No te conocía capitulo 36 (final)

“el final del viaje”

Capítulo 36 (FINAL)

“EL FINAL DEL VIAJE”

Habian pasado casi cinco horas desde que Camila había sido ingresada a la sala de emergencias de la clínica “la Santa María”. Aun ningún médico salía a dar su parte y Nicole estaba desesperada, casi al punto de la locura a pesar de que su padre y sus amigos más cercanos estaban junto a ella, tratando de calmarla mientras esperaban por noticias, pero no podía más, tenía que hacer algo, lo que fuera para no perder la cabeza

Nicole estaba entrando en la pequeña capilla de la clínica cuando vio la figura de una rubia de rodillas ante el altar. Los ruegos de Sara eran como un calmante para su alma porque increíblemente estaba pidiendo por la vida de Camila. Dejo que Sara terminara su oración antes de sentarse a su lado. A pesar de tantos años en los que estuvieron juntas, sentía que nunca en la vida habian conectado tanto

-          No recuerdo haberte escuchado orar antes

-          Desde niña no lo hacía. Creo que con el pasar de los años empecé a perder un poco la fe, pero como ves hoy la he vuelto a encontrar – Levanto sus ojos hacia la cruz -  Como dice mi madre, el silencio no significa olvido, Solo espero que me estén escuchando

Se quedaron en silencio. Nicole miraba el retablo con el Jesús crucificado pensando que esa era una gran forma de representar la agonía. Ella nunca creyó en ningún credo, pero al igual que Sara no había perdido la fe en que algo supremo existía, un ser capaz de mostrar la belleza en un mundo donde reinaba la violencia y el odio. Ella necesitaba creer que ese ser estaba con ella.

-          ¿Qué voy hacer si muere? No es justo que me la quinten así, después de todo el sufrimiento que tuve que padecer para tenerla a mi lado – Nicole puso su cabeza sobre las rodillas de Sara intentando buscar consuelo

-          No va a morir. Esta es la mejor Clínica de ciudad, con los mejores cirujanos. Nico, ya vas a ver cómo va a despertar y van a poder ser muy feliz juntas.

Tenía que ser así, de lo contrario se iba a terminar enloqueciendo. Sin ella, la vida no tenía el más mínimo sentido. Nuevamente Nicole iba cayendo por un agujero oscuro sin poderse agarrar de nada. La muerte de Camila simbolizaría el inicio de su soledad, ella no iba poder ser nunca más la misma, su alegría y esperanza se irían junto con ella. Desahogo su llanto un poco más sobre las piernas de Sara, quien trataba de confortarla acariciando su espalda

-          Lo siento. Yo molestándote cuando tu acabas de perder a tu padre – Se incorporó para poder ver a Sara a los ojos - ¿Cómo te sientes?

-          Tengo una sensación bipolar al respecto. Una parte de mí no siente nada, incluso existe cierto descanso, sin embargo, la otra lo lamenta profundamente sobre todo porque al final demostró que algo de amor sentía por mí – lamento - Es difícil de creer que las personas que yo creía más me odiaban en esta vida terminaron salvándome. Hasta hoy llegue a pensar que a pesar de todo Camila era un ser con muy poca conciencia, que iba a terminar por lastimarte aún más, pero después de esto me di cuenta que no la conocía, y te juro Nicole que rezo para que la vida me permita hacerlo

Nicole se abrazó a ella muy fuertemente para que juntas pudieran llorar y así descargar algo de la angustia que sentían. Parecía irreal lo que estaba viviendo. Toda su existencia había sido un altibajo constante en donde pasaba del cielo a infierno sin ninguna clase de advertencia, y aun así estaba agradecida con la vida por las personas que seguían junto a ella, incluso Sara quien más la había lastimado ahora la abrazaba para no dejarla caer.

-          Lamento interrumpirlas – Dijo Fabián suavemente – Pero el medico ya salió y va a dar su valoración

Los tres se dirigieron a la sala de espera donde un doctor bastante joven estaba parado en medio de la sala con total solemnidad dispuesto a dar su parte, sin mostrar ninguna emoción como lo exigía su profesión. Sin embargo, Nicole intentaba estudiar su rostro para descifrar de antemano que tan malo era lo que tenía por decir sin lograrlo

-          ¿Ya están todos reunidos?

