Noche, alcohol y sexo
Asi es como mi chica y yo empezamos e recorrer un camino de experiencias sexuales que todavia no a terminado. espero que no termine en mucho tiempo.
Esta serie de historias son totalmente reales, desde hace aproximadamente año y medio nuestra vida sexual ha dado un giro completo.
Debo aclarar que todo los sucedido es real aunque ninguno de los nombres los son prefiero mantener nuestra identidad y la identidad de los que han pasado por nuestras vidas.
Todo comenzó el 15 de mayo de 2008.
Hacia tiempo que no salíamos Belén y yo solos de copas por nuestra ciudad.
Esa noche salimos a cenar y después decidimos tomarnos unas copas.
Ya bien entrada la noche decidimos tomar un mojito en local latino que conocíamos de años atrás.
Tras unos cuantos mojitos Belén se fue al servicio, estaba preciosa, llevaba un vestido de tirantes blanco que acababa a diez centímetros de sus rodillas, bajo el cual se notaba que no llevaba sujetador y unas braguitas que hacían su culo perfecto.
Su pelo pelirrojo hoy lo llevaba rizado lo que la daba un aspecto de leona.
Tardaba en regresar hasta queme di cuenta que bailaba alegremente con un mulato en la pequeña pista de baile del local.
Un par de minutos después ya estaba otra vez junto a mí, yo quedaba ahora de espaldas a la pista con un gran espejo frente a mí por lo que veía todo lo que pasaba en ella.
Belén miraba por encima de mi hacia la pista allí seguía el tío con el que había bailado, este la hizo un gesto.
Se acerco, a nosotros.
Se nos presento, Carlos se llamaba e inmediatamente invito a Belén a bailar de nuevo con el.
Yo me iba a subir por las paredes un repentino ataque de celos se apodero de mi, Belén me miro y contesto que no ahora no luego ya veremos, dijo, te tomas algo con nosotros, le invito Belén.
Este acepto, estuvimos un buen rato parlando, hasta que sin mediar palabra cogió la mano de Belén y me salto ahora volvemos.
Bailaron largo rato, yo no quitaba ojo de cada movimiento, poco a poco este tío se fue cogiendo confianzas, llegando a tocar el culo a Belén en repetidas ocasiones.
Cada vez se acercaba mas a Belén la decía cosas al oído.
Belén me clavaba sus ojos azules.
Pasado un rato el tío desapareció Belén volvió, sin medir palabra me planto un beso impresionante, después de un beso axial no podía decir nada.
Este mulato me esta poniendo como una moto, me susurro al oído.
En esto apareció Carlos invitándonos a ir otro bar en la otra punta de la ciudad.
Belén encantada, yo acepte a regañadientes.
Ya en el coche Carlos y Belén no paraban de hablar y de reírse, el iba sentado en el asiento trasero y ella en del copiloto.
Carlos llevo la mano por encima del respaldo del coche hasta el pelo de Belén y enredo sus dedos, comenzó a halagarla.
La soltaba piropos de todo tipo.
Hasta que soltó "por que esta tu chico que si no te iba a dar yo a ti lo que te mereces".
Belén continuo jugando con el, provocándonos a los dos.
En un semáforo se acerco a mí y mirándole fijamente empezó a besarme la oreja.
Por mi cabeza solo pasaban preguntas ¿Qué esta pasando aquí?, ¿tan borracha esta Belén?...............
A mitad de camino Carlos seguía camelando a Belén ahora ya con comentarios muchísimo mas subidos de tono.
Al fin lo consiguió, no se como pero Belén me dijo al oído, no habías soñado siempre con hacer un trío esta el oportunidad y sin mediar palabra paso entre los asientos del coche y se sentó junto a Carlos.
Este no tardo ni un segundo en rodearla con los brazos y besarla, Belén no opuso ninguna resistencia.
Yo puso dirección a las afueras de la ciudad, allí habría algún sitio tranquilo, coloque el espejo de forma que podía ver perfectamente lo que hacían.
Carlos beso largamente a Belén, llevo sus manos a su pecho, lo acaricio por encima del vestido.
Belén miraba fijamente al espejo, nuestras miradas se cruzaban.
No tardo en tener un pecho fuera, ahora Carlos se lanzo sobre el, paso su lengua por todo el, succionaba el pezón.
