Nuestra primera orgia

Levanto mi cara y solo veo sexo por todas partes, hay de todo tipo, es indescriptible. Creo ver a Juan, pero no estoy segura, está metiéndosela por el culo a una mujer con unos pechos prominentes a la que está comiendo el coño otra mujer

Hola de nuevo, esperamos que el anterior relato haya gustado ya que son nuestras experiencias pasadas y que pensamos pueden ser excitantes y animar a otras parejas a iniciar una nueva vida sexual. Hemos decidido dividir el relato en al menos 2 partes ya que consideramos que nos hemos alargado un poco y pensamos que así será más fácil de leer. Lamentamos también habernos retrasado un poco, pero entre recordar y que volvemos a estar en verano y unos cuantos viajes a Ibiza, el tiempo no da para todo.

Tras nuestra noche pasada en ese lugar privilegiado, Cala Coticcio, llena de sexo, nos disponíamos a coger rumbo hacia Porto Cervo donde estábamos invitados a una fiesta a la cual acudían cada año nuestros amigos alemanes, pero como no siempre el estado del mar lo permite, tuvimos que aplazar en un día la travesía, aunque estábamos bastante cerca, unas 12 millas, menos mal que la fiesta se celebraba dentro de 3 días. Dada la situación y como estábamos resguardados del viento, decidimos pasar ese día descansando, tomando el sol y Peter y yo de cocineros.

Durante el desayuno, estuvimos comentado la relación que había surgido entre nosotros ya que, queramos o no, era peculiar y la complicidad surgida, la libertad con la que nos relacionábamos, era, de alguna forma, extraña. Ellos nos dijeron que desde hacía tiempo compartían sexo con más gente, pero no habían encontrado a nadie como nosotros, había surgido una relación abierta y sin tapujos. En nuestro caso, casi recién iniciados, solo la experiencia de Ibiza, hacía que fuera más sorpresivo ya que realmente, nos era extraño poder tener una amistad sincera y a su vez placentera y excitante. Al final coincidimos que hay que dejarse llevar y que ojalá esa amistad durara muchos años y la disfrutáramos los 4. Tanto Ingrid como María, reconocieron que entre ella había surgido una amistad peculiar ya que se sentían atraídas sexualmente de una manera muy intensa y disfrutaban entre ellas, especialmente María confeso que el haber conocido a Ingrid, le había abierto la ventana de tener sexo con otra mujer y reconocía que le había cautivado y le excitaba muchísimo, ella no había tenido relaciones con otra persona del mismo sexo anteriormente, pero ahora había perdido los prejuicios heredados y veía que sexualmente era otra forma de disfrutar y entendía las relaciones entre mismo sexo.

Durante la mañana, las mujeres se fueron a la proa a tomar el sol mientras nosotros repasábamos cosas del barco y preparamos la comida, en ocasiones nos costaba prestar atención a lo que hacíamos ya que las 2 estaban tomando el sol completamente desnudas y en ocasiones completamente despreocupadas ofrecían unas vistas de lo más provocativas y claro, de piedra nos somos, abiertas de piernas, se le veía los coños expuestos al sol. En fin, la hora de la comida llego y degustamos lo preparado por nosotros y en vista que el viento estaba calmando, decidimos esperar un poco y salir hacia nuestro destino sobre las 6 de la tarde. Ingrid y Peter decidieron bajar a su camarote a hacer una siesta y María y yo, nos quedamos en la plataforma de popa, que como estaba en sombra a hacer más o menos lo mismo.

