Nuestros amigos
Nunca imagine que pasaria ese fin de semana tan especial con nuestros amigos. Jordi, yo, Jose, Raquel y una casa enorme para nosotros...
Como cada mes, más o menos, volvíamos a bajar a Barcelona a pasar unos días con la familia. Buffff, menos mal, descanso, en casita, disfrutando de los papis y aprovechándonos de ellos, porque eran los canguros perfectos para dejar a nuestra pequeña, que aunque realmente era lo mejor que nos había pasado en nuestra vida, llegaba a ser agotadora! Pero parecía que esta vez no seria ese el plan...
Jordi había quedado con su amigo Jose para pasar el fin de semana en casa de sus padres en la montaña. Eran amigos desde el instituto y decía que hacia mucho tiempo que no se veían y que tenía ganas de charlar con él y de que le contara cosas... Bueno, seguro que como todos los tíos esas cosas serian el fútbol y los últimos ligues de Jose. Porque una cosa estaba clara, Jordi era mi marido y Jose su amigo, yo los había conocido en el instituto y bueno.... si Jordi me encanto, Jose sin haber tenido nada con el, me parecía muy muy atractivo... el tipo de chico que miras y al momento te imaginas como sería estar entre sus enormes manos. Porque el chico tenia un cuerpo que era de escándalo! Moreno, ojos marrones, cara de hombre (personalmente me gustan mas los chicos con cara de hombre tipo Jonhy Deep, que no los de cara de chica tipo Leonardo DiCaprio), 1,78 m, fuerte (era nadador), con anchas espaldas (he dicho que era nadador?), y un culito que... bueno bueno... a lo que iba que íbamos a pasar el fin de semana con el y con su nueva novia que nos la quería presentar...
La cosa sonaba bastante mal, la verdad, y no por que no me encantara la idea de ir a la montaña con Jordi, sino porque normalmente las novias de Jose eran un poco... bueno, lo que se dice unas tías de película, pero que mejor hubiera sido si fueran de película muda, porque todo el encanto que tenían en sus cuerpos lo perdían al abrir la boca, y no penséis que lo digo por envidia eh? lo digo porque realmente a veces era mejor charlar con nuestro perro que con una chica de esas... pero bueno.
Se acerco la hora de marchar, habíamos quedado el mismo Sábado a media tarde para que nos pasaran a recoger, o sea que me vestí para la ocasión.
Escarmentada de veces anteriores en que la acompañante de Jose me eclipsaba totalmente con su vestimenta, decidí ponerme lo más provocativa que pude. Así que me puse mis zapatos preferidos, con un tacón que me hacia mucho mas alta de mi 1,63 real, mi mini de salir a la disco con Jordi, la cual si me agachaba a coger alguna cosita imaginar lo que aparecía, mi tanguita blanco semitransparente, el cual si hubiera tenido algún mísero pelito se habría transparentado, pero últimamente me encantaba (y a Jordi también) depilarme entera... y un top blanco muy ajustado sin sujetador para que marcara mi poquito, pero bien puesto pecho. Me rice el pelo y me puse esa gomina tan buena que hace eso del efecto mojado....
-Carai!!! Como te has puesto!- me dijo Jordi- Estoy por llamar a Jose y decirle que venga una hora mas tarde!!!
La verdad es que me había puesto muy guapa, pero es que esta vez no quería ser menos que nadie...
Al momento escuchamos el timbre de la puerta, era Jose que nos esperaba para marchar. Cuando abrí la puerta y me vio no pudo evitar repasarme con sus ojos de arriba a abajo, me sentí un poco incómoda, pero a la vez muy excitada. A que mujer no le gusta sentirse deseada?
-Se a puesto sexy eh?-le dijo Jordi a Jose mientras me acaricia el culo...- y eso que no has visto la ropa interior que lleva que si no!!!
-Va Jordi, no seas burro...- respondí yo. La verdad es que tenían una amistad muy grande entre ellos, pero hablar de mi de esa manera delante mío me hacia sentir rara, lo que no sabia si era de enfado o de excitación....
Nos dirigimos al coche, un focus de dos puertas donde a dentro solo se podía distinguir una silueta sin mas detalles... Por el camino solo los oía cuchichear a mis espaldas y reírse de algo, suponía que de algo relacionado conmigo, pero no sabia el que... así que decidí vengarme a mi manera, para pasar a los asientos de atrás tenia que mover el asiento delantero y meterme un poco como pudiera, así que viendo sus caras reflejadas en el espejo interior planee darles un pequeño espectáculo, me agache un poco y levante una pierna para entrar en el coche. Note como mi mini falda rosa subía por mi piel dejando descubierta la parte baja de mi culo. Fue solo un momento, porque rápidamente me metí en el interior del coche, pero me di cuenta como la conversación de los chicos y sus risas se habían cortado de golpe... con una sonrisita me acomode en mi asiento...
Y una vez allí me pude fijar en la acompañante de Jose. Mi primer pensamiento fue: "Madre mía! que chica mas guapa...". Era una preciosidad, morena, pelo corto casi como un chico, ojos negros, nariz respingona, delgadita, mas alta que yo...
-Bueno- interrumpió mis pensamientos Jose- os presento a Raquel. Raquel este es Jordi- se dieron dos besos- y esta es Esther- nos dimos dos besos.
Pero el contacto de mi piel con su piel, el beso en su cara muy cercano, quizás demasiado cercano, a sus labios, su olor, su calor, su suavidad... hizo que se me llenara la barriga de cosquillas...
Que me estaba pasando? No lo se, solo se que algo raro sentía dentro de mi, que me encontraba muy excitada y que solo acabamos de empezar el fin de semana....
Llevábamos cerca ya de una hora de camino y todavía nos quedaba media hora más. En todo ese momento no había podido dejar de mirar a Raquel. Mientras charlaban Jordi y Jose de sus cosas, en la parte delantera del coche, Raquel y yo comentábamos las nuestras. Nos acabábamos de conocer, pero habíamos conectado perfectamente... Hablamos de ropa, de cortes de pelo, de zapatos, de cotilleos, de mas zapatos, de la nueva temporada de ropa de este verano, de la universidad (yo había estudiado Relaciones Laborales y ella Veterinaria), de animales, de mas zapatos.... y sin darnos casi ni cuenta ya habíamos llegado a la casa de los padres de Jose. La verdad es que era enorme! y la teníamos para nosotros solitos...
Bajamos del coche Raquel y yo como si fuéramos amigas ya de toda la vida, medio agarradas de la cintura y sin parar de hablar de nuestras cosas. Mientras hablábamos me pude fijar en su estupenda figura. Llevaba una camisa blanca ajustada, con los botones superiores desabrochados dejando ver ligeramente el inicio de sus pechos, una faldita negra un poco mas larga que mía, pero que también dejaba intuir su preciosa figura y unos zapatos con mucho menos tacón que el mío pero que aun así la hacia un poco mas alta que yo....
-Vaya Esther- me dijo ella- que guapa te has puesto! no me había fijado dentro del coche! Si lo llego a saber me habría puesto un poco más... sexy! Si ya me lo ha dicho Jose que me pusiera guapa que tu lo eras y mucho, pero no pensé que tanto!
