Nuevas experiencias (Parte 3/Final)

Conclusión de las nuevas experiencias que estábamos teniendo. Recomiendo leer primero los 2 anteriores.

(08) - Sin Javier/Nunca pensé hacer eso

El domingo por la noche, antes de irme a dormir mire la producción del fin de semana, de cara a la reunión del lunes por la mañana e hice el computo de la semana y del mes, eran buenos datos, así que no duraría mucho la reunión, llegue a las 8 a la oficina y me fui reuniendo con el personal de oficina, hasta que a las 10 di por terminadas las reuniones y me fui a casa.

De camino a casa fui hablando por el manos libres con Javier, buscando una explicación a lo que había hablado con Silvia la tarde anterior, resulto que el problema era de Javier, como me había indicado Silvia, me conto que ella quería mantener relaciones con él, durante meses a diario, pero que él no quería, no le apetecía, me contó que había estado con una exnovia en varias ocasiones, que quería a Silvia con locura, pero que sexualmente estaba aburrido de ella, que durante el fin de semana había vuelto a verla sexualmente atractiva, pero que si bien quería estar con ella toda la vida, a nivel sexual no funcionaban por si solos, que aunque ella no era en absoluto recatada en la cama, él se aburría, que no quería estar con otras mujeres, que quería estar con ella, que se arrepentía de haber estado con su ex en varias ocasiones y que Silvia lo sabía, que nunca se lo había ocultado. Le pregunte si iba a quedar estos días que estaba solo con su exnovia, su respuesta fue clara, “mientras tu estés en la relación sexual, no tengo necesidad de ver a nadie más, contigo en la relación, vuelvo a ver a Silvia como lo que es, una mujer tremendamente atractiva”.

Eso me tranquilizo, al llegar a casa, esperaba que la dinámica fuera como la de la tarde anterior, nada de sexo, solo 2 amigos hablando, llame a Silvia para avisarla de que en una media hora llegaba, que iba a parar a comprar algunas cosas para comer y después iba para casa.

Cuando llegue a casa, vi que la puerta del salón estaba cerrada, al abrirla me encontré con Silvia en ropa interior en el sofá, me sorprendió verla así, no me lo esperaba, se levantó y vino hacia mí, me abrazo por el cuello y me beso, yo la agarre por la cintura y fui bajando mi mano hasta su culo, lo estuve disfrutando mientras nos besábamos, hasta que decidí ir más lejos y meter la mano entre sus piernas para por encima del tanga empezar a acariciar su coño, note que estaba húmedo, lo masajee un poco, la cogí por los muslos y la levante para que se quedara colgada a mí, fuimos a la habitación mientras nos besábamos, la habitación estaba preparada, había dejado sobre la cama los plugs, el lubricante y un dildo que no había visto hasta ese momento, la tumbe en la cama esquivando todos los juguetes, de camino a la habitación ya le había desabrochado el sujetador, así que al incorporarme la quite el sujetador dejando al descubierto sus grandes pechos, pudiendo ver sus duros pezones.

Los chupe como si me fuera la vida en ello, ella se empezó a agitar, fui bajando, besando su vientre hasta llegar al tanga, la abrí las piernas besándola los muslos, quería tardar en llegar al centro, fui lentamente calentándola con besos, tocándola los pechos y guiándome por su respiración, cuando llegue al tanga, la bese por encima del tanga que estaba empapado, la quite el tanga y me centre en jugar con sus labios externos e internos, besándola alrededor, dentro, el clítoris, estuve un buen rato comiéndomela entera mientras la tocaba los pechos, apretando los pezones, no pare hasta que note que había tenido un orgasmo, entonces subí para besarla.

Ella me empezó a desnudar, me tumbo y se colocó encima, besándome apasionadamente, bajando y mordiéndome los pezones, bajo llenándome el vientre de saliva hasta que llego a los pantalones, me los quito, mordisqueo mi pene por encima del calzoncillo, me quito la ropa interior y fue lentamente besándome la polla, chupando poquito a poco, muy lentamente, quería que durara eternamente la mamada, mirándome de manera lasciva, llenándome de saliva la polla, la indique que se diera la vuelta, que quería tener su coño en mi cara, se dio la vuelta y la volví a comer el coño, según volvía a subir su excitación, aumentaba el ritmo de la mamada, después de un rato me corrí en su boca, por supuesto, no dejo escapar ni una gota y me beso pasando de boca a boca el semen y entre los 2 nos lo tragamos.

Acto seguido la indique que quería jugar con su culo, cogí los plugs y empecé a metérselos, uno a uno, tomándome mi tiempo, cuando su culo estaba completamente dilatado yo ya me había recuperado de la mamada de antes, cogí el preservativo y la indique que me lo pusiera, termino con la boca de ponérmela dura, me lubrico la polla y me puso el preservativo, lo lubrique, la saque el plug y fui directo a su culo, debido al retardante estuve un buen rato dedicándome a penetrarla el culo, sacándola y metiéndola de nuevo, mientras ella usaba el dildo que tenía vibración para jugar con su coño, sin llegar a meterlo, pero acariciándolo, centrándose por momentos en el clítoris, cuando vi que era el momento, volví a lubricar el plug, saque mi polla y metí el plug, quería el culo bien dilatado para después, me quite el preservativo e inmediatamente se la metí en el coño, estuve todo lo que pude penetrándola con desenfreno, hasta que ya no pude más, la saque y se la puse en la boca para correrme allí, la recibió y me beso, nos quedamos tumbados, abrazados durante un largo rato, con el plug aun puesto en su culo, la indique que si quería se lo podía quitar, que solo quería sentirlo al metérsela, se lo quito dando un pequeño respingo, y lo dejo sobre una toalla donde habíamos puesto los juguetes usados, mi fije en que el dildo tenía forma de polla, con todas las venas y detalles de una polla real, hasta los huevos al final.

Al rato me levante para ir al baño, la invite a venir si quería verme, entonces me confeso que su fantasía no terminaba en verme meando, que se extendía hasta el punto de que quería que la mearan por el cuerpo, me quede de piedra, solo podía preguntarme como Javier se había aburrido de una relación sexual tan sucia y depravada, prácticamente no tenía limites…

Yo llegado a este punto estaba desenfrenado, nunca había tenido una relación similar, con ese nivel de depravación, así que sin pensármelo mucho, acepte cumplir su fantasía, nos metimos en la ducha y la empecé a mear por el cuerpo, dado que bebo mucha agua tenía una gran cantidad de orina acumulada desde por la mañana, la empape el cuerpo entero, me pidió que también dirigiera el chorro a la cara, no podía parar, así que la hice caso, cada vez estaba más excitado, así que empezaba a ser difícil, no duro mucho, fueron unos diez segundos, posiblemente menos, pero dieron para mucho, estaba completamente empapada.