-          Si doctor. Por favor díganos ¿cómo esta Camila? – Expreso Fabián, que estaba tan nervioso como los demás en esa sala

-          La señorita Esquivel presenta dos heridas contundentes de bala. Una roso su corazón, pero no causo mayor daño, desafortunadamente la otra se alojó en su pulmón generando un traumatismo abierto en el tórax. Hemos extraído la bala, pero su condición sigue siendo grave. El daño en el pulmón fue serio, así que en estos momentos la llevaremos a la UCI y monitorearemos su estado para saber si traumatismo evoluciona favorablemente o si va necesitar ventilación mecánica. Estas cuarenta y ocho horas serán las más críticas, y esperamos que despierte en ese lapso, así habrá menos probabilidad de un daño permanente o incluso la muerte, pero le aseguro que haremos todo lo que esté en nuestras manos para salvar su vida – Concluyo

-          ¿Puedo verla Doctor? – Pregunto Nicole

-          No en estos momentos, les informare cuando puedan hacerlo

Después de que el Medico diera su informe todos los allí presentes se volvieron a sentar, incluida Nicole quien estaba tranquila acomodada en un mullido sofá entre Fabián y su novia, ambos ofreciéndole su apoyo. Sin embargo, Sara no veía por ningún lado a Valeria que hacia un par de horas había llegado al hospital, así que se dispuso a buscarla, pero no esperaba encontrarla sola sentada sobre unas escaleras de un apartado rincón

-          Te he estado buscando por todas partes mi amor ¿Por qué estas solita aquí?

-          No me gusta que me vean llorar eso me quita encanto

Sonrió falsamente por su mal chiste. Ella sabía que esos comentarios podían sonar insensibles, pero era la mejor forma que había encontrado para lidiar con la pena. Camila fue su primer amor y ahora prácticamente era su hermana, no concebía perderla, el dolor que le causaría a ella y a su familia seria irreparable

-          Camila fue la primera persona que me hizo sentir todo con intensidad: el amor, la tristeza, la rabia, incluso el miedo. Gracias a ella le di un giro a mi vida y puede que ahora no se lo pueda agradecer. Me siento culpable

-          Amor tu no le disparaste – Se sentó a su lado y tomo su mano

-          No, pero tan poco estuve ahí cuando me necesito. Si la hubiera ayudado de verdad ahora no estaríamos aquí con ella luchando por su vida y Nicole y yo muriéndonos de la angustia

-          Yo no quisiera echarle más leña al fuego, pero, todo esto que paso fue decisión de Camila. Ella escogió la venganza tal vez sin considerar que la consecuencia inmediata también pueden ser tragedias para uno mismo. Y si te lo digo es porque yo escogí el mismo camino – Suspiro – Cuando creí que iba a perder el concesionario me concentre en buscar al culpable y vengarme de él, en vez de buscar la forma de salvar nuestro patrimonio y ya sabes lo mal que resulto. Estoy totalmente segura que si ella pudiera te diría algo similar, porque de esto todos hemos aprendido

-          Entonces ¿Que debió hacer? ¿Dejar todo como si nada? ¿A su violador sin un castigo?

-          No. Mira, si algo entendí después de todo esto, es que no puedes confundir la justicia con la revancha y Camila debió buscar ayuda. Yo estoy completamente segura que si ella se hubiera dado cuenta la clase de persona que era Nicole apenas entro al concesionario y le hubiera contado las cosas desde un principio, Niko la habría ayudado a hundir a mi padre aun si tenía que pasar por encima mío, pero estaba enceguecida por el odio, tanto que no se dio cuenta que iba a terminar lastimando a un ángel, al igual que lo hice yo – Sara bajo su mirada dolorida por lo recuerdos

-          Tienes razón mi vida. Perdóname - Se acercó más a Sara para poder abrazarla - Yo aquí haciéndote pasar otro mal rato cuando tu acabas de perder a tu padre ¿Estas bien?

-          Supongo que sí. Es tan raro lo que siento. Es como si estuviera adormecida, como si mi cerebro aun no pudiera procesar tantas cosas y hubiera hecho corto circuito. Afortunadamente Sergio se ofreció a hacerse cargo de los tramites con la policía judicial y de su sepelio junto con José

-          Debe ser más fácil para María José acelerar los trámites, como es medica forense

-          ¿Es medica forense?