Al momento me puse colorada como un tomate al tiempo que miraba de reojo a Jose que también se ruborizaba, mientras Jordi se reía...
-Así que te parece guapa Esther eh Jose? - dijo Jordi dándole un empujón a su amigo...
-Ya sabes que si...
-Ya, pero me encanta oírlo! me encanta fardar de mujer!
-Oye- dije yo casi sin darme cuenta- que te podrás quejar tú Jose, con lo preciosa que es Raquel...
Jordi me miro al momento y rió con más fuerza mientras ahora era Raquel la que se ruborizaba...
-Anda, - dijo Jordi- Vamos a entrar en casa que al final se va a liar la cosa aquí fuera!-y siguió riendo mientras el y Jose entraban las maletas y nosotros nos quedábamos fuera casi sin saber que decir...
-Mejor entramos también no?- pregunto Raquel, con lo que nos pusimos en marcha y entramos en la casa.
Jose, nos empezó a enseñar la casa. Era enorme!, con una piscina en el jardín, una planta baja donde estaban las habitaciones, la cocina, el lavabo y el salón, y una segunda planta donde había un enorme altillo forrado de madera que era precioso y que también usaban como habitación por si venia mas gente. La verdad es que la casa era preciosa...
En un principio nos metimos cada uno en nuestra habitación para dejar las cosas y cambiarnos para irnos un ratito a la piscina antes de que se fuera el sol y nos hiciéramos la cena.
Allí empezamos a desnudarnos y Jordi me sorprendió agarrándome por detrás mientras me quitaba la faldita...
-Madre mía, como me has puesto toda la tarde!- me dijo- desde que te he visto en casa salir con este modelito me has puesto enfermo! y seguro que a mi amigo también! jeje. Me encanta cuando vas tan sexy....- Mientras decía eso empezó a tocarme las tetas por debajo del top blanco que llevaba. Me encantaba como me tocaba Jordi, con esa mezcla de sensualidad y salvajismo que a veces tenia... me encantaba sus suaves dedos recorriendo mis pechos hasta que llegaba a mis pezones y me los pellizcaba con fuerza... mmmmmm.... Me tenia totalmente cogida por la espalda, apoyando su entrepierna en mi trasero con sus dos manos en mis pechos y basándome la parte lateral de mi cuello, que le ofrecía esperando algún que otro mordisco. Su mano izquierda seguía masajeando mis pezones, mientras con la derecha bajaba por mi ombligo hasta llegar a mi tanga, empezó a acariciarme la parte superior de mi ropa interior, suavemente, mientras seguía bajando y me introducía su lengua en mi oreja....mmmmmmm.... eso me encantaba, sentir su respiración en mi oído....mmmmmm.....
-Vaya!! Veo que no soy el único que estaba caliente!- me dijo Jordi al llegar a la parte más intima de mi sexo- mírate! si estas empapada!, hasta el tanga esta mojado! es por mi? no será por mi amigo no? que he visto como te miraba cuando salías de casa... o mejor... no será por la novia de mi amigo eh?- Y me dio un cachete en el culo...
-Anda tonto, cállate y trae mi bolsa, que la tengo fuera y allí tengo los bikinis nuevos.
-OK, ya voy... ahora que la cosa se ponía interesante... Ahora vuelvo!- y dicho eso se marcho un momento del cuarto dejando la puerta medio abierta mientras yo, pensando en lo que Jordi me había dicho, seguía desvistiéndome hasta quedarme totalmente desnuda.
Me quede un rato mirando mi cuerpo, la verdad es que me gustaba. Yo era rubia, no demasiado alta, con un pecho que sin ser excesivo me gustaba mucho, con unas aureolas grandes y oscuras, en contraste con mi piel mas blanquita...
Tenia la piel muy suave, mientras me tocaba la barriga pensaba lo bien que me había quedado después del parto, la verdad es que la pesadez de ponerme todos los días las cremas antiestrías había tenido resultado. Mi mano seguía pasando por mi cintura y fue bajando hasta mi sexo. Lo tenia muy suave, me encantaba el tacto que tenia después de depilarlo y hacia solo 3 días que había pasado por la esteticien... y bufff la verdad es que Jordi tenia razón, estaba un poco mojada, notaba mi sexo húmedo al tacto con mis dedos... Pero, que estaba haciendo? me estaba masturbando en casa del amigo de Jordi y con la puerta medio abierta! menos mal que no había nadie viéndome... o si? al alzar la mirada vi a mitad de pasillo a Raquel que me miraba fijamente. Cuando nuestras miradas se juntaron solo consiguió decir -Perdón- mientras rápidamente se metía en el lavabo....
Madre mía! vaya pillada me había pegado. Que vergüenza! me senté en la cama y apoye la cabeza entre mis manos. A lo que llego Jordi con mi Bikini amarillo y lo dejo encima de la cama.
-Que te pasa? estas bien?-me pregunto al verme en esa postura.
-Si tranquilo, no te preocupes.
-Vale, bueno, vistete y cuando estés sales que voy a ayudar a Jose a hacer no se que OK? Te esperamos ya en la piscina. No tardes!-Y me dio un beso en la frente antes de desaparecer de la habitación...
La verdad es que la tarde había empezado de una manera un poco accidentada, Raquel, la novia de Jose, me había visto mientras me tocaba mis partes intimas y encima en vez de sentirme muerta de la vergüenza me sentía, si, un poco cohibida, pero a la vez excitada... No sabia que pensar. Solo en que me tenía que poner mi bikini nuevo y que tenía que bajar a la piscina........
Todavía tenia la imagen de Raquel mirándome desde el pasillo mientras yo (como podía haber sido tan...) me tocaba mi sexo. Sentada todavía en la cama no sabía como reaccionar. Lo que estaba claro es que no podía seguir sentada sin hacer nada, pensé que lo mejor seria actuar como si nada hubiera pasado. Buffff que vergüenza! Encima el bikini que me había traído de casa era súper provocativo. Me lo había traído una amiga mía argentina de su país y se notaba como allí a la hora de vestir para ir a la playa eran mucho más provocativas que aquí (y eso que según me dijo ella no era costumbre como aquí hacer top-lees). El bikini era amarillo, con unos triangulitos muy pequeños en el pecho que casi no llegaba a tapar el pezón, mientras que la braga era de cintura muy baja, si hubiera tenido la rayita de pelitos que otras veces me dejaba casi no me lo habría ni tapado, y por detrás, sin llegar a ser tanga, dejaba a descubierto bastante de mi trasero, un trasero que a Jordi le encantaba, pero que a mi me parecía un poco grande y por mas que intentaba trabajar en el gimnasio no había manera de reducir. (Porque teníamos las mujeres tantas caderas!)
Bueno, volviendo al tema... Acabe de vestirme y me volví a mirar en el espejo. La verdad es que era precioso el bikini, resaltaba todavía más mis formas. Y justamente eso era lo que menos quería resaltar después de lo ocurrido. Aunque al final me arme de valor y salí del cuarto.