La lógica decía que tendría que darme asco, que se tendría que duchar inmediatamente, pero quería volver a follarla allí mismo, abrazándola, besando sus labios empapados en mi orina, se dio cuenta de que me había gustado, y me dijo que tenía ganas ella de mear, que si quería que cambiáramos posiciones, la idea me excito sobremanera, cambiamos posiciones y empezó a mearme encima, esa lluvia caliente, resbalándome por el cuerpo, me excitaba muchísimo, enfoco el chorro sobre mi cara, lo cual me pareció una sensación maravillosa, el calor que desprendía, el olor, fue genial, cuando termino, se sentó en mi polla, clavándosela en el coño hasta los huevos, se empezó a mover mientras me besaba, el sabor de su boca era maravilloso, no tarde ni 3 minutos en correrme dentro, se la saco y me fui directo a besarla el coño, ya me daba todo igual, estaba preso de esa relación sucia y depravada en la que había entrado y de la que no quería salir.

Nos volvimos a duchar, mientras nos besábamos, con el agua resbalando por nuestros sucios cuerpos…

Al salir decidimos que la ropa nos sobraba, que estábamos mucho más a gusto totalmente desnudos, nos preparamos algo de comer y charlamos mientras comíamos. Estuvimos hablando de como el sexo era más placentero según ibas quitando limites, según podías hacer lo que te apeteciera sin importar lo que fuera, estábamos de acuerdo en ese punto, así que ella decidió subir la apuesta, y me ofreció algo que no me había planteado antes, solo con mi ex, pero de una manera muy limitada.

Me ofreció usar los plugs en mi propio culo, me dijo que ella los introduciría, que si no me gustaba o me notaba incomodo pararíamos, de alguna manera no podía decir que no, todo lo que me ofrecía me parecía excitante, prohibido…

Me indico que debíamos empezar por una limpieza, que el interior era mejor si estaba limpio, así que cogió los aparatos que tenía para hacerse las limpiezas, todos los desinfectaba después de cada uso, las peras las reutilizaba, después de limpiarlas con un producto desinfectante, las cánulas que introducía en el culo para meter el agua las tiraba, cogía cada vez una nueva, tenía una pera profesional y las cánulas venían selladas en bolsas individuales, me introdujo el líquido de una pera, era incomodo, pero excitante, me indico que aguantara unos minutos, hasta que no pudiera más, que me moviera, que andara, relleno otra vez la pera mientras yo expulsaba el líquido, en esta ocasión decidimos que era algo que debíamos hacer solos, sin que nadie nos viera, salió terriblemente sucio, con la segunda pera ya salió bastante limpio, con la tercera, solo salió agua, ya estaba limpio, uso una cuarta dado que era la primera vez que lo hacía, en esta ocasión, se quedó a ver lo que salía, comprobó que estaba perfectamente limpio y me limpio con unas toallitas especiales tanto el orificio como los alrededores, me indico que con una toalla húmeda me limpiara bien por fuera, seguí sus instrucciones y me dijo que ya estaba preparado, fuimos a la habitación, ya había limpiado y desinfectado los plugs, así como el dildo…

Me indico que me tumbara boca arriba, que levantara las piernas y las doblara contra mi cuerpo, que esa posición era la que más facilitaba la introducción de los juguetes. Empezó lubricando bien el culo e introduciendo un dedo, mi única experiencia fue con mi exnovia y el máximo habían sido 2 dedos, los plugs eran de un tamaño mucho mayor, así que fue con calma, tomándose su tiempo, metía y sacaba el dedo hasta que ya entraba con más facilidad, aunque ya había usado una gran cantidad de lubricante, siguió poniendo más, para hacerlo todo más fácil, cuando introdujo 2 dedos a la vez entraron más fácilmente que el primero, era algo incómodo, pero más cómodo que el primer dedo, después de un rato alternando 1 y 2 dedos a la vez, sin previo aviso introdujo un tercero, no fue doloroso, pero parecía estar alcanzando mi limite, sentía que ya no podía dilatar más, que eso era todo, al ver que entraban 3 dedos y que no me queje, cogió el plug pequeño, lo introdujo casi sin ninguna dificultad, el tamaño era un poco menor que los 3 dedos, lo metió y saco durante un rato, hasta que dada la facilidad con la que entraba y salía estaba preparado para algo más grande.

Introdujo un dedo, que no fue prácticamente nada, salvo por que se notaba más frio que el plug, entonces introdujo el plug a la vez, no sentí nada de dolor, aunque se notaba muy justo, entonces saco el dedo, saco el plug y metió el de siguiente tamaño, necesito un par de intentos para introducirlo, no sentía dolor, pero si notaba que estaba muy justo, que ya no podía expandir más y tenía unas ganas terribles de empujarlo fuera, le comente lo que sentía, pero me dijo que era normal, que cuando me lo dijera, que empujara un poco, así lo hice, tuve que disculparme por sonidos que me parecieron vergonzosos, aunque a ella solo la produjeron una ligera risita, volvió a introducirlo, esta vez con mucha más facilidad, a estas alturas notaba debajo de mi la toalla empapada en el lubricante que iba resbalando, después de un rato metiéndolo y sacándolo ya estaba preparado para el tercero, el de mayor tamaño, le volvió a costar, pero entro, me dijo que quería dejarlo un tiempo dentro, fue hacia mí y me beso durante unos minutos, después volvió a continuar con la expansión anal, lo metió y saco empapándolo hasta que ya entraba y salía con facilidad, nunca pensé que podría tener eso metido dentro sin sentir un dolor atroz, pero fue así…

Me lo saco y me limpio el lubricante, relaje las piernas, que sí que me dolían muchísimo, me quede tumbado estirando las piernas con su ayuda para no sufrir tirones más adelante, aunque seguía teniendo el plug de menos tamaño dentro. Con las piernas ya de nuevo relajadas, me beso mientras me masturbaba y me dijo que había un paso más, no me dejo correrme, paro antes de que pasara y me conto el siguiente paso, saco de la bolsa negra (tendría que abrir esa bolsa y mirar dentro, para hacerme una idea de lo que está por venir, pensé) una especie de bragas/cinturón donde encajaba el dildo con forma de polla, la verdad es que el dildo era más delgado que el ultimo plug, pero eso visión me aterrorizo, por primera vez estaba casi seguro de decir que no iba a pasar.

