Nuestro Piso 4, la sorpresa del pizzero
Marti y yo hace tiempo que compartimos piso, las historias que han pasado en el piso y con el han sido memorables. Es la continuación de la historia de nuestra convivencia en el piso. Alberto el pizzero nos trae una pizza y nos las comemos.
Pedí una pizza donde siempre Marti estaba en su habitación jugando con los cascos y no escucho la puerta, como siempre nos la trajo Alberto, al lado de la puerta ya teníamos un albornoz ya qué siempre estábamos en pelotas pero era un corte para el repartidor que le abriéramos en pelotas.
-aqui tienes como siempre-
-gracias, que cara que echas quieres un agua, una cerveza, ..., -
-bueno lo que sí te pido es el baño un momento-
-por supuesto, pasa.- le acompañe al baño y aproveche para decirle a Marti que ya llegó la pizza.
Estaba en la cocina cuando oigo qué Marti dice “hostia perdona” y viene a la cocina
-però que hace él repartidor cascansela en nuestro baño?-
-se la cascaba? Bueno me ha pedido el baño y no me ha parecido mal.-
-es que he entrado en así- el me señala que va desnudo- y claro el cascansela-
-una gran imagen seguro- le digo riendo y quitándome el albornoz entre estas llega Alberto a la cocina, se nos queda mirando -lo siento me tengo que ir a repartir unas cuantas hasta la 1.-
-lo siento yo que te he molestado en medio del trabajo- le dijo Marti
-y con lo que sabemos que jode, jaja.- dije para romper la tensión.
Alberto se fue con lo que veíamos que era una ereccion considerable, continuamos comiendo y nos fuimos a dormir.
Al día siguiente Marti se iba a casa de sus padres el viernes y volvía el lunes así que estaba solo. Al volver por la noche me tiré al sofá y me quede medio dormido al despertarme vi que eran las 12 y pico no tenía ganas de cocinar y recordé que Alberto repartía hasta la 1 llame a la pizzería y la encargué cuando me la trajo que ya era la una y diez, abrí la puerta ya sin albornoz porque total ya lo había visto todo.
-hombre cuanto tiempo!- le dije
-si, aquí tienes-me dijo muy cortado.
-aqui tienes, la última de la noche, no?-
-si ahora ya a casa a cenar-
-como que no has cenado pues pasa que estoy solo y me quedará pizza para aborrecer-
-no se-
-insisto, pasa.-
Al final decidió pasar lleve un par de cervezas al comedor nos tiramos al sofá
-joder hace calor en este piso-
-mira como vamos nosotros, a mi no me importa.-
Se empezó a quitar la ropa a excepción de unos pantalones de moto.
-te puedes sacar los pantalones no me importa- le repito
-no es que... no llevo nada más debajo y me da muy corte.-
-aaa, así que vas en plan comando..., si quieres te presto unos.-
-no se me da cos... corte.-
-e que soy muy limpio, ven.- lo lleve a mi habitación y le di unos -ya sabes donde está el baño- me fui al salón a esperarlo.
-Hostia gracias, estaba asándome.- mientras se sentaba
-joder te quedan mejor que a mi, por cierto las manchitas blancas son de alguna corrida-
-que asco!-
-si me dirás que nunca has manchado unos y a demás tú polla no dice lo mismo.- mientras le sostenía la polla.
-bueno es que me a puesto, te cuento una cosa ayer cuando me fui me tuve que correr en el ascensor-
-así que era tuyo?-
-y al llegar le eche un polvo a mi novia brutal.-
-a me alegro mucho por los dos- no me podía creer que tuviera novia yo ya me imaginaba
-no te preocupes que soy bi y ya le e dicho a mi novia que pasaba la noche en casa de un amigo-
Con esto me había dejado en blanco no me lo hubiera imagino cuando de pronto me planta un beso y empieza a bajar asta llegar el pezon derecho y empieza a chapármelo pasa al otro y repite la operación y sigue bajando me besa el glande y me dice
-come pizza mientras mamo.-
-como?- con una excitacion brutal
-me pone mucho que de mientras la como que coman la pizza que les he traído.- me dice mientras me da un trozo, subí los pies en la mesita del comedor y él se quedó entre mis dos piernas al suelo se notaba que tenía maña con la lengua
-que me vengo-
-espera, aguanta- mientras buscaba algo en la mesilla -ahora dámelo todo- en el último choro se la volvió a meter es una cosa que me encanta y solté un último choro en su boca, no la esperaba ni yo y menos el.