Por suerte no me encontré en el pasillo con Raquel, no se como habría reaccionado en un encuentro cara a cara, era demasiada la vergüenza que todavía tenía por como me había visto, y la vergüenza de como me sentía yo por como me había excitado saber que me había visto...
Baje a la piscina y allí estaban los 3, Raquel y Jose en el agua y Jordi esperándome en una hamaca tumbado. Me encantaba su cuerpo. Jordi era moreno, aunque con mechas rubias, atractivo de cara sin ser demasiado guapo, con unos ojos preciosos, bueno, más que ojos preciosos era su mirada la que era preciosa. Cuando me acariciaba, me besaba, me hacia el amor... me miraba con unos ojos que hacia que me derritiera...mmmmm.... tenia el cuerpo muy fibrado, se notaba que hacia mucho deporte, con sus abdominales, su pecho depilado, sus brazos, sus piernas, su culo.... mmmmmm..... Su culo. Su culo me volvía loca. Lo tenia pequeño, duro, respingón... me encantaba acariciar su culo mientras me hacia el amor, incluso cuando hacíamos sexo oral muchas veces me dejaba perder por su culo, lo mordía, lo chupaba, lo saboreaba.... me volvía loca su culo. En más de una vez al borde del orgasmo, le había dejado mi mano marcada en su culo. Me encantaba darle cachetes incluso a veces él se me quejo que le daba demasiado fuerte, pero es que en esos momentos no sabía ni que hacía ni casi quien era, seguro que todas las mujeres sabéis a que me refiero...
-Ya veo que has bajado!- me dijo Jordi cuando me acercaba- Ya estaba por irte a buscar... - se acerco a mi lado, me abrazo y me dijo al oído- y de paso.... que antes hemos dejado una cosa pendiente...- y me lanzo un rápido lametón en el oído...
-Venga parejas! dejar ya de manosearos y venir al agua que esta muy buena!- dijo Jose mientras nos miraba. A la vez vi como Raquel apartaba la vista de mi cuerpo un poco ruborizada y sin saber casi donde mirar...
Después de un rato en la piscina, me entro un poco de frío (ya se iba haciendo de noche y yo era bastante friolera) así que decidí salirme y tumbarme en la hamaca a tomar los últimos rayos de sol que se colaban entre unas nubes que no presagiaban nada demasiado bueno. Así estuve un rato hasta que vi como salía Raquel de la piscina y se dirigía a la ducha para quitarse el cloro. Que preciosa era esa chica...
Llevaba un Bikini blanco con dibujitos de colores azules de diferentes tonos que le marcaban perfectamente su precioso cuerpo. Las gotas de agua de la ducha le resbalaban hasta los pies, primero mojándole su pelo negro, bajando por sus ojos, su nariz, sus labios, su culo, su pecho, su cintura... Que me estaba pasando? Nunca había sentido nada así por otra chica! si es cierto que a veces con Jordi mientras hacíamos el amor y veíamos alguna película pornográfica nos imaginábamos con la otra pareja haciendo el amor todos juntos, pero nunca había sentido una sensación tan intensa como la que sentía en esos momentos. Notaba como inconscientemente apretaba mis muslos, para sentir mayor presión en mi sexo, notaba como mis pezones se endurecían poco a poco, con la visión de aquella preciosa chica, notaba como mis labios se morían por seguir el camino de alguna de aquellas gotas que acababan en el interior de la boca de Raquel...
-Estas bien Ester?-Jordi me saco de mis pensamientos- Te veo un poco distraída. Además vaya como tienes las tetas! si se te marca todo! me estas poniendo malo todo el día!
-Calla tonto, es que tengo frió- respondí yo como pude, y me tape un poco con una toalla.
-Es verdad- dijo Jose- hace un poco de frío, porque no nos metemos dentro y vamos preparando la cena? además creo que se acerca una tormenta y será mejor que nos pille dentro de casita.
Todos estuvimos de acuerdo y nos metimos en casa.
Dentro nos cambiamos y nos pusimos a hacer la cena. Jordi se puso un pantalón corto y una camiseta, ropa que dejaba ver claramente sus preciosas piernas. Jose también se puso pantalón corto y camiseta, pero el sin mangas lo que dejaba a descubierto sus musculados brazos. Yo me puse un pijama blanco Calvin Klein que me había regalado Jordi no hacia mucho y que me encantaba, porque además de sentirme muy cómoda me parecía muy sexy, y eso que no enseñaba nada de nada eh? Por eso debajo del pijama no me puse nada de ropa interior. Raquel apareció con unos pantalones tejanos cortados a la altura del culo que le quedaban preciosos y una camiseta de tirantes bastante escotada, también sin ropa interior cosa que hizo que me pusiera todavía más nerviosa.
De esa manera empezamos a prepararnos la cena, nos sentamos frente al televisor a ver Salsa Rosa y a comentar sus cotilleos hasta que nos lo comimos todo.
-Bueno y ahora que hacemos? Porque la verdad es que salir por ahí a tomar algo con la que parece que vaya a caer no me apetece mucho-dijo Jordi.
-La verdad es que tienes razón- respondió Raquel que en casi toda la cena no se había atrevido a mirarme a los ojos.
-Bueno- dijo Jose- Pues nos quedamos. Y de paso jugamos a algo, que os parece?
Jose sugirió la idea de irnos los 4 al altillo subirnos algo de bebida y continuar ahí la fiesta.
-Y a que vamos a jugar?- pregunte yo- tienes el trivial, el Tabú, cartas....
-Mejor- respondió Jose- Si os apetece y queremos todos podríamos jugar a algún juego de esos que jugábamos cuando éramos peques, juegos tipo la botella, o el juego de las verdades, o a las pruebas, o al póquer con prendas
-Me gusta la idea!- dijo rápidamente Jordi.-Por nosotros se ve que esta bien, vosotras que decís?- nos dijo mientras los dos chicos nos miraban expectantes...
Raquel y yo nos miramos, nos sonreímos, nos cogimos de la mano y dijimos juntas:
-Vale!- y los 4 nos echamos a reír mientras subíamos las cosas al altillo.
La verdad es que en ese momento no sabia como iba a acabar la noche, pero sinceramente me apetecía tentar a la suerte...
Subimos los 4 las escaleras que nos conducían al altillo. Jose, nos había acomodado en 4 cojines alrededor de un tapete verde en el cual estaban los diferentes objetos a utilizar en los juegos, una botella, unas cartas, unos dados... La habitación era preciosa, forrada toda de madera, en forma de V invertida, con el techo bajo, solo en la parte media los chicos (mas altos que nosotras) podían ponerse en pie sin miedo a darse con la cabeza. Esto hacia que el ambiente fuera mucho más recogido, más intimo. Jose también había llenado la habitación de velas. Eran velas aromatizadas, de diferentes formas y diferentes colores. Todos nos pusimos en marcha para encender todas las velas, que poco a poco fueron llenando la habitación de su peculiar olor y color dejándola, cuando apagamos la luz y nos sentamos, en un ambiente como si de un sueño se tratara... mmmmm.... me encantaban las velas... ese juego de luces y sombras que provocan sus llamas al parpadear con el aire provoca, que las formas, los contornos de nuestro cuerpo, se definan un poco mas, los brazos de Jose parecían mas musculados en esa oscuridad, las piernas de Jordi, fuertes de por si, todavía lo aparentaban mas, los pechos de Raquel parecían más firmes, y su cara... su cara iluminada a la luz de las velas me hacían verla todavía mas preciosa de lo que había pensado antes. Muchas veces Jordi y yo habíamos utilizado velas en los momentos en que disponíamos del tiempo suficiente para recrear nuestras fantasías. Pero eso es otra historia...
