Nuestro amor no morirá (8)

...Sabes que te expones a un gran peligro si no se lo cuentas que hará si un día

Hola a todos perdon por la demora, pero eh tenido algunos cosas que hacer, dentro de poco entrare a la universidad y bueno me estoy preparando para mi exmamen así que desenme suerte jaja pero bueno saliendo del tema, ya mera acaba la primer temporada de "Nuestro amor no morira" bueno aquie como que la trama se empieza a poner caliente jaja bueno espero que les guste, esta vez revise el relato y y si ven por ahi una que otra falta de ortogrfía les pido diculpas y bueno que lo disfruten tratare de subir el otro dentro de 8 o 15 dias vale, espero sus valoraciones y comentarios ya que bueno eso me ayudara a mejorar jaja no importa si es bueno o malo su comentario, recuerden que aqui el lector es el que disfruta vale. Saludos

Capitulo 8 – “Boyfriend”

Adair

La fría lluvia me acompañaba en mi andar, el clima había cambiado tan repentinamente que no me esperaba esto, el frio gélido recorría todo mi cuerpo de pies a cabeza, mi aliento convertido en vaho se disipaba al contacto con la atmosfera, mi chamarra de empapada que estaba ya no me calentaba, la lluvia camuflajeaba mis lagrimas, había esperado con ansias esta día para verla y cuál fue mi sorpresa encontrarla besándose con otro tipo, pero no podía derrumbarme, el mundo no se acaba por una chica, “pero el mío si” pensé, ya no sabía si lo que es cuerria por mis mejillas era la lluvia o mis lagrimas, ya no quería pensar más en aquello así que decidí correr, no me importaba lo que me sucediera, solo quería morirme.

Hola a todos, mi nombre es Adair, tengo 21 años, soy de tez blanca y cabello negro, he ido con mis amigos al gimnasio pero no me interesa tener un cuerpo de modelo, estoy marcado y todo pero use el gimnasio para tener condición ya que practico natación, de mis tres amigos yo soy el que tiene el humor mas bromista y el que siempre los anda sacando de apuros a esos dos, ya que la muerte de mis padres me ha hecho madurar a temprana edad. Tengo un secreto, el cual nadie sabe, me gusta un hombre, el único hombre por el cual he sentido una fuerte atracción, Iván, así es el hermano o medio hermano de mi mejor amigo Joaco, por eso es un secreto del cual me perturba toda mi vida…

Brandon

Un frio gélido que hiso que me estremeciera provoco que me despertara, mis oídos vislumbraron atreves de la ventana el caer de la lluvia, pero…algo rebullo en mi pecho, gire mi cabeza para verlo, y ahí estaba, aferrado a mí, su tersa piel rozaba mi pecho, podía ver como en su rostro se dibujaba una sonrisa, pero tal vez solo sea la sombra, en mi rostro se dibujo una sonrisa al recordar las últimas palabras de mi novio, “Me prometes que estarás siempre conmigo, que nunca me dejaras solo”, claro que nunca lo dejaría solo, el es todo lo que yo amo en este mundo y aunque la tarde no haya sido muy romántica como lo había pensado pero aun así fue romántica. Me había levantado para sacar otra cobija del armario, ya que como estaba lloviendo de seguro haría frio, mire la pantalla de mi celular y vi que eran las 12:00a.m no era muy tarde así que después de agarrar la cobije me fui directo a la cama, extendí la cobija por encima y me metí dentro de ellas con cuidado para no despertar a Iván, mis brazos rodearon su desnudo cuerpo para darle calor, no quería que se enfermara, bese su cabeza con un tierno beso y le dije forma de susurro “descansa amor”.