Hola, ahora soy María que cojo el relevo, como contaba Juan, bajamos a la plataforma a tumbarnos los dos desnudos sobre una colchoneta y yo quede media dormida casi al momento. No sé muy bien el tiempo que paso, pero me desperté al notar unas caricias en mi entrepierna, abrí los ojos y vi a Juan con su cara apoyada en mis muslos, acariciando los alrededores de mi sexo lo dejé que continuara, me gustaba. Estaba claro que ese juego terminaría como terminaría, al poco ya noté que sus dedos recorrían mi rajita y su cara se había aproximado a ella, continuo poco a poco y en un momento note su lengua recorriéndola. Instintivamente alargué mi mano hasta su polla, que estaba ya dura y empecé a acariciarla de arriba abajo, prestando especial atención a su capullo que pronto empezó a humedecerse. Su lengua ya era más atrevida y ayudada por mis segregaciones empezaba a intentar introducirse dentro de mi coño y subía acariciando el clítoris, se me escapo un gemido y el intensifico sus caricias introduciéndome 2 dedos dentro, acercado su polla a mi cara. Fue fácil metérmela en la boca y empezar a chuparla como un caramelo, sus dedos empezaron a entrar y salir del interior de mi coño ayudados por la humedad del mismo. Continuamos, así como 5 minutos hasta que Juan se incorporó sobre mí, y acercando su polla otra vez a mi boca, me cogió de la nuca y empezó a follármela acompasadamente, la tenía muy dura y sus 18 cm se metían casi por completo en mi boca, empecé a ensalivarla y escuché suspirar a Juan. Saque la polla de mi boca y pase la lengua de arriba abajo, chupando también los testículos y pasando mi mano por el culo de mi marido, eso le encanta y le pone a cien. Juan me levanto y me beso apasionadamente, metió su mano entre mis piernas y empezó a acariciar mi coño, centrándose en la zona del clítoris. Me coloca tumbada en la colchoneta y me levanta el culo, colocándose detrás de mí y empieza a lamerme el culo y el coño, noto su lengua que me humedece mi vagina ya por si sola empapada, se abre paso entre los labios y noto como entra ligeramente en mi coño, sale y se centra en el agujero de mi culo y sus dedos vuelven a jugar con mi sexo, me derrito, cierro los ojos y me dejo llevar por el placer.

Vuelvo a ser Juan, tenía a María a 4 patas frente a mí y le estaba comiendo el culo mientras había metido 2 dedos dentro de su húmedo coño, le metía y le sacaba los dedos y cada vez estaba más mojada y movía el culo empujándolo hacia mis dedos. Yo ya no podía más y me coloque para meter mi polla en ese coño, mire alrededor, no había nadie, estábamos en un lugar paradisiaco casi solos, solo un par de barcos situados a distancia de nuestra proa. Fui introduciendo mi miembro en el coño de mi esposa, poco a poco, se introdujo con facilidad, estaba prieto, como siempre, notaba el rozamiento con su interior y empecé el movimiento de mete saca suavemente. Me dejo llevar y me centro en acariciar la espalda de María, llegando a sus tetas que las aprieto suavemente, ella responde y noto como aprieta y gime. Percibo movimiento en la cubierta y veo asomar a Peter que se queda observándonos y se está tocando su polla, se acerca a nosotros y se tumba a nuestro lado y mete su mano en el coño de María y empieza a frotarlo mientras intenta llegar a su boca y besarla. Mi mujer gime al notar una mano en su clítoris al mismo tiempo que yo la estoy penetrando y ve a Peter frente su cara que intenta besarla, ella abre su boca y recibe su boca, entrelazando sus lenguas y dándose un largo obsceno beso al mismo tiempo que yo empujo intentando llegar al fondo de su coño, la situación me excita sobremanera y quiero hacerlo sentir dentro de su coño. Peter se levanta y acerca su polla a la boca de María y esta no duda en abrir su boca, introduciéndosela y empezando a realizar una apasionada mamada, no era para menos, frente a mi veía a la perfección como la polla de Peter entraba y salía de la boca de mi esposa y esta se deleitaba con ella, sus babas le caían de los labios y las recogía golosamente repetidamente.

Realmente desde que empezó este viaje y la amistad con Ingrid y Peter, no reconocía a María por su fogosidad y su libertad sexual ya que hasta ese momento no había dado muestras de ello. La verdad es que a mí me encantaba, me excitaba y me volvía loco, ver a mi mujer disfrutar y ser disfrutada sin reticencias del sexo me inducían a hacer lo mismo y permitir a acompañarla en esas situaciones.