Lo dejo a un lado sin decir nada y siguió besándome, mientras me tocaba lentamente para mantener mi erección pero sin dejarme eyacular, entramos en una negociación sobre el dildo, a estas alturas parecía que tenía poco que ofrecer que no hubiera pasado ya y fuera a volver a pasar, pero saco una carta con la que no contaba, ella sabía que en mi trabajo, podía cogerme cualquier día libre que quisiera, solo tenía que avisarlo, así que me ofreció  que si me cogía el miércoles libre, ella haría lo que la dijera, sería mi esclava sexual, podría hacer lo que quisiera con ella. Esa oferta abría un nuevo mundo de posibilidades, no quedaba mucho por hacer, pero tenía algunas fantasías que requerían de algo así para hacerse realidad, al final acabe aceptando, Silvia lo había conseguido...

Me coloco varios cojines debajo con la intención de levantarme a una altura más cómoda para ella, cuando estaba todo preparado, lubrico perfectamente el dildo, saco y metió un par de veces el plug que aún estaba dentro, lo saco definitivamente, coloco el dildo, y mientras masajeaba mi polla lo empezó a introducir, lentamente, introduciendo un poco y sacándolo, un poco más y sacándolo, hasta que metió toda la parte que imita un capullo, lo volvió a sacar, volvió a introducirlo otra vez, pero esta vez más profundo, entrando totalmente, fue una sensación diferente a los plugs, más excitante, mas pervertida, notaba las protuberancias producidas por las venas marcadas en el juguete, lo empezó a meter y sacar sin sacarlo del todo, después de un rato lo volvió a sacar, lo lubrico abundantemente de nuevo y lo introdujo de nuevo, esta vez a la primera, de un solo golpe, la sensación era tremenda, una parte de mí no quería disfrutarlo, sentía que estaba mal, pero lo estaba disfrutando, era maravilloso, excitante, me había olvidado de mi polla completamente, estaba durísima, sobre mi vientre, soltando líquidos preseminales como si fuera una fuente inagotable.

Silvia me pregunto si me estaba gustando, se recostó sobre mí y me empezó a besar, su vientre rozaba mi polla con los movimientos que hacia lo cual era tremendamente excitante, tan excitante que no me dio tiempo ni de avisarle de que me iba a correr, solté el semen en su vientre, en el mío, se levantó al notar el primer chorro, salió con tanta fuerza que parte me callo en la cara, ella seguía empujando, el semen seguía saliendo, fue una corrida brutal, jamás había salido tanta cantidad, me limpio lo que me había caído en la cara y extendió por mi vientre lo que estaba en mi vientre y por el suyo lo que tenía ella, paro de empujar, la saco lentamente, se tumbó encima mía y se quedó allí, besándome, podía notar mi pene ya flácido rozando el cinturón y el dildo apretándome el vientre, pero me daba igual, estaba en una nube, jamás pensé que eso sería tan placentero…

(09) - Mi día.

Ya había llegado el miércoles, era mi día, lo tenía libre y lo teníamos planeado como el día que ella haría lo que la dijera, era la “compensación” por lo que me había hecho con el dildo, no había preparado un guion, ni cosas que quisiera hacerla o que me hiciera, simplemente quería dejarme llevar y que pasara lo que tuviera que pasar, según me apeteciera, decidimos la noche anterior que contábamos el día desde que nos despertáramos hasta que nos fuéramos a dormir en lugar de contarlo desde las 00:01…

Cuando me desperté era temprano, ya estaba acostumbrado a despertarme sobre las 7 de la mañana y el despertador ya no me servía casi nunca, cuando quería sonar yo ya estaba despierto, así que aunque no teníamos despertador, a las 7 ya estaba despierto, dado que podía hacer lo que quisiera, al mirarla, boca arriba tumbada, con una pierna estirada y la otra doblada hacia un lado, vi que podía despertarla con una buena comida de coño, así que me puse a ello, con mucho cuidado para no despertarla me coloque entre sus piernas sin rozarla ninguna parte más del cuerpo, y empecé a “comer”, se despertó rápidamente, por supuesto no dijo nada, sabía que no podía decir nada, así que se dejó hacer, poniendo de su parte, cuando después de un rato llego al orgasmo pare, la bese y la indique que era su turno, que quería que me la chupara despacio, que quería disfrutar de la mamada mañanera, lo hizo perfecto, cuando me corrí la indique que no se la escapara ni una gota, que me lo enseñara y se lo tragara, así lo hizo, era solo el principio del día…

Nos levantamos y nos hicimos algo de desayunar, desayunamos hablando de temas normales, viendo las noticias y criticándolas, como el resto del mundo, al terminar de desayunar necesitaba una ducha, así que la indique que se viniera conmigo. Nos dimos una larga ducha, donde nos limpiamos mutuamente, al salir de la ducha la dije que trajera los aparatos para prepararse para el sexo anal, que no sabía cuándo, pero que en algún momento lo íbamos a hacer. Mientras ella se limpiaba yo espere viendo la tv a que llegara un paquete que había pedido, al poco de terminar ella llego el paquete. Ella no sabía que era y tampoco se lo iba a decir de momento, según salió ya preparada aún tenía el pelo mojado, salió completamente desnuda y la indique que se pusiera algo de lencería, se puso un tanga precioso, del tamaño justo para ser elegante y un sujetador de encaje que resaltaba sus pechos, estaba preciosa con la lencería y el pelo mojado…

Ya sobre las 11 de la mañana me volví a animar, me fui a por la bolsa negra y empecé a sacar cosas, a ver que tenía… encontré los plugs y el dildo que ya conocía, el lubricante y las esposas, todo eso ya lo conocía, me intereso más lo que encontré que me era desconocido, tenía unas bolas anales que cuando las movías vibraban un poco (las misma que se había introducido Javier, pero que nunca llegue a ver), sujetas por un hilo de un tamaño diminuto y con una terminación que se adaptaba al contorno del cuerpo, estaban preparadas para que no se metieran del todo dentro y para poder salir a la calle con ellas sin que se notara, también tenía un pequeño vibrador, me decepciono un poco que no tuviera nada más, esperaba alguna cosa más, aunque las bolas anales me dieron una idea complementaria a otra que tenía ya.

