Nuestro Reencuentro

NUESTRO REENCUENTRO

Nos conocimos el día 14 de enero de 2004 en un hospital. Nos caímos súper bien y comenzamos una linda amistad que luego se convirtió en algo más. En viarias veces tuvimos intimidad y les puedo decir que es un súper amante y en el sexo oral es un experto, entre otras cosas. A la medida que pasaba el tiempo comenzamos a confrontar pequeños problemas y no nos pudimos poner de acuerdo y cada cual se fue por su lado. Después de varios meses nos comunicamos, luego de varias conversaciones decidimos salir nuevamente y darnos una segunda oportunidad.

El día 10 de abril quedo en pasar por mí a mi casa para cenar y conversar un poco. Pasó por mí como a las 7:10 pm después de llevar sus niños a la casa de su ex esposa y emprendimos nuestro destino. Cuando estamos de camino me pregunta:

¿Qué quieres cenar? En realidad yo no tengo hambre, decide tú.

Yo tampoco tengo hambre, vamos hacer el amor primero y después si tenemos hambre vamos a cenar.

A él le encanta que yo sea tan directa con él, le pida que me haga el amor y el control que tengo para hacer lo que yo quiera y como yo quiera. Llegamos al lugar donde yo le dije que fuéramos, porque es un lugar precioso y a ambos nos gusta mucho por la tranquilidad que se respira. Nos dieron el cuarto que pedimos y luego de que el muchacho de servicio nos trajo algo de tomar, nos desvestimos mutuamente como locos bellacos por hacer el amor, con desesperación.

Rápido él me tiro en la cama y me empezó a mamar el chochito como él solamente sabe hacerlo y yo gemía y gemía como loca del gusto hasta que él me introdujo un dedo en el chocho y después dos, tres llevándome al borde de la excitación. Metió y saco los dedos unas cuantas veces, mientras también succionaba mi clítoris hasta que le grite:

Mi amor me vengooooooooooooooooooooo, que ricooooooooooooooo, puñeta. Ahhhhhhhhhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii. Quiero massssssssssssss, Ahhhhhhhhhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiiiiiiiii, mi amorrrrrrrrrrr.

Nos intercambiamos de posición, ahora el estaba acostado en la cama, mientras yo le mamaba la verga bien duro como a él le gusta y me pide que se lo haga así. Le continúa mamando la verga hasta que me dijo:

Mamita quieres mi lecheeeeeeeeeeeeeeeeeee.

Si, mi amor dame tu leche todita en la boca.

Continué mamandole la verga hasta que se trinco de gusto y comenzaron a salir chorros de leche, de la cual no deje perder ni una gota, le deje la verga limpiecita y vacía no le deje ni una gota de semen, me lo trague todo.

Me levante me tome un trago y le di a él uno para que tomara en lo recargábamos energías, pero no pude esperar mucho tiempo. El todavía estaba acostado, le comencé a mamar la verga nuevamente hasta que se le puso bien dura como me gusta a mí.

Papi la tienes como una piedra de dura, como me gusta que estés así.

El me cogió por el pelo y me empezó a besar bien apasionadamente, y con uno de sus dedos en mi chochito tocando me clítoris y mi hoyito lleno de jugos. Se llevo su dedo lleno de mis jugos vaginales a su boca y se lo chupo.

Mamita me encanta como sabes, estas ricaaaaaaaaaaaaaaa y yo bien bellacooooooooooooo.

Aprovechando yo ese momento y me le trepe encima y lo empecé a cabalgar como me hacia falta hacerlo. (llevaba mucho tiempo sin tener sexo) Lo cabalgaba bien duro mientras él me cogía por el pelo y me jalaba diciéndome:

Estas bien estrechita mami y te siento bien bellaca quiero darte por todos lados hasta que nos cansemos. Te quiero comer todaaaaaaaaa. Me encantasssssssssssss.

Seguía cabalgándolo hasta que:

Ahhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiiiii, me voy a venir mi amorrrrrrrrrrrrrrr. Siiiiiiiiiiiiii, ahhhhhhhhhh que ricoooooooooooo. Me vengoooooooooooooooooooo.

Todo mi cuerpo se estremeció de placer, gusto y excitación. Continué temblando un ratito. Fue un orgasmo brutal que nos disfrutamos al máximo. El se puso tan caliente cuando me vio tan excitada y a gusto que en ese mismo momento me dijo:

Mamita ponte en cuatro que ahora voy yo.

Me puse en cuatro. (su posición preferida) Me penetro muy suavemente y ambos nos acomodamos a nuestra comodidad a la posición y el comenzó sus bombeos a mi vagina estrechita que en esa posición lo siento como si me llegara al estomago. Me jalaba por el pelo (me encanta que me jale el pelo) y yo lo miraba por el espejo con mi única carita de bien bellaca y eso lo excitaba muchísimo.

Ahhhhhhhhhhhhh, papi dame duro como tu sabes que me gusta, durooooooooooooooo, siiiiiiiiiiiiiii, ahhhhhhhhhhhh, dame mas duro que me voy a venirrrrrrrrrrrrrrrrrr, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, ahora quiero tu lecheeeeeeeeeeeeeee, quiero tu lecheeeeeeeeeeeeeeeeeeee, dámelaaaaaaaaaaaaa.

