Nuestra primera vez en pub liberal

La rutina de madrugar entre semana hace que el fin de semana también te despiertes pronto. Eso es lo que nos paso a mi pareja y a mi aquel fin de semana que nos le habíamos tomado de respiro, sin niños, etc.

El sol entro pronto por las ventanas del hotel en que nos habíamos hospedado, una bonita ciudad del norte aguardaba para nosotros el fin de semana, bares, playa, copas, en fin lo que se puede permitir un matrimonio de vez en cuando.

Nos mal vestimos para bajar a desayunar, era tan pronto que la idea era volver a subir a la habitación.

Regresamos a la habitación y cojemos el ordenador para buscar por la zona alguna playa nudista, teníamos la idea de ya que estábamos en una ciudad desconocida probar este tipo de playas, nos excitaba la idea de bañarnos en el agua como dios nos trajo al mundo. Despues de mucho buscar no encontramos nada que nos convenciera asi que obtamos por una playa normal.

En mi interior había un nerviosismo poco habitual, la razón era que unas dos semanas antes de este fin de semana sin saber como se nos vino a la cabeza la idea de visitar un club liberal. Buscamos en internet y encontramos uno en la misma ciudad. Acordamos de que si llegado el momento nos apetecia iríamos, pero no haríamos ningún intercambio, simplente viviríamos la experiencia de follar en medio de desconocidos. Estas dos semanas solo de pensarlo me ponía cachondo y a mi mujer mas o menos la pasaba lo mismo.

Llegamos a la playa a eso de las 12:00, después de buscar sitio para nuestras toallas nos empezamos a quitar la ropa veraniega. Mi mujer empieza a excitarme quedándose solo con la braga de su bañador, sus pezones están duros y erectos debido a la brisa fresca del mar, en mi bañador bóxer se nota que mi polla empieza a coger vida propia, intento pensar en otra cosa pero me es difícil, no puedo quitar los ojos del cuerpo moreno y torneado de mi mujer.

El dia de playa es de lo mas entretenido, sigue dentro de mi una excitación poco común, las vistas que me regala mi pareja sumado a la idea de meternos en el mundo liberal son la razón.

Son las 21:00 horas, nos encontramos en el hotel arreglándonos para salir a cenar, tomar unas copas y lo que surja. Una falda con vuelo y bastante corta la cubren las piernas y el culo, unas botas con un poco de tacon realzan su figura, sobre todo su trasero, una camiseta de tirantes dejan al descubierto casi todos sus hombros, parte de su espalda y un pronunciado escote, me la follaba ahora mismo, pero tenemos que marchar.

Despues de cenar y tomar un par de copas tenemos la gran duda, nos marchamos al hotel o por el contrario nos acercamos hasta el pub que habíamos acordado.

Decidimos ir al pub y una vez allí ya veremos.

Despues de andar unos quince minutos llegamos al local en cuestión, no acabamos de decidirnos, asi que nos metemos en un bar de al lado para tomar otra copa y asi calmar los nervios.

Apuramos la copa, salimos del bar y nos acercamos a la puerta, llamamos al timbre y nos abre la puerta una mujer muy simpatica , nos pregunta si es la primera vez. La contestamos que si.

-Os enseño las instalaciones y vosotros decidis.

-Perfecto.

Estamos paseando por el local haciendo la visita guiada, esta decidido.

-Nos quedamos.

Nos sentamos en una mesa con otras dos copas, observamos todo y a todos. Aunque ya llevamos unas cuantas copas los nervios no se nos quitan.

El ambiente esta muy caldeado en la pista ahí mujeres y hombres bailando, metiéndose mano y una pareja muy cerca nuestro follando.

Mi mano se dirije a las piernas de mi mujer y la empiezo a besar, nuestras lenguas se unen, la beso el cuello, la quito un tirante, luego el otro, mis manos ahora tocan sus tetas y mi mujer me hace un gesto para que me detenga. Cuando me vuelvo veo que una pareja sea a sentado en las dos butacas de al lado. Esto ya no me gusta la idea que teníamos era de estar solos.

-Hola.

-Hola.