Por favor encuentra sitio rápido y ven a mi lado, me dijo Belén, con las dos tetas fuera y una mano sobre el pantalón de Carlos a la altura de su paquete, apunto de reventar el pantalón.
Dejo las tetas de Belén fuera del vestido y bajo hasta su entre pierna hizo un intento de sacar las bragas de Belén, no pudo, Belén levanto su culo para facilitárselo.
Por fin encontré un sitio adecuado, pare el coche y salte al asiento trasero.
Belén me recibió con un beso salvaje, acaricie sus pechos, baje a su sexo, el cual estaba ocupado por la mano de Carlos.
Con el rabillo del ojo pude ver como Belén ya había sacado la polla de Carlos y jugueteaba con ella entre su mano.
Me senté al lado de Belén, esta quedaba en el centro, nos dedicamos un buen rato a ella.
La masturbamos, nuestras manos se turnaban perfectamente, mientras uno se dedicaba a su clítoris, el otro introducía uno o mas dedos en su vagina.
A la vez que hacíamos esto, besábamos su cuello, sus pechos, su boca.
Ahora Belén estaba con el vestido enrollado a su cintura con los pechos al aire, sus piernas estaban apoyadas en los reposacabezas de los asientos delanteros y con sus manos alrededor de nuestros cuellos, dirigiendo nuestras cabezas.
No tardo su cuerpo en erizarse completamente, un largísimo gemido salio de su boca nos apretó contra ella cada uno estabas con uno de sus pechos, lo mordíamos lo chapábamos, hasta que cayo en el asiento del coche.
Sin que pasara un segundo ni mediar palabra se levanto y se arrodillo junto a nosotros, comenzó a sacar mis pantalones, Carlos hizo lo mismo el solo.
Ya sin pantalones se dirigió hacia Carlos y comenzó a lamerle la polla mientras me miraba fijamente a los ojos, llevo su mano libre a mi miembro y empezó a masturbarme.
Vi como dejo de lamérsela a Carlos y comenzó a engullirla bajaba hasta que casi desaparecía en su boca, subía y se la sacaba del todo, entones me miraba y sonreía o guiñaba un ojo.
Un par de minutos después cambio, ahora me la chupaba a mi, empezó comiéndosela entera, hasta donde ya no entraba mas, jugo con ella, subió y bajo, estuvo así un buen rato.
Mientras tanto Carlos ayudo a Belén a cambiar de postura, ahora yo estaba sentado, Belén con una pierna estirada y otra doblada sobre el asiento inclinada hacia mi chapándomela y Carlos arrodillado detrás de Belén comiendo su coño.
No tardamos en volver a cambiar de postura, Belén se tumbo en el asiento, yo me arrodille frente a ella y Carlos se coloco entre las piernas de Belén para penetrarla.
Me quede quieto, solo miraba como mi chica estaba siendo follada por un desconocido.
No tarde en pasar a la acción, bese a Belén mucho, muchísimo bese sus pechos, su cuello, la acaricie.
Otro espasmo sacudió su cuerpo, comenzó a mover sus caderas buscando el enésimo orgasmo no tardo en llegar, se quedo inmóvil, Carlos saco su polla del cuerpo de Belén.
La ayudamos a levantarse, me senté, Belén se sentó sobre mí, de espaldas, ligeramente inclinados Carlos tomo una postura un poco difícil.
Belén engullía su polla, entraba atravesada y yo podía ver claramente como cada arremetida se movía su mejilla.
La mano de Carlos trabajaba el clítoris de Belén, lo que provoco que no tardara en correrse de nuevo.
Esta vez no se corrió sola, yo empecé a soltar fuertes arremetidas me iba a correr y no tarde en soltar chorros de leche dentro de su coño.
Belén saco la polla de Carlos de su boca, la pajeo rápidamente, este tampoco tardo en llenar de su jugo el pecho de Belén, un gran quejido lo acompaño.
Belén continuo unos minutos sobre mi sin moverse, Carlos se sentó a su lado se besaron.
Belén se levanto me beso, acaricie su rostro, radiante de placer.
Llevamos a Carlos al bar donde nos dirigíamos, nos despedimos, nunca nos volveríamos a ver.
De camino a casa Belén me dio las gracias, las gracias se las tengo de dar yo a ella por hacer que se cumplan mis fantasías.