Noche de boda
Quien lo iba a decir, nunca digas nunca
Era un día señalado desde hacía tiempo, no estaba seguro de ir hasta el último momento, ella era una mujer que había ocupado muchas de mis fantasías masturbatorias y el que se casaba con ella tuvo la suerte de conocerla un par de meses antes que yo.
Trabajamos en la misma empresa, en departamentos diferentes, cuando me ascendieron tuve que empezar a moverme también por la zona noble donde se tomaban las decisiones, como responsable de calidad, gran parte de la buena marcha de la fabricación se debía a mi trabajo, ella, María, estaba en control de producción y el equilibrio entre los dos departamentos era vital.
Siempre me llamó la atención, elegantemente vestida, siempre de tacón, maquillada lo justo, siempre con un punto de insinuación en forma de transparencias, escotes, faldas abiertas, pero sin ser provocativa, en cambio sus ojos, su rostro no daba lugar a dudas, sobretodo cuando estaba relajada y en el trabajo no ocurría demasiado, pelo rizado rubio, ojos de color miel, pechos generosos, figura estilizada con algo de barriga y un par de piernas espectaculares, largas y bien torneadas con tobillos muy delgados, no aparentaba para nada la edad que tenía, que crei rondaba los 30. Yo divorciado, moreno, bien de cuerpo para los 40, algo de barriga, espalda ancha, de mirada picara y peligroso, según la opinión de algunas amigas, aunque nunca me vi asi, soy estrovertido, ocurrente y algo degenerado.
En ese momento, no tenía relaciones con nadie, mi nuevo puesto me tomaba mucho tiempo, tanto que solo salía a tomar alguna cerveza con los compañeros de trabajo al terminar la jornada, los fines de semana que no tenía a los niños, los dedicaba a hacer algo de deporte, ir al cine, ver películas en casa tirado en el sofá, todo muy monótono, hasta que llegaron unas navidades y se hizo una cena de empresa y como suele pasar, los de producción juntos en un lado y los de oficinas en otro, una magnifica cena regada con buen vino que hizo relajar el ambiente, las chicas cuchicheando juntas y mirando a los chicos de reojo…
- Seguro que hablan de nosotros, comento uno de los técnicos
- Estas que no salen nada mas que con la gente de siempre se sienten libres y se desmelenan sin sus parejas, dijo otro
- Pues como nosotros, pero ellas lo disimulan mejor, dije yo
Las caras que de unos y otras se iban poniendo más interesantes a medida que se consumían botellas de vino, llegaron los postres y comenzó un juego de provocación por parte de las chicas más jóvenes que veían risueñas como alguno de los operarios bufaban como ciervos en celo cuando jugaban con las cucharillas y el merengue, María que en un principio había sido participe de los cuchicheos y primeros juegos, empezó a apartarse y aponer cara de disgusto, no le iban esos gestos tan esplícitos, yo que estaba disfrutando de lo pardillos que se mostraban hombres hechos y derechos con la mínima insinuación de unas chicas de buen, cruce en esos momentos la mirada con ella, hizo un gesto cansino y yo respondí encogiendo los hombros y con una leve sonrisa, ella también sonrió. Llego el momento de las copas y todavía no se porque me levante y me dirigí directo a ella, me acerque a su oreja…
- Veo que estas disfrutando tanto como yo, te parece que tomemos la copa en la barra?