Decidí ir por el camino sencillo, la quite la lencería y estuve un rato jugando a introducirle los plugs mientras con el vibrador jugaba con su coño, cuando ya estuvo a punto la folle por el culo mientras seguía jugando con el vibrador en su clítoris, cuando ya no pude más, la saque de su culo, me quite el preservativo y me corrí en su boca, nos fundimos en un largo beso, compartiendo el semen, hasta que después de un tiempo ya no quedaba nada por compartir.

Hasta ese momento el día estaba siendo bastante normal, nada que no hubiéramos hecho cualquier día anterior, pero tenía un plan para después, la indique que nos volvíamos a duchar, que íbamos a salir a comer fuera, cuando salimos de la ducha la indique que se pusiera un vestido que había visto en su maleta el otro día, no era nada muy especial, pero ya se lo había visto en otras ocasiones y la quedaba genial, cuando se lo había puesto la levante el vestido para comprobar si llevaba ropa interior, se la baje y coloque lo que me había llegado por mensajería un rato antes, era un vibrador que se enganchaba a las braguitas o tanga y se adaptaba a la forma de la vagina, el encendido y el apagado así como la potencia o ritmos de vibración se manejaban desde una aplicación de móvil y ya había probado mientras se arreglaba que era extremadamente silencioso aunque potente, llevaba unas gomas en la parte de abajo y laterales para que la vibración no se escuchara si estaba tocando algo sólido, así que se lo puse y la indique que se agachara, poniendo el culo en pompa, lubrique bien las bolas anales y se las introduje, limpiando bien la zona para que no quedaran restos, entonces estábamos preparados para irnos a comer…

De camino al restaurante, cada vez que cogíamos un Baden de la carretera las bolas vibraban con el movimiento  y daba un pequeño respingo, me encantaba, fui bueno y la deje mi móvil para que pudiera probar el vibrador y que no la sorprendiera en el restaurante, a estas alturas ya tenía claro cuál era mi plan.

Al llegar al restaurante nos sentamos y cuando el camarero nos tomó nota de las bebidas empecé a jugar con los controles del vibrador, empecé poniéndoselo muy suave, a un ritmo continuo muy simple, para que se fuera acostumbrando, se podía ver en su cara que estaba esforzándose por que no se notara lo que estaba pasando, así que como estábamos en una zona reservada y las mesas estaban muy separadas unas de otras, decidí subir la potencia un poco y cambiar el ritmo intervalos, se estaba empezando a poner nerviosa, además estaba de espaldas al camino que seguían los camareros y no sabía cuándo podría llegar, vi que seguía controlando muy bien las caras, así que para asegurarme de que lo seguía teniendo puesto y no había hecho trampas lo baje (ella pensaba que solo lo iba a subir, nunca bajar) y su cara se relajó, fue un alivio para ella.

Una vez comprobado que no fingía, decidí subirlo al nivel que estaba anteriormente, su respiración se notaba un poco agitada, y en su cara se notaba nerviosismo, cuando vi al camarero llegar baje el ritmo, yo sabía lo que pasaba, pero no sabía que podría entender el camarero, una vez el camarero se fue volví a subir, esta vez solo estuve unos segundos en ese nivel y manteniendo los pulsos subí un poco la potencia, dio un pequeño respingo y me pidió que lo bajara, que la faltaba poco para tener un orgasmo y que no se iba a poder controlar, que aunque solo hubiera una mesa más en la zona de reservados se iban a dar cuenta, por supuesto la dije que no, que cuando viera que faltaba poco, que se podía ir al baño, pero que no se lo podía quitar, así que unos minutos después se fue al baño, me encanto, andaba nerviosa, intentado mantener la calma, pero se veía que algo pasaba, por suerte para ella en la otra mesa estaban todos menos una mujer de espaldas a nosotros y la mujer no miro en nuestra dirección.

Según volvió a la mesa me sonó un WhatsApp en el móvil, era un video que me había mandado ella, lo abrí con discreción para que no se viera ni se escuchara nada, había puesto el móvil en la puerta y estaba grabando con el vestido levantado como tenía el orgasmo, pude ver en su cara el momento en que al calcular que estaba en el baño subí la potencia casi al máximo durante como un minuto, luego la volví a bajar, al terminar, se limpió bien alrededor y termino la grabación. Como no me fiaba de que no se lo hubiera quitado, primero lo apague, para ver si notaba algo, vi en su cara que estaba bastante aliviada, así que durante unos segundos lo puse en la potencia máxima y en ritmo constante, al pegarme una patada por debajo de la mesa decidí que era el momento de dejarlo al mínimo, me lo agradeció y seguimos con la comida ya sin más sobresaltos.

De vuelta en el coche, al montarnos subí la potencia casi al máximo, para que llegara bien calentita a casa, la lleve todo el camino moviéndose de los nervios, al llegar a casa, la quite el vestido el sujetador y la tire en la cama, con el vibrador aun funcionado, empecé a sepáralo y a volver a colocarlo, estaba empapada, tenía el vibrador empapado, cuando se lo quite chorreo por los lados, la comí el coño como si no hubiera comido en el restaurante, disfrute del sabor durante un buen rato, ella no paraba de moverse, estaba excitadísima, cuando estaba a punto de llegar al orgasmo se la metí de un solo empujón, de la excitación que tenía no dure más de 5 minutos y me corrí dentro, poniendo mi boca inmediatamente para recoger los fluidos que emanaban, tanto los suyos, como los míos, cuando ya no quedaba nada más por salir la bese apasionadamente, estábamos rotos de placer…

Después de un buen rato tumbados la indique que fuera al baño, la metí en la bañera y la mee encima, empapándola todo el cuerpo, la cara, la boca, el pelo… cuando termine se levantó y me coloque en su posición y entonces ella meo encima mío, empapándome entero por igual, nos besamos y me di cuenta de que aún tenía en el culo introducidas las bolas anales, con mucho cuidado empecé a tirar de ellas mientras ella empujaba para que salieran, dejándolas salir un poco y entrar de nuevo, hasta que las 3 bolas habían salido. Decidimos darnos una ducha, dado que estábamos aun mojados de la lluvia dorada de unos minutos atrás, salimos limpios y sin vestirnos nos fuimos al sofá a tumbarnos un rato.

