Niña Demonio cap3: Verdad o mentira

Niña de instituto maltrata a una compañera, su hermano mayor sale en su ayuda, pero se da cuenta de que todo gira en torno a él llevándolo por caminos que no le convienen.

JUEVES

Esa mañana parecía normal no tenía nada especial que hacer en el colegio, el tema de mi hermana permanecía en pausa hasta llegar a casa y todo transcurría de forma tranquila. Pedro me hizo señas para que me separase del grupo durante el recreo.

P —que tal ayer, fue todo bien

M —sii hice las fotos y nos marchamos —intentando ocultar lo ocurrido—.

P —que ocultas, no has sonado del todo convencido

M —bueno es que ella vio las manchas en tu puerta —uff—.

P —a si eso fue un pequeño estornudo

M —pues ella piensa que son de haber estado…

P —que mente más sucia que tiene la niña, como iba yo a hacer eso, algo mas

M —no nada eso fue todo

Y eso fue todo, todo hasta llegar a casa, donde tras comer me cole al cuarto de luci con disimulo.

L —ya era hora, pensaba que no venias, todo ha sido rarísimo, hoy sí que estaba rara, para empezar a intentado hacerse amiga mía como si nada hubiera pasado, durante el recreo alguien ha revuelto mi mochila pero no a cogido nada y además se ha portado muy normal y educada con todos los profesores y…

M —que mas.

L —esto, lo cierto es que en una de las ultimas clases se estuvo comportando como muy dulce y juguetona con un profesor y además me pidió tu numero

M —¡con que profesor!

L —pedro ¿importa eso?

M —¿mi numero, para que? ¿se lo diste? —pregunta muy preocupado—.

L —lo cierto es que insistió mucho así que al final se lo di. Marco, ¿puedo llevar ya mi móvil este es una patata inútil no puedo ni instalarle el wasap?

M —no, todavía no, esta tramando algo

L —es que las niñas se ríen cada vez que lo saco y me siento marginada, además podías haber mandado el video al tuyo en vez de mandármelo a mi

M —eso no es del todo cierto, pero creo que se como aprovechar esto, ¿tienes dinero?

L —si, pero…

M —tranquila para algo esta la garantía

L —¿eh?

M —nada tu cógelo y ven conmigo a comprar uno, por el camino te cuento —yo por mi parte ya llevaba la cartera—.

L —¿que estas tramando?

M —vamos a comprarte uno lo mas parecido al tuyo, con garantía y tu lo llevaras a clase como si fuera el de siempre pero asegúrate de que Susana te vea olvidártelo en la mochila sin que se entere de que lo haces aposta vale, si no ocurre nada raro lo devolveremos antes del plazo vale.

L —no se, la garantía no es barata

M —no te preocupes la garantía la pago yo

L —bueno vale, pero si pasa algo te lo cobrare a ti.

La tarde fue larga, nos recorrimos toda la ciudad buscando el teléfono hasta que encontramos uno casi igual, lo compramos y volvimos a casa para prepararlo y que pareciese el mismo de siempre.

M —por fin, dios, no se para que le pones tantas pegatinas a un trozo de plástico

L —calla —ofendida— así está mas mono, además ya parece el mismo

M —vale asegúrate de dejarlo en la mochila, mira puedes meterlo en este compartimento con rejilla para que lo pueda ver, esperemos que pique.

VIERNES

Todo lo de ayer había sido muy raro y la intranquilidad reinaba mi mente Susana tampoco había llamado por la tarde y lo de pedro me daba mala espina

S —brrp brrp-tienes un rato, me gustaría hacer las paces con lucia pero me guarda mucho rencor, te espero en los aseos de parvulitos durante el recreo.

Aquel mensaje me pareció totalmente fuera de contexto y yo no entendía nada así que durante el recreo fui a verla.

S —menos mal, no sabía si vendrías, lo cierto es que lucía no me hace ningún caso, evita dirigirme la mirada y ni me habla.

M —eso es normal después de lo que la hiciste, por cierto para que me citas aquí.

S —ya se que es normal pero quiero disculparme y no me deja, he tratado de hablar con ella, pero no me contesta y yo no sé como arreglarlo.

M —tal vez si no lo hubieras hecho no habría nada que arreglar —enojado—.

S —es... es que… es que es la única del curso tan guapa como yo y…

M —claro y solo por eso hay que machacarla no

S —bueno, eso solo no… yo… yo… yo no sabia como acercarme y todo eso, me sacas 5 años y en unos meses te vas, además ayer estuve tocándome como nunca con el recuerdo dee… —note su mano en mi paquete— te quiero.

Entonces se arrodillo con el descenso de mis pantalones.

M —claro, y para acercarte a mi atacas a mi hermana, lo siento pero me vo-oy —dios que burra era, enterita y sin dudarlo—.

S —venga hazme feliz y te lo cuento, además a mí no me parece que atacar a tu hermana sea algo malo, ni siquiera he recibido castigo.

Esas palabras llenaron mis manos de odio, un odio que no tardo en sujetarla por la cabeza y arremeterla contra mi cintura con el fin de empotrar la polla en el fondo, dejándola allí bloqueando la garganta e impidiéndola respirar hasta que mi mente se despejo.

Cuando recobre la cordura la vi entre mis manos con los brazos y el cuerpo tendido, que he hecho, la he ahogado, iré al reformatorio, seguro que alargan el juicio y voy a la cárcel, que hago, que hago. La puse en pie y me dispuse a intentar un boca-boca desesperado. ¡Pero que! Me estaba metiendo la lengua hasta la garganta

M —que coño te….

S —jajjaaajaa,

El odio resurgía de nuevo

S —mira que cara tiene si se a puesto pálido y todo aaaahh.