- De acuerdo, mirándome inquisitiva
Pedí un bourbon y ella un gin tonic, nos quedamos en la barra hablando, primero de trabajo y después de nuestras vidas, tenía novio desde hacía un año, con planes de boda, siempre se quiso casar pero su novio de toda la vida la engaño y tardó en volver a tener relaciones, yo le hable de mi matrimonio fallido de como había pasado por las diferentes fases hasta que ahora simplemente estoy solo, con mis hijos y algún que otro buen amigo. A medida que iban bajando las copas, la conversación se fue poniendo más comprometida hasta que nos interrumpieron, algunos compañeros querían continuar la fiesta en algún pub donde pusieran música bailable y aceptamos contentos seguir la noche, en el pub seguimos bebiendo, bailamos y hubo algún acercamiento corporal que ni ella ni yo quisimos eludir, apenas se oia pero nuestras miradas hablaban más que nuestras bocas finalmente bailamos juntos y una extraña sensación recorrió mi espina dorsal, notaba su nerviosismo pero se pegaba cada vez más a mi, nos miramos a los ojos, no había mucha luz estábamos separados de los demás, la bese, fue suave pero intenso, ella me miro un instante y me beso con pasión, su lengua invadía mi boca y luchaba con la mia, la sujete fuerte por la cintura y respondí con pasión a su beso, que a esas alturas era mucho más que un beso, notaba sus endurecidos pezones a través de las telas que nos separaban y ella se pegaba contra la dureza que había aparecido en mi entrepierna, su mirada rendida, pasional, encendida,… de haber querido nos hubiéramos follado el uno al otro allí mismo. No podía pensar solo actuaba y a ella le debía pasar lo mismo. Cambio la música y fue como si despertáramos de un sueño.
- Perdóname, le dije, no pude evitarlo tenía que besarte
- Yo debí pararlo pero no quería es como si algo me empujara a ti, pero no puede ser tengo novio y le quiero, me voy a casar joder, lo siento
- Esta bien no tenemos porque dar mas importancia a lo que ha sucedido, simplemente nos besamos
- Y tu siempre besas asi?
- Bueno, hace bastante que no lo hacía, no lo pensé mucho
- Debo irme, si me quedo contigo no se que pasara
- Yo si lo se, es mejor dejarlo asi o no podrás resistirte
Me miro incrédula
- Que creído lo tienes
- No lo soy, es la verdad
La agarre del brazo me acerque a su oreja y le susurre
- De no tener novio hoy no te librabas hasta el amanecer
- Estas muy seguro de ti mismo, palabras, palabras,… Me voy o…
- …O?
- Me arrepentiré
Me dio un beso en la mejilla y se fue, yo me quede pensativo asimilando todo lo que paso. No daba crédito, esa mujer apenas había cruzado unas palabras en un año conmigo, sin mostrar interés alguno, tampoco me había llamado la atención de forma especial, aunque reconozco que las pocas veces que nos miramos a los ojos había algo que me perturbaba como hacia tiempo que no ocurria.
Llegue a casa y tuve todo un torbellino mental a cuenta de lo que había pasado, no nos veríamos hasta el lunes y eso me molestaba, hubiese querido estar mas tiempo con ella.
Me levante el domingo con una erección terrible como hacia tiempo, esta mujer me gustaba de forma intensa y podía decir lo que quisiera pero mi cuerpo estaba reaccionando con solo el recuerdo de aquellos besos furtivos, hice ejercicio como nunca, fui a comer con amigos, volvi a casa me puse una película en netflix y en todo ese tiempo solo tenia en mente su forma de mirarme mientras nos besábamos. Me costó dormir y ese lunes por la mañana me arregle más de lo normal para verla aunque fuera de pasada, al llegar al parking y bajar del coche una marea de remordimientos me llego, no me gustaba que estuviera en una relación, no quería ser la causa de una ruptura y a la vez no podía quitarme su mirada, seamos serios y haz según dijiste, no le des más importancia y entre a trabajar.
Apenas subí una vez a las oficinas por la tarde, había mucho trabajo y poco tiempo para hacer las entregas a tiempo, cosa que agradecí, termine muy cansado y al ir a recoger el coche la vi subirse al suyo, me miró sonrió y se subió su coche, la salude con la mano y una sonrisa. Todo estaba bien, sin reproches ni preocupaciones, seguiríamos haciendo nuestra vida.