-          Si ¿No lo sabias?

-          No. Es otra de las cosas en las que debo trabajar. Comunicarme más con las personas que me rodean y preocuparme por sus vidas. Hablando de eso tengo que pedirle a Julieta que averigüe con su esposo los teléfonos de los padres de Antonio. Sergio dijo que también se iba hacer cargo de sus trámites, pero el cuerpo solo se le puede entregar a un familiar

-          ¿Vas a hablar con sus padres? – Sara asintió con la cabeza - Amor no tienes que ser tú la que les des esa mala noticia, déjame hacerlo a mi

-          No. Me siento en la obligación de hacerlo. A pesar de todo fui yo la que llegué a tener un compromiso con él. Seguramente sus padres ni siquiera lo supieron, pero creo que esta es una forma de cerrar ese círculo y dejar el mal recuerdo de Antonio atrás

Valeria le regalo un pequeño beso sobre sus labios. Se sentía tan orgullosa de la nueva Sara que tenía abrazada. La forma que estaba afrontando esta nueva catástrofe era admirable, en vez de lamentarse y echarse a la pena prefirió levantarse de las cenizas, siendo el soporte de otros como lo había comprobado cuando la vio en la capilla confortando a Nicole.

-          ¿Y tú, ya le avisaste a tus padres que Camila está hospitalizada?

-          Solo pude contactar a mis hermanos. Los viejos están en alguna parte de Asia y aún no han podido comunicarse, pero los chicos estarán aquí en Cualquier momento

-          Entonces solo nos queda esperar


Finalmente, ya al amanecer, le habian permitido a Nicole ver a Camila, aunque tuvo que mentir diciendo que era su esposa para evitar la engorrosa situación de que nadie pudiese verla, ya que la morena no tenía familia conocida. Estaba frente a su cama sentada en una incómoda silla con su cabeza reposando sobre la colchoneta y su mano sosteniendo la de su novia. Se veía tan hermosa cualquiera pensaría que solo estaba dormida en vez de estar luchando por su vida

-          Cami ¿Me escuchas? Estoy aquí a tu lado – Puso la mano de la morena sobre su rostro. Quería creer que la estaba acariciando mientras hablaban – ¿Sabes? he pensado muchas cosas en estas horas que he esperado a que despiertes y me di cuenta que ha sido muy poco el tiempo que hemos estado juntas. Mi amor no te puedes ir, no me puedes dejar. Tu vida ha sido demasiado corta y llena de dolor, déjame demostrarte que puedes ser feliz. Hay tantas cosas que podemos hacer, tantos lugares y personas por descubrir. Seguro que no has visto la puesta de sol en Myanmar, el amanecer en la Isla de Skye o la aurora boreal en Islandia. Ya conociste el infierno en la tierra déjame que te muestre el cielo. Por favor te lo suplico despierta… Vuelve conmigo

Sus ojos se humedecieron suplicando al cielo por su despertar, hasta que sus lágrimas empezaron a descender por sus mejillas, cuando de repente sintió que la mano de Camila se movía sobre su rostro, lo que la alarmo e hizo que se levantara rápidamente

-          ¡Camila… Camila amor! – Grito eufórica viendo como su chica reaccionaba con pequeños movimientos de sus manos e intentaba abrir sus ojos – Medico… Un médico… Necesitamos un médico – Acciono rápidamente el botón para llamar a las enfermeras

-          Niki… - Logro pronunciar la morena en tono cansado utilizando las pocas fuerzas que tenía - Cuando salga de aquí – Enmudeció un momento cuando su pecho se empezó a oprimir por el esfuerzo, pero sintió alivio cuando Nicole tomo su mano y la beso - ¿Me llevas a Grecia? ¿A la isla que dijiste?

