Nuestro nuevo amigo el canario

De sufrir un tiròn a una buena sesiòn de sexo.

FERNANDO, paso a relataros lo acontecido:

Aparcamos nuestro coche cerca de la castellana para ir a comer a un restaurante de la zona. De repente, Marta (mi mujer) notò un tiròn en

El bolso y un muchacho saliò corriendo con èl. Intentè perseguirlo mientras gritabamos. A unos cien metros, un joven negro intercepto

El paso. El ladrón soltò el bolso y continuò su carrera . Al llegar donde

Habia caido el bolso interrumpimos nuestra cabalgada. El muchacho

De color lo recogio y se lo entrego a Marta y esta le dio las gracias

Y se quejo del tiròn y de la inseguridad de las calles a pleno dia, le

Invitamos a tomar algo al joven el cual aceptò nos tomamos unas cervezas y nos explico que era estudiante y que los fines de semana

Aprovechaba para viajar, y seguidamente le invitamos para vernos luego y cenar le parecio bien y se marcho. Luego comiendo Marta y

Yo comentamos lo agradable que era Pol el muchacho mediria alrededor de un metro ochenta, de complexión deportiva y facciones suaves y agradables.

Ya por la noche nos encontramos con Pol en una terraza, Marta llevaba un vestido azul y balnco, de escote cruzado que cuando se inclinaba se abrià graciosamente, dejando ver parte de sus tetas se

Habia maquillado y perfumado suavmente. Solo cruzando la calle entramos al restaurante en el cual cenamos muy bien y la conversación fue muy agradable ya que Pol tenia un gran nivel cultural y humano. Después de cenar nos dirigimos a una discoteca. Bailamos

Y tomamos un par de copas. A continuación propuseir a dar una vulta. Le enseñamos la ciudad de noche: travestis, prostitutas, chulos….. Màs tarde, sin consultar a nadie, dirigì el coche a club de habian abierto recientemente, muy cerca saludamos a la relaciones publica y nos sentamos en còmodo sofà. Marta me susurrò al oido que me habia pasado trayendo a Pol a un lugar como aquel. Se lo comentè a Pol y este me dijo que hay que conocerlo todo, aunque confeso que no habia estado nunca en un sitio como este, se acerco a nosotros la

Relaciones publicas y aproveche la ocasión para desabrocharle la blusa y descubrir sus hermosas tetas, Pol alucinaba y ya lanzado le dije ves a esta mujer tan simpatica pues no le molesta en absoluto

Que le toques las tetas como yo lo hago Pol no se atrevio y me vi obligado a acompañarle las manos hasta los pezones de la relaciones publicas………….. En la pista y en las mesas cercanas la gente iba a

Lo suyo y los mas lanzados se magreaban como desesperados. En el otro sofà, una chica muy rubia, con la blusa abierta, enseñaba completamente los pechos. Su acompañante le acariciaba los muslos mientras eela le pajeaba con suavidad. Agarre la mano de la chica rubia y la guie hasta la bragueta de Pol , en la que se adivinaba un bulto impresionante. La rubia le bajo la cremallera y extrajo una polla oscura de respetables dimensiones. Yo cambie de lugar y me sentè al lado de Marta. Le bajè los hombros del vestido. Se resistio al principio pero luego, poco a poco, accediò, debido seguramente a la morreada que le estaba metiendo. Terminè por sacarle las tetas a mi mujer y observè a Pol, cuya excitación aumentaba por momentos. Cogi la mano de Marta y la llevè hasta la picha del negro. La agarro con fuerza, mientras la rubia se dedicaba a acariciarles los huevos. Baje mi mano hasta lapierna de Marta y empecè a subirle la falda. Le abrì laspiernas, coloque mi mano sobre su coño y empecè a acariciarle el clítoris. Se mojo enseguida y aprovechè para quitarle las bragas, algo a lo que no puso incoveniente. Pol se levantò, disculpàndose, y comènto que tenia que ir al lavabo. Al quedarnos solos empece a susurrarle guarradas a mi mujer mientras seguìa frotàndole la pipa,. La chica rubia se acrecò un poco mas y acaricio las tetas de Marta. Pol regresò a los pocos minutos. Propuse que fueramos a bailar para (respirar un momento) Marta se levantò, colocandose los tirantes del

Vestido, y se llevo a Pol a la pista. Observè como se apretaba a èl y se besaban. Regresaròn pronto y Marta me comentò en voz baja que Pol habia ido al lavabo ( porque se habia corrido). Sin permitir que se

Sentara, otra vez le bajè los tirantes hasta quitarle el vestido. Quedò completamente desnuda. Me sentè en el sofa, apoyando mi espalda en la pared y la hice arrodillar. Le dije que me la chupara. Lo hizo rapidamente y al mismo tiempo le indique a Pol que la penetrara por

Detrás. El negro a tope de fuerzas, se bajò los pantalones e hizo lo que le dije….. Marta empezo a gemir como nunca lo habia hecho. Movia el culo acompasadamente y me hizo la mejor mamada de mi vida. Supuse que sus corridas eran comntinuas, pero no creì qure Pol estuviera en condiciones de aguantar mucho. Si ya se habia corrido una vez, er mejor reservarlo. Me detuve para cambiaas de posición.

Marta estaba excitadisima y jamàs la habia visto de auqella manera. Respiraba entrecortada y aceleradamente. Cuando tuvo a Pol delante,cogio su polla y se la entriujo en la boca sin dudarlo un momento un momento y acariciandole el culo y los cojones con las manos. Entretanto yo la penetre por dentras a ritmo muy suave paro no cansarme. Al limite de su resistencia, Pol eyaculo en la boca de Marta, la cual, al darse cuenta, lo abrazo procurando no moverse tanto. A los pocos minutos, Pol se aparto de ella con la verga completamente seca,. Marta se habia tragado toda su leche. Nos sentamos un momento. Y Marta me susurrò que nunca habia bebido

Tanto semen de una sola corrida. Le contestè que todavía le quedaba el mio. Se arrodillo ante mis piernas y atrapo mi nabo con su boca y empezo a moverse mientras con la mano acariciaba otra vez el pene de Pol, qyue se recobraba por momentos. Al borde de mis fuerzas, aparteunos centímetros la boca de Marta de mi picha y mientras la muy puta mentenia la boca abierta, me corri dentro. Luego de dejo limpio a lametazos. …. La chica rubia, que habia intervenido minimamente, esperaba que alguien le hiciera caso. Le dije a Pol que se dedicara a ella. Pero Marta considero que tambien podia dedicarse a la rubia. Se arrodillo a sus pies, le abrio las piernas y empezòa comerle el clítoris. Opinè que necesitaba ayuda. Pol por un lado y yo por el otro, procedimos a besarle y acariciarle las tetas.La corrida de la rubia fue de las que hacen epoca…. Para llegar a disfrutar de un episodio como el relatado he necesitado que trancirrieran diez años. Ahora Marta tiene 32 y yo 43.