Hay mamita vente que yo también me voy a venirrrrrrrrrrrrrrr, ahoraaaaaaaaaaaaaa, siiiiiiiiiiiiiiiiiii, venteeeeeeeeeeeeeeeeeee, mamiiiiiiii.

Nos quedamos tres minutos en la cama y luego nos fuimos a bañar, el me baño a mi y yo a él como era de costumbre hacerlo. Cuando terminamos de bañarnos nos fuimos un rato a la cama y hablamos de lo mucho que nos había gustado la cogida que tuvimos. Nos fuimos calentando yo toque su miembro que ya comenzaba a ponerse dura y botaba su juguito natural, el cual yo chupe con ansias. Me invertí poniendo mi chochito en su cara haciendo un rico 69, mamabamos como locos, yo le masajeaba los testículos y el me metía los dedos como me gusta. Cuando me tenía bien excitada aprovecho la oportunidad para meter uno de sus dedos en mi virgen culo. Cosa que no estoy acostumbrada, pero no me desagrado, al contrario me gusto que tomar la iniciativa. Me perforaba mi chochito y mi culito virgen con sus dedos y me daba lengua bien rico, me seguía dando lengua, lengua, lengua estaba tan excitada que casi no podía respirar.

Papi me gusta lo que me haces quiero venirme ahoraaaaaaaaaaaaaaaaaa, ahhhhhhhhhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiiiiiii, quiero mas, me vengoooooooooooo, quiero massssssssssssssssssssss, ahhhhhhhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, que ricoooooooooooooooo.

Después de venirme le seguí mamando la verga hasta que el también acabo en mi boca

Ahhhhhhhhhhh, que rico, mamita.

Me tome toda su leche sin dejar una gota, la verga le quedo limpiecita. Nos servimos otro trago y conversamos un poco.

Mami te gusto que te metiera el dedo en el culito.

Si, mi amor me encanto, ahora quiero que me comas mi culito virgen que lo he guardado para ti.

Tú sabes que hace tiempo te pedí que me dejaras comer ese culito y te negaste.

Si, pero ahora quiero que me lo comas, pero suave por favor.

Nos empezamos a tocar hasta que estábamos lo suficientemente excitados para lo que nos esperaba. Nos incorporamos yo voluntariamente me puse en cuatro.

Waooooooooo voluntariamente, no sabes cuantas veces he soñado con comerte el culito, lo quiero para mí todito.

Me empezó a mamar el culito y el chocho a la misma vez me daba unos lengüetazos que ya quería venirme de gusto, pero me aguante. Cuando me tenía gimiendo de place me hecho un poco de su saliva en mi culito y comenzó a introducir un dedo en mi ano, después dos me dolía, pero a la misma vez sentía placer, así que lo deje con su trabajo, aguante el dolor todo lo que pude. Ya que sus dedos entraban y salían casi sin dificultad, me dijo:

Estas preparada para comernos ese culito mamita.

Si, mi chulería estoy preparada y quiero que me lo comas.

Saco sus dedos de mi culito, hecho nuevamente un poco de saliva en mi ano y comenzó a penetrarme suavemente. La presión que sentía era inmensa y dolor, pero en mi interior me repetía:

Tu puedes, date ese gusto y dáselo a él.

Así que no dije palabras de dolor, me quede callada. Logro acomodarlo bien dolosamente en mi ano, comenzó el bombeo poco a poco. Ya cuando mi culito se iba acostumbrando a esa verga fui sintiendo placer.

Ahhhhhhhhhhhh, me gusta se siente bien.

Te duele mamita.

Al principio me dolió, pero ya lo que siento mas bien es gusto, me esta gustando, si me envicio no te quejes, tu sabes que yo soy una viciosa del sexo.

Tú sabes que me gusta que seas así.

Siguió con el bombeo en mi ano ya totalmente acostumbrado a esa verga. A la misma vez me apretaba los pezones y mis enormes tetas que son las mas que le gusta por su exagerado tamaño. A mi me encanta que me trate con rudeza y entre mas me apretaba mas me excitaba y comenzó a penetrarme el culo mas duro y mas duro.

Me gustaaaaaaaaaaa, la quieroooooooooooooooo, quiero venirme ahoraaaaaaaaaaaaaaaaaaa, y quiero que te vengas conmigo, estas listo para venirte mi amor.

Si quiero venirme contigo mamita.

Siiiiiiiiiiiiii, quieres venirte conmigo, nos venimos ahoraaaaaaaaaaaaa.

Siiiiiiiiiiiiiiii, mamita, ahoraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, me encantas cogee mi lecheeeeeeeeeeeeeeee en el culitoooooooooooooooooo, cogeeeeeeeeee miiiiiiiiiiiiii lecheeeeeeeeeeeeeeeee en tu culitoooooooooooooooo.

Ya con nuestros orgamos al borde me penetraba mas fuertemente hasta que mi culito quedo inundado con su leche, nos quedamos quietos unos minutos. Cuando se retiro, su leche salía de culito y bajaba hacia mi chochita donde mis jugos y su leche se mezclaban.

Nuestro reencuentro es lo mejor que nos ha pasados. Hemos continuada con nuestros encuentros sexuales y nuevas experiencias pero eso ya serían otros relatos.