-          Claro que si amor, te llevare a Marte si quieres – Camila solo sonrió y volvió a dormirse

El nuevo parte médico fue satisfactorio. Aunque Camila seguiría en terapia intensiva, estaba estable, solo quedaba monitorear su progreso y evitar posibles infecciones en su pulmón. Nicole se encontraba sola en la clínica ya que había pedido a todos incluido a don Luis Fernando que acompañaran a Sara al velorio de su padre. Estaba muy agradecida por la solidaridad que demostraron tener todas las personas de su entorno, principalmente su padre y Fabián quien no apreciaban mucho a Sara, pero no se negaron acompañarla en ese duro momento. Sin duda eran los hombres de su vida y no sabría qué hacer si ellos

-          Señorita Fonzi – Llamo su atención una risueña enfermera

-          Si, dígame

-          La señorita Esquivel ya fue enviada a una habitación privada, esta despierta y dice que quiera verla. Por favor sígame, la acompañare hasta su habitación

Su corazón empezó a martillar fuertemente cuando vio a Camila recostada sobre esa cama de hospital. Estaba pálida y tenía unas profundas ojeras, pero a pesar de todo se veía como un ángel. Nicole estaba tan feliz y al tiempo tan conmovida por verla fuera de peligro que se le formo un nudo en la garganta que le impedía hablar

-          Amor ven, siéntate aquí – Camila débilmente señalo un lugar al lado de su cama para que Nicole se pudiera sentar. Le dolía todo el cuerpo, incluso hablar, pero si seguía viva era por esa hermosa mujer que le había enseñado a amar de verdad, así que el dolor no importaba con tal de no perder un solo minuto más con ella - Niki ¿Estas bien?

Nicole solo pudo asentir cuando de nuevo sintió que las lágrimas brotaban por sus ojos sin permiso, intento disimularlo rápidamente retirándolas con su mano, mientras que Camila hacia un esfuerzo casi sobre humano para poder abrazarla y reconfortarla

-          Perdóname. No sé qué me pasa. Estoy muy sensible o cansada pero no tienes idea de lo feliz que estoy de que estés bien

-          No me tienes que explicar, cuando es casi un milagro que te pueda abrazar. Te juro Niki que sentí la muerte – Calló un instante pensando que tan ridículo podría sonar lo que iba a decir - Recuerdo que cuando cerré los ojos fui arrastrada hacia un puente colgante, pero no tenía miedo, era como si supiera a donde iba, cuando mire hacia abajo, reconocí a cada persona con la que me había cruzado en la vida, aunque fuera solo un saludo lo que intercambiamos, pero de repente te escuche y cuando me volví a ver de dónde provenía tu voz desperté aquí. Yo sé que es un sueño muy loco, pero fue tan real – Camila rio consiente que sus palabras sonaban como una completa locura

-          Te creo mi amor. Yo también sentí que te ibas. Ni siquiera sé cómo explicarlo era como si una parte de mi mente, mi corazón o mi alma se quedaran completamente vacíos y lo que dijiste cuando, bueno cuando…

-           Estaba desangrándome

-          Si, fue muy hermoso. Nunca imagine que pudieras decirme algo así. Incluso la primera vez que me dijiste “amor” fue muy difícil para ti. Entonces hay sí que creí que sería lo último que me dirías

-          Buenos, pensé que iba a morir y tenía que decirte antes de irme para estar en paz. Cada una de las palabras que te dije son verdad

Nicole sonrió, mientras que Camila se movió cuidadosamente a un lado para que se pudiera recostar sobre la cama que era más grande que el promedio de un hospital. Nicole se veía realmente cansada como si no hubiera dormido en días, lo que era cierto. La ojiazul agradeció en silencio ese gesto ya que le dolía la espalda por la cantidad de tiempo que había hecho vigilia sentada junto a ella, así que se acomodó lo mejor que pudo para poder abrazarla sin hacerle daño

-          La enfermera me dijo que estabas sola en la sala de estar – El tono apesadumbrado que uso Camila le dio a entender a Nicole que Camila creía que no le importaba a nadie por todo lo que había sucedido

-          Sí, pero no es por lo que crees bobita – Camila puso la cabeza sobre su pecho – Hoy la policía judicial finalmente entrego el cuerpo de Sandoval para su sepelio. Todos incluyendo a papá y Fabián se fueron al funeral, incluso tus hermanos tuvieron el detalle de acompañar a su ahora cuñada – Ambas sonrieron - Tus padres, porque así me dijo doña Helena que es lo que son para ti, llegan hasta la noche, porque están en Asia, pero no te preocupes que todos prometieron estar aquí mañana por la mañana

Nicole sintió como los músculos de los hombros de Camila se relajaban por esa noticia, como si un gran peso se hubiese caído de ellos. Pero luego sintió que nuevamente se contraían

