Niña Lucía (Apuntes del personaje)

“¿Qué tal si enseñas sobre lo de crear un personaje? Lo hiciste conmigo y el resultado no te ha quedado tan mal.”

Noche por todas partes en mi habitación, el silencio era total. Debían ser las 4 de la mañana y el que aquí os escribe, completamente desvelado. No preguntéis por qué, últimamente tengo repentinos ataques de insomnio que no me hacen ningún bien.

A lo que iba. Eran las 4 de la mañana y de pronto un ruido me sobresalta. Me incorporo en mi cama y afino oído, pero el sonido no se repite. El insomnio me estará volviendo paranoico. Abatido, me dejo caer de nuevo sobre las sábanas, pero noto una presencia a mi lado y el corazón se me congela.

"Ya va siendo hora de que escribas algo, ¿no?"

Conozco la voz. Joder.

"¿Qué haces aquí, Lucía?"- susurro, mientras intento dominar mi corazón.

"Hace ya mucho tiempo que publicaste la entrevista y no he visto ningún movimiento más. Te queda una categoría, "textos educativos", ¿Acaso lo olvidas?"

"No, no lo olvido, pero…"- Mi brazo se mueve nerviosamente y roza el cuerpo de mi personaje.- "Niña Lucía… ¿Estás desnuda?"

Cascabelea la risa de Niña Lucía, que me obliga a levantarme y sentarme ante el ordenador. Lo enciende y, nada más iniciar, me abre una página de Word (toda esta introducción la escribíría después de aquello)

"Bien, Kalashnikov. Escribe el texto educativo."

"¿Sobre qué? ¿Sobre qué puedo educar yo? Coño, Luci, tengo 20 años, casi 21, estoy en edad de que me enseñen, no de enseñar."

"¿Qué tal si enseñas sobre lo de crear un personaje? Lo hiciste conmigo y el resultado no te ha quedado tan mal."- Niña Lucía gira sobre sí misma y me muestra su cuerpo adolescente y desnudo. No. No está nada mal. Ese culo me vuelve loco.

"Está bien, está bien…"

I. Génesis .

"¿Qué es lo que hay que hacer para crear un personaje atractivo y coherente a los ojos de los lectores? Precisamente eso. Hacerlo atractivo y coherente.

Obviamente, un señor de Cuenca obeso e impotente, que pasa las tardes mascando ‘conguitos’ y viendo los documentales de "la 2", no va a tener el mismo éxito que una preciosa ninfómana, a pesar de que el mundo interior de cada uno pueda ser todo lo grande que quiera.

Tú tienes que pensar qué personaje es el que mejor va con lo que quieres narrar de tu serie, puesto que una serie no debe nunca limitarse a narrar, una tras otra, escenas de sexo. Para eso haces relatos sueltos y santas pascuas. Para una saga es necesario pensarse bien el personaje, su aspecto, sus filias, sus fobias, su forma de ser, imaginarse también cómo son los personajes que lo acompañarán… y sobre todo, no cometer incongruencias entre relatos. No vayas a decir que tu personaje tiene los ojos azules y, varios relatos después, misteriosamente los tiene verdes. Lo digo por experiencia

Lo bonito de una serie es que da tiempo para encariñarse, amar, odiar, enamorarse o simplemente interesarse por el personaje principal y la gama de secundarios que toda serie que se precie debe tener. Y para eso lo mejor es ir llevando al personaje poco a poco, describirlo bien, hacerlo llevar una vida coherente. Por ejemplo, que de repente el protagonista se encuentre con Elsa Pataky por la calle y follen en los baños de un McDonald, o que se cruce con un inventor chiflado que le proponga viajar en el tiempo a una bacanal romana, son escenas que sólo un genio podría hacer coherentes. Y, reconozcámoslo, aquí no hay ningún genio. Si fuéramos genios estaríamos publicando libros a diestra y siniestra y las editoriales se darían de hostias por nosotros.

Pero en fin, que estamos hablando de relatos eróticos, y lo interesante de los personajes es su vida sexual. Pero también has de decidir desde cuándo se narra esa vida sexual. ¿Desde que el personaje, joven, torpe e inexperto, pierde la virginidad? (en estos casos es conveniente omitir edades para que los torquemadas de TR no vengan a quemaros los relatos) ¿O la serie empezará cuando el personaje está ya tan curtido que su polla baila sola o el coñito es capaz de hacerle palmas por bulerías? En fin… que una serie empiece con el o la protagonista ya sabiendo arameo no significa que, en un momento dado, no puedas hacer uno o varios capítulos de flash-back, narrando cómo empezó todo. Otra cosa que también habría que decidir al principio es cómo acabará la serie. ¿Qué es lo que piensa conseguir? ¿Es una sumisa que busca la aceptación de su amo? ¿Un adolescente enamorado de una hermosa profesora? Y aunque la búsqueda del protagonista no tenga final, siempre es bueno imaginar cómo será el último capítulo.