Iván

Un sonido hiso despertarme, gire mi cabeza para encontrar la fuente del sonido y la vio brillando en la mesita de noche de Brandon, estire mi brazo para alcanzarla y lograr apagar la alarma de mi móvil, “las 5:00” pensé, tendría que irme a cambiar lo antes posible para irme al colegio, me levante de la cama y gire para ver a mi novio durmiendo, era hermoso verlo en estado de relajación así que opte por darle un beso en la mejilla. Recogí mi ropa del suelo y al hacerlo me sonroje al pensar en lo que habíamos hecho ayer, por fin éramos uno solo, no de la forma que me lo esperaba pero lo éramos. Me vestí sin hacer mucho ruido para no despertar a Brandon, mire hacia el escritorio en el cual se encontraba un cuaderno, tomo una hoja limpia de este y un bolígrafo de por ahí, y escribí un mensaje a mi novio, “Mi amor perdón por haberme ido, perdón por no despertar a tu lado pero debí ir por ropa, te veo en clase”, algo que me encantaba de mi escuela era que tenia a Brandon en el mismo salón que yo, y eso era grandioso. Salí de la habitación sin cerrar bien la puerta para no hacer mucho ruido, me puse la chamarra y emprendí mi paso hacia la puerta cuando…

-          ¿Por qué no desayunas algo antes de irte? – aquella voz no era de mi novio, aquella voz femenina solo podía ser de una persona

-          Ah, ¡buenos días señora! yo este…

-          ¿Señora? Que va, no me llames así por favor, llámame Sara que así me siento menos vieja, ¿Cuál es tu nombre hijo?

-          Iván, me llamo Iván

-          Mucho gusto Iván – me dijo extendiéndome la mano la cual yo apreté correspondiendo al saludo – y dime eres novio de mi hijo – en su rostro se dibujaba una sonrisa de picardía, lo que provoco que me sonrojara un poco.

-          Emm…bueno…como decirlo…pues….si

-          Ya lo sabía, los vi durmiendo cuando llegue – ¿qué? – no te preocupes, de hecho me hace muy feliz que estés a su lado, el divorcio lo ha dejado destrozado, hay días en los que no dormía, no comía o a veces ni salir de su cama quería, pero un día de volver de dar una vuelta por la ciudad llego con una cara que pensé que no volvería a verla en mi vida, al día siguiente salió de la casa a la misma hora de ayer, pero con esa sonrisa en su rostro, lo que supuse que había conocido a alguien, y mira no estaba equivocada.

-          ¿Ha, entonces él salió al siguiente día?

-          Así es, bueno luego hablamos con más calma como se conocieron ya que te estoy quitando tu tiempo, abrígate Iván que anoche cayo un diluvio, a Iván prométeme que cuidaras de mi hijo, que pase lo que pase siempre estarás ahí con él, que nunca lo dejaras solo, prométemelo.

-          Se lo prometo, Sara, yo cuidare de su hijo.

Salí del edificio y de inmediato me puse a andar en dirección a mi casa, el frio me estaba matando, tiritaba a más no poder, el frio lastimaba mis ojos, por lo que opte por caminar más rápido. Después de cuarenta y cinco minutos, por fin estaba en mi casa, subí corriendo a mi habitación, cerré tras de mí la puerta y me metí al baño, abrí la llave para que el agua caliente saliera, me despoje de mi ropa y la eche al tambo, en ese momento mi cuerpo desnudo quedo reflejado en el espejo, podía ver pequeñas marcas rojas de lo vivido ayer, pero hubo otra cosa que me llamo la atención, mi rostro, se veía…confundido, en ese momento recordé las palabras que Sara me había dicho, “…que pase lo que pase siempre estarás ahí con él, que nunca lo dejaras solo…”, ‘’¿Qué habrá querido decir con eso?. Fui sacado se mis pensamientos por el vapor de agua que se condensaba en el espejo del baño, cerré el cancel tras de mi dejándome envolver en el agua caliente que recorría mi cuerpo, las gotas recorrían mi cuerpo como unas finas manos, el agua siempre hacia despejarme, pero esta vez no lo logro, en mi mente seguían aquellas palabras con las que me había despedido de la mamá de Brandon, esas simple palabras deben tener algún significado en particular pero… ¿Cuál? Deje que el agua me tranquilizara, trate que esas palabras se desvanecieran pero no lograron irse por completo, pase el jabón por mi cuerpo, la espuma resbalaba por este como una cascada y que hacia un mar blanco en el fondo, no iba a dejar que me consumieran esas palabras, tal vez solo lo dijo por decirlo, así que ¿cuál era el problema?

Salí de la ducha, el frio de la mañana aun predominaba en la atmosfera, con una toalla amarrada en la cintura me dirigí en busca de mi ropa, saque unos jeans, una palayera de cuello V de rayas blanco y negro, una camisa de tipo mezclilla manga corta, una chalina entre gris y café y mis tenis, está dispuesto a vestirme cuando escucho mi celular sonar.