-Bueno, a que os apetece jugar?- dijo Jose una vez acomodados todos- Podemos jugar al juego de la botella, o si preferís jugamos al streap-póquer!
-Bueno -le interrumpió Jordi- a mi el streap -póquer me encanta, pero una cosa, no se ellas, pero Jose, tu y yo, llevamos solo dos prendas y Esther conociéndola como la conozco dudo mucho que lleve algo mas debajo de ese pijama tan sexy y que a mi tanto me pone!- y me soltó un pellizco en el culo.
-No, claro que no. -dije yo- ya sabes que me gusta ir cómoda. Aunque no se Raquel...
-Yo tampoco llevo nada debajo- dijo un poco cortada.
-Pues entonces mejor pasamos de las cartas y las dejamos para mas tarde no? que sino en 10 minutos acabamos todos en pelotas y luego que hacemos!- dijo Jordi. Y empezamos todos a reírnos.- Que os parece si jugamos al juego de las verdades? Uno le pregunta a otro cualquier pregunta relacionada con el sexo y el otro tiene que contestar la verdad vale? y si no pues a pasar un prueba. Que os parece?
Todos estuvimos de acuerdo con el juego, era una manera bastante Light de empezar una noche que hasta ese momento estaba siendo muy excitante.
-Vale- continuo Jordi- empiezo yo preguntándole a Jose OK?- Jose asintió con la cabeza.- Bien, ahí va, y recuerda que tienes que contestar la verdad eh? Bueno, pues la pregunta es... Que es lo que más te gusta practicar en el sexo? y con cuanta frecuencia lo practicas?
Me quede mirando a Jordi y vi que empezaba a sonreír de una manera maliciosa.
-Que perro eres! - salto Jose-. Como puedes preguntar eso! ten amigos para esto...
-Recuerda que tienes que contestar la verdad eh?- le dijo Jordi.
No entendía lo que pasaba, pero note que las otras tres personas si sabían de que iba. Jordi se reía de su amigo, Jose, no sabia como reaccionar y Raquel estaba roja como un tomate y no sabia a donde mirar.
-Vale, voy a contestar, pero recuerda que la venganza será terrible!- y respirando profundamente nos dijo a los 3... -Bueno, lo que más me practicar es el sexo anal. Me encanta... -Jordi le hacia señales de que siguiera con la respuesta...- ... ya, ya voy... y la frecuencia con la que lo practico es... bueno, no es. No practicamos sexo anal, ha Raquel cuando lo hemos intentado me ha dicho que le duele mucho y no hay manera. Pero -Jose rápidamente abrazó a Raquel y la beso en los labios- no pasa nada! no me importa, si hay que esperar pues espero. Aunque no pierdo la esperanza!- con ese comentario todos nos echamos a reír menos Raquel que seguía sin saber donde mirar.
-Contento? Y prepárate que ahora me toca a mí preguntarte...
-Nooo, lo siento, pero tienes que preguntar a otra persona -dijo Jordi- en esta ronda yo te he preguntado a ti, o sea que tendrás que esperar más adelante para devolvérmela!
-Ya veo que lo tienes todo estudiado -le contesto Jose- pero no te preocupes, que ya te tocara ya.... Y girándose para mi me dijo- bueno Esther, entonces la pregunta es para ti, y como no estoy muy lucido en este momento mi pregunta es la misma que la de Jordi. Te gusta el sexo anal? Disfrutas cuando lo practicáis?
La verdad es que no me esperaba esa pregunta, pensaba que el juego iba a ser bastante más pausado, sobretodo cuando no hacía nada acabábamos de empezar a jugar, y ahora me encontraba con esa pregunta. En circunstancias normales no habría respondido, pero en ese momento me sentía muy excitada y liberada. Todos me miraban fijamente, en especial Jordi que reía creyendo que no iba a tener el valor de contestar.
-Recuerda que tienes que decir la verdad eh?- me dijo como desafiándome. Así que me arme de valor, respiré hondo y contesté:
-Si, me gusta el sexo anal. Y si, disfruto mucho cuando lo practico, eso si, he de estar muy muy excitada. En esos días mis orgasmos pueden ser mucho más intensos cuando practico el sexo anal que el vaginal. Sobretodo cuando soy yo la que marca el ritmo y la profundidad de la penetración. Cuando practicamos sexo vaginal, me gusta sobretodo la frotación, el notar como el miembro de Jordi sale y entra todo entero en mi interior, para volver a salir y entrar, con todo su recorrido, -la verdad es que la explicación me estaba calentando y de que manera!, me sentía cómoda y excitada hablando de ese tema- en cambio en el sexo anal me gusta estar a mi encima de él, empezar con una buena mamada para lubricar bien el aparato del nene (Jordi no tenia un pene excesivamente largo, 17 cm. la ultima vez que se lo medí, pero si que era bastante ancho, al menos hasta donde yo podía conocer, su perímetro era de 16 cm.) mientras le hago la mamada me gusta chuparme algún dedo e ir introduciéndolo en mi culo para facilitar luego la penetración, cuando ya esta todo bien mojadito me gusta colocarla en mi entrada e ir empujando, poco a poco, a veces he de parar porque me quema, pero vuelvo a lubricarle bien el pene y vuelvo a introducirlo cada vez mas hasta que llego a tener todo dentro de mi. Entonces a diferencia del sexo vaginal que como he dicho antes prefiero la frotación, en el anal prefiero la profundidad, me vuelve loca sentirla toda dentro de mí y cuando la tengo toda dentro mis movimientos son de muy poco recorrido, intentado introducírmela más cada vez, hasta que así llego a los orgasmos más brutales...
-Ni que lo digas que intentas introducírtela cada vez mas!!! Hay veces que aprieta tanto contra mi que parece que me vayan a explotar los huevos!- Dijo Jordi entre risas.
-Joder! -interrumpió Jose- espero que ya hayas acabado, porque me has puesto como una moto! mirar como estoy -y con la mano remarco en su pantalón la erección de su miembro. La verdad es que debajo de ese trozo de tela aparecía un enorme bulto! Jolin, cada vez estaba mas excitada... entre la bebida de la cena, las velas, el olor, las historias, el bulto de Jose... buffff.
Ahora era a mi la que me tocaba preguntar a Raquel, así que como vi que antes lo había pasado mal con lo del sexo anal, decidí ser buena y preguntarle algo con lo que pudiera sentirse cómoda.