Despues de las navidades ganamos un contrato con una empresa japonesa, era muy importante por muchas razones, nos venían a ver, tanto las instalaciones como el personal y como funcionábamos, alguien tenía que ir con ellos, aparte de los ejecutivos necesitaban un técnico y me eligieron para hablar con mis alter ego japoneses, entre el grupo nuestro estaba María, conocedora de los entresijos financieros en relación a la producción completábamos la parte técnica y nos toco ir juntos con los japoneses, tras horas de reunión, intercambiamos informes y los lleváramos a cenar, un fastidio, ya antes había estado con japoneses y a parte de llevar mal el alcohol, no tienen medida de diversión lo hacen hasta desmayarse y eso pasó, cenamos, fuimos a un tablao típico y acabamos en un karaoke, yo les observaba sin apenas beber y María paso a ser el centro de atención de los nipones, primero suavemente hasta que empezaron un acoso que a duras ella podía evitar, hice lo que pude tratando de que no se pasaran de la forma más diplomática posible, hasta que el alcohol hizo mella en ellos y como pudimos, entre María y yo, los llevamos su hotel. Al abrir la puerta de su habitación uno de los japoneses se desperezo con la mala suerte de entrar en el escote de la blusa de María, se rompieron algunos botones y sus pechos quedaron a la vista de todos, llevaba un sujetador transparente, ella me miro y dejo caer al japonés mientras cerraba su blusa, los deje uno a uno en sus camas y cerré la puerta, María estaba colorada como un tomate pero tenia media sonrisa pícara en la cara.
- Tu crees que se acordarán mañana?
- Ellos? No se, pero yo jamás olvidaré lo tiesos que tenías los pezones, a ti los japoneses te han puesto
Me miraba con la boca abierta
- Tu quien crees que soy? Además son enanos y seguro que tienen el pito pequeño y yo necesito herramientas de buen tamaño
Ahora era yo el que abría la boca y al verme se sonrojo aun más
- Hasta hace unos segundos hubiera dicho que eres una madurita interesante, elegante pero algo aburrida
- Y ahora?
- Diría que eres una madurita interesante, elegante y algo degenerada
Soltó la blusa que se volvió a abrir y fue a darme un cachete, la paré y le di un beso intenso, caliente, húmedo y largo, la mano que quería pegarme paso a agarrarme la cabeza por la nuca, nuestras lenguas volvían a encontrarse semanas después, en un alarde de atrevimiento dirigi mi mano por debajo de su falda, acaricie sus muslos, ella gemía y llegue a su minimo tanga, chorreaba, María estaba cachonda como jamás crei que fuera posible, oia los ruidos de mis dedos acariciando su mojodísimo coño, no paraba de gemir, empujaba su pubis contra mi mano sin dejar de besarme, movía las caderas de adelante atrás de forma espasmódica, se estaba corriendo en el pasillo del hotel, apoyada contra la pared la sujetaba por la cintura porque el trabajo de mis dedos en su entrepierna le doblaba las rodillas, cada vez que me acercaba a su clítoris, lo frotaba con fuerza o suavemente, se estaba volviendo loca, susrraba a mi oído
- Dios, siiii, siiii, aaaaah, siiii dame, dame,…
Cogi dos dedos y la penetre con ellos, dio un respingo y abrió aun más las piernas, estaba desatada y no podía abrir los ojos, estaba disfrutando como nunca mientras manoseaba aquella mujer increíble.
- Mas que degenerada, creo que eres un poco puta o mas bien, eres muy puta
- Siiii, soy tu puta
Ostras, que estaba pasando?, no tenia novio? No sabia darle lo suyo a esta hembra de fuego?
- Enseñame lo puta que eres, quiero ver tur tetas
Sin dejar de penetrarla con los dedos se saco las tetas por encima del sujetador y mi boca se apropio del pezón más cercano, con ansia, con hambre. Sus gemidos se transformaron en aullidos, no debía haber hospedados cerca, habrían salido al oir el escándalo, entonces empezó a convulsionar y chorros de flujo salieron a presión de su coño, mojándome la mano, el brazo, el pantalón y la moqueta del pasillo. Nuestras respiraciones se entrecortaban nos miramos a los ojos fue como ver dentro de nosotros, nos recompusimos lo mejor que pudimos en los servicios del hotel y me ofreci a llevarla a su casa, no nos hablamos en todo el trayecto y cuando se bajo del coche a 100 metros de su portal se despidió dándome un beso en la boca.
En los días siguientes volvimos a trabajar con normalidad, sin hacer referencia a nada de lo ocurrido, no sería el primer en hablar de ello y ella no lo haría.
