetas al aire la acorraló entre él y la barandilla donde se sostenía, la tomó del pelo bruscamente con su mano izquierda como si fuera una brida de un caballo y la obligó a mirarle ya que era un poco más alto que ella. Asuka le sostuvo la mirada con sus ojos azules algo sonrojada y seria, respirando fuertemente, el sonreía con superioridad.

-Suplica que te folle.

Le dijo con desprecio, la única respuesta que recibió fue un escupitajo que se limpió con el brazo.

-Vaya, veo que quieres hacerte la dura.

Sin decirle nada más la obligó a darse la vuelta hasta que quedó ligeramente inclinada sobre la barra de acero en la cual se sujetaba, con los senos colgando hacia fuera y el culo en pompa.

Touji le levantó la falda viendo sus ajustadas y finas bragas rosas y con la mano derecha se las bajó de un tirón exhibiendo su ano y coño algo brillante. Mientras con la otra mano se bajaba la cremallera de sus jeans liberando su pene duro y ancho que casi estallaba dentro de sus pantalones.

-¡Mmmm! ¡Joder!

Gritó Touji cuando empaló a la chica por completo introduciendo todo su sexo en la vagina de ella.

-¡Te odio!

Le respondió esta aferrándose con más fuerza a la barandilla, sonrojada y cerrando los ojos, sentía como sus paredes vaginales apretaban calientes el inmenso miembro del chico.

-¡Estás disfrutándolo, tu coño está mojadito!

Reía completamente satisfecho el joven mientras tenía aferrada a Asuka de las caderas para moverla de atrás a delante embistiéndola con rapidez y ritmo. A la piloto le hacían cosquillas los vellos púbicos al rozarse contra sus nalgas, pero lo que más le preocupaba era que sus fluidos iban escapando poco a poco de su cálido sexo, aquello le estaba gustando.

-¡Aunque seas una zorra malcriada tienes un culo estupendo!

Se divertía Touji mientras amasaba las redondas nalgas de la pelirroja sin dejar de arremeter contra ella haciendo que sus caderas chocasen contra sus glúteos provocando un sonoro ruido.

-¡Ah! ¡Para, estamos en medio de la carretera, alguien puede vernos!

La alemana sudaba mucho y se relamía mientras sus senos se balanceaban de atrás a adelante.

-¡Ya acabo!

Suzuhara apretó los dientes y se puso muy rojo, sacó su largo pene babeando los flujos de ella y casi inmediatamente eyaculó chorros espesos de esperma sobre las nalgas suaves de piel clara de la pelirroja, luego se limpió frotando el glande contra estas hasta quedar sin nada.

Después de haber acabado ambos se volvieron a vestir sin decirse nada durante un buen rato.

-Si cuentas esto a alguien te mato.

Asuka rompió el silencia amenazando a su compañero de forma bastante realista pero sin elevar la voz.

-No contaré a nadie esto, no quiero que me relacionen contigo.

Mientras se subía la cremallera la miraba serio de reojo.

Touji fue el primero en irse, Asuka esperó un rato para no tener que volver con él. Tras cinco minutos decidió ponerse en marcha y volver a casa antes de que anocheciera del todo, se paró en una fuente para limpiarse un poco y tomó el primer tren al centro.

Cuando llegó a casa de Misato Shinji estaba en la cocina cortando verduras para la cena.

-¿Cómo te fue la cita?

Preguntó el chico sin dejar de usar el cuchillo y sin girarse a mirarla. Ella le miró con odio.

-Tranquilo, no volveré a salir con él.

Y tras ello se metió en su cuarto.

Shinji sonrió para sí mismo, al parecer al final él era quien tuvo un mejor día.

FIN


Segundo episodio y con más acción. ¡No os quejareis! Espero que os haya gustado como está yendo la historia y las escenas eróticas.

En próximos capítulos la trama seguirá siendo lineal aunque habrá episodios donde haya pausas para contar historias paralelas.

Muchas gracias por leerla.

AsukaHentai.