-          Debió ser terrible para Sara ver morir a su padre

-          Lo fue, pero me parece que aún no ha podido asimilarlo completamente – Nicole enmudeció por un momento recordando todo lo que paso – Es que todo ocurrió tan rápido. Antonio le disparo a Sandoval y en cuestión de minutos tú te atravesaste para evitar que la matara a ella. Tu sangre todavía estaba fresca sobre nuestra ropa cuando Julieta nos trajo al hospital. Ni ella, ni yo nos cambiamos hasta que estuvimos seguras de que estabas estable. Después tuvo que llamar a su hermano para darle la noticia y para completar   también tuvo que encargarse del cuerpo de Antonio

-          Antonio… - Exclamo desconcertada. Desde su despertar no había pensado ni una sola vez en él, como si selectivamente su cerebro hubiera borrado su recuerdo - Dios Santo murió por mi culpa…. Todo esto es mi culpa... Yo lo use y luego lo deseche sin más… No debí meterlo en esto y ahora no hay nada que… – Tartamudeaba al tiempo que disparaba frases de culpa como una ametralladora

-          Espera un momento Camila – La interrumpió en tono autoritario - No voy a permitir que sigas culpándote por algo que no hiciste. Tu no obligaste a Antonio a disparar contra Sandoval y mucho menos contra Sara, ya que terminaste recibiendo las balas por ella ¿Recuerdas cuando te dije que yo iba a matar a Sandoval con mis propias manos? – Camila asintió - ¿Crees que hubiera sido capaz de hacerlo?

-          No

-          ¿Y porque no?

-          Porque eres una buena persona

-          Así es Cami. Soy una buena persona y pienso y digo muchas cosas que jamás haría, porque finalmente somos lo que hacemos. Y si Antonio hizo todo lo que hizo es porque era una mala persona y murió en su ley punto - Camila se abrazó fuertemente, ocultando su rostro en el cuello de la ojiazul como una niña pequeña intentando esconderse de sus errores - Lo siento. Solo quiero que comprendas que todos tenemos elección y así como tu elegiste abandonar tu odio, él pudo hacer lo mismo porque incluso él tenía menos que perder. Simplemente pudo entregarse, declararse culpable y recibir la condena mínima como lo hizo Jorge

-          Lo sé, es solo que no puedo dejar de sentirme culpable – susurro aun refugiada en su cuello

-          Amor, ya es hora de cerrar este capítulo y seguir adelante. Si no puedes olvidar todo lo que paso vivirás encadenada por la tristeza el resto de tu vida, porque por mucho que lo lamentes no puedes cambiar nada. Lo que si puedes hacer es redimirte con quienes dañaste y recibir dos disparos por Sara fue un gran comienzo ¿No te parece?

-          Si, supongo, aunque… No hecho nada por ti

-          Estas con vida y conmigo haciéndome feliz. No pido nada mas – La beso apasionadamente

-          Yo también te amo ¿Te quedas conmigo esta noche?

-          Como todas las noches, pero tenemos que pedir otra cama


A la mañana siguiente Camila estaba muy contenta. El médico le había asegurado que en máximo tres días podría estar en casa. Ya había convencido a Nicole para que vivirían en su querido apartamento y aparte esa mañana Fernanda había llegado con muy buenas noticias sobre su proceso. Le aseguro que envista de lo que había hecho por Sara el Juez concedería la pena mínima que consistía en dos años de prisión domiciliaria, con un permiso de trabajo especial. Sentía como su alma en ruinas por fin se estaba reconstruyendo

-          ¿Viniste a rematarme Sarita? – Dijo en broma, apenas vio a la rubia atravesar la puerta del pequeño cuarto de hospital. Tal como había pronosticado Nicole, esa mañana todos habian aparecido a saludarla desde sus padres, hermanos, el padre de Nicole, Fernanda, Fabián incluso Sergio fue exclusivamente agradecerle por haber salvado a su hermana

-          Que mal chiste para estas circunstancias ¿No te parece? – Camila solo sonrió mientras la rubia se acercó a ella, sentándose en la cama – Nunca he conocido a alguien tan tonto como tú ¿A quién se le ocurre atravesársele a un loco armando para salvar a su enemiga?