-Bueno, Raquel, que es lo que mas te gusta hacer en el sexo?
Se quedo un rato pensativa. Los tres la mirábamos expectantes hasta que levantó la cabeza nos miró y empezó a contar:
-Bueno, a mi lo que más me gusta en el sexo es hacer el amor, y digo hacer el amor y no follar, porque yo lo veo diferente. Esta claro que me encanta follar con Jose, dar rienda suelta al animal que llevamos dentro! jeje- y todos nos reímos con ella- pero yo lo que prefiero es hacer el amor.-Y se me quedo mirando fijamente a los ojos hasta que tuve que ser yo la que apartara la mirada. -Me gusta estar con la otra persona y hacerle un masaje con aceite por todo el cuerpo, sentir su piel en mis manos, sentir su cuerpo en el mío, notar su olor, su sabor... poder saborear todos sus rincones, besar sus parpados suavemente, besar con mi lengua su boca, recorriendo sus labios sin todavía introducirme en ellos, recorrer con mi lengua su cuello, susurrarle al oído lo mucho que lo deseo... -cerré los ojos, la voz de Raquel se introducía en mi interior como si fuera música, transportándome a su mundo de fantasías y deseando que fuera yo la que recibiera esos besos de su boca - ...saborear con mi lengua su pecho, llegar a sus pezones y morderlos suavemente mientras noto como entre mis dientes aumentan de tamaño por la excitación, buscar su ombligo y saborear con mi lengua todo su contorno, mientras noto como la respiración de la otra persona se entrecorta y empiezan los tímidos jadeos... - a la que se le cortaba la respiración era a mi escuchando sus palabras, me sentía realmente excitada, imaginándome que esa chica me hacía llegar al cielo con su ternura. Nunca había estado con otra chica, pero siempre que lo había imaginado era exactamente como lo describía Raquel...mmmmmm- ....seguir bajando hasta llegar a su pene y primero acariciarlo con las manos, para después lamerlo por todo su perímetro, pero aun sin introducírmelo en la boca, saboreando el placer que se siente al tener a la otra persona a tu entera disposición, sabiendo que esta deseando una cosa, pero que solo tu decides cuando y como se la vas a dar, retrasando el momento, hasta que rodeo todo su miembro con mis labios y empiezo a subir y bajar, subir y bajar, subir y bajar, manteniendo un ritmo lento pero constante hasta que el deseo de poseerme es mas fuerte que mi aguante y entonces si follamos como locos...
Estuvimos un rato todos callados, yo todavía con los ojos cerrados y lejos de la habitación en la que se encontraba mi cuerpo, pensando en lo que Raquel nos había contado...
-Madre de mi vida! -Jordi me saco de mi pensamiento- Os importa que vaya un momento al lavabo a hacerme una pajilla?... Joder, Raquel, vaya como me has puesto!
Jordi y Jose se reían y Raquel seguía mirándome fijamente a los ojos.
-Bueno Raquel - dijo Jose, te toca preguntarle a Jordi...
-A Jordi? es que no se que preguntarle...
-Le puedo ayudar yo? -dije al momento y me puse a susurrarle la pregunta al oído. Jordi se lo estaba pasando pipa así que ahora era nuestra hora de divertirnos con él... Cuando acabe Raquel me miro como extrañada, pero le dije un si con la cabeza y le lanzo la pregunta a Jordi:
-Bueno Jordi, la pregunta es? te gusta el sexo anal?
-Pues claro que me gusta! -y se puso a reír...
-No, no -interrumpí yo- creo que no la has entendido. La pregunta es si te gusta que te hagan sexo anal a ti...
La cara de Jordi cambio al momento, paso de reírse a sacar su sonrisa maliciosa...
-Que perra eres! y eso que tu eres mi mujer! ya veras ya... esta me la pagas! - Y los otros tres nos empezamos a reír. -OK. Está bien, me gusta el sexo anal, bueno, me gusta que cuando hacemos el amor o cuando Esther me hace una mamada me chupe el culito (bueno, eso no me gusta, eso me encanta) y también que me meta un dedito en el culo...
-Uno solo? -dije yo riéndome a pierna suelta...
-Serás mala! - y me soltó una palmada en el culo- Bueno, uno o dos... o yo que se, lo que se es que me gusta que me haga el sexo anal si... contenta? contentos?
Los cuatro en ese momento nos estábamos riendo, nos lo estábamos pasando en grande y eso que solo llevábamos una ronda...
-Bueno -dijo Jordi- ya a acabado la primera ronda y me toca otra vez preguntar a mi. Y esta vez elijo a Esther... Te vas a enterar tú ahora!!
-Nooo, eso no vale, porque empiezas tu?
-Hombre, yo creo que será divertido, haber que te pregunta -dijo Jose- Tu que dices Raquel?
-Yo creo que puede estar bien... -dijo ella mientras me miraba y se reía.
-Bueno, pues decidido, es un tres contra uno -dijo Jordi- así que prepárate que ahí va mi pregunta...: Tendrías relaciones sexuales ahora mismo con alguien de esta habitación que no fuera yo?
Me quede paralizada al oír su pregunta. Se oyó un silbido de Jose como diciendo "vaya tela la pregunta". Los miré a los tres, primero a Raquel que rápidamente aparto la vista de mi, después a Jose, al que se le veía bastante nervioso y expectante ante esa pregunta, que tampoco se atrevía a mirarme, y por ultimo a Jordi, que se apoyaba hacia atrás sobre sus brazos y me miraba mientras sonreía. El muy capullo (en el buen sentido) me conocía muy bien y sabía que algo raro me estaba pasando. Muchas veces habíamos fantaseado con la idea de mantener sexo con otras personas, pero siempre era yo la que, en frío, mas reticente estaba. Por eso el vio en esta su oportunidad de ver hasta donde era capaz de llegar yo, de ver si seria capaz de seguir adelante... Lo pensé durante unos momentos y al final respondí:
-Prueba -no había tenido el valor para decir la verdad, pero es que sinceramente no me veía preparada para decir lo que sentía en ese momento, principalmente porque ni yo sabia lo que sentía.
A los chicos se les noto la decepción en sus caras. Ese había sido el momento de la verdad, (o al menos el primero de la noche) y no había pasado nada. Aunque Jordi rápidamente recupero la compostura y reflejó con una caricia cariñosa en mi mano que lo comprendía perfectamente al menos eso quise interpretar yo!
-Esta bien, pero yo pongo la prueba -dijo mi marido mientras me soltaba de la mano. -Haber... ya esta. La prueba va a ser la siguiente, te voy a vendar los ojos y cada uno de nosotros va a tener 5 segundos para hacer contigo lo que quiera.
-Como que lo que quiera? -pregunte yo algo nerviosa.
-Hombre -contesto Jordi- tampoco creo que en 5 segundos de tiempo a hacer muchas cosas no? Que os parece a vosotros? -les preguntó Jordi a Jose y Raquel. Los dos dijeron que les parecía bien...