Tumbe a María de lado en la toalla sin sacarle la polla del coño, eso hizo que Peter se colocara sobre su cara y le volviera a dar su polla, ella la trago ávidamente y con una mano empezó a acariciar sus testículos y el agujero del culo, pasándole la lengua por él y metiéndole un dedo dentro. Esa visión me excito al máximo y volví a follarla intentando llegar al fondo de su coño, la imagen de la boca de María tragándose completamente la polla, las babas que salían de su boca y el dedo en el culo, era demasiado para mi aguante, empecé a correrme y empuje para que fuera lo más dentro posible, ella lo noto y me miro con cara de vicio y de placer, empezó a gemir, también se estaba corriendo sin dejar de chupar la polla de Peter. En cuanto noto que mi polla disminuía dentro su coño, no dudo en sacarla, tumbar a Peter boca arriba y se sienta, mirando hacia mí, metiéndose de golpe su polla, se inclinó un poco sobre él, lo que me permitía ver perfectamente la penetración, la polla de Peter chorreaba la leche de mi corrida. Al tener ambos los sexos depilados, la visión era perfecta y no tardo María en empezar a acariciarse el clítoris con la mano, tenía los ojos cerrados y aceleraba el frotamiento. Ante esa visión, empecé a tocarme la polla, húmeda por la follada anterior, lo que ayudo a que se endureciera de nuevo, me levanto y me sitúo frente a María, abriendo mis piernas y ellos en medio, dirijo mi polla a la boca de María y ella empieza a relamerla. Estamos así unos minutos y ella me coge y me hace agachar hacia su coño, está claro, empiezo a pasar mi lengua, primero por su clítoris y voy bajando, noto el sabor de mi leche y mi lengua tropieza con la polla de Peter que entra y sale del coño de mi mujer, mi lengua se turna entre la polla y el coño, mojándome toda la cara con la mezcla de jugos sexuales. Noto que Peter coge a María por las caderas y la empuja hacia abajo, su polla queda toda metida en el coño y noto que aprieta, se está corriendo, nunca había visto de tan cerca una corrida, veo el coño de María palpitar y ella se levanta y aparece la polla rezumando semen blanco. María empuja mi cabeza hacia su coño y yo empiezo otra vez a comer los 2 sexos y mis labios se llenan de leche, me incorporo y voy directamente a besar la boca de María, abre la boca, saca la lengua y recorre mi boca lamiendo todo lo que encuentra, Peter se acerca por detrás y cogiéndola por las tetas nos empuja y caemos los 3 al agua, estallando todos en gritos y risas. Al salir vemos a Ingrid asomada con cara de interrogación, al salir del agua María le cuenta lo ocurrido y nos mira con cara de niña mala como pidiendo explicaciones de porque no hemos contado con ella, unos besos de su marido le hacen cambiar esa cara, pero seguro que pensaba como vengarse.

Como la tarde iba pasando y el viento había amainado, decidimos llegar zarpar y llegar a Porto Cervo, la verdad que estábamos muy cerca y en nada llegamos y fuimos directamente a amarrar en la Marina donde teníamos el amarre reservado. Durante la travesía Ingrid y Peter nos explicaron que la fiesta donde íbamos a ir, era una fiesta liberal, donde se practicaba el sexo conjuntamente y con quien se quisiera y que no seriamos más de 15 parejas, todos conocidos y que por lo que sabían, los únicos invitados éramos nosotros, que, si no queríamos ir, no había problema, entendían que quizá era demasiado prematuro para nosotros. Se celebraba en la casa de un matrimonio participante, con cena servida por servicio, dormiríamos en la casa, las mujeres tenían que ir vestidas con ropa provocativa y un día antes tendríamos que hacernos todos unos análisis para estar seguros de que todos estábamos sanos y no pudiéramos transmitir nada, vendrían a tomar las muestras mañana por la mañana al puerto.

Esa noche salimos a cenar a uno de los restaurantes del puerto y nos fuimos a dormir algo tarde pues el ambiente era super agradable y se estaba fantásticamente en un ambiente de lujo. Al día siguiente, sobre las 11 vinieron 2 sanitarios a tomarnos las muestras y decidimos pasar el día en Porto Cervo y recorrer las tiendas y esperar a que nos vinieran a recoger para ir a la fiesta.

Sobre las 19 horas teníamos una furgoneta negra esperándonos en el inicio del pantalán, antes las mujeres nos habían dejado asombrados ya que, aunque se habían tomado su tiempo en arreglarse y vestirse, la espera valió la pena. Las 2 llevaban una mini faldas cortas, no, lo siguiente ya que, aunque no quisieran, a cada paso se les podía ver casi perfectamente las nalgas y el triangulito del tanga, arriba Ingrid llevaba una blusa casi transparente sin sujetador y con un escote del que asomaban más de la mitad de sus prominentes pechos, María solo llevaba un top de encaje negro tipo malla que dejaba ver más que tapar, menos mal que la furgoneta estaba cerca, porque si no, las asaltan directamente. El trayecto duro poco, el lugar una mansión casi aislada cerca de “Liscia Ruja”, estaba rodeada de jardines y daba al mar y a distancia de cualquier otra edificación. Al llegar nos esperaban los anfitriones, Bianca y Flavio, italianos de unos 50 años, muy bien conservados ambos, el alto 1,85 y con cuerpo de gimnasio, ella de 1,65, delgada con un culo respingón y unos pechos tiesos (operados) y 2 pezones que se veían perfectamente a través de su vestido, este era corto con la parte inferior completamente transparente bajo el cual llevaba una tirita que cubría lo justo para no dejar ver sus labios vaginales, la parte superior era una especie de blusa de malla sin tirantes que dejaba ver la mitad de sus tetas y desafiantes pezones. Nos saludaron efusivamente y nos dieron las gracias por asistir a la fiesta y que si veníamos con Ingrid y Peter ya éramos de la familia, hicieron una indicación y un chico y una chica de servicio nos indicaron el camino ya que ellos se quedaban a esperar al resto de invitados. María y yo nos miramos al ver el servicio, el chico solo llevaba una especie de bañador tanga que por delante tapaba su sexo y la chica, también en tanga y un sujetador push-up de encaje, en ambos casos de color negro. Nos acompañaron hasta la parte delantera de la casa, un porche espectacular que daba una esplanada de césped con una piscina desbordante que daba hacia el mar, rodeada de hamacas y camas balinesas enormes, las vistas eran fantásticas, se veía la costa y en la bahía los yates fondeados. Al llegar ya había otros participantes, Ingrid y Peter nos los fueron presentado, la edad media estaba entre los 40 y los 55 años y la mayoría, tanto hombres como mujeres, se notaban que se cuidaban y como me susurro María, había bastante operación de estética. La verdad es que eran gente guapa y las mujeres, ayudadas por sus provocativas vestimentas, estaban muy atractivas y no podías evitar mirarlas más o menos lascivamente.