Nos quedamos dormidos de puro agotamiento, al despertarnos eran ya las 7 de la tarde, la dije que quería volver a practicarle sexo anal, que si se podía hacer o había que volver a limpiarlo, se levantó y se fue a hacerse una limpieza rápida, volvió y me dijo que estaba lista. Decidí hacer algo que aún no habíamos hecho, pero que había visto en las películas X, acerque la mesa y la coloque a cuatro patas, con los pechos apoyados sobre la mesa y las piernas en el sofá, la empecé a pasar la lengua por el culo, primero por los cachetes y después en el orificio, parecía que le gustaba, estaba empezando a gemir y a tocarse el coño, durante un tiempo estuve lamiéndola y empecé a jugar con los plugs y después con el dildo, la pregunte si la apetecía que la follara el coño mientras tenía el dildo en el culo, volver a sentir dos pollas dentro, dado que la idea la gusto así lo hicimos.

Con el plug más grande metido dentro, dilatándola, preparándola para el dildo me la empezó a chupar, lentamente, como sabía que me gustaba, cuando estaba erecta completamente se sentó encima de mí, introduciéndose mi polla hasta el final, subiendo y bajando, mientras con una mano sujetaba el dildo y lo introducía y sacaba, estuvimos un tiempo así, hasta que vi que me faltaba poco para correrme, entonces la indique que parara, la saque el dildo del culo y la tumbe en el sofá boca arriba, puse un poco de lubricante en sus pechos y puse mi polla en medio, los junte y empecé a follarla las tetas, nunca lo había hecho antes, no era todo lo que esperaba pero no estaba mal, me gustaba, cuando me acercaba a su boca respiraba con la boca abierta dejándome sentir su aliento en el capullo, después de un rato la avise de que mantuviera la boca en esa posición que me iba a correr, me corrí y los primeros chorros salieron directos a su boca, otros cayeron en su garganta, rápidamente, deje que me chupara el capullo para sacar los que se había quedado y la chupe lo que había caído en su cuello, tragándomelo directamente y haciendo ella lo propio, ya casi había pasado el día, era prácticamente la hora de cenar…

Nos preparamos algo de cenar y después de cenar ya no sabía que más hacer, ya casi ni me apetecía hacer nada más, así que como no sabía que hacer la pedí que se tocara para, en el peor de los casos, ver a una mujer masturbarse, se empezó a tocar y la verdad es que era una visión maravillosa, se tocaba el coño y se chupaba los dedos, se ponía saliva en los pezones, se acariciaba el cuerpo, su coño estaba cada vez más mojado, me estaba volviendo a empalmar, así que me empecé a tocar yo también, vi que la gustaba verme tocándome, cuando la tenía dura la hice un gesto para que se acercara, no quería que me la chupara, no quería metérsela, solo quería que me masturbara, me hizo una paja fantástica, llenándome la polla de saliva, me chorreaba la saliva por los muslos, mientras con una mano me masturbaba con la otra se tocaba a sí misma, se introducía los dedos en el culo en lugar de en el coño, cuando vio que estaba a punto de correrme, por iniciativa propia, la mano que tenía empapada de saliva se la paso por el culo, me escupió más saliva en el capullo y cuando vio que ya estaba a punto de estallar, se levantó y se metió el capullo en el culo, corriéndome inmediatamente dentro de su culo, me cogió por sorpresa, fue una agradable sorpresa,   se quedó quieta en esa posición, la pregunte que por que no se la sacaba, me pidió que esperara hasta que se pusiera flácida y saliera por sí sola, que quería sentirlo, igual que quería sentir una polla flácida endurecerse dentro de ella…

(10) - Su día.

Ya era Jueves, mi último día en la oficina, al ser el último día me quede toda la mañana asegurándome de que todo quedaba bien atado y el chico que se iba a quedar en mi lugar no tenía ninguna duda de última hora, a la hora de comer ya con todo listo me despedí de los compañeros y deje al chico nuevo al mando. Volví a casa y terminamos de empaquetar todo, bajamos la tv  y la protegimos para el viaje, ya solo quedaba el viernes bajar las cajas y la tv al coche y volver a Madrid, la verdad es que durante la mañana entre trabajo y mudanza no paramos.

Silvia me pidió que la dejara cumplir una última fantasía antes de volver a Madrid, quería tener al menos una tarde noche un esclavo sexual, dado que el día anterior fue al revés, no tuve inconveniente en ello, entonces se puso en plan jefa, me dijo que me desnudara allí mismo, que tirara la ropa al suelo, cuando me quede desnudo me dijo que la desnudara a ella, la desnude y me indico que me fuera al baño, me metió en la bañera y me meo por todo el cuerpo, siguiendo sus órdenes, cuando termino ella, se puso en mi posición y la mee yo a ella, entonces sin ducharnos saco las cosas para hacer la limpieza anal, y me limpio por dentro, cambiando la boquilla y limpiándose también a sí misma, me ordeno que fuera a la habitación, aunque la intente convencer de ducharnos antes, me dijo que no, limpiamos bien la zona anal pero nada más, dijo que la funda de la cama se tiraba al día siguiente con la basura…

Llego a la habitación y empezó a jugar con los plugs en mi culo, a la vez que jugaba con ellos en el suyo, iban pasando de un culo a otro, en mucho menos tiempo que la vez anterior ya tenía el dildo metido dentro, lo metía y sacaba goteando lubricante sin parar, durante casi 15 minutos estuvo haciéndolo sin descanso, entonces, me indico que cambiara de posición, se colocó boca arriba en la cama, con las piernas hacia arriba y unos cojines debajo de la espalda y el culo para levantárselo, me coloque yo como me indico, a cuatro patas con el culo delante de su cara y las piernas a los lados de ella, me dio el dildo y me dijo que se lo empezara a meter a ella, con sus piernas hacia arriba apoyadas en mis brazos tenía una visión casi perfecta de su ano desde mi posición, a la par que se lo metía y sacaba ella jugaba con el plug más grande, a meterlo y sacarlo de mi culo, mientras de vez en cuando se colocaba mi polla en la boca y la succionaba, era una situación tremendamente excitante, al cabo de un buen rato, me dijo que parara, que la metiera el plug mediano en el culo y cambio de posición.

