Nos descubrio mi madre
Ahora les voy a contar de algo que a pesar de que cualquiera pensaria que fue un problema o una tragedia para mi fue como una liberación, ya les conte que empece a trabajar en el negocio de Alberto por las tardes después de la escuela, asi que prácticamente teniamos relaciones diario...
Nos descubrio mi madre
Ahora les voy a contar de algo que a pesar de que cualquiera pensaria que fue un problema o una tragedia para mi fue como una liberación, ya les conte que empece a trabajar en el negocio de Alberto por las tardes después de la escuela, asi que prácticamente teniamos relaciones diario, todo era felicidad para mi teniamos ya casi 3 años de una relacion perfeta pero un dia se me ocurrio pedirle a Alberto que pasaramos una noche completa en mi casa, queria ser suya en mi cama, bajo mis sabanas, al principio el se opuso pero cuando le dije que mi madre saldria todo el fin de semana siguiente acepto, asi que teniamos la oportunidad de amarnos sin escondernos de nadie y gozar de nuestro amor e intimidad, el resto de la semana me parecio eterno pero por fin llego el dia sabado, despedi a mi madre, no sin que antes me diera toda una lista de recomendaciones e instrucciones, por fin se fue y yo empece a preparar el que seria nuestro nido de amor por unas horas.
Alberto llego puntual a las 4 de la tarde, yo lo estaba esperando vistiendo una bata de encaje transparente de color rosa que el me habia regalado, en juego con la bata me puse una tanga y un bra del mismo color y tela, y claro esta unos zapatos de tacon altisimo como a el le gusta , al estar en la puerta de mi casa le di un jalon para hacerlo entrar rapidamente, no podia arriesgarme a que algun vecino lo viera, ya dentro nos fundimos en un largo y tierno beso, fue un beso suave y muy prolongado, no habia prisas, teniamos toda la tarde y la noche entera para nosotros, después de ese largo beso pasamos al comedor donde le servi lo que yo personalmente habia preparado para la comida, al terminar le lleve el postre, eran fresas con crema pastelera, cuando le deje el plato con sus fresas, el me jalo hacia el y me sento sobre la mesa frente a el, tomo el bote de crema pastelera y unto una gran cantidad sobre mi abdomen y con su lengua empeso a limpiarme muy lentamente.
Cuando dejo mi abdomen sin rastro de crema, volvio a tomar el bote y esta vez me puso sobre el brassier y de igual forma se dedico a limpiarme, yo estaba gozando mucho era algo nuevo, ahí me encontraba yo sobre la mesa del comedor de la casa de mi madre, semidesnuda y gozando de las caricias de mi amante y esta situación me llenaba de una inmensa morbosidad, mi vagina estaba ya escurriendo gran cantidad de liquidos, el lo noto ya que mientras chupaba mi brassier su mano habia entrado dentro de mi tanga y jugaba con mis labios baginales.
Su boca fue bajando lentamente hasta llegar a mi tanga, con sus manos la levanto un poco y puso gran cantidad de crema sobre mi monte de Venus, era tanta la crema que ahí puso que mi tanga se abultaba con el relleno de la crema y se esparcia para los lados saliendoseme de la tanga, el me abrio las piernas y empeso a limpiar la crema que se salia de la tanga, yo sentia algo asi como descargas electricas en mi vientre, sentir su lengua tan cerca de mi vagina y la frescura de la crema sobre mi vagina y ya una gran cantidad tambien dentro de ella, me hacian sentir miles de cosas raras diferentes y excitantes, estaba yo simplemente enloquecida.
Mi vagina escurria ahora mis liquidos mesclados con la crema y prácticamente mi tanga estaba empapada y el aun no llegaba su lengua a la orilla de la tanga, debo decirles que con este juego tuve mi primer orgasmo de la tarde, cuando por fin su lengua llego a posarse sobre mi tanga senti que me moria, su lengua presionaba mi tanga contra mi vagina y al tiempo que la crema se volvia a salir por los lados de la tanga, otra parte de la crema se introducia en mi llenandome el interior de la vagina, sus dedos poco a poco fueron retirandome la tanga por completo y me encanto como se veia mi entrepierna toda llena de crema, parecia un pequeño pastel, un pastel que esperaba a que el festejado le diera su mordida y le pusiera su vela.