Esteban

Había dormido en el kiosco del parque, le peor noche que eh tenido en toda mi vida, Brando me las iba a pagar cuando lo encontrara. Había pasado frio, hambre,  mi ropa estaba mojada de la lluvia torrencial que había caído anoche, y ahora me encontraba otra vez sin rumbo. Decidí volver a marcar para ver si tenía suerte de nuevo, marque el numero, tres veces sonó y de inmediato una voz me contesto.

-          ¿Bueno? – Gracias a dios pensé, aquella voz no era de mi amigo sino que era de…

-          Hola Sara, habla Esteban

-          Esteban hijo, te esperábamos desde hace dos días ¿que pase?

-          Ah lo siento, pero han sucedido cosas – y valla que cosas.

-          A bueno ¿pero ya estás aquí no?

-          Si ya solo que no encuentro la dirección

-          A no te preocupes te la doy

Rápido saque una hoja de papel y un bolígrafo y como pude tome nota de la dirección, después de terminar de hablar corrí para coger un taxi el cual no tarde mucho en esperar, al entrar en este me sentía aliviado, agradecía de que  Sara haya contestado el móvil.

Brandon

Unas sacudidas me hicieron despertar de mi profundo sueño, al abrir mis ojos vi que Iván no estaba a mi lado, por lo que pensé que era él el que me movía, gire mi cabeza para encontrarme con sus ojos pero con lo que me encontré fue con mi madre, como pude me tape con las cobijas ya que en esos momentos me encontraba desnudo.

-          Tranquilo, que fui yo quien te bañaba cuando eras pequeño – me dijo mi madre – levántate que se te ara tarde para el colegio – mire mi reloj y vi que eran cuarto para las siete, con la sabana tapándome me levante, cuando estuve a punto de salir mi medre me observaba con una sonrisa en el rostro – Muy majo tu novio ehh

-          ¿Qué?

-          Tu novio salió desde muy temprano de la casa, ah y Esteban llamo hoy llega – después de esa pequeña charla mira en mi escritorio n cuaderno abierto, me dirigí a él y vi el mensaje de Iván, corrí por mi móvil y le envié un mensaje diciéndole, “Hola amor, cuando llegues al colegio no entres, quiero que entremos juntos, te amo un beso”.

Después de envíalo corrí hacia el baño, abrí la llave del agua y me sumergí en el chorro, el agua fría al contacto con mi piel hiso que me estremeciera, pero no me importaba quería llegar antes para darle una sorpresa. Me había bañado lo más rápido posible, me dispuse a vestirme con lo que primero que encontraba, tome una gabardina y una bufanda, acomode mi mochila, tomo un poco de dinero y me dirigí de nueva cuenta al baño, cepillé mis dientes y me peine con un peonado estilo surfero, salí de este y emprendí mi caminar rápido hacia la salida, tenía la mano agarrada a la manija de la puerta cuando mi andar es interrumpido por mi madre.

-          Gran combinación eh – me dijo un poco risueña.

-          Gracias – le dije, la verdad es que no tenía tiempo de conversar ya que tenía prisa

-          Sabes que no debes de agitarte mucho ¿verdad? – aquellas palabras me habían sacado de mis casillas, algo me estaba oprimiendo el pecho, esa sensación cuando quieres llorar pero no puedes – ¿se los has dicho? – la voz de mi madre ya no era de una mujer alegre, había pasado a ser la de una mujer preocupada.

-          No y no pienso hacerlo – mi voz sonaba cortada, aquel nudo en la garganta me impedía hablar claramente.

-          Sabes que te expones a un gran peligro si no se lo cuentas que hará si un día…

-          ¡Basta! – la interrumpí – se lo diré en el momento adecuado, mientras tanto quiero disfrutar de mi vida, por favor, mi vida sin preocupaciones.

-          De acuerdo

Fue lo último que escuche, las lagrimas surcaban mis ojos una tras otra, había un secreto que solo mi familia y mi hermano del alma Esteban sabían, pero dentro de poco Iván también, pero no ahora. Como pude logre llegar a una florería, mis ojos aun estaban algo hinchados pero no me importo, en el local pedí un ramo de orquídeas y rosas, cuando pague mire mi reloj y vi que tenia 15 min antes del toque de entrada, así que a paso presuroso me dirigí hacia la escuela.