Se colocó al borde de la cama, me coloco a cuatro patas delante suya, en el suelo y me metió el dildo en el culo de nuevo, me dijo que la mirara, durante unos minutos me tubo con una mano metiéndome y sacándome el dildo y con la otra jugando junto con mi boca en su coño, cuando decidió que era el momento, me coloco para sin sacar el dildo de mi culo pudiera colocarme en el suelo a la altura para poder besarla mientras la penetraba el coño y tenía el dildo dentro de mí, fue una situación maravillosa, cuando me corrí, me corrí dentro de ella, fue una explosión bestial, me empujó hacia abajo para que la chupara los fluidos, con la advertencia de que quería que el dildo siguiera en mi culo metido, la chupe y extraje todos los fluidos de su coño y los mantuve en la boca como me indico, sin tragármelos, me explico cómo quería que me colocara, me saco el dildo y me metió el plug más grande, tenía la boca llena de la saliva que se iba creando por los líquidos que ya tenía dentro, todo mezclado, casi no podía aguantar más, me dijo que se lo pasara, fue como una fuente, la cantidad de fluidos vaginales, semen y saliva que había era tremenda, aunque a ella no la costó acomodarlos en su boca.

Me ayudo a colocarme con la espalda en el cabecero, dejando el culo hacia arriba y las piernas hacia abajo, era una posición incomodísima, no podría aguantar más de unos minutos antes de tener que cambiar, fue rápido, me saco el plug y con 2 dedos de cada mano se aseguró de que se mantuviera mi culo abierto lo suficiente para escupir todos los líquidos que le había pasado, los metió todos dentro de mí y espero masajeando unos segundos hasta que mi esfínter se cerró, siguiendo sus indicaciones fue rápido, sobre todo fue excitante, tenía todos esos fluidos dentro de mi…

Durante un largo rato descansamos, entonces me dijo que solo me pediría una cosa más y nos ducharíamos, dejaría de ser su esclavo, me dijo que con la polla flácida que se la metiera en el coño, hice lo que me dijo, no es fácil meterla flácida, pero con la excitación se va poniendo “morcillona”, me coloco medio tumbado en la cama, para tener una postura que favoreciera la penetración en este estado, y se la metió aun “morcillona” en el coño, se empezó a mover y la verdad es que no tardo en ponerse dura como una piedra, se recostó sobre mí para poder besarme mientras se movía encima mía, yo no hacía nada más que besarla, todo lo demás lo estaba haciendo ella, al cabo de un rato me corrí dentro de su coño, se levantó sujetándose los labios para que no saliera nada, se colocó encima de mi cara un poco de lado para que al abrir los labios saliera resbalando por el muslo, así lo hizo, indicándome entonces que quería que la fuera limpiando el muslo y tragándomelo todo, la limpie todo lo que había salido y termine limpiándola el coño con la lengua, nos tumbamos destrozados en la cama y dio por finalizada su fantasía, acto seguido nos dimos una merecida ducha…

Salimos a cenar fuera para no manchar ya nada en casa, al volver nos fuimos directamente a dormir, al día siguiente teníamos que volver a Madrid y estábamos cansadísimos los 2.

(11) - Vuelta a Madrid.

A la mañana siguiente nos pusimos en marcha muy pronto, queríamos desayunar, bajar las cosas al coche e irnos a Madrid. Ya de camino fuimos un rato hablando con Javier, al ser viernes terminaba a las 13hr, así que quedamos en que nos esperaba en el apartamento (él había cogido unos días antes las llaves en mi nombre y había recibido las camas que había comprado, así como los muebles, ya que cogí el apartamento sin amueblar). Un rato antes de llegar le avisamos de que cogiera unas pizzas para comer, así que al llegar allí nos estaba esperando con la comida en casa.

Nada más abrirnos la puerta nos recibió como si nada pasara, pese a que estaba al tanto de todo lo que había pasado en Guadalajara en su ausencia, comimos y subimos las cosas del coche, para ese entonces ya estaba casi todo en casa, solo faltaban un par de cajas que estaban en el trastero, así que era más que nada empezar a montar todo. Nos pasamos casi todo el día desembalando y colocando cosas. Cerca de la hora de cenar decidimos parar, darnos una ducha y salir a cenar fuera a celebrar mi vuelta a Madrid.

Salimos a cenar y a tomar algo después, nos fuimos a un sitio tranquilo, donde poder estar sentados hablando, según iba pasando la noche ellos se iban animando, cada vez se les veía más cariñosos, pude ver que la mano de Javier estaba entre las piernas de Silvia, estaban ya entrando en faena, así que decidí, que siendo la primera noche después de volver y sin haber hablado como funcionaria el extraño trio que teníamos montado, era el momento de irme a mi casa. Me fui a despedir, pero no me dejaron, me invitaron a quedarme e ir a su casa con ellos, oferta que por supuesto acepte.

Dejamos el local y nos fuimos a su casa, durante el camino, sentado en la parte de atrás del coche, pude ver como Silvia le hacia una paja a Javier mientras conducía, aunque no le dejo correrse… llegamos a su casa y antes de que se cerrara la puerta del todo, Silvia que entro primero ya se había quitado el vestido y estaba en ropa interior, por supuesto la ropa de todos duro poco tiempo puesta, antes de que nos diéramos cuenta estábamos en el sofá, con Javier besando a Silvia mientras ella le volvía a masturbar y conmigo entre las piernas de Silvia saboreando el manjar que tenía delante.

Estuvimos en esa posición hasta que Javier se corrió, entonces nos dirigimos a la habitación, según entramos vi que había unas correas en la cama, antes de que pudiera darme cuenta, me habían empujado a la cama y estaba atado boca arriba. Rápidamente se pusieron los dos a chuparme la polla, dos bocas chupando era una sensación maravillosa, chuparon hasta que me corrí en sus bocas, entonces cambiaron de posición, Silvia se puso a cuatro patas encima mía, con su cara a la altura de la mía, empezó a besarme, mientras nos besábamos notaba el movimiento de que Javier la estaba follando. No paso mucho tiempo hasta que se me volvió a poner dura a mí.