Me entrego la tanga que acababa de quitarme y sin pensarlo me la lleve a la boca tenia un sabor delicioso, mis liquidos le daban un sabor diferente a la crema.
Estaba yo extasiada saboreando mi prenda cuando senti por fin su lengua sobre mi vagina, jugaba con mis labios de una forma magnifica, su lengua entraba en mi intentando sacar hasta el ultimo rastro de la crema que ahí se habia metido, después no solo su lengua urgaba dentro de mi, dos de sus dedos se le unieron en la busqueda de mas crema en mi interior, cuando termino de chuparme dejandome completamente limpia yo estaba como muerta habia sido una cantidad inmensa de placer y sin la necesidad de penetrarme.
Cuando me recupere, lo vi sentado aun en la silla y observandome, le pregunte que era lo que estaba pensando y me respondio que le gustaba admirarme, que lo tenia loco y que mi cuerpo le encantaba, baje de la mesa y me arrodille frente a el bajandole el pantalón le dije que el ya habia comido su postre y que ahora me tocaba a mi, asi que una vez que deje libre ese duro y hermoso pene, le unte crema a todo lo largo y una mayor cantidad en la punta, empese a chuparlo lentamente como si fuera un helado, mi lengua recorria todo su tronco y cuando se acababa la crema volvia a ponerle mas, de verdad estaba disfrutando como nunca de esas chupadas que le daba, su respiración aumentaba de ritmo y sus gemidos me indicaban que muy pronto eyacularia, asi que me meti casi la totalidad de ese riquisimo pene en mi boca y con mi mano derecha lo masturbaba y con la izquierda acariciaba su abdomen, senti la gloria nuevamente cuando senti varios chorros de semen llenar mi boca, por la sorpresa me costo trabajo tomarme su semen, pero al final no deje que se escapara ni una sola gota, nos acomodamos la ropa y pasamos a la sala a ver televisión.
Al caer la noche merendamos y nos dispusimos a irnos a acostar, pero como estaba muy interesante la película que pasaban, decidi yo misma que durmieramos en la recamara de mi madre que era la unica recamara con televisión, mas tarde me arrepentiria de esa decisión.
Al terminar de ver la película nos abrazamos y empesamos a vesarnos muy lentamente, su lengua urgaba en mi boca buscando la mia, y al mismo tiempo sus manos retiraban de mi cuerpo la bata y cada una de mis prendas, en poco tiempo me dejo completamente desnuda, sus dedos hacian maravillas sobre mi piel, yo no podia mas y casi le arranque la ropa, sentir su cuerpo desnudo junto al mio era fenomenal, su calides, la dureza de su miembro rosando mi abdomen, se recosto sobre mi y podia sentir su pene rosando la entrada de mi vagina.
Por reflejo ante esta sensación abri las piernas para darle entrada a mi interior, su pene aprovecho mi gran lubricación y sin mayor esfuerzo se perdio completamente dentro de mi intimidad, sus movimientos eran lentos entraba y salia de mi dandome un placer inmenso, fue un largo rato el que lo hicimos asi, queria hacer de esa noche algo unico y especial, después fue aumentando la velocidad de sus movimientos y yo aumentaba el sonido de mis gemidos hasta hacer que fueran gritos, a gritos le decia cuanto lo amaba y cuanto placer me daba, tambien gritando le pedia que no se detuviera que me siguiera penetrando asi, se me olvido por completo que vivia en un edificio y que habia vecinos a rededor, cuando me lleno mi vagina con su candente y espeso semen volvi a gritarle que me encantaba que me llenara con su leche, decansamos un rato, pero yo queria aun mas, asi que me acomode para poder chuparle su miembro y una vez que estuvo levantado de nuevo, me acomode sobre el y baje poco a poco haciendo que su pene se perdiera dentro de mi ano, cuando senti dento de mi aproximadamente la mitad de su miembro, me deje caer sobre el para que entrara de un solo golpe, de mi garganta escapo un grito enorme, mescla de dolor y placer, después de este grito hubo muchisimos mas, cada metida que me daba de pene era un grito que se escapaba de mi garganta, sin medir consecuencias ni recordando el lugar donde estaba empese a gritarle que me encantaba que me partiera el ano en dos, que me enloquecia como me cogia, que queria que me llenara el ano con su leche y mas cosas por el estilo estaba yo completamente fuera de mi, me sentia feliz, extasiada, en las nuves, como drogada por el placer, me sentia en pocas palabras la mas puta del mundo y asi lo grite, le dije que era fantastico ser su puta que nadie me haria gozar nunca como el, a Alberto parecia exitarle que le dijera todas esas cosas y mas fuerte me bombeaba el ano.