Al cabo de unas semanas viajamos a Japón junto a otros ejecutivos de la empresa para devolver la visita a nuestro nuevo cliente, todo muy organizado y coordinado, fueron jornadas intensas y el ultimo dia fuimos invitados a un complejo turístico termal especializado en tratamientos corporales, etc, yo me moria por volver a tener a María en mis brazos pero no hubo ocasión, hasta la cena, coincidimos al lado uno del otro en las típicas mesas bajas japonesas degustamos platos excelentes, niguiri, otonomiyaki, ramen,… todo excelente, salvo el sake, no me gustan los licores calientes, María parecía disfrutar especialmente y volvia a ser el centro de atención de nuestros anfitriones, pero esta vez si empezaban a acosarla no podría contenerlos a todos, cuando terminó la cena nos llevaron a un espectáculo de corte erótico, muy japonés, Maria rodeada de japoneses se removia en su asiento y es que la estaban metiendo mano entre 4, se movio como pudo hasta ponerse a mi lado y me bastó lanzar una mirada torva a cada japones para que dejaran en paz el voluptuoso cuerpo de María
- Sabes que esto no te saldrá gratis
- Sabes que hoy no podras escaparte tan rápido, respondio ella
Ahora era ella la que me miraba pícaramente con media sonrisa. El espectáculo proseguia en el escenario y un grupo de chicos vestidos de colegiales le hacían de todo a una mujer mas mayor con unas tetas enormes que hacía de maestra, la escena me habría motiva una erección monstruosa si no fuera por que María estaba a mi lado y prácticamente podía oler su excitación, en cuanto pudimos huir respetuosamente nos fuimos al hotel, en le ascensor nuestras bocas se fusionaron en uno de esos besos que te hacen perder el sentido del tiempo, llegamos a mi habitación y nos desnudamos casi de forma automática, sin dejar de besarnos, tocarnos, la deje encima de la cama con solo sus zapatos de tacon alto y las piernas abiertas dándome un primer plano de un coño rosado y cremoso, debía llevar excitada un buen rato
- Esos japoneses te han puesto eh?
- Si aunque eran muy torpes, si hubieras sido tu no me habría movido
- Veamos si te mueves o no
Empece a besar sus muslos mientras mis manos se hacían con sus tetas, su torso, fui subiendo mi lengua hasta llegar cerca de sus labios exteriores, María respiraba de forma entrecortada, sono un móvil, ella lo cogio y no paraba de tocarla y besarla, mientras ella hacia esfuerzos para parecer calmada, por la forma que se despidió debía ser su novio,…
- Eres un cabrón me podía descubrir
- Si hubiera querido lo habría hecho
Le di un lengüetazo fuerte en su hinchado clítoris y ella arqueo la espalda mientras emitia un profundo suspiro
- Oh dio, eres un cabronazo me estoy derritiendo
Ni me moleste en contestar, levante más sus piernas para tener sus dos agujeros a mi merced, fui combinando mis dedos con mi boca, ella no paraba de tener espasmos y de gemir, estos gemidos se hacían gritos cuando llegaba al orgasmo, una, dos, … deje de contar las veces que se corrió en mi boca las gotas de su placer mojaban mi pecho y corrian por mi estomago hasta la tripa, nunca via a una mujer correrse tanto y hacia mucho tiempo que no tenia tal erección, me levante y ella me miro, seguía con las piernas abiertas, acerque la punta de mi polla a su chapoteante coño y empece a dar golpecitos con la cabezota morada
- Dios, métemela, follame de una vez
- Pidelo bien
- Follate a tu puta, por favor lléname con tu verga
Comence a entrar dentro de ella y lo hice despacio, con parsimonia, ella cerró los ojos abrió la boca y dejo salir un profundo suspiro, arqueaba la espalda a medida que me metia dentro de ella
- Joder, que rico, me estas partiendo, dios, siiiiii