-          No lo hice por ti – Respondió, tratando de disimularla un poco lo vulnerable que se sentía ahora que Sara sabía todo lo que su padre le había hecho

-          Lo sé, sé que lo hiciste por Nicole, pero igual no sé cómo agradecértelo, te hemos hecho tanto daño que…

-          Tu no me hiciste nada. Yo fui la que hizo que Antonio entrara a tu vida. Él era mi responsabilidad

-          Hace poco tiempo me hubiese consolado con eso, pero la realidad es que yo lo deje entrar y justifique cada cosa que hacía o decía en contra de Niko

-          Porque yo así lo aleccione

-          Puede que eso sea verdad, pero para serte sincera, si yo hubiese tenido que atravesar lo que tú, hubiese hecho las cosas igual o peor

-          No creo que se pueda ser peor – Dijo Camila en un susurro desviando su mirada apenada hacia sus manos

-          Si se puede. Yo no me detuve por amor en cambio tu si lo hiciste – Refuto mientras ponía su mano sobre las manos de la morena en la primera muestra de genuino afecto hacia ella - Camila tú me diste la lección más valiosa de mi vida y es entender que el éxito no es el poder o el dinero que puedas tener, sino la felicidad que puedas alcanzar. Y que está bien gerenciar un concesionario, como freír hamburguesas en un restaurante, siempre que eso te haga feliz. Y ahora mi mayor felicidad es saber que estas bien

-          Vaya… No puedo creer que eso haya salido de la boca de una rubia atolondrada – Sonrió mientras con un dedo quitaba las lágrimas que habian escapado de sus ojos - No te puedo decir que lamento la muerte de tu padre, pero si lamento el dolor que ese hecho te debe causar

-          Lo sé, lo entiendo. Ese hombre marco trágicamente tu vida y es apenas lógico que sientas alivio de que ya no esté – Suspiro - La verdad es que yo también siento alivio porque también me causo mucho daño, aunque nunca podría compararse con lo que te hizo, y por eso mismo... – Sara Saco un sobre de su cartera - El señor Fonzi acepto venderme un veinte por ciento del cuarenta de las acciones que compro del concesionario. Claro que no fue fácil convencerlo, es tan terco como su hija, pero cuando le conté lo que pensaba hacer con ellas finalmente acepto, aunque obviamente me cobro un poco más caro. Ese viejo zorro

-          No sabes cuánto lamento lo de la estafa y de verdad me alegra que hayas recuperado la mayor parte de tu concesionario. Yo te he visto esforzarte tanto por salvarlo que mereces que sea exitoso y no dudo que lo va a seguir siendo

-          Claro que va seguir siéndolo porque nos conviene a ambas- Dijo ofreciéndole el sobre - Son tuyas Camila, es lo mínimo que puedo hacer para reparar un poco el daño que mi padre te hizo

-          No…No. Definitivamente no. Casi te matan por mi culpa ¿y me premias? Olvídalo Sara, yo podre ser una cínica, pero no tanto

-           Igual no lo entiendes, pero ya están a tu nombre así que no hay nada que hacer. Se las daré a Nicole quien te va a sermonear para que las aceptes y ya sabes lo pesada que se vuelve cuando busca justicia. Tu veras, si las tomas ahora o te aguantas su cantaleta día y noche, noche y día – Sonrió sabiendo lo persuasivo que era ese argumento

Camila no supo que decir o que hacer. Estaba totalmente bloqueada por ese inesperado gesto.

-          Camila tu salvaste mi vida. Déjame poner un grano de arena para que reconstruyas la tuya. Acéptalas por favor

-          Yo… No sé qué debería hacer – Dijo apenada, aunque finalmente accedió - Esta bien, pero que conste que solo lo hago porque no quiero sacarle más canas verdes a Nicole. Mil Gracias Sara, seguro que va a ser muy interesante ser tu socia ahora que eres “Buena” – Sonrió

-          Lo mismo digo, pero no solo quiero que seas mi socia también que vuelvas a tu cargo en la gerencia comercial, a pesar de todo, nadie puede negar que hacemos un gran equipo, al fin y al cabo, tu conseguiste la mayoría de clientes que tenemos actualmente

-          Te prometo que ahora que solo tengo buenas intenciones vamos hacer los numero uno en la ciudad

Sara se lanzó a abrazarla. Ni en sus mejores sueños o en sus peores pesadillas imagino que algún día terminaría abrazando a su enemiga, pero estaba tan agradecida con ella. Camila estuvo dispuesta a entregar su vida por salvar la suya demostrándole que el amor es la única fuerza capaz de lograr sacrificios

