Nuestra no normal primera experiencia swinger

Como una visita para adentrarnos y descubrir el mundo swinger, nos llevó directamente a lo más duro.

Hola, os voy a contar nuestra primera experiencia swinger. Aunque ya lo habíamos hablado todo con anterioridad, el día del estreno fue todo una pura improvisación. Nos despertamos un sábado por la mañana como cualquier otro y a eso del mediodía entre unas cervecitas y unas tapas, nos planteamos irnos esa tarde a visitar un club swinger. Y dicho y hecho…pero no cualquier club cerca de casa no…típico de nosotros y nuestras locuras, optamos por visitar uno de una conocida localidad playera…a 200 kmts de casa. Nos vestimos para la ocasión y nos pusimos en marcha. Llegamos antes de lo previsto con lo cual teníamos tiempo para ver y analizar in situ las dos opciones que se nos presentaban y de paso tomar alguna copa para ir entrando en calor. Nos costó trabajo encontrar el primero de los clubs, nos apostamos cerca de la puerta para ver el trasiego y el tipo de gente…pero acabó no gustándonos la entrada, justo junto a dos portales de dos edificios, con mucha gente de esos edificios en las inmediaciones…era algo que, siendo nuestra primera vez, se nos antojaba algo incómodo, así que optamos por desechar este primer local. Así que nos dirigimos al segundo, este fue más fácil de encontrar y una vez localizado, decidimos tomarnos la copa en un local que tenía una terraza junto al mismo. De esa forma  matábamos dos pájaros de un tiro: tomar la copa y poder observar con tranquilidad.

Acabada la copa nos pusimos en acción, nos dirigimos a la puerta del club y allí nos recibió una chica muy amable que nos preguntó por si era la primera vez, y a la vista de la respuesta, nos condujo en un tour por todo el establecimiento. Una vez situados, nos pedimos la primera de las muchas copas que luego vendrían. Nos dedicamos en un principio a observar todo el ritual, a intercambiar amigables charlas con otras parejas y a intercambiar las primeras impresiones sobre el local. Así entre el humo del tabaco, conocimos a X, una chica venezolana que la verdad que nos facilitó mucho las cosas ya que hizo que nos sintiéramos más cómodos. Junto a ella conocimos a N y S, una pareja con la cual entablamos conversación y con la cual tomamos una copa. Él era marroquí y ella malagueña, nos contaron sus historias y nosotros les contamos las nuestras…lo habitual, hasta que sin darnos cuenta nos vimos solos en la barra y decidimos hacer nuestra propia ruta.

Nos dirigimos a la zona de parejas para ver que se cocía en ese lugar tras las mamparas de separación: una pareja aquí achuchándose, otra más allá metiéndose mano en la oscuridad y nuestra amiga X observando, M empezó a hablar con ella y un poco más allá, sola, estaba S que empezó a preguntarnos por nuestras intenciones, si solamente queríamos mirar, si queríamos realizar tocamientos, si intercambios, si tríos… y que cara puso cuando le dije que era nuestra primera vez en un club de estas características. De repente M decidió que quería bailar en la barra de pool dance, a lo que S la siguió impetuosamente. X y yo nos dirigimos tras ellas dos hacia el lugar donde rodeada de unos bancos, se erguía brillante la barra de baile. S y M comenzaron el baile lentamente, de la misma forma que muchos mirones se fueron arremolinando en la entrada de la sala para observar la danza. A medida que los movimientos de las dos se hacían más sensuales, la temperatura fue subiendo. En un momento dado apareció N, que se acomodó a mi lado dándome un codazo de complicidad a la vista de la danza. Ellas dos seguían con sus movimientos hasta que en un momento dado quedaron bailando con los pechos al descubierto….S se había quitado el top y permanecía con sus taconazos y sus vaqueros ajustadísimos y M se bajó el ceñido vestido hasta la cintura…la visión de aquellas dos hembras con aquellos maravillosos pechos nos puso a todos los que mirábamos excitadísimos….excitación que llegó a su momento álgido cuando la música paró y las dos chicas se abrazaron en torno a la barra. De repente todo se disolvió a la misma velocidad que aquel espectáculo se formó, cada uno volvió a los suyo y M y yo nos vimos otra vez solos mientras ella se ajustaba el vestido.

Necesitábamos una copa y eso fue lo que hicimos. X, S y N habían desaparecido como por ensalmo, así que tomamos nuestra copa y nos dirigimos otra vez a la zona de parejas....y voila¡¡ allí estaba N totalmente desnudo tumbado sobre una enorme cama mientras X cabalgaba sobre el…arrodillada semidesnuda y alrededor de ellos observando y besando, se encontraba S. El espectáculo era subyugante..varias parejas de pie alrededor de la cama observaban la escena: X se giraba hacia N, se daba la vuelta y gozaba con la follada.