Soy María que tomó el relevo: Como os contaba Juan, tras llegar a la casa y conocer a los anfitriones y parte de los invitados que iban llegando escalonadamente. Ingrid me iba presentado y me comentaba más de una intimidad de ellos y ellas, la verdad es que estaba algo nerviosa ya que el lugar, el ambiente me imponía. Los invitados fueron llegando y como nos habían comentado nuestros amigos, no éramos más de 30 personas, todos matrimonios o parejas y las mujeres no es que fueran vestidas de forma sexy y provocativas, más que eso, había desde conjuntos muy sofisticados a otras que iban con conjuntos de lencería directamente que resaltaban y exhibían sus atributos.

Los propietarios de la casa indicaron que ya podríamos degustar la cena preparada por un conocido chef, tipo bufete y teníamos a nuestra disposición al servicio para lo que quisiéramos. Las mesas estaban en una terraza a pie de la piscina y rodeada de césped y tenía unas vistas espectaculares desde distribuidas en grupos de 6 personas y nosotros nos sentamos con nuestros amigos y los propietarios de la casa, sentados de forma salteada para que las parejas no estuviéramos juntas. La cena fue exquisita con platos básicamente mediterráneos e italianos, todo regado con vino y champagne. Durante la cena la conversación empezó sobre temas profesionales, familiares y fue derivando a temas más íntimos, Ingrid y Peter les resumieron lo acontecido durante desde los días que llevábamos juntos e Ingrid hizo especial hincapié en mi fogosidad sexual tanto con los hombres como con las mujeres, lo que hizo que Bianca me mirara lascivamente. Flavio nos explicó después que después de la cena, habría un brindis con un combinado especial preparado por ellos y después empezaría la fiesta, donde estaría permitido todo siempre que los participantes lo aceptaran, no había nada que no se permitiera, pero que siempre seria conjuntamente y en la zona exterior de la casa.