-          Lo siento mucho. En verdad perdónanos por lo que mi padre te hizo y gracias por salvarme la vida

-          Enserio que no hay nada que perdonar, ni agradecer, pero sino me dejas de apretar tan fuerte en verdad me vas a matar

-          Tu si no cambias Sara, deja de aprovecharte de la pobre Camila, que si Nicole te encuentra en estas te va a sacar de aquí a patadas – Dijo Fabián risueñamente entrando al cuarto sin previo aviso

Sara se levantó rápidamente y esta vez abrazo a Fabián con todas sus fuerzas

-          Oye… ¿Que te sucede?  está bien que pasaste por algo traumático, pero no es para tanto – Expreso perplejo

-          ¿Me perdonas por todo lo que te hice? Tu sabes, lo de los guardias, y la demanda

-          No te preocupes… Eso ya lo superé, pero ¿porque no hablamos mejor de la remodelación que quieres hacerle al concesionario, mientras me invitas una malteada?

Fabián También se abrazó a Sara como si fueran viejos amigos, a pesar de todo lo malos ratos que le hizo pasar había algo en ella que extrañaba y ya era tiempo para todos de perdonar. La tomo por sus hombros y juntos salieron de la habitación

-          ¿Se puede?

-          Sigue

-          No sabía que para poder verte tocara con cita previa – Dijo Valeria acercándose a Camila, dándole un beso en su frente como en los viejos tiempos - Llevo casi dos horas esperando afuera. Aunque debo admitir que ha sido un espectáculo ver a Nicole siendo sacada por su padre casi arrastras ordenándole que se fuera a duchar y ver a Sara y a Fabián salir abrazados contándose chismes como un par de viejas comadronas. Estoy segura que ni siquiera recordó que estaba aquí. En fin ¿cómo Te sientes?

-          Bien. Solo me duele un poco cuando me muevo o cuando me hacen reír. Creo que don Fernando se dio cuenta y por eso saco a Nicole de aquí.

-          Pues me alegra. No que te duela, sino que estés bien – Se acomodó a igual que Sara aun lado de la cama de hospital – Mamá, papá y lo chicos dijeron que volverán en la tarde

-          Si, Lo sé. Incluso Hele… Mamá – Corrigió recordando como Helena le había pedido que por fin hiciera el esfuerzo de llamarla mamá, afirmando que después de todo lo que habian pasado era justo y necesario - Tuvo una pequeña discusión con Nicole para ver quien se quedaba conmigo esta noche. Por supuesto ella gano

-          Me lo imagino. Mamá nunca pierde – Sonrieron al tiempo que ambas quedaban en un incómodo silencio, querían decirse muchas cosas, pero no sabían cómo - Cami yo… Quería decirte…

-          Perdóname Valeria, perdóname por todo lo que te hice sufrir

-          ¿Que?... No… Te equivocaste. Es al revés, yo te lo tengo que decir a ti – Camila no pudo evitar reír

-          No... Val tu si me hiciste mucho daño, pero yo termine alejándote de tu familia por mi rencor y eso no fue justo. Debí haber resuelto las cosas contigo hace mucho tiempo, ahora incluso sé que debí detenerme con esto de la venganza cuando me lo pediste

-          Y yo nunca debí soltar tu mano – Expreso al tiempo que tomaba su mano - Fui tan egoísta. Estaba tan enamorada de ti y sin embargo preferí mi propia libertad que sacarte a ti de la oscuridad – La abrazo tan fuerte como pudo - Perdóname y gracias por salvar a lo que más amo

Hace muchos años que Valeria había esperado por ese abrazo más que por las palabras de reconciliación que se pudieran decir. Volver a estar en sus brazos la devolvía a una de los mejores momentos de su vida cuando Camila era su refugio, su amante, pero sobre todo su amiga y sabía que por fin la había recuperado, aunque esta vez prometía amarla como a una verdadera hermana

-          Oye Valeria ¿Sabes que significa abrazar? Es estrechar sin ahogar, ya déjala que se está poniendo morada – Exigió Nicole conmovida casi hasta las lágrimas por esa escena -  Hola Val – La saludo dándole un sonoro beso en la mejilla - Sara te mando a decir que te están esperando en la recepción con Fabián, que bajes rápido porque tienen mucha hambre y quieren que los invites almorzar. También dijo que te ama y que te diera un beso en los labios como muestra