No podía moverme y no me dejaba hablar, así que durante un tiempo estuve con la polla dura pero sin ningún contacto, solo sentía los besos de Silvia y el movimiento de la cama. Entonces escuche a Javier avisarla de que se estaba corriendo dentro, según Javier termino de correrse y se apartó bajo Silvia la cadera y se colocó mi polla dentro, de un solo golpe, dejo de besarme y se levantó sobre mí, ahora podía ver sus pechos moviéndose al ritmo al que ella saltaba encima mía.

Cuando llevábamos ya un rato Silvia y yo solos apareció Javier por el lateral de la cama, sin mediar palabra acerco su polla aun flácida a mi cara, rápidamente lo entendí, así que abrí la boca y deje que me la metiera, debido a la posición no podía hacer muchos movimientos con el cuello sin que me doliera, así que más que chupársela, me follo la boca, podía notar como cada vez la tenía más dura, aún tenía el sabor del coño de Silvia, así que no me parecía molesto, seguía sin gustarme del todo chuparle la polla, pero tampoco me podía negar, así que deje sin rechistar que me siguiera follando cuidadosamente la boca, no tarde ya mucho en correrme dentro de Silvia, sin siquiera poder avisarla.

Según termine de correrme, Silvia se levantó, juntando sus labios vaginales para que no se escapara nada de dentro, y se colocó en una posición parecida al 69, pero más alta, no llegaba a poder comerla nada. Según se colocó Silvia, Javier se la metió abriéndola los dedos que tenía cerrando su coño, en ese momento gran parte de mi corrida anterior, se salió, cayendo parte sobre mi boca y el resto por mi cara, durante el tiempo que lo estuvieron haciendo en esa posición seguían cayendo fluidos en mi cara, hasta que se corrió Javier de nuevo, entonces se movieron de manera que cuando Javier termino de sacarla, el coño de Silvia se colocó directamente en mi boca, donde estuvo unos minutos mientras la limpiaba con mi boca todos los fluidos que tenía.

Me soltaron las correas, dejándome libre, lo cual aproveche para ir al baño a lavarme un poco la cara, que tenía empapada en toda clase de fluidos. Al volver vi que era Javier el que estaba atado a la cama, pude ver que tenía los ojos tapados con un antifaz y un plug metido en el culo, así que pude imaginar lo que venía ahora.

Vi que Silvia estaba sentada enfrente de la cama, mirando a Javier, decidí ponerme delante suya y aprovechando que en esa posición mi polla quedaba justo a la altura de su boca, se la metí en la boca sin siquiera preguntarla, sin titubear ni un segundo comenzó a chupármela, continuo así hasta que la tenía completamente erecta, entonces se levantó y se colocó el arnés con el dildo, alargo las correas de las piernas, coloco a Javier unos cojines debajo, para levantar su culo, y le coloco las piernas en una posición que dejaba expuesto su culo, le saco el plug y le empezó a meter el dildo.

Mientras penetraba a Javier con el dildo me indico que me colocara con el culo en la cara de Javier, por supuesto lo hice, me coloco como ella quería que estuviera, de manera que Javier podía chuparme el culo, a la vez que ella podía chuparme la polla, la sensación que producía una lengua chupando mi culo era maravillosa, tremendamente excitante, acentuada por la mamada que me estaba haciendo, no tarde demasiado en estar a punto de correrme, la avise y cuando salía el primer chorro de semen de mi polla se separó, dejando que saliera todo mi esperma disparado, cayó sobre ella y sobre Javier. Fui a levantarme, pero no me dejo, me pidió que dejara que Javier continuara lamiéndome el culo, lo cual hice encantado.

Silvia seguía penetrando a Javier, mientras Javier me lamia, la polla de Javier estaba que parecía que iba a estallar, Silvia no la tocaba en ningún momento. Ella me indico que me pusiera de manera que Javier pudiera chupármela, mientras yo se la chupaba a él, así lo hice, primero coloque mi polla en la boca de Javier, que rápidamente empezó a chupar, acto seguido comencé a pasar la lengua por la polla de Javier, justo debajo del capullo estaba empapado de líquidos preseminales, sin usar mis manos, me la metí en la boca, la verdad es que no pasaron ni 30 segundos desde que me la metí en la boca hasta que Javier se corrió, recogí en mi boca toda su corrida, sin dejar escapar ni una gota y se la pase a Silvia. Yo ya estaba completamente empalmado de nuevo, así que aprovechando que Silvia había sacado el dildo del culo de Javier, la quite el arnés y la folle el coño hasta que me corrí, en ese momento ya completamente agotados, soltamos a Javier y nos quedamos dormidos los 3 en la cama…

(12) - El principio del fin.

Cuando me desperté a la mañana siguiente me di una ducha y sin que se despertaran me fui a mi casa, tenía muchas cosas que hacer, pero más en las que pensar, no tenía claro que esto pudiera continuar así durante mucho más, estaba muy bien, era divertido y excitante, pero no veía como se podía mantener en el tiempo, ellos son una pareja, yo estoy soltero, si encontrara a alguien se tendría que terminar y por el bien de su relación, se debería terminar mucho antes de eso, no veía que nuestra relación a 3 fuera a funcionar sin terminar por romper su relación, que cada vez tenía más claro, estaba muy afectada desde hacía tiempo, sabía que tenían problemas, pero después de casi una semana sin verse, incluirme a mí en el sexo, no era normal, dentro de lo que pudiera ser normal en esta relación que teníamos…

Estuve toda la mañana pensando en mi casa mientras organizaba cosas, hasta que a eso de las 13hr, llamaron al timbre, cuando abrí era Silvia, Javier vendría después, ella se había adelantado para hablar conmigo, quería saber por qué me había escapado por la mañana de su casa, así que se lo explique, escucho todo lo que tuve que decirla, palabra por palabra, cuando termine, ella no sabía por dónde salir, parecía que no se hubiera parado a pensarlo antes. Entonces llamo Javier a la puerta, lo hablamos con él y decidimos dar un tiempo a nuestra extraña relación, normalizar la situación, parecía lo más normal, un rayo de cordura en medio de la tormenta de locura que se había desatado entre nosotros.

Pasaron varias semanas, en las cuales ni siquiera nos vimos, de vez en cuando hablábamos por teléfono, pero nada más.