Al finalizar la cena, la pareja anfitriona se levantó y tras dar las gracias a todos por su asistencia brindamos con una copa de un coctel dulce, bastante cargado de alcohol y con un sabor peculiar. Enseguida empezó a haber movimiento de gente, varios se fueron hacia la piscina y desnudándose se metieron en ella, otros se instalaron en las camas balinesas, Ingrid me cogió de la mano y me levantó de la silla, “vamos, ven y te presentare a mis amigos”, mire a Juan y le puse ojitos, me marche con Ingrid hacia una de las camas donde estaban sus amigos. Al llegar, me presento a Josef, su mujer Anna, Thomas y Andrea, todos austriacos de unos 45 a 50 años que estaban hablando con una camarera de piel morena con un cuerpo de modelo. Ellas llevaban unos conjuntos de lencería cubierto por unos pareos que hacían resaltan principalmente sus traseros y sus pechos, ellos, ambos bastante altos y grandes, no gordos pero con algo de barriga, llevaban un polo y unas bermudas, nada más presentarme, todos me dieron un beso directamente en la boca y Josef y Thomas aprovecharon para cogerme por la cintura y aparte de apretarse contra mi cuerpo hicieron que mi faldita se subiera y dejara a la vista mi trasero y el triángulo que cubría mi sexo y escuche los comentarios de las mujeres alagando mi cuerpo, eso hizo que mi cuerpo reaccionara y note como me humedecía. Me senté tal cual estaba en la cama e Ingrid vino a mi lado pasando su mano por mi trasero y desabrochando el corchete de mi falda, bajándola y quitándomela, acerco su cara a mí y directamente empezó a besarme introduciendo su lengua en mi boca. Ahora fui yo que la cogí y atraje su cuerpo hacia mí para quitarle su falda y empecé a acariciar su trasero abriéndolo e intentando llegar a su sexo, yo notaba la cercanía de los dos hombres a nuestro lado, que no dudaron en poner sus manos entre nuestros cuerpos y empezar a acariciarnos los pechos, mi top pronto fue deslizado hacia abajo y la escotada blusa de Ingrid desabrochada mientras nosotras seguíamos besándonos, ahora ya de una forma intensa. Mi mano derecha fue a posarse sobre el pantalón de Josef y note su polla dura y aun sin verla era de un buen tamaño, él me facilito el trabajo ya que rápidamente se bajó las bermudas y mi mano noto el miembro de considerable tamaño, tuve que dejar de besar a Ingrid y mirar, menuda polla tenía el austriaco, mi mano la empezó a acariciar de arriba abajo como para asegurarme de que su tamaño fuera real. Mientras Ingrid no había desaprovechado el tiempo y había sacado el miembro de Thomas y ya lo tenía dentro su boca, también de buen tamaño, pero no era el de Josef, que, al no tener ningún incordio, acerco su polla a mi boca, me cogió la cabeza y empujo hacia mi boca, tuve que abrirla al máximo, era gruesa y solo me entraba su punta y tenía que jugar con mi lengua, humedeciéndola e intentando amoldar mi boca al tamaño. Mi mano seguía acariciando esa polla e iba también hasta sus testículos, sospesándolos y llegaba hasta su culo, al que abría y acariciaba su agujero mojándolo con restos de saliva que rezumaba de mi boca que seguía luchando para poder introducirme más polla en ella.

Soy Juan que retomo el relato, al irse Ingrid con María, me quede con Peter, Bianca y Flavio, pero estos 2 últimos pronto se levantaron y se mezclaron con los invitados. Me entretuve dando un vistazo general al ambiente, estaba claro que la fiesta ya había empezado y en general, la situación empezaba a calentarse, repartidos en camas balinesas, en la piscina y en alguna tumbona se podía observar grupos de personas acariciándose, besándose y haciendo subir la temperatura rápidamente.  Abstraído como estaba, noto que alguien estaba detrás de mí, me giro y encuentro a la chica que nos acompañó a la mesa al llegar, solo llevaba el pequeño tanga negro y sus pechos parecía que me miraban desafiantes, aunque me hablo en italiano, entendí, “ya le dijo la señora que estamos aquí para lo que deseen sus amigos”, me levanté y casi como un autómata empecé a acariciar sus pechos y pasar mi lengua por su cuello. Ella no se quedó quieta, note su mano sobre mi pantalón y casi sin darme cuanta, este cayó al suelo y su mano se apodero de mi polla y empecé a notar como su cuerpo iba descendiendo poco a poco, se iba agachando y sus pechos pronto estuvieron a la altura de mi polla y note su lengua acariciar suavemente la punta mientras sus manos no paraban pasar por mi entrepierna centrándose meticulosamente en los puntos más sensibles. Levante la vista para observar otra vez alrededor, aquello iba cada vez a más y localice a María e Ingrid, las 2 estaban completamente desnudas y las 2 parejas las estaban besando y acariciando mientras ellas se dejaban hacer, tenían manos por todas las partes de sus cuerpos, eran manoseadas frenéticamente y se dejaban hacer, se podía apreciar alguna de las manos entre sus piernas y en sus culos. Esto hizo que mi polla reaccionara y empezara a rezumar liquido lo que motivo que la chica se la introdujera hasta el fondo de su boca notando sus labios en mis testículos, empezó una mamada inenarrable, me quede mirando embobado como su boca iniciaba un movimiento de adelante y atrás engullendo mi miembro que cuando aparecía estaba empapado de su saliva que se escurría hacia abajo mientras un dedo de su mano no cesaba de jugar con el agujero de mi culo, intentando entrar en él. Me hizo girar y apoyarme en una butaca y lengua se apodero de mi culo, notaba como si quisiera entrar, lo estaba mojando con su saliva mientras me acariciaba la polla con una mano. Frente a mí, veo a Bianca, la propietaria de la casa, completamente desnuda, a 4 patas y ensartada por uno de los camareros y la estaba follando alternativamente por el coño y por el culo, lo hacía de forma ruda, embistiendo hasta el fondo en cada embestida y veía que ella movía su culo desesperadamente. Sus movimientos y sus gemidos no pasan desapercibidos para 2 invitados, que se acercan a ella, uno de ellos se tumba en una hamaca mientras el otro la coge, apartándola del camarero, la coloca encima de la polla del que estaba tumbado y la sienta sobre la polla que se introduce completamente en el coño de Bianca, el camarero no lo duda y colocándose detrás, le introduce también su polla en el culo, Bianca pega un grito que queda apagado por la polla del otro invitado que entra en su boca, los 3 hombres inician una follada conjunta y acompasada. La visión me hizo llegar al límite, cojo a la camarera y la tumbo encima de la mesa, apartando platos y vasos, le aparto el triángulo del tanga y empiezo a lamer su coño con desesperación, levanto sus piernas y tengo a mi disposición su culito y su coño, sin un solo pelo y empiezo a pasarles mi lengua por ambos, noto que ella empieza a convulsionar y escucho sus gemidos, su coño rezuma, noto su sabor en mi boca, es una delicia. Me incorporo y dirijo mi polla a su coño, aprieto y empieza a entrar, noto como mi polla se abre camino en su interior, el rozamiento es intenso pero suave ya que está muy húmeda, mantengo sus piernas levantadas y abiertas por lo que me es fácil metérsela completamente y me concentro en follarla sacando y metiendo mi polla con un ritmo lento, ella me mira y abre su boca lo que me incita a besarla, me tumbo sobre ella y mi lengua busca el interior de su boca, nos fundimos en un lujurioso beso. Me incorporo y me encuentro con una mujer a escasos centímetros nuestros, una morena con unas tetas grandes, completamente desnuda, tocándose el coño mientras nos observa, se agacha y me sustituye en la boca de la camarera, sus tetas quedan al alcance de mi mano y aprovecho para masajearlas, tiene unos pezones prominentes y duros, los pellizco y mi mano busca su coño, está húmedo, le introduzco 2 dedos, ella me mira y su boca busca la mía, realmente me come, está muy caliente, sus manos no paran de tocarnos. Me incorporo completamente y dejo a su alcance nuestros cuerpos, mientras yo sigo follando a la chica, ella mete su mano entre nuestros sexos, acariciando tanto el coño como mi polla en cuanto sale. La camarera empieza a emitir gemidos continuos, entre mi follada y las caricias en su coño poco va a aguantar, algo dice que no entiendo y de repente empieza a mearse y correrse, la mujer se agacha e intentar sorber mientras su mano frota ágilmente el clítoris de la camarera que se agita frenéticamente y emite palabras que no entiendo.