-me parecía que ya avías acabado-
-Yo también pero lo has echo tan bien-
Veo que se come un trozo de pizza - la pizza con leche entra mejor- dice, si, me hizo correr en la pizza que se estaba comiendo -para i siente es mi turno, pero dame un mordisco del mangar-
Mordí la pizza con mi leche y se la empecé a mamar me lo tragué todo le pasaba la lengua con cada chorro que entraba lo cual le ponía más i el siguiente era más intenso asta que eran espasmos sin nada lo tuve un par de minutos así yo pegado como una babosa y él retorciéndose de placer
-dios! Para que no puedo más!-
-Que te a parecido?-
-La mejor con mucha diferencia y que si lo sé entro antes en vuestro piso-
-Yo quiero saber si queda algo más en el bote pero ya no solo con la boca-
-Por su puesto pero después me toca a mi quiero probar esto dentro mío-
Abrió un bolsillo de la bolsa de las pizzas y sacó un bote de lubricante y una tira de condones pensé este sí que va preparado para el trabajo me senté en el reposabrazos del sofá mis piernas en sus hombros y empezó primero despacio y fue acelerando en un momento lo abrazó por el cuello y nos levantamos yo colgado con su polla dentro de pronto dice
-ya-
-dentro mío que llevas cordón- me ponía y es una cosa que no se suele hacer y les encanta la sensación de correrse dentro, y no me equivoque le encanto me tiro en el sofá se iba a quitar el cordón -no esto ya lo hago yo- se lo quito le limpio con la lengua me levanto y me tiro el contenido del cordón en la boca y a continuación lo beso note que le volvió la ereccion -ahora me toca a mi- le susurre en la oreja. Lo subí en la mesa del comedor y allí se la metí de una sentada pego un grito de dolor que al poco lo cambio a placer seguimos un raro en la mesa asta que se la saque y me lo lleve a mi habitación allí me estire y él se sentó encima de mi a cabalgar en cima hacía un girito que me estaba encantando.
-que me vengo-
-perfecto-me dice mientras noto que aprieta un poco y intensifica la subida, bajada y los guiritos me vine con unos espasmos que se la clave hasta el fondo, los gritos de placer de los dos se mezclaron a la perfección.
-bua, genial, lo tendremos que repetir-
-déjame recuperar queda mucha noche- dijo entre sollozos y risas
-joder yo me refería a otro día pero también me apunto-
Estuvimos una hora más dándole allá a las tres y media caímos rendidos y nos dormimos allá las 9 me desperté mientras Alberto me la estaba mamando
-todos los días serían buenos con un despertador así-
-buenos días he aprovechado el empalme mañanero, te he despertado?-
-un poco pero no me importa qué me despierten así- lo cogí de la pierna para llenarme su polla a la boca terminamos en un perfecto 69 he incluso sincronizado las corridas me beso dejando caer toda mi leche en mi boca que aún tenía la suya se mezclaron y me las tragué Albert me dijo al oído -la próxima vez la leche me toca a mi-
-perfecto quizás esta noche también toca pizza-
-pedidla a las done y media y seréis la última la traigo y ya me quedo-
-joder a Marti le va encantar llamas te hacen la comida y encima traen pizza, jajaja.-
-telemamada para servirle, jaja.-
Nos duchamos y él se fue que su novia lo estaba buscando ya. El martes le expliqué a Marti mi aventura con el repartidor se quedó a cuadros y le veía la cara de envidia lo único que no le expliqué es que si queríamos algo más lo llamaros a las 12:30 esto me lo guardaba para mi y una sorpresa a él.