Así que me senté en mi sitio y mientras se disponían a taparme los ojos miré a Jordi que me sonreía a mi lado con un trapo entre las manos, a Jose, en su sitio mirándome y riendo, con una risa producto mas de los nervios y la excitación que de otra cosa y por ultimo a Raquel, que ahora si, me miraba directamente a los ojos. Luego la oscuridad....
A cada momento que pasaba mi cuerpo se tensaba más. Solo oía leves susurros que se decían entre ellos, en especial entre los chicos, aunque no podía entender lo que decían. Mi respiración iba en aumento, mis pulsaciones cada vez mas aceleradas... que me iba a pasar? Todavía no me explicaba como había podido llegar a esa situación... Si me lo llegan a decir a la mañana que iba a acabar así... Aunque eso de acabar era un forma de hablar, eso solo había echo que comenzar. Y yo era el centro de todo...
Me sentía indefensa, no veía, no oía casi nada... solo me quedaban los recuerdos. De Jordi, de Jose, de Raquel... mmmmm.... de Raquel. Que estaría haciendo? que haría conmigo cuando le tocara? Que harían conmigo cuando le tocara a cada uno! Me sentía un objeto, como un muñeco... y eso me excitaba aun más.
-Bueno pues ya esta. Estas prepara Esther? - era Jordi el que hablaba. Se lo notaba muy cómodo. Seguro que estaba disfrutando.
Asentí con la cabeza. No sabia si estaba preparada, no sabia lo que iba a pasar, pero si que sabia que quería que pasara ya...
Note como una persona se acercaba a mí y se sentaba a mi lado. Note su respiración acercándose, sus labios cerca de los míos, contactando con ellos, abriendo ligeramente la boca y explorar con su lengua el contorno de mis labios. Me agarré fuertemente con mis manos al cojín sobre el que me sentaba. No podía tocar a la persona que me besaba, eran las reglas, solo podía dejarme hacer. Así que suprimí el intento de acariciar a aquella otra persona (que por la manera de besar supuse que era Jordi) y me agarre fuertemente a mi cojín. Busqué con mi lengua su contacto hasta que nuestras puntas se juntaron fugazmente y ahí acabó, para mi pesar, nuestro beso...La persona se incorporo y volvió a su sitio. Yo, haciendo un gran esfuerzo, volví a relajarme... Me excitaba mucho la situación... Sabia que seguramente fuese Jordi el que me había besado, pero ¿y si no lo era? Podía haber sido Jose o Raquel... buffff.... estaba... la verdad es que no se como estaba, pero seguro que alguna de vosotras si habéis estado en alguna situación similar sabréis lo que se siente. Yo a día de hoy soy incapaz de definir ese momento... Solo se que era bueno... muy muy bueno...
-Preparada para el segundo asalto?- Volvía a ser Jordi el que hablaba y volvía asentir yo con la cabeza. Todavía no quería ni hablar, prefería seguir saboreando el beso que acababa de recibir de mi desconocido amante.
Otra persona se acercó a mí y se volvió a colocar a mi lado. Suavemente me acaricio el pelo y me lo aparto de mi cara. Acercó su boca y muy suavemente empezó a besarme el cuello. Dios! un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Debía de ser Raquel la que me besaba... y como lo hacía... Había deseado sus besos y no me habría importado en absoluto recibirlo en mi boca como el anterior. Deseaba besar a esa chica con todas mis fuerzas, pero debía de conformarme con sus suaves y sensuales besos en mi cuello. Que delicadeza... solo Jordi me había besado así algunas veces, las veces que dejábamos a un lado nuestro instinto sexual y nos dedicábamos a darnos placer a un nivel mucho mas sensual. Note durante esos cinco interminables segundos, los labios de la otra chica recorrer mi piel, abriéndose y cerrándose sobre un punto, luego otro, luego otro... alguna vez note la punta de su lengua en mi cuello y moría de envidia. Envidia de no poder corresponder ese beso de esa chica...
Por desgracia pasaron esos 5 segundos y mi segundo extraño volvía a su sitio.
Estuvimos unos segundos en silencio sin que se oyese nada, hasta que Jordi volvió a hablar.
-Bueno, pues aquí va el último...
Según mis cálculos mi próximo invitado debería de ser Jose, ¿que me haría? La verdad es que me atraía mucho ese chico y en breves instantes me tendría a su entera disposición. Seguro que Jordi estaría disfrutando muchísimo, aunque no tanto como yo...
Note su cuerpo junto al mío, sentarse, acomodarse y acercarse a mi...
Su mano izquierda se poso en mi pelo, masajeándolo suavemente, entrelazando sus dedos con el cuerpo de mi pelo, su mano derecha se poso delicadamente en mi mejilla izquierda, acariciándola con sus yemas mientras que con su pulgar acariciaba muy levemente mis labios. Note su cara acercase a la mía, note su respiración muy cercana a mi oído derecho. Su lengua se poso en mi cuello, muy cercana al oído que era su destino. Fue subiendo suavemente notando cada vez más su respiración. A esa distancia su lenta respiración se asemejaba a un gemido. JODERRRRRR. Que placer.... Sus labios se cerraron brevemente sobre mi lóbulo que quedo prisionero en el interior de su boca, mientras sus manos seguían masajeando mi pelo y mi cara al compás de su respiración haciendo todo mucho más sensual. Libero mi lóbulo y siguió subiendo, recorriendo con su lengua el contorno de mi oreja y adentrándose en su interior... madre mía... Retiro su lengua de mi oído, pero no su boca, que con un susurro me dijo:
-Estaba deseando besarte desde que te vi esta mañana en tu cuarto.
Dios Santo! era Raquel la que me estaba susurrando al oído que deseaba besarme! La persona que estaba haciendo que me derritiera con sus caricias, con sus besos, con su sola respiración era Raquel...
-Ester te deseo tanto...
Y se separo de mí plantándome un beso enorme en la mejilla. Estaba confusa, pero decidida. Nunca había sentido nada igual por una mujer, nunca, ni por otro hombre que no fuera Jordi, pero esta vez era diferente. Desea a esa chica, quería besarla, quería tenerla, quería hacerla mía, quería hacerle el amor, ella y yo, mujer contra mujer, como dice la canción. Solo por una vez quería hacer el amor con otra persona que no fuera Jordi. Nunca había estado con otro chico y mucho menos con otra chica, pero en ese momento necesitaba, deseaba con toda mi alma, hacer el amor con esa chica.
Antes de separar su mano de mi cara, cuando ya se disponía a marcharse, no pude más y la agarre por la muñeca.
-Eso no vale! es trampa! -grito Jose muy animado. Jose, Jordi... casi me había olvidado de ellos...
Me quité la venda como pude, fuera de mi, sin saber que hacer, ni que decir, ni donde mirar... solo había una cosa en mi mente, besar a Raquel, sentir sus labios, sentir su lengua... Pero antes y ante las risas y los gritos de Jose, necesitaba una cosa. Mire a Jordi que me observaba en silencio, notó que algo pasaba, pero no sabía lo que era y yo no tenía palabras, no me salían, para decir lo que mi cuerpo pedía... Lo mire a el, mire a Raquel nerviosa, con su mano en mi mano, tocándonos, acariciándonos, mirándonos a los ojos, solo nosotras sabíamos lo que queríamos. Volví a mirar a Jordi que me miró y me sonrió. Se había dado cuenta de todo... Y me hizo un movimiento con la cabeza que era lo único que necesitaba. Quería poseer a esa chica, pero quería mucho más a mi marido y necesitaba su aprobación para seguir adelante. Su solo movimiento afirmativo de su cabeza fue suficiente. Ya nada se interponía entre ella y yo....