Mi polla no es que sea muy larga, son 17 cm, pero tiene un grosor de 6 cm e impresiona bastante a quien la prueba y Maria no fue una excepción, más bien al contrario, estaba muy ajustada, o bien hacia tiempo que no follaba o bien la visitaba una herramienta más delgada, el caso es que notaba como se contraía con cada embestida y se volvia a estirar, estaba disfrutando siendo empalada por mi, despacio pero sin pausa, con un ligero aumento del ritmo cada vez, mientras besaba sus pies, me apoderaba de sus tetas, le daba fuertes pellizcos a sus pezones, se corria una y otra vez, cada vez que lo hacia bajaba el ritmo un poco y volvia a empezar pero con más ímpetu en cada ocasión, ya no gemia eran gritos y aullidos continuos
- Siiiii, follame, soy tuya, soy tu puta, hazme lo que quieras, me estas matando, siiiiii, oh dios, siiiii
Estallo y fue como si un sifón se abriese saliendo a presión todavía con mi polla dentro, duchándome
- Follame a cuatro patas
Se dio la vuelta apoyo la cara en la cama extendió los brazos arqueo la espalda y me mostro sus agujeros chorreando totalmente hinchados y encharcados, se la meti del tirón y fue como meter un brazo en una manga, sin ninguna resistencia por el exceso de lubricación pero sintiendo totalmente su coño recibiéndome apretado aun a pesar de que llevábamos mas de media hora follando como animales, a la tercera embestida se estaba corriendo otra vez, apretaba las sabanas con sus puños cerrados con fuerza y sus gritos se ahogaban con la colcha, después de estar otros veinte minutos asi, sentí que iba a reventar, hice que se bajara de la cama, la puse de rodillas delante mio y mientras se apretaba las tetas ofreciéndomelas me estaba chupando la polla y los huevos
- Abre la bosa y saca la lengua que te voy a surtir de leche
- Damela, dámela toda, lléname, aaaaaa
Cinco chorros de semen, salieron disparados a su rostro a su boca a sus tetas y empezó a recoger con las manos todas las gotas y comérselas, saco las ultimas de mi polla succionandola con verdadero deleite, tenia una expresión muy viciosa, cuando empezó a restregarla contra su cara, mezclando el semen el sudor y sus jugos.
Caimos derrumbados en la cama y después de sosegar la respiración nos duchamos, juntos y a su espalda empece a tomar posesión de sus pechos, hice que se apoyara contra la pared y la empece a penetrar con mis dedos, primero desde atrás, luego por delante, se corrió otro par de veces, nos aclaramos, nos secamos y nos dormimos. Fue espectacular, como podía cambiar tanto esa mujer tan competente, conservadora, educada,… y al rato era una fiera sexual sin medida, me dormí, cuando desperté ella no estaba, volvimos a casa ese mismo dia y no coincidimos, hasta volver al trabajo y de nuevo como si nada, aunque algo había cambiado, cada vez ella me miraba más, me sonreía al cruzar las miradas.
Su compromiso seguía en pie y se iba a casar con su novio, si bien hacia tiempo que era mi musa erotica en las noches solitarias, estaba teniendo algo más que ganas de sexo con ella, lo cierto es que apenas habían sido tres encuentros, pero la progresión de los mismos era alucinante, que sería lo siguiente.
El dia de la boda decidi ir acompañado, una amiga de cuerpo escultural, era mi pareja ese dia, vi a la novia salir del coche, preciosa en su vestido blanco, después la misa, el si quiero, las fotos, allí ella se dio cuenta de que llevaba acompañante y vi incertidumbre en su mirada, asi hasta el momento del banquete, los compañeros de trabajo estábamos en dos mesas redondas yo de cara a la mesa principal, teníamos una conversación muy animada, lo estaba pasando bien y ya con las corbatas flojas y las primeras copas la cosa se puso mucho mas animada, no me di cuenta hasta entonces la atención que estaba teniendo en mi Maria durante el banquete, llego el momento de los bailes y baile con mi acompañante, todas las veces que vi a la novia tenia puestos sus ojos en mi, ya con los bailes casi sin disimulo, ella cogio a su recién estrenado marido y bailaron juntos, acaramelados si no fuera porque no hacia más que mirarme en cuanto pasaban cerca de nosotros, llego el momento de cambiar parejas y nos intercambiamos con los novios, entonces la felicite por la boda y la desee felicidad
- Solo a mi?, ahora estoy casada y sere feliz con mi marido
- Y eso os deseo
- Y ella quien es?
