No te he escrito una poesía
A ti no te he escrito absolutamente nada.
No he escrito versos de la tersura de tu vientre,
no enredé metáforas a los pelillos de tu pubis,
ni he desguazado un lenguaje por cada gemido.
No rimé tus caricias con las mías,
ni he intentado buscarle un sinónimo a tu desnudez,
maldigo a quien puso el libro de Machado en la mesita.
Bécquer se muere a los pies de la cama,
Se asfixian bajo las sábanas Neruda y Lorca,
San Juan y Santa Teresa se pudren en el infierno de nuestra indiferencia
Y tú y yo sabemos que Miguel Hernández jamás cruzó esa puerta.
Vive dios que prefiero tus besos a mi lápiz
No te he escrito absolutamente nada
que las ganas de escribirte un poema
acabaron donde empezaba tu cuerpo.