Vuelvo a ser María, que retomo mi narración: os había dejado con la polla de Josef en mi boca, intentando introducírmela lo máximo posible para saborearla completamente, al mismo tiempo las manos de Anna acariciaban lascivamente mi cuerpo y la boca de Andrea se había apoderado de mi sexo mientras era taladrada por el miembro de un desconocido que había pasado y al verla agachada sobre mí, no había dudado en follarle. Notaba las envestidas del desconocido ya que la boca de Andrea chocaba con mi coño y eso hacía que mi excitación me hiciera sentir la necesidad de tener la polla de Josef en mi interior. Dejo de comerme la polla y me incorporo, Ingrid esta tumbada a mi lado, con sus piernas levantadas por Thomas que tiene su miembro completamente metido en su coño, mientras Anna tiene sus manos metidas entre los dos sexos y besando a Thomas, me coloco sobre la cama, a cuatro patas dejando mi culo frente a Josef y aprovecho para besar a Ingrid que responde sorbiendo toda mi boca. Noto una lengua que recorre mi culo y mi coño, este está empapado y yo necesito sexo desesperadamente, estoy muy muy excitada y caliente. Josef deja de comerme el culo y noto sus dedos abrir los labios de mi coño y frotar el clítoris con la otra mano, me está matando de placer, me noto muy húmeda y estoy a punto de tener un orgasmo, Andrea se acerca a mi boca y directamente se apodera de mi boca introduciendo su lengua, me besa lascivamente, me inunda la boca de su saliva que sabe a sexo. De golpe, mi coño se llena con la polla de Josef, me la mete hasta el fondo y me empieza a follar con un mete y saca continuo y profundo, sus embestidas pegan mi boca aún más con la de Andrea que también se apodera de mis pechos, estrujando mis pezones con sus dedos, estallo en un salvaje orgasmo, largo e intenso mientras Josef continúa entrando y saliendo de mi coño. Andrea deja mi boca e intenta deslizarse bajo mi cuerpo y noto su lengua llegar a mi coño y se centra el pasar la lengua por mi clítoris y supongo que también por la polla de Josef, su cara debe estar completamente empapada de abundantes jugos que manan de nuestros sexos. Unos dedos intentan llegar al agujero de mi culo, no sé quién es, si Andrea o Josef, pero fácilmente se introducen en él. La polla de Josef sale de mi coño y la noto en la entrada del culo, lo tiene fácil, se va introduciendo progresivamente con facilidad a pesar de su tamaño, mientras, Andrea se ha apoderado completamente de mi coño y lo está lamiendo profundamente. Un empujón de Josef y toda su polla está dentro de mi culo y empieza un violento mete saca que hace que la boca de Andrea me perfore el sexo, noto como se restriega completamente y vuelvo a estar al borde del orgasmo.