En fin… digamos que ya tenemos todo el marco inicial. Personaje principal, secundarios, el lugar donde se va a desarrollar la historia (no es lo mismo pueblo que ciudad, y tampoco sería bueno que los protagonistas vivieran en Madrid y quedaran todas las tardes en la playa), el espacio temporal (para no complicarse siempre se puede ubicar en el momento actual, pero si quieres rizar el rizo y viajar a la corte de los antiguos faraones, o bajar a las mazmorras de la Inquisición, esto conlleva una pequeña parte de documentación que evitará incongruencias como ver a los Borgia viendo pelis porno)… todo.

Es aconsejable pensar el número de capítulos aproximados que tendrá la serie. Así te evitarás que los capítulos tengan mucha diferencia de tamaño entre sí. Una virtud de las sagas es que sus capítulos sean similares al menos en duración.

Una vez hecho todo eso, ya es hora de empezar la serie.

II. Elaboración

Ya tenemos a nuestro personaje campando alegremente por nuestra imaginación. No lo pongamos directamente a follar. Siempre hay tiempo para eso. Recuerda que esto es una saga y te acabarán sobrando capítulos. Empieza a narrar su vida. Si es un putón verbenero, no te prives de hacer que lo demuestre, ya sea tirándole los trastos a un desconocido o mencionando que se ha dejado las braguitas debajo del asiento del coche. Eso, en los primeros relatos, siempre es un buen gancho. Si, en cambio, nuestro/a protagonista todavía no ha probado su primera vez (cosa que, seguramente, cambiará en los primeros capítulos) haz hincapié en su inocencia, en que lo más cercano al sexo que conoce es el porno de ciertos canales regionales. Los lectores desearán saber cómo y con quién es su primera vez.

El secreto de los primeros capítulos es causar curiosidad en el lector, dejarlo con ganas de leer el próximo, aunque tenga que esperar. Porque esa es otra, no sucumbas a la presión de los comentaristas, no aceleres tu escritura sólo para sacar antes los relatos a sus ojos. Pero tampoco te duermas, si estás mucho tiempo sin publicar un capítulo la gente puede olvidarse de la historia. Mantén una frecuencia de publicaciones estable. De uno a cinco relatos por mes está bien…"

"Kalash, me duermo…"- Me interrumpe Niña Lucía, que no ha separado sus ojos de la pantalla ni un instante…- "Eres más aburrido que una pelea de estatuas. No sé cómo coño has conseguido mantener a tanta gente conectada a la serie"

"Es un texto educativo. No tiene que entretener, sino educar."

"Bah… déjame a mí cuando llegues a la tercera parte, verás como educo…"

"Que sí, lo que tú quieras…"- hago un gesto de indiferencia con la mano y Niña Lucía se vuelve a la cama. A los pocos segundos la oigo gemir. Se está masturbando ¿Y quiere que yo enseñe algo en estas condiciones? Intento hacer oídos sordos y seguir escribiendo.

"¿Por dónde íbamos? Ah, sí, frecuencia de publicación. Ni mucho ni poco. Relatos muy rápidos confunden y hastían al lector, que además puede perderse varios por una semana de ausencia y desconectarse de la serie. Demasiado tiempo entre relatos hace que la gente se olvide de la saga y tenga que releerse los relatos anteriores para ubicarse. Y cuando se llevan más de 3 relatos, la gente se niega a leer tanto por un simple relato, habiendo decenas más de ellos cada día.

Por otra parte, la escritura, y más para una serie, ha de cuidarse. Pero no sólo eso, ha de mantenerse el mismo estilo. Si escribes "Su polla llegaba cada vez más dentro mientras Eva soltaba la sarta de improperios más grande que José jamás había oído", al siguiente relato no es conveniente escribir "y sus dos cuerpos, fundidos en un rayo de luna, se unían y desunían al ritmo de la mare, embarcando a los cuerpos en un agradable crucero por un mar de placer."… sé coherente, sé fiel a tu estilo, marca y si hace falta, INVENTA tu estilo.

Otra cosa, he de incidir otra vez en la coherencia de la serie. En TR no se suele mirar, pero es un consejo más. Una tía que no sabe nada de sexo no la puede mamar como una profesional. Un estudiante virgen no puede tocar donde hay que tocar y chupar donde hay que chupar sin una sola indicación. Una…"

Joder… es imposible seguir escribiendo. Niña Lucía está corriéndose y mi sangre no está en el cerebro precisamente. Y eso que no quiero mirarla… Sigamos

"Resumiendo. A pesar de que en TR no abunden estos casos, tenéis que enteraros de que existen, y son consejos igualmente válidos para series que para relatos .

  • En ocasiones, sobre todo para sexo esporádico, se folla con condón.

  • No todas las mujeres del mundo tienen 90-60-90 de medidas y están deseosas de follar con cualquier tío.

  • A partir de cierta edad, las arrugas se notan. (Especial para sexo con maduros-sexo con maduras)

  • Hay pollas de menos de 24 centímetros (Lo juro, yo tengo una)

  • Un beso pasional después de una felación completa tiene ligeros inconvenientes.

  • Clítoris no es una isla griega.

