Nuevas sensaciones (9)

Juego de baloncesto.

Capitulo IX

Ha transcurrido una semana desde que Alejandro y David pactaran el final del acoso. Hasta los momentos se ha cumplido todo a cabalidad, ninguno de los muchachos ha intentado seducirlo, esta ha sido la semana mas tranquila que ha tenido desde que llegó a ese instituto. Inclusive ha conocido mejor a cada uno de sus compañeros, sin la presión de un acoso sexual, ha podido compartir con ellos a tal punto que quedaron en verse esta tarde en el complejo deportivo cerca del colegio para jugar baloncesto.

David no era una superestrella jugando baloncesto, pero si jugaba bien para el grupo en que estaba. Se vistió como un profesional: zapatos deportivos, medias a los tobillos, short y franelilla blancas. Fue el ultimo en llegar a la cancha, ahí ya se encontraban Alejandro, Gustavo, Luis, Miguel y Antonio, todos vestidos de forma parecida. Decidieron jugar un 3 contra 3 en media cancha, ganando el equipo que hiciera 10 canastas primero.

Debido a lo parecido de los uniformes un equipo tenía que quitarse las franelillas, así que Alejandro, Gustavo y Miguel se la quitaron, dejando al descubierto sus torsos sudorosos. Todos apreciaron con cierto deseo el cuerpo atlético de Miguel, con abdominales y pectorales marcados, mientras que otros al ver el blanco pecho de Alejandro de abdomen plano recordaron su iniciación y el goce de haber estado con semejante hombre. En cambio, Gustavo había perdido un poco de físico y mostraba una barriguita y unos rollitos en sus costados, nada que ver con aquel chico atlético que deleitaba a todos hace un año, aun así provocaba cierto morbo.

Durante el juego, David mostró sus habilidades de conductor y excelente drible, Luis lo acompañaba bien en el juego interno, mientras que Antonio era el mas perdido de todos, estaba mas pendiente de ver los cuerpos de sus amigos que en jugar. Al llegar el juego a un empate a 8, la marca se estrecharon, no se permitía espacio para maniobrar, David recibió el balón de espaldas al aro y en seguida sintió como Alejandro lo marcó a presión, sintió su olor cerca, el torso sudoroso se pegaba a su espalda mientras que su culo sentía la arremetida de su pene. Intentó abrirse espacio empujando con su cuerpo a Alejandro, pero lo que hacía era sentir aquel pene que se ponía cada vez mas erecto ante cada choque con sus glúteos. Alejandro se percató de la situación excitante de este juego, pero recordando el trato decidió hacer caso omiso a esta oportunidad y solo le quitó el balón a un desconcentrado David. 9 a 8 a favor de Alejandro.

Antonio se fijó en el juego sexual que tuvieron David y Alejandro, por lo que en la siguiente jugada cuando tuvo la oportunidad de hacer lo mismo, él si buscaba con su culo el pene de Gustavo, quien excitado por la presión que hacía esas nalgas suaves contra su hinchado pene, lo marcó mas de cerca y tomando con su brazo la cintura de Antonio fue guiando acompasadamente aquellos movimientos propios de un baile de reggaeton que de un juego de baloncesto. El balón quedó botando sin dueño hasta que Luis lo recuperó y convirtió una canasta. 9 a 9, el que hiciera el próximo punto ganaba el partido, pero ya estaba claro que las hormonas se habían disparado y el juego había pasado a un segundo plano.

La jugada crucial: David tomó el balón, observó a sus compañeros, Antonio estaba entretenido con Gustavo y su marcaje especial, Luis buscaba desmarcarse pero el excelente estado físico de Miguel no lo dejaba zafarse. Decidió jugarse el uno contra uno con Alejandro, hizo una finta hacia la derecha, medio giro hacia la izquierda, marcó doble paso hacia el aro, pero se llevó por delante a un parado Miguel cometiendo falta ofensiva. Fue un choque fuerte, los dos cayeron aparatosamente, Miguel cayó de espaldas al piso mientras que David quedó sobre su regazo. David sintió en su rostro el palpitar de aquella fiera enjaulada en el short de Miguel, levantó la mirada y vio aquel torso brillante con los músculos bien formados, su pene reaccionó rápido y creció contra la pierna de Miguel. Los demás los levantaron rápido pensando que se habían lastimados dando por terminado esa situación incomoda.

El punto decisivo fue sencillo, motivado al desconcierto de David ante el hecho anterior, no opuso resistencia a una canasta fácil de Alejandro. Terminaba el juego, sin embargo no todo quedó allí; en la otra mitad de la cancha estaban otros seis muchachos jugando y se habían quedado viendo el juego del clan, por lo que los retaron a jugar a un juego a 21 puntos, cancha completa, 5 contra 5. David declinó rápido alegando cansancio, entraría a jugar en un rato, dejando así a su equipo con 4 porque Antonio no contaba, ni sabia jugar y estaba pendiente de los cuerpos del equipo contrario. Luis y Antonio se quitaron las franelas para quedar igual que el resto del equipo. Luis era el único del clan que tenia vellos tanto en el pecho como en las axilas, mientras que Antonio tenía un cuerpo rosadito y para mostrar un poco mas se bajo el short hasta las caderas mostrando el inicio de la entrada de su culo y unos escasos vellos claro s que tenía en su sexo.