Cuando llegue a esta el portón de entrada estaba ya abierto, busque con la mirada a mi novio pero no lo vi por ningún lado así que opte por esperarlo, no tarde mucho en reconocer su figura a lo lejos, se veía muy guapo con la ropa que traía puesta, no puede evitar sonreír. Me despegue de la pared de donde estaba recargado y fui a su encuentro, este al verme corrió con una sonrisa en su rostro y cuando estuvo cerca de mi salto y se colgó en mí sujetándose de sus piernas mientras me regalaba un tierno beso.

-          Y ahora, ¿por qué esa bienvenida? – le pregunte pegando mi frente con la de el

-          Que, no puedo

-          No claro que si puedes, pero que tal si te caes cuando corres, no quiero que te hagas daño Iván

-          No te preocupes (beso) por eso te tengo a ti, porque si me caigo, se que iras a ver como estoy.

-          Hay que eres, un tipo de adivino – le dije con una sonrisa seguido de un tierno beso

-          Oye, ¿y esas flores? – me pregunto mi Iván

-          Oh, son para una persona muy especial, una persona muy hermosa que hasta los mismos ángeles sienten envidia

-          Así y ¿quién es esa persona? – estaba claro que el ya sabía la respuesta pero le gustaba hacer drama.

-          Pues esa persona es mi novio – acto seguido levante el brazo con el que cargaba las flores y se los entregue a Iván.

El timbre había sonado y como almas que lleva el viento corrimos para entrar en nuestra clase.

Iván

No sabía cómo agradecerle por las rosas a Brandon, pero no sabía dónde ponerlas ya que el ramo era algo grande, así que le dije al conserje que si me las cuidaba, y el muy amablemente acepto. Brandon y yo corrimos agarrados de la mano hacia nuestra clase, la primera hora teníamos Ingles así que estaría en el edificio de idiomas. Al llegar al salón vimos que ya nadie se encontraba fuera de este, “mierda” pensé, pero como era primera vez que nos tocaba ingles seguro que daría su sermón de cómo trabajaría, típico, al entrar en el salón todos nos observaban de pies a cabeza, la verdad me incomodaba cuando alguien llegaba tarde y todos lo/a observaban como un fenómeno.

-          Córdova Núñez and  Ramirez Prado? – habia preguntado la maestra, estuve a punto de contestar pero Brandon me gano el turno

-          Ah, no, I’m Lozada.

-          Oh yes, come and sit please, the seats are sorted by last name –no entiendo como había podido lograr pasar de curso si no entendía nada el Ingles. Creo que Brandon vi mi cara de”what” y me tradujo lo que la profesora había dicho, no quería que nos separaran, quería estar junto a mi novio todo el día pero, que podía hacer. Mi asiento estaba situado en la primera fila hasta el final,  la verdad no me gustaban los asientos de hasta el final, siempre me distraía. No tuve otra elección más que aceptar, pude ver que Brandon se sentaba en las filas de en medio, saludo a un chico, tal vez de su Taller Tecnológico o que se yo.

-          Good morning guys, I’m the teacher Samantha… - la profesora había empezado su discurso.

Mire de reojo a Brandon el cual me observaba con cara de niño regañado, no pude evitarlo y una sonrisa se dibujo en mi rostro, volví a prestar atención a la clase pero no le entendía ya que todo lo hablaba en ingles, en ese momento se cruzo la imagen de Joaco, hace dos que no lo veía y en la mañana no quise despertarlo así que no se si este bien o este en la casa, algo hiso salirme de aquellas dudas, el chico que tenia alado me miraba con una sonrisa de oreja a oreja mientras me extendía su mano con un papel dentro de ella.

-          Mmm, te lo mando el chico con el que entraste – me dijo mientras me entregaba el papel.