  • Meter una polla enorme por el culo de alguien sin dilatación previa es una noche que acaba en el hospital.

  • Para pasar de "Niña inocente y virgen" a "Puta insaciable" se necesita algo más que un solo polvo.

  • Una mujer no puede follarse a un tío ciertamente orondo y reinventar con él todas las posiciones del kamasutra. Eso sólo lo podemos hacer los delgados, lo siento… Hay posturas imposibles con "flotador"."

"Me toca."- Niña Lucía me separa las manos del teclado y me levanta de la silla. Le brillan sus ojazos verdes. Me encanta cuando, después de un orgasmo, le dan estos ataques de seriedad… joder, me dejaría esposar por ella

"todo tuyo…"- no sé muy bien si hablo del ordenador o de mí mismo. Lo que sea… a ella le interesa el ordenador.

III. Sexo y personajes

"A ver, futuros escritores de series y personajes ¿Qué queréis? ¿Una serie erótica? ¿Una serie pornográfica? ¿Una serie romántica? En TR tienen cabida las tres, pero las terceras tienden a recibir tanto apoyo como el partido pirata.

Si queréis una serie erótica… centraros en los personajes. Lo importante no es el sexo, si no cómo llegan a él. No importa el lenguaje que emplees… a pesar de lo que diga Kalash, tiene muy poca vergüenza, después de que en el primer relato pusiera que el placer nos fotografió "en un éxtasis completo, con todos los músculos hechos piedra que temblaba." (sic.)

Si queréis una serie porno, follar. Es lo que tienen que hacer los personajes, follar. Siempre es más divertido el porno que el erotismo, de verdad, y la mayoría de lectores prefieren el porno, aunque gran parte de los comentaristas prefieran el erotismo… incongruencias de la página. Y si la página tiene incongruencias, que no os obsesione no cometer ninguna en vuestra serie. Los lectores no se fijan en eso. Tiene una mano en el ratón y la otra sobre el sexo, les faltan manos para señalar errores.

El tipo de lenguaje y los diálogos tienen la importancia que les queráis dar. Evidentemente, es imposible hacer una serie con relatos donde más de la mitad del texto son gritos de placer en mayúsculas (siempre en mayúsculas, resaltan más, si no, parece que estén leyendo malamente un guión).

Otra cosa, no os quedéis cortos con los preliminares. A los personajes nos gustan tanto como a las personas de verdad. Un pollazo a las primeras de cambio duele, pero algunas somos muy profesionales y fingimos. Pero con dos o tres párrafos de toqueteos, trabajos orales y demás (No pido mucho, sólo dos o tres párrafos, que si queréis poner dos o tres páginas tampoco hay problema), cualquier personaje, de seguro, trabajará más a gusto.

No os paséis de crueldad. Por muy buena que esté una protagonista, no la pueden violar siempre que salga de casa. Si la habéis secuestrado y le hacéis mil perrerías, por lo menos que uno de los secuestradores se preocupe por ella y la cuida y la sane… Hasta en las categorías más duras se agradece un poco de ternura.

Y bueno, si queréis rizar el rizo y hacer como Kalash, es decir, un relato en cada categoría con el mismo personaje, intentad que los capítulos no estén demasiado forzados. Obviamente, habrán relatos en que la parte erótica puede caer en otro personaje (si el prota es un tío, a ver cómo lo metéis en "lésbicos", ídem en "gays" si la prota es una chica. Kalash lo arregló poniéndome a ver un porno-voyeur-amateur, pero no lo intentéis siempre así, seguro que se os ocurren mil cosas más).

No os olvidéis de los personajes secundarios. Echar mano de ellos sólo cuando los vas a usar para follar hace que la serie pierda credibilidad. Los personajes tenemos nuestra vida, nuestras amistades, y no nos pasamos 24 horas al día en una cama (o alfombra o ducha o lo que se tercie).

En fin, para acabar y con pocas palabras, sed fieles a vuestro estilo pero no os privéis de ser originales, al menos de vez en cuando

Y ya está todo dicho."

"A ver, Kalash, ¿Qué te parece?"- Dice Lucía, enseñándome su parte.

"Pues realmente, es una mierda de texto educativo. No por tu parte, la mía también"

"Te jodes, porque lo acabo de enviar…"

"¿Qué? ¡Pero si no tenía introducción ni nada! ¡Ni lo había repasado!"

"Pues más te vale escribir la introducción ahora y mandar el relato completo antes de que Álex publique éste."

"Joder…"

"Cuando quieras…"

Niña Lucía se va a la cama y yo comienzo a editar el relato. No me atrevo a mover ni una coma de lo que ella ha escrito. Menuda se pondría

Añado los diálogos y la introducción a toda prisa. No por Álex, ni la página… Niña Lucía está desnuda en mi cama y me está llamando.

"Vamos, Joan… digo, Kalash… te estoy esperando…"

"No me llamo Joan, y lo sabes…"

"Bah, una letra más o una letra menos qué más da ¿Vienes o no?"

"Voy."

Voy a cerrar el archivo y a enviarlo. No quiero que Luci se impaciente.

Kalashnikov.