David quedó a un lado de la cancha del solitario complejo deportivo como un mero espectador, rápidamente los retadores tomaron ventaja de 0-7 sobre todo por el pésimo juego de Antonio quien marcado por uno de ojos rasgados (era blanco, alto y de buena musculatura). La marca pasaba más allá del juego, el chino (como le decían sus amigos) tomaba fuertemente a Antonio presionando su sexo contra las nalgas de Antonio, además de que masajeaba con sus manos los pechos de este. Después de cinco minutos de juego ya se atrevía a meter su mano dentro del short de Antonio para palparle el culito directamente, demostrando con esto que los retadores mas que un juego buscaban otras cosas con este partido.

Con el marcador 2-10, Alejandro no tardó en pedir el ingreso de David por un manoseado Antonio quien abandonó la cancha un tanto molesto. Con David en la conducción, el clan mejoró notablemente su rendimiento, se acercaron 10-14, sobre todo a quiebres rápidos aprovechando la velocidad de Miguel. En la siguiente ofensiva, David recibió de espaldas al aro, cuando sintió como una mano ajena entró por su short tomando sus nalgas fuertemente mientras que el dedo medio penetró hasta donde pudo a aquel culo virgen. La reacción no se hizo esperar, el intruso era el chino a quien el clan buscó para golpear por su acto traicionero. Los retadores intentaron calmar los ánimos y cambiaron al chino por el jugador que estaba esperando en la banca, sin embargo el juego se tornó brusco a partir de ese momento.

Los empujones y choques fuertes fueron común en el resto del juego, sin embargo pese a la voluntad del clan, los puntos regalados al comienzo no permitieron levantar el juego y terminaron perdiendo 17-21. Para evitar más problemas, los retadores se fueron rápidamente.

Ya era tarde, el sol se estaba ocultando y el complejo deportivo estaba casi solo, David tenía que ir a l baño, no aguantaba las ganas. Al entrar al baño escuchó unos gemidos que provenían de las duchas, intrigado se asomó para ver de que se trataba y se encontró con el chino y Antonio completamente desnudos y en plena faena sexual. En repetidas ocasiones, el chino bombeaba fuertemente su pene contra el culo deseoso de Antonio, era la primera vez que veía a su amigo siendo penetrado, se quedó perplejo viendo como aquellas nalgas se estremecían cada vez que el chino arremetía contra ellas.

Un pequeño ruido y el chino se percató de su presencia. Inmediatamente cesó de penetrar a Antonio, sacó su pene de aquel agujero dilatado y se dirigió a un asustado David. Quedaron uno frente al otro, el chino lo vio y rápidamente lo tomó entre sus brazos, su mano derecha se introducía por el short buscando el orificio preciado, mientras la mano izquierda intentaba quitarle la franelilla.

Chino: ¿sabes? Aun mi dedo está conmocionado por cómo tu culo lo besaba, ahora podemos terminar lo que empezamos.

David intentó zafarse, pero la fuerza del chino era superior y lo tenía a su merced, no pudo evitar que su franelilla quedase tirada a un lado a la vez que sus nalgas estaban siendo abiertas por aquella mano larga. En un movimiento rápido, el chino se montó a David sobre su sexo, evitando el contacto solo aquel short que lentamente iba bajando dando inicio a lo inevitable.

Chino: uhm, eres virgen, pero aun así te pudiste comer 5 cm de mi dedo, ahora veremos si te puedes meter todos los 20 cm de mi verga.

Debido a que las piernas de David colgaban a los costados del chino, era imposible quitarle el short por completo pero había quitado lo suficiente como para penetrarlo de una vez con su verga a aquel culito abierto por las largas manos del chino. Todo listo. Un grito tras otro de David pidiendo ayuda rompió el ambiente. El chino le tapó la boca con una mano y a pesar del forcejeo ya no había mas nada que hacer, pero Antonio interrumpió justo a tiempo.

Antonio: déjalo ir, no ves que no quiere. Además para que buscar más si me tienes a mí.

El chino vio lo asustado de David, así que desistió de penetrarlo, lo dejó caer a un lado.

Chino: tienes razón, él está asustado ahora, pero después volverá, le gustó sentir mi dedo dentro de sí y está deseoso de sentir mi verga, pero ahora te tengo a ti como a mi perra, así que ponte en cuatro patas que vamos a seguir.

David se vistió rápidamente y se fue asustado de aquel baño donde el chino siguió penetrando cuanto quiso a su nueva perra.