Levanto mi cara y solo veo sexo por todas partes, hay de todo tipo, es indescriptible. Creo ver a Juan, pero no estoy segura, está metiéndosela por el culo a una mujer con unos pechos prominentes a la que está comiendo el coño otra mujer; cerca de ellos dos hombres se están haciendo una paja mutua observando como dos mujeres están completamente taladradas por varios hombres, tienen sus coños, culos y bocas llenos. El observar eso, me lleva a las puertas del orgasmo, noto una fuerte embestida de Josef que se corre en mis entrañas, pero no para, sigue su movimiento y noto la lengua de Andrea llegar hasta mi culo y escucho como le dice a Josef que saque su polla, que quiere toda la leche de mi culo. Josef lo hace, pero rodeándome, se coloca entre sus piernas, se las abre y le inserta de golpe su polla hasta el fondo, ella deja un momento de comerme el culo y da un fuerte alarido y le dice algo así como que “enséñale a esta como follamos, que aprenda”. La barriga de Josef choca conmigo a cada envestida y no puedo evitar en una de ellas, coger la polla y metérmela en la boca, esta empapada, chorrea y tiene sabor a coño, me encanta, me la saco y la dirijo otra vez al coño de Andrea, aprovecho para acariciarlo lo que implica la reacción de ella, me mete varios dedos en mi coño y algo me dice, no lo entiendo, pero enseguida me doy cuenta, una polla quiere entrar en mi culo y si verla es más gruesa que la de Josef, pero entra aunque la noto como aprieta para conseguirlo.

Retomo ahora yo, Juan. Las tetas de la mujer me hechizan y tras el orgasmo de la camarera que se ha corrido meandose sobre la mujer, esta se dedica a limpiarle el coño por lo que me obliga a sacar la polla y se agacha para ello, dejando su culo a la altura justa para mi ataque. Si sus tetas me fascinaban, su culo me hipnotiza; redondo, duro, no lo dudo, le separo los cachetes y mi polla se dirige sola hacia el agujero, aprieto y empiezo a metérsela, poco a poco, la saco y la vuelvo a meter, como entra, me aprieta y noto el roce como nunca. Ella se mueve y deja el coño de la camarera para hacerla pasar bajo ella y dejarle su coño al alcance de la boca, la camarera, obedientemente empieza a lamer el depilado coño mientras yo la cojo por los hombros y me ayudo a darle por el culo. Al poco, la saco y ayudado por la camarera se la meto en el coño, esta empapado y mi polla se mete hasta el fondo, se la meto unas cuantas veces y vuelvo a sacarla, ahora la camarera se la mete en la boca y me da un par de mamadas antes de metérsela por el culo otra vez. Me gusta más el culo, está más apretado que el coño, aunque me tengo que contener si no, me corro. Pero la camarera no está dispuesta a olvidarse, me coge la polla sacándola del culo y se la vuelve a meter en la boca y me succiona de tal manera que tengo que levantar la cabeza para respirar profundamente; es cuando veo a María, a 4 patas siendo follada por el culo por un tío negro de 2 metros de alto y al mismo tiempo tiene otra en la boca que chupa como una posesa. Veo que se separa del negro, lo mira y le hace tumbar en el borde de la cama, ahora veo la polla del negro, parece la de un caballo, ella se gira hacia donde estoy se inclina hacia atrás y se sienta sobre ese monstruo de polla, veo perfectamente como se va introduciendo en el coño de mi esposa y va desapareciendo dentro. María empieza a saltar sobre la polla, pero no puede, entonces aparecen 2 hombres que la sujetan por debajo los brazos y le ayudan a realizar el mete y saca, la levantan y la dejan caer de golpe, no me lo creo, se clava casi toda y su cara esta desencajada. De golpe, la levantan más y el negro apunta a su culo y la dejan caer, se la mete hasta el fondo, los hombres dejan de levantarla y se queda completamente ensartada, uno de ellos se coloca delante de ella y entiendo que le clava su polla en el coño, no lo veo, pero la posición deja pocas dudas. Esa visión y el intenso rozamiento de mi polla dentro el culo de la tetona hace que no pueda resistir y me corro sin poder contenerme, además la visión hace que yo también apriete mi polla lo máximo que puedo, me quedo clavado en el culo y me abrazo para poder sobar las tetas mientras me recupero. Al poco noto que mi polla no disminuye de tamaño, vete a saber lo que había en el coctel de después de la cena, así que como la visión de mi mujer era demasiado morbosa para mí, cogí a la mujer de la mano y me dirigí hacia donde estaba María que continuaba ensartada por el negro, quería verlo de cerca, aunque al llegar no era el único espectador, se habían congregado como una docena de personas, hombres y mujeres que observaban o participaban en el espectáculo. De camino nos presentamos la italiana a la que me había follado el culo y yo, se llamaba Carina y me pregunto si María era mi mujer y si era la primera vez que asistíamos, afirme a las 2 preguntas y le pregunte el por qué, pues las primerizas pasan, sin saberlo un ritual sexual y no te preocupes, acaba de empezar y tu dedícate a disfrutar, déjame a mí, te acompañare. Al llegar era impresionante, María tenía clavada en el culo una estaca de polla negra, dura y muy larga, no sé cuánto, pero no había visto nada igual, mientras algunos hombres se turnaban en follarle el coño, algunos corriéndose ya que el coño chorreaba leche y varias mujeres no paraban de besar a María y sobarle el cuerpo. Ella estaba como una posesa, no dejaba de gemir y mover las caderas respondiendo a todas las caricias y penetraciones. Me doy cuenta que me mira y al verme, pone una cara de satisfacción que hace que mi polla se enderece y tengo la necesidad de acercarme a ella, dejar que un hombre se corra en su interior y clavarle la polla como uno más, me susurra que está muy caliente……