Entonces un viernes por la tarde aparecieron por casa, nos sentamos a hablar, ellos habían pensado al respecto por su lado, yo lo había hecho por el mío, mi opinión la tenía muy clara, no tenía problema en reanudar la relación, siempre que se entendieran por todas las partes lo que suponía y lo que pasaría en caso de que mi situación cambiara. Ellos volvieron con todo pensado, así que nos dispusimos a hablarlo, me pidieron que hablara yo primero, así lo hice, dejando claro lo que opinaba, según termine de hablar y explicarles lo que pensaba, Silvia se quitó el vestido que traía, dejándolo caer al suelo, intente pararla, quería que ellos también hablaran antes de que pasara nada, pero no pude evitarlo, volver a ver ese cuerpo desnudo delante mío fue demasiado, el deseo me pudo y caí en sus brazos.

Sin darme tiempo a levantarme de la silla se sentó encima de mí, completamente desnuda, con sus piernas a los lados, me beso con una pasión que no había visto hasta ahora, mientras ella me besaba, Javier se desnudaba, en un abrir y cerrar de ojos me había quitado la camiseta, podía sentir sus pezones en mi pecho, me levante con ella colgada a mí y nos dirigimos a la habitación.

La deje caer en la cama y me termine de desnudar, una vez más estábamos los 3 desnudos, ella sobre la cama boca arriba, Javier y yo delante de ella, completamente desnudos, como era costumbre me dirigí a comerla el coño inmediatamente, casi igual de rápido note que Javier empezaba a pasar su lengua por mi culo, lo cual me agradaba, pero tenía claro que no quería que pasara nada más, cuando estábamos los 3 no me importaba que me la chupara o chupársela a él, pero no quería nada más, estas experiencias no habían cambiado mi postura, los hombres no me atraían, así que sabía dónde poner el freno a la situación, pero de momento le deje hacer. Cuando Silvia llego al orgasmo pare de comerla el coño y aprovechando que la tenía dura como el acero se la metí de un solo golpe en el coño.

Mientras yo me follaba a Silvia, Javier le metía la polla en la boca, al poco tiempo cambiamos, pase a su boca y Javier se la empezó a follar, no tardamos mucho en corrernos Javier y yo, Javier en su coño y yo en su boca, rápidamente Javier fue a recoger con su boca los jugos y su propia corrida del coño de Silvia, mientras yo la besaba.

Cuando me recupere di la vuelta a Silvia, dejando su culo expuesto ante mí, comencé a lamérselo introduciendo primero un dedo, luego dos… así hasta que ya había espacio para que entrara mi polla, me puse un preservativo de los que habían traído y me dispuse a penetrarla el culo, entonces Javier aprovecho para colocarse debajo y metérsela en el coño, disfrutando entonces de una doble penetración, aguantamos todo lo que pudimos, hasta que Javier primero se corrió en su coño y acto seguido se la saque del culo, me quite el preservativo y se la volví a meter, corriéndome en su culo, dejándola tirada en la cama, exhausta.

Aunque ella estaba bastante agotada, a Javier y a mi aun nos quedaban fuerzas para una más, así que después de unos minutos, con Silvia boca arriba en la cama nos pusimos cada uno a un lado de su cara para que nos la chupara, sin decir nada, empezó a pasar la lengua de una a otra, metiéndose una y luego otra en la boca, succionándolas, pasando la lengua por los dos capullos a la vez. Mientras ella se ocupaba de nuestras pollas yo la hacía un dedo, jugaba con su clítoris. Cuando estuve listo, me coloque a la entrada de su coño y lentamente, con cuidado, fui metiéndosela, poco a poco, introduciendo unos centímetros y sacándola de nuevo, acelerando progresivamente, hasta llegar a un ritmo totalmente desenfrenado, cuando vi que Javier se corría en su boca acelere todo lo que pude el ritmo y cuando estuve a punto se la saque y me fui a correr a su boca, llenándola la boca del semen de los dos, que ella sin pensárselo se tragó.

Después de eso nos dimos una ducha, aun teníamos una conversación pendiente.

(13) - El final.

Después de que todos nos ducháramos nos reunimos en el salón, teníamos que terminar la conversación que habíamos empezado antes, mi postura la había dejado clara, pero no tenía ni idea del camino que tomaría su decisión.

Lo que me contaron me dejo helado, Javier me había mentido en prácticamente todas las conversaciones que habíamos tenido. La relación entre ellos estaba completamente acabada, Javier había estado viéndose con una “amiga” desde antes de que empezara nuestra relación a tres y por supuesto durante los días que Silvia se quedó en Guadalajara, Silvia no tenía la certeza pero se lo imaginaba. Javier ya no sentía nada por Silvia, no tenía ningún motivo para seguir con lo que según él era “la mentira de su relación”, todo lo que me había dicho sobre cuanto la quería era mentira…

Así me entere de que la relación entre Silvia y Javier había terminado unos días antes, por eso habían decidido aparecer en mi casa ese día, para terminar con nuestra relación a tres e informarme de que su relación había terminado. Supongo que llegados a ese punto, en el que Javier esta sistemáticamente con otra persona y necesitan incluir más gente para tener relaciones, era la única solución con cierto sentido. Al poco de terminar de contármelo, Javier se despidió de Silvia y de mí y se fue con su nueva amiga/pareja, quedándonos solos Silvia y yo.

Pudimos hablar durante un largo rato, ella tenía que desahogarse, aun tenia ciertos sentimientos hacia Javier que no desaparecerían tan rápido, así que la deje desahogarse conmigo esa tarde. Cerca de medianoche paso la hermana de Silvia a recogerla, ya que unos días antes se había mudado con su hermana. Continuamos viéndonos con bastante asiduidad, no para acostarnos, sino para hablar, al fin y al cabo antes que pareja/trio sexual éramos amigos desde hacía años.

Pasaron seis meses, durante los cuales seguía viéndoles a los 2, por separado, al final nuestra relación había vuelto a una normalidad perdida durante el tiempo que estuvimos los 3 juntos.

No me alargare mucho más, por ultimo solo diré que casi un año después de que la relación entre Javier y Silvia terminara y nuestra relación volviera a ser de amistad sin derechos, empezó una relación entre Silvia y yo, sin tríos, sin perversiones extrañas, una relación como otra cualquiera…

FIN.

(Espero que os haya gustado, por favor, dejad vuestros comentarios para que pueda mejorar en mis futuros relatos.)