- Una amiga
- Es muy guapa
- Si que lo es
- Que tal es en la cama?
- Vaya, vaya, eso te importa?
- Es por saber
- Te gustaría follartela
- No soy bollera
- Bueno siempre existe una primera vez para todo
- No en mi caso
- Entonces serán celos
- Celos? De que
- De que has tenido el mejor sexo de tu vida conmigo y es posible que no lo vuelvas a disfrutar
- Eres muy creido
- Tal vez pero no me has dicho que no y es más, ahora mismo tienes el coño chorreando simplemente por hablar conmigo
- Joder cállate
- Tranquila no te voy a poner en evidencia aquí y ahora, no a no ser que me lo pidas
Pase la yema de mis dedos por su espalda al aire, muy suave, notando como se estremecía, cerro sus ojos
- Te acuerdas de esa habitación de hotel en Osaka?
- Si, joder, para
- Me voy a atrever a decir que piensas en ello habitualemente y no te queda mas remedio que masturbarte
- Calla
- A mi me pasa
- Ufff
- Dime, tengo razón? A que tienes tus bragas mojadas? Y cuando empezaste a bailar estaban secas?
- Eres un cerdo
- Me sigues insultando sin quitarme la razón
Me acerque a su oído y le susurre
- Eres mi puta, soy tu amo y deberas pedirme permiso para correrte a partir de ahora
- Pero que dices?
- Lo que oyes
Se paro la música y cada cual se fue con su pareja, era ya de noche y fuimos a la zona de pubs a tomar copas, mi amiga hizo lo posible por ponerme contento pero no tenia ojos mas que para María. Ya de madrugada deje a mi amiga en casa, aunque ella quería que yo subiera, no quería y puse una excusa fatal para dejarla allí a las 2 de la mañana. Llegando a casa me sono el WhatsApp
- Hola
- El Amo me da permiso
- Para que?
- Para correrme
- No
- Pero es mi marido
- Finje, pero no te corras
- No se si podre
- Me da igual, si no obeces el Amo no se volverá a mostrar a ti
- No digas eso, obedeceré
- No dejes que se corra en tu boca, eso esta reservado para mi igual que tu culo
- Vale
- Que forma de contestar es esa
- Si Amo
- Ahora a descansar
Paso una hora, me estaba durmiendo y sono un nuevo mensaje
- Mi Amo, no puedo dormir
- Eso no me importa
- Hice el amor con mi marido pero apenas disfrute
- Eso es cosa tuya
- Necesito al Amo, no puedo parar de pensar en su polla, en su forma de dominarme y llenarme
- Quieres tener al Amo
- Si lo deseo
- En tu noche de bodas
Estaba flipando
- Si, deseo al Amo
- Pues lo tendras pero tendrá que ser en tu habitación
- Aquí? Con mi marido presente?
- Ese es mi deseo
- Estas loco no voy a hacer eso
- Pues no molestes al Amo
- Por favor lo podemos hacer en una habitación cerca
- O en la habitación o nada
- Es una suite puede ser en el baño o el sofá
- Veremos no te prometo nada
- Bien
No me lo podía creer estaba apunto de tener mi aventura más salvaje con una de las mujeres mas guapas que conoci jamas, en su noche de bodas, me vesti rápidamente, cogi un somnífero y en 20 min estaba delante del hotel, subi hasta la plata de suites y allí me la encontré con una bata de satén blanca en la puerta de su habitación
- Pon este somnífero en su agua y haz que beba un poco
Asi lo hizo, al volver cerro la puerta de la habitación y fue a abrazarme, la frene en seco
- Eres mi puta, que forma es de recibir asi a tu Amo?
Se arrodillo delante mio mirándome a los ojos, debajo de la bata no llevaba nada, le quite el cinto de la bata y tape sus ojos
- Pon tus manos a la espalda levanta la cabeza y abre la boca
Saque mi polla de su encierro, estaba durísima y la acerque a su cara, ella la olio y empezó a dar bocanadas al aire para atraparla, finalmente lo logro y empezó a chupar desesperada, me iba desnudando a medida que seguía la mamada magistral que estaba disfrutando, increíble
- La echabas de menos?