Abrí el papel, y cual fue si sorpresa, un mensaje de media cuartilla de Brandon “Te necesito cerca de mí, no quiero que estés tan separado de mi, pero bueno la siguiente hora toca gimnasia así que bueno por lo menos te podre abrazar ahí, pero enserio quisiera que estuvieras aquí a mi lado, te amo Iván, te mando un beso desde acá”. De nueva cuenta una sonrisa se había dibujado en mi rostro, me sentía un idiota al hacerlo pero no me importaba

-          ¿es tu novio? – logre escuchar, gire para ver quién me había preguntado eso

-          Si, ¿porque algún problema? – le dije algo molesto, apenas era mi segundo y ya hiba a tener problemas.

-          No por nada, tranquilo, no te estoy ofendiendo, descuida mi hermano es gay, así que bueno no debes porque preocuparte, yo no te voy a ofender – ups creo que me había equivocado

-          No descuida, perdóname por haber reaccionado así

-          No perdóname a mí por llegar así de la anda a interrogarte, mi nombre es Rafael – seguido de esto me extendió su mano  a lo cual yo correspondí diciéndole mi nombre – y bueno espero que seamos amigos de ahora en adelante ya que tu eres la primer persona con la que hablo

-          ¡No!, ¿enserio?, no te creo

-          Pues créelo, soy algo tímido para hacer amigos, así que bueno.

-          Descuida claro que podemos ser amigos, de hecho también eres mi primer amigo.

Lo que restaba de la clase no preste atención, estuve hablando con Rafa, él era un chico guapo algo alto y muy divertido, tal vez si podría congeniar con él. El timbre sonó para avisar que la clase había terminado, todos tomamos nuestras cosas y nos dirigimos hacia el gimnasio para la siguiente clase, vi como Brandon era arrastrado por el amigo con el que había hablado en la mañana, la verdad es que me puse algo celoso, pero sabía que debía dejarle su espacio a él también así que opte por irme con Rafa.

-          Y dime Iván cuanto tiempo llevas con…

-          Brandon, bueno llevo dos días

-          Ow, enserio, bueno se ve que te quiere mucho – quería saber que lo hacía decir eso así que decidí seguir con la plática.

-           ¿Por qué lo dices? –le pregunte

-          Por la forma en que te mira, cuando cruzaron miradas en la clase, pude ver un brillo en sus ojos, es como el brillo que veo en los ojos de mi hermano cuando ve a su novio, el mismo brillo que veo en el novio de mi hermano, por eso supuse que eran novio.

-          Ah, enserio te diste cuenta de eso

-          Claro, y mira como te dije antes, yo no te criticare de acuerdo, tu eres mi primer amigo y bueno creo que te puedo considerar el mejor – un pequeño rubor se había dibujado en mi rostro, sentí como Rafa pasaba su brazo por mis hombre y hacia ese típico abrazo entre amigos, yo pase mi brazo por su cintura para corresponderle aquel abrazo.

Llegamos a los vestidores y busque con la mirada a Brandon, pero no lo encontré así que de nueva cuenta me fui con Rafa, no es que me desagrade su presencia pero quería ver a mi novio aunque sea una vez.

-          Jaja bueno perdón por quitarte tu tiempo con él – me dijo algo sonriendo como en broma.

-          Ah, no te preocupes, también debo darle su espacio.

Rafa se quito la camisa que llevaba, su cuerpo estaba trabajado, tal vez como el de Brandon, pero lo que lo diferenciaba era su piel blanca. Desperté de aquel sueño, y me dispuse a cambiarme, llevaba un short y una playera de tirantes en mi mochila, así que empecé a despojarme de mi ropa, el frio hiso que un escalofrió recorrió mi cuerpo, mi piel se me había puesto de gallina.

-          Jaja ¿frio verdad?

-          Si

Cuando hube terminado ambos salimos para encontrarnos con los demás, el profesor empezó a darnos algunas instrucciones, unas cuantas reglas y nos puso los ejercicios, todos eran en parejas así que me toco hacerlos con Rafa, el chico me agradaba, era muy divertido y amable, y además me consideraba su mejor amigo. Veía a Brandon de reojo para ver en donde se encontraba, lo vi haciendo pareja con aquel chico de la mañana, me encantaba verlo hacer ejercicio, como sus músculos se tensan cuando hace esfuerzo, el se dio cuenta de que lo veía y correspondió mi mirada con una sonrisa.