-          Ja. Ya te quiero ver intentándolo delante de Cami

-          Ni se te ocurra Niki porque no respondo – Amenazo Camila incorporándose abruptamente sobre la cama, cuando vio el ademan de Nicole de acercarse a Valeria. Ni de chiste iba a permitirlo

-          Lo siento Val, pero mis labios ya tienen dueña

-          Los míos también ni te creas. Si tan solo lo hubieses intentado te hubiera dado un puñetazo por traicionar a mi hermanita – Dijo risueña dirigiéndose a Camila – Adiós princesa, volveré más tarde. Mamá quiere una foto de hospital en familia – Le dio un beso en la mejilla y otro igual a Nicole como despedida

Cuando quedaron solas Nicole se volvió apropia de su lado de la cama. A pesar que durante esa semana en que Camila había permanecido en el hospital solo se desprendía unas cuantas horas cada día para ir a asearse, le aterraba la idea de volver y que ella ya no estuviera. Anhelaba con ansias sacarla de ese lugar para por fin empezar una vida juntas

-          Entonces ¿te encontraste a Sara y Fabián abajo?

-          Pensé que había entrado a la dimensión desconocida cuando los vi conversando y riéndose juntos en la entrada – Se acomodó mejor en la pequeña cama para poder verla de frente -  Es increíble lo que no has hecho cambiar todo esto a cada uno. Hasta mi padre me dio como cinco besos antes de despedirse. Me dijo que me amaba y que la otra semana viajaría a Londres a decir lo mismo en persona a mis hermanos. Se asustó mucho cuando supo que Antonio también tenía pensado matarme a mí. Creo que todos nos dimos cuenta que el tiempo es muy valioso y se gasta muy rápido

-          Dímelo a mí – Respondió mientras acariciaba suavemente su rostro – Desperdicie tanto tiempo buscando desesperadamente una salida, en vez de simplemente confesarte que te amaba y contarte la verdad, seguro de haberlo hecho no estaríamos aquí

Nicole se quedó unos segundos escrutándola con la mirada. Acaricio con un dedo la preciada sortija que había heredado de su madre y sonrió mientras la sacaba de su dedo. No había vuelta atrás, nunca creyó posible que pudiera enamorarse tanto de nuevo y por esa razón no iba perder la oportunidad de reafirmar su promesa a Camila de un “por siempre” con algo mucho más simbólico. Así que tomo su mano y puso la sortija en el dedo anular de su novia

-          No Niki. Esta es la sortija que te dio tu madre, su ultimo recuerdo no me la puedes dar

-          No me entiendes amor, es que… yo espero no perderla. Yo quiero que esta sea una sortija de compromiso. Por favor Cami no me hagas rogarte como siempre si al final también lo quieres solo di que aceptas

-          Claro que acepto, como no, si eres millonaria – Bromeo y junto sus labios con los de Nicole besándola suavemente - Aparte te amo con mi alma. Eres la persona que más he amado en mi vida. Nicole lo que te dije es cierto, toda mi vida valió la pena solo por haberte conocido y atravesaría por el mismo dolor una y otra vez si en algún punto de ese camino te volviera a encontrar

No les fue fácil aprender lo doloroso que puede ser el pasado, lo frágil que puede ser el presente y lo difícil que puede ser el futuro. Que nada vale la pena sin en algún momento de la vida no decidimos arriesgarnos, olvidarnos del dolor y empezar de nuevo, pero lograron derrumbar los muros para encontrar su camino juntas y por supuesto todas tuvieron un largo y feliz final

FIN

Yo también tengo un amplio sentido de la justicia así que por ningún motivo podía matar a Camila. Desde un principio imagine la historia de este modo, Así que no se trató de maldad😉. No puedo creer que me tomara casi un año y medio escribirla, es prácticamente un libro, entonces ya hice una de las tres cosas de la vida, próximamente espero plantar el árbol porque hijos sino voy a tener.

De verdad que lo disfrute mucho y sobre todo por cada una de las personas que se tomaron unas horas de su tiempo para leerlo y un agradecimiento eterno para las personas que escribieron para motivarme.

Mil Gracias a todos y les deseo mucho amor y felicidad