- Siiii, mmmmm
- Estabas celosa cuando me viste con aquella chica eh?
- Si lo estaba
- Tenias miedo de perder esto?
- Si es para mi, me hace sentir cosas que jamás creí posibles
- Sigue chupando, ahora a los huevos
- Mmmmmmm
- Te gusta satisfacer al Amo?
- Si deseo que el Amo sea feliz conmigo, con su puta
- Lo soy y ahora quiero comerte, pero deberás limpiarte antes
Fuimos a la ducha, todavía con los ojos vendados la enjabone a conciencia, la aclare y la seque, la puse de pie frente al espejo del lavabo le quite el cinto de la bata y me miraba con los ojos muy abiertos y yo detrás, mi polla rozaba su sexo, muy húmedo y abierto, separe sus piernas y sin dejar de mirarnos en el espejo la comencé a penetrar, apenas costo por su lubricación, estaba muy caliente, en cada embestida cerraba los ojos y reprimía un gemido, se corrió sujetándose con fuerza al lavabo
- No puedes dejar de pensar en el Amo, ni en tu noche de bodas, eres una puta, mi puta, mi perra y vas a obedecerme por que te encanta hacerlo
Apenas podía andar, la llevaba por la cintura, nos íbamos a su habitación me miro son miedo, la lleve y entramos, su marido roncaba profundamente, la empuje y la puse en la cama con las piernas abiertas y empecé a follarla sin miramientos, cogió una almohada y se la puso en la cara para reprimir sus gemidos, note como se le venían los orgasmos no detrás de otro, no podía abrir más sus ojos, los jugos de su coño mojaban la colcha, cese la penetración para cambiarla de posición, de pìe junto a la cabeza de su recién estrenado marido, echada ligeramente hacia adelante con el culo en pompa y yo agarrando sus brazos por detrás, volvi a penetrarla, fuerte, contundente, haciendo círculos con la cadera, se estaba volviendo loca, empezó a susurrar en voz baja
- Por favor para
- Soy tu amo harás lo que te ordene y esto te gusta no puedes negarlo
- Es mentira, es mi marido
- Es un cornudo que no sabe cuidar de su hembra, no le da lo que ella necesita, acaso miento?
- Siii
- Di la verdad o para ahora mismo
- Tienes razón soy una puta que le pone cuernos a su nuevo marido
- En realidad yo soy tu hombre, repite!
- Tu eres mi hombre
- Haces todo lo que quiera y cuando quiera
- Hago lo que sea cuando sea
- Diselo a el
Con lagrimas en los ojos pero totalmente entregada
- El es mi hombre, le pertenezco y hago todo lo que me dice
- Solo yo se como eres de verdad
- Solo el sabe como soy
- Y eres una puta
- Soy una puta
- Mi puta
- Su puta
- Y asi será por siempre
- Asi será por siempre
- Solo le follarás con mi permiso
- Solo te follaré con su permiso
- Y llegado el momento te marcare como mi propiedad
- Me marcara como su propiedad
Las embestidas se volvieron salvajes mis huevos golpeaban su clítoris, se estaba derritiendo por momentos y volvieron a salir sus chorros mojándome entero desde el ombligo a los pies hasta dejo un pequeño charco al lado de la cama le hice ponerse de rodillas frente a mi polla, la chupo salvajemente y empecé a correrme en su garganta, recibió toda mi leche con hambre
- Mira a tu esposo y di solo me comeré la leche de la polla del Amo
- Solo me comeré la leche del Amo
- Ahora sal a 4 patas de la habitación
- Ponte de rodillas con las manos en la nuca
Me vestí, me acerque a María que seguía de rodillas en medio del salón, le cogí un pezón y se lo estiré hasta que se levantó y le di un beso apasionado, sin dejar de apretar esos pezones duros como piedras.
- Descansa y disfruta de tu nueva vida, ya hablaremos
- Si Amo
Me di media vuelta y sali por la puerta
Que cosas pasan.