.
Todo pasaba a mí alrededor a una velocidad lentísima. Mis ojos se posaban sobre cada una de las personas de la habitación, Jordi a mi lado recostado sobre sus manos y mirándome expectante, Jose a lo suyo seguía hablando y riendo no se de que, Raquel a mi lado con su muñeca atrapada por mi mano mirándome a los ojos. No podía esperar más, no quería esperar más... Tiré de su mano a la vez que mi cuerpo se acercaba al suyo, con mi mano izquierda libre le acaricie su preciosa cara a la vez que cerraba los ojos y torcía levemente la cabeza mientras me acercaba a sus labios. Al momento note nuestro contacto, primero solo con los labios. Tenía unos labios pequeños y muy suaves, con un ligero sabor a coco de los restos de la protección labial que utilizaba para hidratarlos. En ese mismo momento que nos besábamos se hizo el silencio, no se si por la sorpresa de Jose que lo dejó mudo o porque en ese instante todos mis sentidos estaban en ese primer beso. Separe por unos momentos su boca de la mía, con los ojos aun cerrados, para morderme un poco mi propio labio y saborear aun más si cabe el sabor de esa chica. Pasado ese instante volví a besarla, otra vez juntando nuestros labios, aunque en esta ocasión abrí un poquito más la boca. La punta de mi lengua tanteaba los bordes de sus labios a la vez que ella ofrecía una ligera abertura, todavía dudando si se quería entregar a mis besos, pero no le di tiempo a pensar y mi lengua entro deseosa dentro de su boca buscando con desesperación su preciosa y rosada lengua.
Sentí un enorme escalofrío por mi cuerpo cuando note nuestro contacto. Mis dos manos se posaban ahora en su cabeza, acariciándole su precioso y suave pelo. Nuestras lenguas empezaron a bailar al son de nuestros movimientos. Que diferente son los besos de una mujer de los de un hombre, mucho más suaves, mucho más sensuales, mucho más femeninos...
Me deje caer sobre ella y las dos nos recostamos sobre el suelo. Mi mano seguía recorriéndola, primero su pelo, luego su cuello, su cara... Ella correspondió mis caricias, sus manos exploraban también mi cuerpo, bajando de mi cuello a mis brazos y depositándose en mi barriga. Buscaba meter su mano bajo la parte de arriba pijama blanco hasta que lo consiguió. Sus dedos empezaron a acariciar la piel de mi barriga, jugando con mi ombligo, posando toda su mano en mi vientre. Que placer me producía sus caricias. Me notaba totalmente excitada, notaba mi sexo totalmente húmedo deseoso de recibir las caricias de Raquel.
En ese mismo momento note, notamos, como más manos se unían a nuestras caricias. Abrí los ojos y vi a Jordi y a Jose a nuestros lados completamente desnudos, acariciándonos...Tenían sus penes totalmente tiesos de la excitación de vernos a las dos en nuestros juegos. Jose se acercó un poco más a Raquel y esta separo sus manos de mí y le agarró del miembro empezando a frotarlo. En otras circunstancias tener dos pollas para nosotras me habría gustado, pero en ese momento las veía como a unas extrañas. Acaba de descubrir que a partir de ese momento el sexo, o mejor dicho, una nueva forma de experimentar el sexo, se abrían delante de mí. Sabia que a partir de ese día experimentaríamos Jordi y yo cosas que no habríamos podido si quiera fantasear, pero en ese momento solo quería una cosa y era a Raquel, no quería nada más. Jordi debió notar algo porque se acerco a mi oído y me pregunto:
-Que te pasa? estas bien?- yo le expliqué lo que pensaba, lo que me sucedía, le dije que estaba dispuesta a partir de ahora a que me mostrara todos los caminos del sexo (el siempre había tenido más imaginación e iniciativa que yo) pero que en ese momento quería disfrutar con y de Raquel, solas ella y yo.
-Vale, pero recuerda que después me lo cobrare!- me dijo mientras se reía...
-Puedes cobrarte lo que quieras... y además con intereses....- Dije yo mientras le besaba en la boca.
-Pues venga disfruta, que yo me llevo a Jose aquí al ladito a disfrutar del espectáculo...
Los dos chicos se retiraron y nos volvieron a dejar solitas. Raquel me miro a los ojos me beso suavemente en los labios y me susurro "así esta mejor, te quiero sola para mi"
Me tumbe sobre ella, sus manos me acariciaban la espalda mientras las mías le separaban en pelo de la cara. Le recorría sus perfectas facciones con la yema de mis dedos...
-Eres preciosa Raquel -le decía mientras no perdía detalle de se rostro. La verdad es que a plena luz del día me parecía una chica preciosa, pero en ese momento a la luz de las velas me parecía increíblemente guapa.
-Sigue besándome por favor -fue su única respuesta...
Mis labios volvieron a juntarse con los suyos, nuestras lengua volvieron a bailar al son de nuestros gemidos, pero ya de una manera mucho mas desbocada. La pasión se había desbordado. Nuestras lenguas ya se juntaban fuera de nuestras bocas, locas de placer. Mis manos empezaron a recorrer su cuerpo. Su camiseta de tirantes apenas podía disimular la forma de sus pechos. Busqué con frenesí meter mis manos debajo de su camiseta, notando el contacto con la piel de su vientre, fui subiendo, cada vez más, hasta llegar a sus pechos. Que maravilla.... mis manos se posaron enteramente en sus pechos, que eran ligeramente más pequeños que los míos. Quería verlos desnudos, quería ver los pechos de otra chica, de esa chica, a mi lado, poder examinarlos, poder besarlos, poder saborearlos...
Le subí la camiseta dejando ver esos dos hermosos pechos. Se la quite, dejándola solo con su pantalón tejano cortado de una manera muy sexy. Me encantaba verla así, sus brazos por encima de su cabeza, su cabeza ladeada a un lado, lamiéndose el brazo con su lengua, su pelo negro, alborotado, cayéndole por la frente y a los lados, sus ojos cerrados... Al tener sus brazos alzados sus pechos quedaban subidos, mas apetecibles aun si cabe, con lo cual no tuve mas remedio que lanzarme a lamer esa aureola negra y pequeña que envolvía el pezón... que gusto... me encantaba lamerle los pezones a Jordi, pero estos eran diferentes, mas grandes, mas sabrosos... los notaba duros dentro de mi boca y los lamía con devoción, primero uno y luego otro, escuchando los gemidos de Raquel a cada mordisquito que le daba...
