No pude más que obedecer (1)
Desde hace unos días, vivo sometida a los caprichos de cuatro chicos, que ahora son mis superiores, y sólo uno de ellos, el jefe, es mi amo, esto es algo que ellos acordaron, y yo tuve que acatar, he dejado mi vida normal, y ahora vivo de ellos, no me quejo pues no puedo, y ya no tengo más sitio a donde ir, pues no me queda familia, por lo cual, no puedo hacer otra cosa más que obedecer.
Ésta historia es ficticia y los personajes inventados, nada tiene que ver con la realidad. Espero que la disfruten y que les guste.
No pude más que obedecer
Permítanme primero presentarme..
Soy una chica de 20 años, alta, (1.72cm), delgada, morena, con un color de ojos claro. Nada mal para alguien de mi edad.
Vivo sola, en una casita pequeña, un apartamento mas bien, estoy estudiando y trabajo a veces en algún bar por las noches, para sacarme un sueldo.
Desde hace unos días, vivo sometida a los caprichos de cuatro chicos, que ahora son mis superiores, y sólo uno de ellos, el "jefe", es mi amo, esto es algo que ellos acordaron, y yo tuve que acatar, he dejado mi vida normal, y ahora vivo de ellos, no me quejo pues no puedo, y ya no tengo más sitio a donde ir, pues no me queda familia, por lo cual, no puedo hacer otra cosa más que obedecer.
Todo empezó en un parque, iba haciendo deporte, suelo ir a correr de día, entonces escuché unos ruidos, y aceleré, alguien me seguía. Al salir del parque me encaminé hacia mi casa, esperando que dejaran de seguirme y pensaba que así había sido. Al llegar al portal alguien me agarró del brazo, y me asusté, pero cuando me volví, vi que era un vecino mío, dos años mayor que yo, se llamaba James, era inglés. Me preguntó por qué estaba asustada, a lo que respondí con una sonrisa, que no era nada...
El chico venía con dos amigos más, entramos los cuatro en el ascensor y comenzó a subir, los amigos de James no paraban de mirarme, así que me limité a mirar al suelo, notaba como me rozaban cuando podían, disculpándose por ello alegando que como el ascensor era pequeño, e íbamos justos...
Yo lo dejé pasar, llegamos, nos despedimos, y me fui rápido a mi casa.
Mientras abría la puerta, noté una mano que me recorría la espalda, y otra que me tapó la boca me empujaron dentro y cerraron con llave, estaba muy asustada, y ninguno hablaba, ni me dejaban mover la cabeza, aunque sabía que eran James y sus amigos.
Me dejaron en el sofá y me dijeron que si gritaba me matarían, que solo querían proponerme algo. Uno de ellos me miraba casi babeando y le preguntó a James que si podía probar la mercancía antes de la noche, James contestó que luego se divertirían, yo temblaba de miedo.
Me dijeron que querían que participara en una fiesta, yo iría como la novia de James, y haría todo lo que me dijeran, les contesté que no lo haría, pero James me convenció diciéndome que si no lo hacia acabarían conmigo, y él sabia que vivía sola, así que no podría mentirles...
Me desnudaron poco a poco, y yo me dejaba hacer, hasta que empezaron a desnudarse ellos, intenté correr hacia mi cuarto, encerrarme en él y llamar a la policía, pero me atraparon y me tiraron al suelo.
James se acercó a mi oído y me susurró: Si vuelves a intentarlo, te las verás conmigo, ¿entendido zorrita?
Y alzando la voz proclamó: Bien, ahora tu eres mi puta, y no quiero que me lleves la contraria, o te castigaré, ahora come.
Y cogiéndome del pelo me hizo abrir la boca y metió su polla de golpe hasta la garganta, me atraganté y la escupí, por lo que me pegó un el culo, poniéndome a cuatro patas, y me dijo que si no quería comer, me fallaría, y me dolería mas, si estaba tan seca.
