Nuestro primer intercambio

PRIMER INTERCAMBIO.

Somos una pareja de Guatemala que hemos gozado de intercambios de parejas y tríos, nuestra primera vez en el intercambio sucedió hace 9 años.

Los nombres que aquí damos no son los reales, aunque cuando hemos contactado parejas damos el nombre real; diremos que mi esposa se llama Claudia y yo Romeo. Actualmente Claudia tiene 42 años y yo 47. Esta y las demás historias que compartiremos son totalmente reales.

Conocimos una pareja a través de Internet la cual contactamos y nos reunimos para conocernos, para identificarlos ella se llamaba Susana y el Manuel, cenamos en un restaurante de la zona 9 de nuestra ciudad, platicamos de los deseos que teníamos de participar en intercambios de parejas y de lo excitante que seria ver a mi pareja teniendo sexo con otro hombre, Manuel nos contó que ellos tenían los mismos deseos pues deseaba ver a su esposa poseída por otro hombre, pasado un tiempo de platicas, el calor y la excitación fueron aumentando, ambas parejas llegamos a la conclusión de que queríamos estar intercambiados.

Nos fuimos a nuestra casa, durante el viaje Claudia se fue con Manuel, luego me contó que durante el camino él le metía su mano dentro de su falda, acariciándole su clítoris y metiéndole el dedo dentro de su húmeda vagina; Susana se fue conmigo en mi vehículo, mientras íbamos en camino aprovechaba a sobar su vagina encima de su pantalón, se sentía deliciosa.

Ya en nuestra casa, Claudia se quedo con Manuel en la sala, yo me fui con Susana a nuestro cuarto, empezamos a besarnos, le acariciaba sus pechos, los cuales eran pequeños pero deliciosos terminados en unos pezones rosados exquisitos, poco a poco nos quitamos la ropa, ella empezó a acariciarme mi pene y yo le metía un dedo dentro de su pusita ( así le decimos aquí a la vagina), sentía como estaba mojada, su pubis tenia unos pelitos deliciosos, finos y un poco depilados. Susana empezó a sobarme con más ganas mi pene, fue bajando poco a poco hasta tomarlo dentro de su boca, mamaba delicioso.

Mientras tanto mi esposa estaba con Manuel en la misma faena, al quedarse solos empezaron a desnudarse, Claudia, a quien le fascina el sexo oral, empezó a mamarle su pene a Manuel. Haciendo un paréntesis Claudia y yo fuimos novios desde que ella tenia 15 años y nos casamos cuando ella cumplió 19, con Manuel era su primer pene que probaba, a parte del mió.

Estábamos con Susana, gozando de la mamada deliciosa que ella me daba, cuando vimos en la puerta del dormitorio a Claudia y Manuel, desnudos, el con su pene bien parado y ella sobandoselo, nos acostamos los cuatro en la cama para compartir nuestra desnudez, fue delicioso ver cuando Manuel le hacia sexo oral a Claudia, verla con sus piernas abiertas siendo mamada en su pusita, igualmente era delicioso mamarle su pusita a Susana, excitaba verlas acostadas las dos juntas siendo mamadas, se sentía el olor delicioso del sexo en la habitación.

Ambas parejas nos pusimos de acuerdo e hicimos un belicoso 69, era delicioso ver a Claudia con su vagina bien húmeda siendo mamada por Manuel, al verla abierta encima de el dándole su mamando su pene, metí un dedo en su ano; mientras acariciaba el ano de Claudia, metía mi lengua en el ano de Susana, se sentí delicioso bien apretado, a cada pasada de mi lengua lo apretaba rico.

Claudia estando excitada pedía ser penetrada por Manuel, quien abrió mas su piernas y las elevo sobre sus hombros para darle una penetrada deliciosa, de mi parte me excito ver como entraba y salía el pene de Manuel de su pusa, era delicioso ver como se hundía y salía dentro de ella. Susana, quien también estaba acostada prefirió ponerse encima mió, fue delicioso sentir como mi pene entraba dentro de ella, pues tenia su pusita un poco mas apretada por ser delgada, mientras la penetraba le acariciaba su ano, metía un dedo en el, era delicioso sentirlo apretado, se movía delicioso hasta que hizo que acabara. Claudia por su parte hacia acabar a Manuel, sacando su pene con el condón lleno de su esperma.

Fue delicioso ver la pusita de Claudia bien mojada de lo caliente que estuvo, el pubis de Susana estaba deliciosamente mojado por el sudor del roce de nuestro cuerpos, después de sacar mi pene de su pusita, volví a mamar su clítoris tan delicioso, era exquisito sentir el olor de su vagina mojada de la excitación, fue delicioso ver sus pezones bien parados y duros. Manuel luego de haber acabado con Claudia, le metió su pene a su mujer volviendo a llenarle su pusita de su semen, era delicioso ver a Susana con sus piernas abiertas y el semen deliciosamente saliendo de su pusa.

Luego de que Susana y Manuel se marcharon volvimos a tener sexo con Claudia, mi pene entraba delicioso en su pusa ya que la tenía bien lubricada, lo que me hizo llenarla de mi semen recordando lo que acababa de pasar.

Después de esa noche estuvimos compartiendo la cama por mas tiempo seguido, durante algunas noches se dio el hacer la doble penetración a cada una de ellas, fue algo delicioso pues mientras penetraba a Claudia en su pusita, Manuel le penetraba su ano, igual tratamiento recibía Susana después.

Con el tiempo ellos tuvieron sus problemas como pareja, por lo que decidimos ambas parejas dejar por un tiempo el intercambio con ellos, de esto han pasado ya ocho años en que ya no hemos gozado con ellos del delicioso placer del sexo compartido entre parejas, aun extraño su boca en mi pene y el sabor de su vagina.

Hemos tenido otras experiencias en intercambio, luego probamos los tríos HMH, MHM y sexo grupal, hay muchas historias que contar las cuales compartiremos poco a poco.

Siempre deseamos conocer nuevas parejas para compartir nuestra sexualidad con ellas, esperamos que en nuestro país se logre romper las barreras que muchas parejas tienen para gozar del sexo compartido.