No soy tan puta, sólo soy caliente (9)

En mi quinto día en la tienda de celulares vuelvo a encontrrme con el distribuidor y junto con su empleado nos la pasamos muy bien...

Cumplía mi quinto día trabajando vendiendo celulares, aunque en realidad no había vendido ni uno sólo, las cosas no iban del todo como las había planeado aunque tengo que reconocer que yo también había disfrutado mucho todo lo que había pasado, sobretodo cuando el dueño de la tienda me había exhibido en los camiones urbanos. El día anterior me había portado como una auténtica puta, dejando que el distribuidor de celulares hiciera de mi lo que quisiera, aunque estaba conciente de que yo misma lo había provocado al vestirme de esa manera.

Para este día tendría varias situaciones que tendría que enfrentar, por un lado Joaquín iba encima de mi puesto que hace 2 días lo había dejado que tallara su verga en mi culo hasta que se vino y también le había dado una mamada de verga haciéndolo explotar en mi boca, por otro lado César seguramente ya se había enterado de que estuvimos cogiendo en su oficina, por lo que probablemente iba a pretender algo conmigo también. Debía tener más cuidado y tomar el mando de la situación.

En esta ocasión decidí vestirme un poco menos sexy aunque tampoco quería detener el juego de provocarlos y ver qué eran capaces de hacer. Me puse un vestido blanco con rayas y grecas rojas muy finitas, de tela muy delgada y elástica que aunque no me queda tan pegado como otros dibujaba perfectamente el contorno de mi cuerpo marcando la redondez de mi trasero y mis tetas, tiene mucho vuelo en la parte de abajo y es corto del frente dejando ver totalmente mis piernas ya que me llega un poco más arriba de la mitad de mis muslos y más largo por detrás semejando como si se hubiera desgarrado, en la parte de arriba tiene un escote pronunciado cubriendo apenas la mitad de mis tetas, va sujetado de unos tirantes delgados y me deja media espalda al descubierto. Al final resultó que iba más sexy de lo que esperaba, ya que aparte del escote y de lo cortito del frente, al caminar se me mete el vestido un poco entre mis nalgas por el corte que tiene y lo delgado de la tela. Finalmente me puse una tanguita roja y unos zapatos blancos de tacón, no pude ponerme sujetador, puesto que se hubiera visto debido al generoso escote que mostraba.

Llegué a la tienda y nuevamente Joaquín ya me estaba esperando, afortunadamente estaba hablando por teléfono y pude entrar sin problemas para dejar mi bolsa en el privado, aunque pude sentir su mirada en mi cuerpo como ya lo había hecho otras veces. Regresé al mostrador y me fui a refugiar a la caja, en dónde sólo cabía una persona y así evitar que Joaquín fuera a intentar algo. Me senté y crucé mi pierna fingiendo no darme cuenta que el vestido se me subía un poco más de la cuenta, Joaquín seguía con la llamada pero me devoraba con la mirada, se metió la mano a la bolsa y vi como la movía agarrándose la verga. Finalmente colgó el teléfono y de inmediato fue a dónde yo estaba, intenté taparme las piernas con mis manos pero Joaquín las hizo a un lado al acercarse a saludarme. Me dio un beso en la boca, pero como yo no abrí mis labios sentí como pasaba su lengua rodeándolos dejándomelos mojados, sus manos la puso sobre mis piernas y me acarició los muslos que se mostraban desnudos al subirse el vestido, le detuve las manos antes de que las subiera más y le di un beso en la mejilla.

Se alejó para verme mejor y me dijo "que bárbara….luces espectacular……..ayer te veías preciosa……..pero hoy también ese vestido te hace lucir riquísima……….no tienes miedo de que en la calle te falten al respeto o te pase algo??..." me reí por su comentario, me puse de pie para que quitara sus manos de mis piernas y poniendo cara de ingenua le contesté "como crees Joaquín……que me podría pasar?? …" me fui caminando hacia el extremo del mostrador moviendo mi trasero para calentarlo aún más. Se me acercó por detrás y colocando su verga entre mis nalgas me rodeó con sus brazos besándome el cuello "pues podrían decirte cosas como que rica estás…… estás buenísima……o podrían darte una nalgada…..o acariciarte el culo así con sus manos…. no crees???...". El pobre está que explotaba de caliente, sentía su verga dura y palpitar tallándomela alrededor de todo mi trasero, la verdad es que sentía muy rico y yo también había me empezaba a calentar, mis pezones se erguían buscando salir de su prisión y movía mi culo al mismo ritmo que él para sentir más placer, después de todo ya conocía esa verga que era bastante más grande de cualquier otra que hubiera visto antes.