• Yo soy Roberto y mi novia Sara. Nos dice el.

-Cristina y Angel. Contesto yo.

Despues de charlar de lo típico, de donde sois, es la primera vez, etc. Nos dicen que nos invitan a una copa en otro sitio del local mas tranquilo, ellos ya lo conocen.

Miro a mi mujer como diciendo, -esto nos es lo que habíamos acordado.

Ella me mira y en su pensamiento creo leer, -ya pero no veas que bueno esta Roberto.

Aceptamos y les seguimos con nuestras copas en la mano, y ya van como seis, el alcohol y el ambiente nos están haciendo meternos en un lio.

Roberto encabeza la fila, luego su novia, después voy yo, no puedo quitar la mirada del trasero de su chica, las mallas que lleva la marcan su culo a la perfeccion.

Llegamos a una sala con la luz tenue y una especie de lona cubria todo el local. Nos sentamos en corro como los indios. A mi mujer se la ve el tanga, todas sus piernas están al descubierto, mientras seguimos charlando y riéndonos de cualquier cosa la mano de Roberto empieza a acariciar las piernas de mi mujer, una sensación extraña me invade, celos quizás, pero mi polla esta a punto de reventar en mi pantalón. Su mano se acerca a su coño ya mojado y un gesto de placer cambia la cara de mi pareja. Acerca su cara y la besa en la boca, ella le corresponde, no me puedo creer lo que veo, ahora la toca el pecho, esto se nos ha ido de las manos, me encuentro paralizado cuando mi mujer le empieza a quitar el pantalón, se le ilumina la cara cuando descubre semejante polla. A mi ya me da igual todo y la ayudo a desnudarse, se encuentran completamente desnudos y su novia Sara me desnuda a mi, después yo ella.

La beso su cuello, luego sus preciosas tetas, mis manos tocan el culo que antes miraba con deseo, mi mujer se esta dando un festin con enorme aparato, le esta haciendo una mamada de escándalo, le esta comiendo toda su polla, se entretiene con la lengua en la punta para luego de golpe metérsela todo lo mas que puede.

Yo me encuentro tumbado bocarriba observando a mi mujer, se esta deleitando, mi visión es espectacular, el sube y baja de su cabeza, sus pechos colgando moviéndose a compas, mi polla va estallar, Sara me la esta chupando poniendo todo su empeño como lo hace mi mujer con Roberto, que bien me la chupa, mi polla esta mojada y brillante de su saliva.

Cristina, mi mujer, se pone a cuatro patas, me temo que ya no ahí quien la pare, observo la pedazo de polla de Roberto mientras este esta decidido a follarsela, es enorme.

Cuando con su polla empieza a adentrarse en ella, un grito de dolor se oye en todo el local.

Yo me preparo para follarme a Sara y la tumbo boca arriba, justo debajo de la cara de Cristina que todavía sigue a cuatro patas, con sus piernas sobre mis hombros se la meto entera, que coño mas rico, esta empapado, empiezo con el vaivén, tengo la cara de Cristina tan cerca que llego a besarla, nos besamos con pasión y deseo, esto no es lo que habíamos acordado pero me encantaba verla disfrutar.

Mientras nos besamos sus gritos ahora de placer no cesan.

-Follame asi Roberto no pares, me encanta tu polla, aaaaaah, aah.

Las embestidas de Roberto cada vez son mas rapidas y mas fuertes, con sus manos sobre sus caderas  la mueve a su antojo, la esta follando como una perrilla, su cara es todo vicio y lujuria.

-Sigue follandome, asi, asi, mas, no pares, estoy super cachonda.- Mira Angel me esta follando como a una puta, me esta metiendo su enorme polla en mi coño, ¿Te gusta lo que ves?

No se que contestar, me dejo llevar por la situación.

-Vamos Roberto, follala mas fuerte, vamos hasta que se corra, no pares.

Sigo follando con Sara y otra vez me quedo perplejo.

