No puedo ser fiel

No puedo ser fiel (1) por Telonero

Basado en una historia real

Me encontraba solo, como todos los sábados a la tarde, cuando mi esposa salía a visitar a su madre que vive en otra ciudad. Siempre fui un esposo fiel, sólo de vez en cuando me tentaba a engañarla, sobre todo por la larga abstinencia sexual a la que estaba sometido por mi esposa. Ella nunca quería acostarse conmigo, siempre tenía una excusa a mano para no hacerlo...el tiempo pasaba y pasaba y ya más de un año sin actividad sexual de ningún tipo. Pero hasta ahora, nunca la había engañado...

Hasta que un día llegó ella: Noelia, la mejor amiga de mi esposa. Tocó el portero eléctrico de mi departamento a eso de las 13 hs...mi esposa se había ido hace un rato y yo iba a estar toda la tarde solo...al escuchar su voz sentí muchas ganas de abrirle y bajé...estaba más hermosa que nunca, con una de esas remeritas apretadas que siempre usaba...no tenía mucho busto, pero podía ver su forma perfectamente....y esa cola, por favor!!! esa cola perfecta que pedía a gritos acción...

Lo que me sorprendió más fue que llegó llorando...yo la abracé y le pregunté qué le pasaba....y ella pasó a contarme todos los problemas que estaba teniendo con su actual novio. Para peor, yo sólo tenía puesto un short fino, casi un boxer, por lo que el abrazo me excitó y mi verga quedó a full...creo que ella no se dio cuenta, yo igual me ruboricé y me tapé con su cartera, que de forma galante me ofrecí a llevar...

Entramos a mi depto. y se sentó en una silla. Yo hice lo mismo, tratando que mi verga no creciera tanto. Me puse una remera y me senté a escuchar...hacía una hora se había peleado una vez más con su novio, y no paraba de llorar y llorar...yo quería consolarla pero no podía así como estaba vestido y ella insistía con agarrar mi mano y llorar encima de ella...me paré a ofrecerle un vaso de agua y ella vino hacia la cocina...como seguía llorando me acerqué y le di el abrazo más cercano que cualquiera podría haberle dado en ese momento...en ese instante dejó de llorar...pero se aferraba más y más a mí...no nos soltamos por unos cinco minutos, en los que yo sólo le decía:

-Noe, no te pongas mal, hay muchísimos hombres buenos que te merecen...sos una mujer hermosa, dulce, cariñosa, inteligente, atractiva...hombres que se morirían por estar con vos...

-¿Hombres como vos?- me preguntó.

Yo me quedé duro; ya estaba muy duro con el tremendo abrazo que le estaba dando, pero no esperaba esa pregunta.

-Sí, un hombre como yo te desearía y mucho.

-¿Tanto así?

-Mucho más de lo que te imaginás.

En ese momento no pensé más, y me dejé llevar. No me importó si era amiga de mi esposa o no, me acerqué más, rodeé su cola con mis dos manos y la besé, metiendo mi lengua en lo más profundo de su garganta. Ella ni se inmutó, me devolvió el beso y así estuvimos un buen rato...seguí besando su cuello, sus brazos....ella tenía una mirada lujuriosa que no conocía...y que me invitaba a llevarla a la cama....la llevé despacio, y la empujé lento, para que cayera sobre mi cama...mi cama matrimonial!!!

Allí me transformé en un animal...más de un año sin coger me habían transformado en eso...la besé por todos lados, me comí sus tetas, le mordí los pezones, la di vuelta, recorrí su espalda con mi lengua y después con mi pene...después lamí su ano, su clítoris y su concha...en ese punto se convirtió en una vampiresa y empezó a gritar como una loba en celo...cuando sentí que estaba lo suficientemente abierta, la penetré como si fuera la última vez que cogía en mi vida y le dí y le dí...cada grito de los dos subía hasta el cielo y recorría la Tierra...yo conté cinco orgasmos para ella, y yo debo haber acabado unas tres veces en una hora, sin necesidad de sacarle la pija...

Cuando terminamos, yo seguía con ganas de cogerla; pero para descansar un poco, la invité a que nos fuéramos a duchar y así lo hicimos...y mientras nos jabonábamos se me paró de nuevo y empezamos a coger bajo el agua...y en lo mejor del polvo la di vuelta violentamente, la apoyé contra la pared, le metí la lengua en el ano...cuando sentí que empezó a gemir me paré y le apoyé la punta de mi verga...

Ella dijo:

-Despacio, bebé, nunca lo hice por ahí!!!

-No me importa, vas a ser mía por todos tus agujeros...

Y la penetré. Ahí me di cuenta que le dolió un poco, un poco bastante, diría yo...pero así como estaba no me importó...la tuve quince minutos sollozando, entre lágrimas y placer, mientras con una mano le agarraba un pezón, con la otra le masajeaba el clítoris y con mi boca le metía la lengua en sus dos orejas, para excitarla más...

Cogimos hasta cansarnos, hasta que se hicieron las seis de la tarde...ahí comimos algo y empezamos a limpiar la casa...para no dejar huellas. Sin embargo, ella seguía con ganas y como ya habíamos limpiado todo, le pedí que sólo me la chupara, así como estábamos...ella accedió, le costó un poco, no por lo largo sino por lo ancho de mi pija (siempre había tenido problemas con eso), pero lo hizo igual, tragándose toda la leche como le gusta a todos los hombres...

Lo bueno de Noelia es lo reservada que puede ser...confié en ella para que no le cuente nada a nadie...era mi primera infidelidad...pero no contaba con que me iba a traicionar...pero eso es parte de mi próximo relato...quieren saber qué pasó?

Muy pronto se los contaré...si quieren algún adelanto mándenme un mail a telonero@gmail.com , con gusto les voy a contestar.