Bajó sus manos para ponerlas sobre mis mulos y los fue acariciando subiéndolas poco a poco hasta llegar a mi rajita que empezaba a mojarse. Volví a la realidad apartándome de él "Joaquín….esto no está bien….tenemos que hablar de lo que pasó entre nosotros…..debemos detenernos somos compañeros de trabajo y esto no está bien…." De pronto pareció que él también despertaba de su pasión y me dijo "por cierto…habló el dueño y me comentó que ayer no hiciste el pedido de aparatos que te encargó, así que hoy va a venir un chofer del distribuidor para llevarte a que lo hagas…." yo me quedé petrificada, nuevamente iba a tener que ver al viejo panzón de Miguel Angel después de que el día de ayer había cogido con él en su oficina.

En ese momento llegó un muchacho como de unos 20 años de edad con una playera puesta de la marca de teléfonos que nosotros vendíamos, por lo que supuse que sería el chofer que venía por mi. Parecía un pandillerito de barrio porque traía unos pantalones flojos, el cabello casi a rape, arete y un tatuaje en el brazo. Preguntó por mí y Joaquín no tuvo más remedio que dejarme ir, se despidió de mí dándome un beso en la boca que yo por lo confundida y nerviosa que estaba contesté dejando que su lengua se resolviera con la mía. Me fui con el muchacho a una camioneta que traía y como él caminaba un poco detrás de mí noté que su mirada la clavaba en mi culo que debía notarse demasiado al pegárseme el vestido y meterse un poco en medio de mis nalgas. Me tuve que subir con él en la parte delantera de la camionetita, muy caballeroso me abrió la puerta aunque en realidad lo hizo para verme las piernas que al subírseme el vestido al sentarme alcanzó a ver un poco de mi tanguita.

Durante el camino no quitaba sus ojos de mis piernas y al hacer los cambios de velocidad con su mano quería alcanzar a tocarlas. Yo venía muy nerviosa sin imaginar lo que pudiera pasar, le pregunté si el señor Miguel Angel estaba en las oficinas contestándome que no íbamos a las oficinas, sino que César le había pedido que ya nos fuéramos directamente a la bodega por el pedido. Me tranquilicé al saber que no estaría ahí el viejo panzón de Miguel Angel y me relajé un poco, me di cuenta de que el muchacho seguía con su mirada fija en mis piernas, por lo que me acerqué mis piernas de manera que alcanzaba a rozarlas levemente, se le empezó a formar un bulto en su entrepierna y el pobre no encontraba la manera de sobárselo. En cuanto llegamos a la bodega se bajo de prisa para abrirme la puerta, me di cuenta de sus intenciones y me levanté un poco más el vestido de manera que pudiera ver un poco de mi tanguita, me abrió la puerta y puso una cara de sorpresa al ver la imagen que tenía enfrente, ya no guardó ninguna discreción para agarrarse por encima del pantalón el paquete que se le había formado, yo me recorrí poco a poco hacia la puerta permitiendo que el vestido se me subiera todavía más y al momento de bajarme abrí mis piernas mostrándole toda mi rajita cubierta sólo por el encaje de mi tanguita.

Entramos a la bodega y cuál fue mi sorpresa al encontrarme a Miguel Angel, se me quedó viendo con sonrisa burlona "que milagro preciosa…te ves exquisita con ese vestido hermosura….….a cabo de hablar con su jefe y ya arreglamos el pedido de artículos, sólo me pidió que usted se encargara de revisar que estuviera completo para que lo lleven a la tienda……pero pase por aquí por favor en lo que este muchacho se encarga de subirlo a la camioneta…" yo estaba inmóvil por segunda vez en el día y sin saber que hacer, se acercó para darme un beso y no pude ni moverme, todavía no salía de mi sorpresa. Me besó en la boca y ante mi inmovilidad me metió su lengua buscando la mía. Que podía yo hacer? de nada me valía fingir después de todo lo que había pasado el día anterior.