Me dio a elegir, o se la comía ahora, o me dolería más, en ése momento mi orgullo me vencía, y me negué a comerle la polla, por lo cual, me llevó a la cama y uno de sus amigos sacó unas esposas. Me esposaron a la cama.
James empezó, se subió y sin mediar palabra me penetró, grité como una loca, me destrozaba, y la tenia muy grande y muy gruesa, me estaba empalando, paró, y dejó que los otros fueran primero, pues él era el que más grande la tenía.
El primero me puso a cuatro patas, y desde atrás mientras me tiraba con fuerza de las tetas haciéndome daño me la metió, todos estaban empalmados, así que me iban tocando por donde querían, cuando estaba terminando James le ordenó que no se corriera dentro, "aun no", por lo que me llenó la espalda.
Antes de que el segundo ocupara su puesto, James me limpió, lo cual me resultó extraño, luego me di cuenta de que me secaba cumpliendo su promesa de que me dolería más, así cada vez que uno me violaba estaba seca completamente.
El segundo me montó como el primero, y así el tercero también.
James me dio la vuelta, y tumbada me violo, con él fue con quien más gritaba, no podía parar.
Empujaba cada vez más fuerte, yo al principio intentaba quitarlo, moviéndome, pero recibí un par de tortas que me hicieron dejarlo, al terminar, me dijo que iba a romperme el culo, si quería podía comérsela y él a cambio intentaría no hacerme mucho daño, intentando agrandarlo poco a poco, sino, esto si me iba a doler.
Contesté levemente que lo haría, pero no estaba satisfecho, me hizo decirlo bien alto y claro y suplicándole un..
-"James por favor, déjame comerte la polla, por favor, déjame hacerlo, quiero que me folles la boca, tú y tus amigos, para que cuando me rompáis el culo, no me duela tanto, por favor, déjame."
Humillada, lamí cada una de las cuatro pollas, y tenia que esmerarme, por que sino, pararían y me partirían en dos.
Empezaba lamiéndoles el tronco, y luego subiendo poco a poco, sin tocar el capullo, lamía todo el tronco, y después me metía un poco la punta en la boca, luego ellos terminaban, por que impacientes cogían mi cabeza y movían como posesos las caderas, haciéndola entrar y salir de mi garganta, me dejé hacer, y procuré ensalivarlas bien, cuando el primero terminó en mi boca, se acercó a mi culo, y aun chorreando semen empezó a metérmela, yo intenté gritar por el daño que me hacía, pero el segundo ya tenia su polla en mi boca.
Siguieron violándome, por el culo y la boca, t terminando cada uno en un lado, se sentaban a mirar, cuando James terminó en mi boca, me hizo tragar todo su semen, y después volver a lamerla para mi culo, La metió con mucho esfuerzo y muchos gemidos por mi parte, ya que mordía un trapo que me habían dado, no querían que gritara tanto, yo lloraba mientras James disfrutaba , me la metió entera, y luego empezó a moverse como un loco, parecía poseído, y me estaba reventando, me dolía muchísimo.
Cuando terminó, no sacó la polla de mi culo, sino que llamó a un compañero, y le dijo que se pusiera debajo de mi, y mientras él me follaba el coño James seguía bombeando en mi culo, se corrieron dos veces más en mi coño y tres en mi culo, me sentía llena, y ellos cansados, así que llamando a los otros, se cambiaron, y ahora me llenaban los otros dos amigos.
Cuando salieron, empecé a chorrear semen, y entre risas comentaban lo cómico que les parecía, yo estaba hecha polvo, y no podía más, pero sabía que no podía moverme o sería peor.
Me volvieron a empalar y a empujar ambos, y ahora además James de puso delante de mi y me sugirió que ya que tenia la boca desocupada, que la usara un rato.
Así, me llenaron varias veces el culo, el coñito y la boca, donde se iban cambiando James y unos de los amigos.
Cuando todos estuvieron satisfechos me soltaron, y me ordenaron recoger lo que necesitara para pasar una semana en una casa de campo.
Pero esa será otra historia. Espero que les halla gustado, es la primera historia que escribo, gracias por leer.