Sara y mi mujer se están pegando un morreo pornográfico, esto si que no me lo esperaba, sus lenguas se entrelazan, las manos de Sara acarician salvajemente las tetas de Cristina, estoy apunto de correrme y me salgo de Sara, las acerco mi polla y con la ayuda de mi mano me viene una gran corrida, el semen se desliza por la cara de mi mujer para después perderse en sus bocas, ahora el beso es mas brusco, sus lenguas se pelean por mi leche.

El cuerpo de Sara se desliza por debajo del de Cristina, quiere alcanzar su coño, cuando lo consigue están en un perfecto 69 mientras Roberto no para con su bombeo. Las embestidas son mas fuertes y unos gemidos salen de su garganta, saca su polla del coño de Cristina, mientras yo observo lo dilatado que tiene su agujero, con su mano al igual que hice yo primero se prepara para la eyaculación que se le viene. El semen choca contra el culo de mi mujer, inmediatamente se desliza por el coño para ir a parar a la boca de Sara.

Sara no aguanta mas y también la viene una gran corrida, la lengua de Cristina en su clítoris no para.

-Me corro Cristina, siiiiii, aaaah, sigue, aaaaaah.

Su espalda brillante por el sudor que emana su cuerpo se arquea y se tensa.

La escena me tiene boquiabierto, mi polla se endereza otra vez.

Sorprendentemente Cristina todavía no se ha corrido, siguen con su 69.

El culo en pompa de mi mujer me tienta, me acerco a ella, la acerco mi polla ya tiesa a su culo y puedo sentir los restos de lefa de Roberto en el culo de Cristina, esto me facilitara el trabajo, pues la voy a dar por el culo como a ella le gusta.

Mi aparato entra sin ninguna dificultad en el agujero de mi mujer, un grito sale de su boca.

-Si métemela en el culo, asi entera.

-Toma polla putita.

-Dame por el culo, fuerte, rápido, mas, no pares, siiiii. Roberto ven, dame tu polla, te la quiero comer otra vez, quiero estar muy follada.

Parece nunca cansarse, ahora Roberto obedece a sus ordenes. Se mete la polla de Roberto en la boca, todavía esta flácida, acaba de correrse, aun asi no le entra entera en su boca, esa polla es enorme.

Sara, Roberto y yo estamos a las ordenes de mi mujer que se a hecho la dueña de la situación.

No aguanto mas, me viene otra corrida, mi polla late en el culo de Cristina, mi leche a entrado en su culo, ella al sentirlo incrementa el ritmo de la mamada que le esta propinando a Roberto, este a su vez siente cosquilleo en su espalda e inunda la boca de Cristina de semen, Cristina tampoco aguanta mas.

-Me corro, siiiii, yaaaa, me viene, aaaaaaaaaah, siiiiiiiii,aaaah.

El grito se volvió a oir en todo el local.

Caimos rendidos los cuatro sobre la lona y tras diez minutos de descanso y recapacitación nos fuimos a dar una ducha. Despues ya mas tranquilos tomamos otra copa juntos, y tras despedirnos abandonamos el local para dirigirnos al hotel.

Eran las 04:00 de la madrugada, caminábamos despacio, en silencio, la brisa de la noche refescaba nuestras caras, mil pensamientos se mezclaban en mi mente, celos, culpabilidad, alegría, la verdad es que lo habíamos pasado muy bien, Cristina me abraza.

-Te quiero mucho.

-Yo también, siempre.

Nos metemos en la cama y apagamos la luz, mi amada-amante duerme, yo no puedo, no paro de pensar, la angustia se apodera de mi.

Para que hemos hecho esto, si en realidad no nos hacia falta, nuestra vida sexual era de película, y si ahora todo cambia, y si la pierdo.

Un suspiro salió de mi interior, mi corazón bombeaba muy rápido, estoy confuso, abro los ojos, me pregunto donde estoy, aunque esta todo a oscuras distingo mi cama, mis sabanas.

Es mi habitación, ahora el suspiro que sale de mi es de tranquilidad.

-Que te pasa Angel, ¿Qué has estado soñando?

-Si joder, que mal lo he pasado.

-¿Con que soñabas?

-Cuando lo recuerde bien ya te lo contare, o mejor ya lo leeras.