Me tomó del brazo para indicarme una oficina que estaba en el segundo piso de la bodega "pasa tu primero preciosa……..yo te digo por dónde…" noté su mirada sobre mi cuerpo, recorriéndolo de pies a cabeza deteniéndose en mis piernas y mi escote, me di media vuelta para ir a dónde me indicó y una extraña sensación me rodeó, me sentía nerviosa y excitada al mismo tiempo, caminé por delante de él moviéndome muy sexy, me contoneaba haciendo que el vestido marca más mi culo metiéndose entre mis nalgas a cada paso "estás riquísima…..y ese vestido te hace ver como reina……" me dijo de manera que alcanzaran a oir el muchacho que me había llevado a esa cueva y que venía caminando un poco atrás de él. Llegué al pie de la escalera de metal y subiendo un pie volteé a verlo con cara coqueta "por aquí voy bien??..." Miguel se acercó y acariciándome las nalgas me hizo para adelante para subir el primer escalón "que rico se siente tu culo con este vestido mi reina y también se siente muy rica tu tanga……..sube, es el primer cuarto a la derecha….." el jovencito que nos seguía se puso frente a mi para poder ver por debajo de mi falda cuando subiera y no hice nada por taparle la visión.

En cada escalón que subía mi excitación iba en aumento, ya estaba muy mojada y presentía lo que iba a pasar adentro de esa oficina. Me senté encima del escritorio, tras de mi entró Miguel Angel a quien ya se le notaba una erección a través de su pantalón. Se fue directamente sobre mi, me tomó de la cintura para bajarme del escritorio y me jaló hacia él quedando de pie, me tomó de las nalgas y me empezó a besar el cuello, yo sentía su verga rozando mi entrepierna, con mi mano se la liberé para masajearla pero no me dejó "espera putita……..primero yo te voy a hacer disfrutar…." me cargó hasta un sillón que tenía y poniéndose de rodillas me abrió las piernas y empezó a lamer mi rajita. Era un verdadero maestro con su lengua, hacía que me retorciera de placer gimiendo como perra en celo, le apretaba su cabeza agarrándolo de los pocos cabellos que le quedaban y mis caderas parecían moverse solas al ritmo de su lengua "siiiiii!!! …….no te detengas….soy tuya………..coméme…….ooooohhhh……..no puedo más……aaaaahhh!!!!" me provocó un orgasmo largo que me hizo perder conciencia por un momento, se levantó con la cara llena de mis fluidos y sonriendo me dijo "ahora te toca a ti…..".

Me acerqué a su verga que me metí en la boca de un solo bocado, la lamía con desesperación como si de eso dependiera mi vida, la recorría desde la cabeza hasta la base con mi lengua y la aprisionaba con mis labios, le agarraba los huevos con una mano mientras con otra me agarraba el clítoris. Estaba a punto de venirse cuando me la sacó de la boca, se bajó el pantalón y me la metió de un solo empujón sin problema, yo estaba muy mojada facilitando la entrada "tómala mi amor………te encanta verdad puta…….te fascina calentarme, no putita……..eres una perra…….." empezó un mete-saca frenético y rápido, mis vista se nubló y sólo gemía de placer pidiendo más "soy lo que quieras….no te detengas……cógeme……maaaaaaassss…" no tuvo ningún problema para sacar mis tetas del vestido y pegarse a ellas como bebé alimentándose "tienes unas tetas preciosas………me…… encantas……. puta………." y enseguida empezó a correrse adentro de mí "aaaahhhh…..me….vengooooo………toma mi leche…….mmmmm!!!!!....."

Se dejó caer encima de mí todo sudado y jadeando, me besaba la boca y yo ahora si le correspondía. Nos quedamos así un instante, con su tranca adentro de mí en lo que tomábamos un poco de aire. En nuestra calentura no nos habíamos dado cuenta de que el muchacho estaba de pie junto a la puerta con su verga de fuera masturbándose. Intenté levantarme pero me era imposible por el peso de Miguel "Miguel…… quítate….nos están viendo…….." él sólo volteó sonriendo y le dijo al chamaco "te gustó Pepe?.....quieres disfrutar tu también de esta puta?.........ven…acércate…" yo protesté "estás loco…….quítate……esto es una locura…un error…".