No se bien a bien que tiempo paso pero hise que dos veces me llenara con su lechita mi ano, perdi la cuenta de la cantidad de orgasmos que tuve estando asi ensartada por ese magico palo del placer, me baje de el y me recoste dandole la espalda, levante una de mis piernas y aprovechando que aun estaba erecto, me lo volvi a introducir en el ano y baje mi pierna haciendo presion al maximo en su pene con mi ano y mis nalgas, no nos moviamos solo sentia su dureza dentro de mi, ya a estas alturas sentia un pequeño ardor en mi ano pero no me importaba queria seguir sintiendo su pene llenandome por completo, asi nos gano el sueño y permanecio dentro de mi ano hasta el dia siguiente.
Desperte por los movimientos de Alberto sacando y metiendo de nuevo su pene en mi fue un despertar unico, volvio a mi la lujuria y mi respiración aumentaba de nuevo pero esta vez no grite como la noche anterior, creo que ya no tenia fuerzas, entre gemidos le pedi que me avisara cuando fuera a terminar el asintio con la cabeza, al poco rato de mi petición, lo oi decirme de forma entrecortada "mi amor me vas a hacer acabar" cuando oi esto saque rapidamente su pene de mi ano y me arrodille sobre la cama para chuparlo, casi se lo arrancaba con la succion de mis labios, senti grandes chorros de semen llenar mi boca pero en esta ocasión no me lo tome, lo guarde en mi boca y cuando estuve segura que no quedaba mas, abri la boca para vertir ese semen sobre su pene aun duro, lo cubri por completo y lo acariciaba y de vez en vez lo volvia a chupar, se sentia rico y pegajoso acariciarlo mientras embarraba el semen a todo lo largo de su miembro.
Habiamos gozado como nunca esa cogida, pero el encanto se acabo cuando me levante de chupar su pene y vi a mi madre que nos observaba desde la puerta de la recamara, su mirada estaba cargada de coraje y odio, toda la pasion sentida se me convirtió en miedo, pero al mismo tiempo me sentia segura y protegida por Alberto, mi madre no dijo nada se salio y oi que se fue a la cocina, eso me lleno de un panico enorme, pense que podria regresar con un cuchillo o algo asi, rapidamente le avise a Albeto y a toda velocidad nos vestimos y fuimos a su encuentro.
Llegamos juntos a la cocina y ella estaba sentada frente a la mesa que ahí teniamos, volteo a verme y solo me dijo "ves como si tenia razon en decir que el tipo este te habia convertido en su querida" yo quise explicarle que de verdad nosotros nos amabamos pero no me dejo decir mas de tres palabras seguidas, me dijo que todos los vecinas sabian la clase de puta callejera que era yo que la noche anterior todo el edificio escucho mis vulgaridades, que ella regreso porque uno de esos vecinos le hablo al celular y le dijo con lujo de detalles todo lo que yo decia.
Me quede sin nada que decirle y fue cunado Alberto quiso hablar pero mi madre se lo impido, en ese momento fue cuando mi madre volteao a donde estabamos nosotros le dijo a Alberto "bueno ya estaras feliz has prostituido a mi hija" Alberto se puso igual o peor de enojado que mi madre y le grito que yo no era ninguna prostituta que si eso pensaba de su hija de verdad ella era la enferma que el de verdad me amaba, mi mama parecio tranquilisarse un poco, respiro profundo y de una forma muy calmada me dijo
"A partir e hoy estas muerta para mi vete de mi casa en este momento"
Crei que estaba bromeando o que lo decia solo por el coraje, pero cuando le dije que si era su decisión la aceptaba y que solo subiria por mis cosas, en ese momento comprendi que hablaba en serio y muy en serio, se levanto de la silla y tomandome con mucha fuerza del antebrazo me jalo hasta la puerta, la abrio y me empujo afuera de la casa unto con Alberto que venia junto a nosotras, mi madre todavía me grito:
"Te dije que te largaras ahorita, te vas como lo que eres una puta y solo te llevas lo puesto, y recuerda para i estas muerta"
Después de esto dio un portaso que casi sella la puerta me quede como idiota, cuando reaccione abrace a Alberto y le pedi que me sacara de ahí, nos subimos a su camioneta y dimos varias vueltas a la ciudad sin decir ni una sola palabra, bueno el si hablaba me decia que regresaramos a aclarar las cosas, que el me cuidaria que no me preocupara, etc, yo agradecia su apoyo porque en ningun momento intento escaparse de la situación, después de varias horas por fin abri la boca y le pregunte: "Alberto de verdad me amas" Detuvo bruscamente la camioneta , me abrazo y mirandome a los ojos de la forma en que solo el sabe me respondio que me amaba como nunca habia amado a nadie en el mundo que su vida era solo de las gemelas y mia.