De pronto detrás de ellos un delgado chaval comenzó a follar a una chica bastante entrada en carnes, mientras otra chica le lamía el pene a cada entrada y salida del carnoso coño. Todo era de lo más irreal, pero a la vez cercano, M y yo para esos momentos estábamos de lo más calientes y podía pasar cualquier cosa. X se levantó de la cama y se retiró envuelta en una toalla, N se levantó dejando una chorreante polla colgando…no la tenía muy larga, aunque si bastante gruesa, se vistió y nos fuimos a la barra a tomar algo que nos refrescara. Mientras estábamos con nuestra copa, vimos que muchas gente entraba en la zona de parejas para ver a dos holandesas haciéndose un lésbico, una vez allí nos acomodamos de pie en un lado de la cama junto a la pared. Las dos chicas se estaban literalmente devorando entre risas y jadeos….yo para ese momento estaba flipando con lo que allí pasaba.

N se nos acercó sigilosamente poco a poco y se puso detrás de mi mujer. M y yo nos percatamos e instintivamente comenzamos a besarnos, a lo que N respondió pegando su cuerpo al de M. M comenzó a notar el bulto de N oprimiendo su culo, a lo que yo respondía pegando mi bulto a su entrepierna…la teníamos entre los dos..los besos de M se fueron haciendo más lascivos y en un momento dado giró su cabeza y comenzó a besar a N….sus lenguas se entrelazaron…aquella visión, lejos de molestarme, me puso a cien….yo dirigí mi mano hacia el húmedo coño e introduje dos dedos en aquel mar de jugos….los saqué y alargué la mano hacia atrás hasta juntarla con la de N para desde abajo empujar los dos sobre el mojado coño de M……todos queríamos más…….M no paraba de gemir….y de repente paró, se recompuso el vestido, nos miró a los dos con una cara que yo no había visto nunca y nos invitó a seguirla….entró en uno de los cuartos y cerró la puerta detrás suya…N y yo nos quedamos fuera mirándonos con sorpresa….al momento la puerta se abrió y ella nos susurró que entrásemos. Entramos los dos y allí estaba ella, mi diosa, desnuda arrodillada sobre el borde de la cama, se había corrido el maquillaje deliberadamente para ofrecernos un aspecto mayor de como se sentía…una auténtica puta. Nos dijo que cerráramos con pestillo y pidió con desesperación nuestras pollas, cosa en que la complacimos inmediatamente. N se refirió a mi polla como un Kalashnikov, aun no comprendo muy bien la comparación, mi polla no es que sea nada especial, me mide 18 ctms aunque eso si, tengo el glande muy grueso. La suya no sería muy larga, pero era enormemente gruesa…M no paraba de lamer ambos miembros como si no hubiese mañana….yo no pude aguantar más y solté un chorro de semen que hasta yo me asombré…me aparté a un lado mientras M seguía chupando el pollón de N. Lo agarró con violencia de un brazo y lo sentó en el borde de la cama, le enfundó un condón con una maestría que yo desconocía (yo estoy vasectomizado) y se subió a horcajadas sobre el….a medida que el grueso miembro de N entraba en su húmeda vagina, la cara de M cambiaba y sus gestos se hacían más sucios…estaba disfrutando de lo lindo.

Ni que decir tengo que esa visión había puesto mi Kalashnikov en forma de nuevo, hacía tiempo que no me la sentía tan dura, me dolía….y M se percató de ello. Me miró con una cara que conozco, me subí a la cama y comenzó a chuparla....me estaba volviendo loco…ella seguía con un suave sube y baja sobre la gruesa polla de N….este empezó a llamarla zorra, a pedirle que le cabalgase más fuerte…pero M me tenía reservado el plato fuerte a mi. Me pidió que me bajara de la cama y que la observara desde atrás…eso hice y allí quedé con mi polla palpitando y dura frente a la visión de mi mujer con su perfecto culo cabalgando esa hermosa polla….ella se metió dos dedos en la boca y los dirigió chorreando de saliva hacia su ano…comenzó a masajearse sin dejar de subir y bajar sobre la polla del marroquí y volvió su cara hacia mi…me señaló mi polla y se tocó el ano….esa visión casi me vuelve loco….estaba claro que iba a cumplir su deseo…me acerqué y apreté mi glande sobre la entrada, ella saltó ligeramente, pero emitió un si largo y sonoro…yo empujé suavemente y el capullo entró….el resto fue detrás sin problema…en ese momento, M se volvió loca y comenzó una cabalgada salvaje…tenía dos pollas dentro y por sus movimientos yo sabía que estaba a punto de correrse…comenzó a gemir y emitió un fuerte chillido…pero en vez de parar, redobló sus acometidas…N y yo seguimos empujando con fuerza…ella gritaba que la estábamos destrozando…que le gustaba…ya no pude más….la saqué y me corrí sobre su espalda….ella saltó y de la polla de N salió un espeso chorro de semen que le manchó todo el abdomen…N se derrumbó sobre la cama y ella se limpió con sus dedos y se tragó todo nuestro semen…yo no daba crédito a lo que había visto, no era lo que me esperaba de nuestra primera visita a un club swinger. Nos vestimos en silencio, cada uno salió del cuarto y desapareció y yo fui al aparcamiento y allí estaba ella, junto a la puerta del coche fumando un cigarro....no nos dijimos nada y volvimos al hotel…serían las cuatro de la mañana….el resto de la noche hasta el amanecer fue un sinfín del mejor sexo que hemos tenido nunca…yo nunca hubiese creído que a mi edad podría aguantar tanto tiempo follando. Aquella experiencia cambió para siempre nuestra vida sexual.