Pepe se acercó un poco temeroso pero con su verga totalmente parada, se puso junto a mí y Miguel Angel le dijo "acércate con confianza….a esta vieja le encanta la verga y hoy va a recibir una buena dosis….." se quitó de encima de mí dando vía libre a Pepe y tomándome de los brazos impidió que me levantara, Pepe empezó a sobarme las tetas y con otra mano me acariciaba las piernas, yo no podía hacer nada, estaba sujetada y me deja hacer por este muchachito. Finalmente puso su garrote junto a mi boca y me lo pasó por toda la cara, Miguel me metió un par de dedos en mi conchita y empecé a gemir nuevamente, sin que Pepe hiciera nada tomé su verga con mi mano y me la metí a la boca dándole una memada que él no se hubiera imaginado nunca.

Mi vestido estaba hecho bola en mi cintura dejando mis tetas y mi culo al aire. Miguel nuevamente empezó a meter su lengua en mi rajita provocándome otro orgasmo enorme, me tomó de los brazos para ponerme en la alfombra en cuatro patas, su verga ya esta otra vez rígida como piedra. Me empezó a coger en esa posición agachándose para agarrar mis tetas que colgaban sueltas moviéndose al ritmo en que su garrote entraba y salía de mi. Volteé a ver a Pepe y con la mirada le indiqué que se pusiera delante de mi para seguir mamándole la verga, así lo hizo hincándose frente a mí agarrándome la cabeza como si me estuviera follando por la boca.

"Ahora si tienes los que te gusta verdad puta…….inmediatamente se ve que te encanta la verga, cabrona….te vistes como puta provocando a los hombres…..pero yo si te doy lo que mereces…" yo estaba entregada a ellos y me dejaba hacer lo que quisieran. En eso Miguel se salió de mi y haciendo a Pepe a un lado me emtió su tranza en mi boca para correrse "toma puta………trágate…..mi…leche…..aaahhh………me encantas……..siiiii!!!......"sentí como su verga expulsaba borbotones de mecos que me tuve que tragar, habrán sido unos 5 que aventaron una buena cantidad de leche. Pepe por su cuenta tomó el lugar de Miguel y no tardó mucho en venirse llenándome una vez más de semen "ooohhh…..me vengoooo………aaaaaahhhh!!!" sentía como aventaba su leche en mis entrañas, su verga palpitaba y parecía que no acababa de vaciarse.

Después de que les limpié a cada uno su verga con mi boca, quedamos los 3 tirados en el suelo por unos 20 minutos, estamos extenuados y Miguel Angel más que todos porque no tardó en quedarse dormido. Me levanté y traté de arreglarme el vestido que había quedado echo un desastre, traía semen por toda la cara y me escurría a chorros por mis piernas. Le pedí a Pepe que me llevara a la tienda y levantándose se acomodó su pantalón y me llevó de regreso. Ninguno de los dos dijimos nada en el camino, él intentó acariciarme las piernas pero se detuvo al darse cuenta de que seguían escurriendo leche que seguramente era de él. Yo estaba perdida y no me daba cuenta de nada, en eso sentí que su mano se apoderaba de una de mis tetas y la acariciaba sacándola del vestido, volteé a verlo y ví que su verga nuevamente estaba dura formando un paquete en su entrepierna, lo vi a los ojos y me acerqué a él para sacársela del pantalón y empezar a masturbarlo "tu encárgate de no chocar y yo me encargo de lo demás….." me agaché y me la metí en la boca. Así nos fuimos todo el camino y poco antes de llegar sentí como se arqueó hacia delante y empezó a venirse otra vez ahora en mi boca, tragué toda la leche que aventó y limpiándosela con mi lengua le besé la cabeza, haciéndolo gemir como perro herido. Me levanté acomodándome el cabello y me bajé de la camioneta y le dije antes de irme "entrega todo el equipo al empleado que está en la tienda, se llama Joaquín, el puede recibirlo…" y cerrándole un ojo me fui caminando a mi casa, después de todo…..ya era hora de mi salida.