Esto era lo unico que me faltaba escuchar ya que la salida de mi casa dentro de todo era lo mejor ya que desde hacia muchos años la relacion con mi madre era de lo peor, peleabamos por todo, me tenia por criada, no me dejaba salir a ningun lado, era una madre enferma y chantajista, ademas de que estaba segura que su coraje no era porque fuera yo o no una puta como me dijo, sino porque ella siempre habia querido meterse con Alberto.
Le dije a Alberto que con su amor y apoyo saldria yo rapidamente de ese problema y le pedi que fueramos a cenar, estaba segura que con el sueldo que me pagaba Alberto podia conseguir fácilmente alquilar un cuarto para mi, lo que verdaderamente me preocupaba era mi ropa y algunas cosas de la escuela, ademas de donde pasaria esa noche, pero a Alberto se le ocurrio una buena idea, me dijo que le marcara a su esposa y le pidiera permiso para quedarse en su casa y que le platicara el problema, me parecio algo loco pero lo hise y la señora acepto de inmediato me dijo que tomara un taxi y ella lo pagaba ahí, de nuevo volvi a ver que ella todo lo solucionaba con dinero.
Llegue a la casa de Alberto sola pues no podiamos llegar juntos obviamente, cuando llegue tuve que fingir tristesa y le conte lo sucedido a la señora, logico no le dije que tuve sexo con nadie,solo le dije que habiamos peleado mi madre y yo y que me habia corrido, lo que me dijo ala final me molesto bastante, fue algo asi "no te preocupes chiquilla mañana le pedire al bueno para nada de mi marido que te ayude a buscar un cuartito para que vivas" me dio tanto coraje que ahí si me solte a llorar de verdad pero no de la tristeza sino del coraje, me subi a dormir y no oi a que hora llego Alberto, al dia siguiente me levante temprano para ir a la escuela antes de llegar compre una libreta ya que Alberto me habia dado dinero, lo raro fue que al salir el ya no estaba en su casa, al salir de la escuela me diriji como siempre a trabajar, llegue a revisar mis pendientes y en eso sono mi extencion, era Alberto que queria verme de inmediato en su oficina, me extraño pues se oia muy serio, pense que tal vez habia algun problema de trabajo, me diriji rapidamente a su oficina y apenas entre agarro su saco y me dijo acompañame, dejo instrucciones con una de las vendedoras y nos salimos de la oficina.
Todo el camino me la pase preguntando que pasaba y el solo decia que no fuera impaciente que en poco tiempo me enteraria, llegamos a un edificio de la colonia del Valle, subimos hasta el ultimo piso, salimos del elevador y pude ver que solo habia un departamento en ese piso, Alberto abrio la puerta, mi primera idea fue que ahí pondría las oficinas ya que tenia tiempo con esa idea, pero me equivoque, el departamento estaba arreglado como casa habitación no como oficina, al preguntarle que significaba eso, por toda respuesta extendio su mano y me entrego unas llaves, me quede sorprendida y como no reaccionaba el me dijo, si amor es tuyo, para que no te preocupes de nada de hoy en adelante, lo abrace feliz de la vida, pero no feliz por el departamento ni nada, mi felicidad era por su apoyo y amor.
Me mostro el departamento, estaba completamente amueblado y en la recamara el closette estaba repleto de ropa a mi medida, no en valde muchas veces el me habia comprado ropa, tambien habia comprado los libros y todo lo que necesitaba para la escuela, ademas de algunos pares de zapatos, yo solo atine a preguntarle si el viviria conmigo aunque fuera uno o dos dias a la semana, el me abrazo y me dio un beso tierno limpio, puro y lleno de amor, estaba segura que desde ese dia mi vida seria completamente diferente y llena de amor y de ilusiones.