Vuelvo a ser María, no sé muy bien como llegue a la situación que os ha estado narrando Juan, pero a realidad es que era el centro de atracción de la fiesta, nunca me había sentido tan deseada y sentía una necesidad de seguir siéndolo, estaba como en una nube y no quería dejar de estarlo.

Tengo un inmenso miembro clavado en mi culo, sentada sobre él, las piernas completamente abiertas, me penetran el coño continuamente y me acarician y besan sin parar. En esa situación veo acercarse a Juan de la mano de una mujer que le acariciaba su miembro, veo que me mira, le sonrió le veo acercarse y se coloca detrás de uno que me está follando, tengo mi coño chorreando de leche, me la han metido y vaciado unos 6 hombres y este no tarda en hacerlo también, mi marido lo reemplaza rápidamente y me la introduce de golpe, escucho el “chop chop” al introducirse, mi coño chorrea leche, noto la polla de Juan rozarse con la polla del negro que está quieto, solo se mueve ocasionalmente, me tiene completamente empalada. Mi marido parece estar fuera de sí, me está follando como un poseso mientras tiene su vista clavada en mí y observa cómo me varias manos me acarician, me estrujan los pezones y me besan. Me vuelven a coger por debajo de los brazos y vuelven a levantarme y dejarme caer sobre la polla del negro, vuelvo a sentir una explosión de placer, ese movimiento y las violentas envestidas de Juan, hacen que note como chorrea el esperma acumulado en mi interior y vaya rezumando del interior de mi sexo. No sé si mi esposo se corre dentro, pero sale de mi con cara de satisfacción y su lugar lo ocupa la mujer que venía con él, se agacha y empieza a comerme, con sus manos me abre los labios y pasa su lengua de arriba abajo, sorbiendo todo lo que encuentra. Escucho la respiración acelerada de negro y su cuerpo se tensa, se va a correr y yo también, las lamidas de la mujer en mi coño son intensas y profundas, me hacen un efecto intenso, noto la descarga en mi culo, caliente e intensa, los que me levantan han acelerado el movimiento y la mujer se aparta de mi coño y ayudada por otra mujer, mantienen mis piernas completamente abiertas, agacho la cabeza y veo como mi coño sube y baja ensartado por una polla negra que parece que no tiene fin, levanto la vista y frente a mí, observando la penetración hay un montón de personas, unas masturbándose, otras tocando a sus vecinos, mujeres, hombres, entre ellos mi marido al que su vecino le está masturbando, exploto en un orgasmo intenso y profundo.