Mis manos seguían bajando mientras mi lengua jugaba con sus pezones. Llegaron hasta el pantalón y siguieron bajando. Se posaron encima de su sexo cubierto por ese mini tejano que aun lo hacia mas sexy. Mis dedos recorrieron el borde del pantalón y se introdujeron por las oberturas de sus piernas que al estar cortadas tan cortas apenas cubrían nada. Empezaron a explorar el contorno de su sexo, primero los alrededores, pero poco a poco fueron cercando su objetivo, mi objetivo. Empecé a notar su humedad en mis dedos, las yemas toparon con una pequeña cantidad de vello que adornaba la parte superior de su coño. Seguí la línea de sus labios notando cada vez mas humedad hasta que se posaron en su clítoris hinchado. Raquel soltó un gemido. Se lo toque un poco con suavidad... a mi no me gustaba mucho que me hurgaran directamente en el clítoris, llegaba a molestarme y pensé que igual Raquel era como yo, por lo que me seguí bajando mi dedo hasta encontrar la entrada a su vagina.
Introduje lentamente un dedo. Raquel esta vez dejo escapar directamente un chillidito de placer. Seguí metiendo y sacando, cada vez un poquito más rápido, cosa que no era difícil porque al estar tan lubricada resbalaba perfectamente. Pase a introducirle dos dedos, como hacia Jordi conmigo, el tenia una manera de tocarme que hacia que eyaculara (y en bastante cantidad) e intentaba hacer lo mismo que el hacia conmigo. Y supongo que con buen resultado, porque Raquel seguía gimiendo cada vez mas al ritmo que marcaban mis dedos. Al momento los saque de su sexo y me los lleve a la boca...mmmmmm.... tenia un sabor diferente, pero no desagradable, cosa que hizo que dirigiera mi boca a su fuente. Tenía delante de mis ojos el sexo de otra mujer y me encantaba. Sus labios rosados e hinchados, sus poco pelos bien cortados a diferencia de mi que iba totalmente depilada como de costumbre. Su clítoris erecto, como queriendo salir de su capuchón. Quería saborearlo, quería chupar un coño, quería lamer su coño... Pero no sabia como hacerlo, mi única experiencia eran las películas que veía con Jordi y lo que el me hacia a mi, pero hasta ese momento lo que había sentido con esa chica no era ni mejor ni peor que lo que sentía con Jordi, solamente era diferente, así que me olvide de todo y me dije llevar por mi intuición...
Empecé lamiendo la cara interna de sus muslos, acercándome cada vez mas a su sexo, con suaves lametones... llegue a sus labios, que estaban totalmente empapados...
-Sigue por favor... -oía la voz de Raquel desde la distancia que me pedía más... así que abrí con mis dedos sus labios y apareció ante mi un hermoso clítoris y una hermosa vagina. Saque la lengua de mi boca y empecé a lamer... suavemente... de abajo a arriba... saboreando sus jugos... me encantaba su sabor. Mi lengua jugaba con su clítoris, para luego introducirse en su interior y luego repetir la operación... otras veces succionaba sus labios externos al interior de mi boca... otras veces introducía mis dedos dentro de ella. Notaba la mano de Raquel posándose en mi cabeza apretándome más si cabe para que mi lengua se introdujera más en ella. Estaba siendo la experiencia más sensual que había vivido jamás. No recuerdo cuanto tiempo estuve en esa posición, estaba disfrutando muchísimo y no me importaba seguir saboreando a mi amiga, pero un largo gemido de Raquel me indico que había llegado al orgasmo... Sus gritos retumbaron toda la casa y eso me encantaba. Me encantaba darle placer a esa chica, además tenia la esperanza de que si le gustaba pudiéramos repetir mas veces. Yo estaba segura que esa había sido mi primera vez con una chica, pero que seguro no seria la ultima...
-Dios Esther... me ha encantado... -Decía mientras se incorporaba y me besaba- Espero hacerte disfrutar tanto como has echo tu conmigo.... - y dicho esto me recostó a mi sobre los cojines y empezó a desnudarme. Primero la parte de arriba de mi pijama, lentamente me la pasó por la cabeza hasta que quedaron mis pechos al descubierto, mas tarde fueron mis pantalones... Yo estaba en la gloria, no conseguía diferenciar lo que esa chica estaba haciendo conmigo, solo sabia que disfrutaba y muchísimo...
Estaba sumida en un clímax de placer, notaba sus manos masajeando mis pechos, pellizcándome suavemente mis pezones, que en esos momentos estaban durísimos. Alternaba sus caricias con sus besos, notaba sus labios y su lengua recorrer mi aureola rosada. Sus manos se posaron en mi depilado sexo y empezaron a explorarlo...
-mmmmm.... que suave tienes el coño... me encanta acariciártelo... y estoy deseando saborearlo....
-Si! por favor... -fue lo único que pude decir yo mientras notaba como su lengua recorría todo mi cuerpo en dirección a mi húmedo sexo.
Note como su lengua bajaba por mi ombligo y seguía su camino hasta la entrada de mi cueva, allí se paró durante un instante que se me hizo eterno y acto seguido note el contacto de su lengua dentro de mi. Fue como un chispazo, todo el cuerpo se me puso en tensión. A cada movimiento de su lengua mi cuerpo respondía con una convulsión...
-Ohhhhh.... siiiiiii.... - no podía decir otra cosa. Levanté un poco la cabeza para ver lo que esa chica me estaba haciendo y lo que vi se me quedo grabado para siempre en mi cabeza. Su pelo negro colocado entre mis piernas abiertas, sus delicadas pero grandes manos sujetándome las caderas, sus ojos mirando fijamente mi coñito depilado, la visión intermitente de su lengua entrando y saliendo de mi, sus uñas largas y arregladas clavadas en mi piel... tenía una mujer entre mis piernas que me estaba proporcionando el placer más sensual y tierno que había recibido nunca. No se como explicarlo, pero seguro que las mujeres que hayan disfrutado del sexo con otra mujer sabrán a que me refiero. Es una manera de tocarnos, de besarnos, de acariciarnos que solo otra mujer consigue...
No se cuanto rato estuvimos así, si fue mucho o fue poco, perdí la noción del tiempo, del espacio, de todo... hasta que al final note como desde lo mas profundo de mi ve venía un profundo y explosivo orgasmo. No pude reprimir mis gritos, no se lo que dije, no lo recuerdo, solo se que cerré los ojos, apreté mis manos con las suyas entrelazando nuestros dedos y me deje ir...
Raquel se incorporo a mi altura y nos volvimos a besar. Saboree mis propios jugos que todavía quedaban en su boca y disfrute de nuestro sabor...
-Ha sido fantástico -dije...
-Para mí también... -y nos fundimos en un abrazo...
Los dos chicos se nos acercaron a nuestro lado, no dijeron nada en un tiempo, solo se sentaron a nuestro lado y cada uno siguió acariciando a su pareja. Había sido un día especial y sabíamos que nos habría un mundo nuevo de fantasías y sexualidad, que habíamos abierto una puerta que ya no volvería a cerrarse, pero eso son otras historias que ya las contare en otro momento...
Espero que os haya gustado tanto como me gusto a mí...