Las siguientes horas se me habían hecho eternas, pero por fin quedaba el receso, tenía ganas de relajarme de todo el ajetreo vivido en la mañana, me encontraba con mi amigo Rafa cuando Brandon llego de improviso con un rostro de agotamiento.

-          Uff no bueno tenía ganas de…ah hola perdón por interrumpir

-          No pasa nada, soy Rafa, y tú debes ser Brandon, Iván me ha estado contando sobre ti – no pude evitar sonrojarme

-          ¿A si Y que te a contado exactamente? – en la voz de Brandon se oía picardía.

-          Todo absolutamente todo, y quédate tranquilo, yo cuidare de tu novio cuando tu no puedas, te lo prometo, bueno Iván nos vemos en clase, hasta luego Brandon – Aquella pequeña charla me había sonrojado más

-          Bueno creo que debes presentarme a tu amigo ¿no crees?

-          Jaja, bueno solo si quieres

-          ¿no estás molesto?

-          Mmm no porque tendría que estarlo – le dije

-          Pues no sé, no estuve contigo medio día así que me dio la impresión de que te habías molestado.

-          Brandon no, como crees, además tú tienes tu espacio también, no te preocupes.

-          Bueno –sus brazos me rodearon, me encantaba estar asi con él – bueno y ¿quién era tu amigo?

-          Mi mejor amigo Rafael.

-          Ah, tan rápido y con mejor amigo, espero que no me cambies ¡eh!

-          Claro que no, el nunca podrá remplazarte

-          Bueno confiare en ti, bueno, oye que te parece si nos vamos los tres a tu casa, así sirve que lo conozco mejor ¿no?

-          Bueno déjame ver si quiere

El resto del receso me la pase abrazado a Brandon, hasta que termino el receso y nos fuimos a la siguiente clase, en esta le pregunte a Rafa si quería irse con nosotros y el muy encantado acepto.

A la hora de la salida, los tres salimos juntos, Brandon y Rafa hablaban de cómo me habían conocido, y no pude evitar sonrojarme. Al estar a pocos metros de casa un nudo en el estomago me hiso estremecer, ¿Qué actitud tomaría Joaquín al ver a Brandon?, ya que creo que no le caía muy bien que digamos. Rogaba por qué no hiciera uno de sus numeritos.

Joaco

Estaba preparando la comida para cuando llegara Iván, Axel me ayudaba a picar verduras y a poner la mesa, habían pasado casi cuarenta y ocho horas de que no veía a Iván, pero hablar con Axel sobre el tema me había tranquilizado algo.

-          Oye, creo que ya llego, venga vamos tío apresúrate con la sopa – me dijo Axel casi regañándome, o bueno creo que si era un regaño.

A los pocos minutos después escuche aquella tierna voz avisando que ya estaba en casa, Axel y yo salimos a su encuentro y cuál fue el encuentro, encontrarme con aquel criajo y otro tío que no sabía quién era.

-          Mmm, bueno Axel, Joaco, ellos son Rafa y Brandon, Brandon, Rafa ellos son Joaco mi hermano y Axel su amigo – Axel fue el único que correspondió el saludo, como se atrevía a traerlo a casa. Sentí un pequeño golpe en mi brazo, gire para ver que sucedía y en la cara de mi amigo veía su expresión de “anda”.

-          Bueno, llegan a tiempo para comer, venga váyanse a lavar las manos.

Durante la comida reinaba un silencio absoluto, debes en cuando su amigo Rafa e Iván intercambiaban comentarios, pero Brandon se quedaba al margen de la conversación. Cuando todos terminaron, recogí los platos y los lleve al lava trastes, cuando siento una mano en el hombre que hiso que me espantara.

-          Joder, tío no me espantes así quiere – le dije a Axel con una expresión fulminante

-          Perdóname la vida pero oye, ¿Qué vas hacer?

-          ¿Qué voy hacer de qué?

-          De lo que platicaste en la mañana

-          A eso, bueno…

-          Axel, Joaco, enseguida volvemos – tras esto salí disparado en su encuentro, los tres estaban a punto de salir cuando los detengo.

-          Espera un momento, Brandon, debo hablar contigo

Se me había hecho un nudo en la garganta, hablaría con el novio de la persona que me gustaba y eso no era muy recomfortable.