No pude contenerme y ella se lo merecía. Con todas las ganas eleve mi mano para proyectarla contra su nalga. Aquel sonoro grito, el lugar donde nos encontrábamos, no podíamos hacer tanto ruido o nos pillarían. Esos pensamientos diluyeron el odio.

S —no tan fuerte pero sigue.

Al verme parado ella retomo el control de la situación con un largo y profundo beso. Sin duda una sutil artimaña para camuflar unas manos que no tardaron en sujetarme los huevos.

M —paraaa paraaa paraaa —la presión no cesaba y un segundo azote aún más fuerte cubrió sus nalgas. Como por arte de magia la presión se deshizo entre sonidos más propios de excitantes quemaduras, al fin libre y con la cara entre sus pechos aproveche para morderle esos empalmados pezones.

S —aah- despacio

M —que pasa ahora te duele

S —no es eso tonto, aun llevo la ropa y me la estas llenando de babas semental.

Ropa que en pocos instantes abandono su cuerpo, deslumbrándome con bellas vistas y haciéndome cambiar de parecer, ahora quería bucear y bucear es lo que iba a hacer, sumergí la boca en aquella húmeda concha, la abrí con la lengua y encontré allí esa bella perla que se mostraba reluciente e impaciente por obtener mi atención, sin mas contención la apreté con mis labios.

S —ahh aah aaahhh

Sus manos abarcaron mi cuello, me obligaban a levantarme, esta vez estaba preparado, de la misma que subía dirigí mi miembro en busca de la pudorosa abertura, la precisión de dicho movimiento no fue la esperada, pero la ligera presión contra las paredes y el fugaz roce acabaron reconduciendo toda mi rigidez directa hasta el fondo de su abertura, el instintivo gemido retumbo en las paredes, ambos recobramos la consciencia, hay un montón de alumnos fuera, pueden venir cualquiera, incluso un profesor.

Esa tensión era muy incómoda, pero lejos de molestarme provocaba en mi un hormigueo muy excitante, Susana parecía haberse percatado, pues dejo de acallar suspiros y jadeos, nervioso por los ruidos intente taparla la boca más sus retorcidos movimientos no hacían más que zafarse de la obstrucción de mi mano, sumido por la excitación deje de prestarle importancia y me deje arrastrar por las señales de gozo que llegaban a mis oídos, cada suspiro me envolvía, cada jadeo me excitaba y con cada gemido era como si una fuerza primitiva impulsaba mi euforia, euforia que comenzaba a gobernar mi cuerpo hasta que llego el ansiado momento en el que susi llego al clímax, los gemidos eran pronunciados, los jadeos constantes y las embestidas continuadas, pero nadie llego, nadie escucho nada.

Ya con la descarga a las puerta y la excitación por las nubes me dispuse a terminar, aquello parecía idílico, pero una niña pequeña llego, aquella puta cría nos escuchó.

N(niña pequeña) —hay alguien hay… hola… estas bien

Por ese entonces yo me encontraba distraído por la cercanía de la niña que ya parecía irse, pero una fantástica sensación engullía mi miembro.

M —ooooh.

Susi estaba aún hambrienta y… para mi desgracia, no quería esperar por lo que se tragó entera aprovechando mi despiste.

N —estas hay, te he oído, contesta

La muy cabrona sabia lo nervioso que estaba yo por la cría y se puso a hablar con ella intentando que se fuera.

S —zi zi ez zodo que ne e gaido

Esa frase sonó tierna y dulce en mi cabeza, pues podía sentir todas las vibraciones de sus cuerdas vocales, además de el calorcito del aliento recorriendo la cabeza y tronco, eso sin contar la presión que ejercía la lengua al intentar vocalizar, todo era glorioso, demasiado glorioso.

N —te ayudo

S —no ace falda

De nuevo esa magnificas sensaciones se repitieron, el límite de mi resistencia había sido rebasado, mi mente se perdía en el placer, la existencia de la cria ya no era importante, solo importaba yo, mi poya y la dulce boquita de la joven susi que soportaba cada una de mis embestidas, el orgasmo apareció nublando la poca lucidez que aun contenía mis voces.

M —oooohh oohhh oohhhhhhhhhhhh

N —eso era un chico, este es el baño de niñas, selo voy a decir a la profe

Era cierto, esa cria pretendía chivarse, no había tiempo que perder, ambos nos esforzamos por salir de allí lo más rápido posible. Yo por mi parte solo tuve que limpiarme las babas, subirme los pantalones e irme, recorrer el pasillo y marcharme por las escaleras, pero… ya en las escaleras me cruce con una profesora, no pude evitar fijarme en la brutal mirada que me hecho antes de retomar rumbo al baño. Susana aún seguía allí y estaba claro que la pillaría dentro, por evitar riesgos regrese a mi clase y la pregunte por el wasap.

M —creo que me tienes que contar algo —al cabo de un rato, nada entre 3 y 5 minutos empezaron a llover mensajes

S —ya me libre de la petarda, casi me lleva con mi tutor, bueno te cuento:

S —el primer día de clase me dirigía al comedor y me cruce contigo,

S —me pareciste atractivo y te seguí,

S —tu hermana apareció así que me quede observando hasta que te fuiste con ella,

S —al día siguiente estuve hablando con ella pero jamás te menciono así que entable amistad,

S —todo iba muy bien los chicos se nos acercaban y tu hermana se iba soltando, incluso alguna vez te menciono,

S —un día el desarrollo de mi cuerpo comenzó a hacerse notar,

S —los chicos seguían acercándose pero pasaban de tu hermana,

S —eso no le debió gustar, pues cada vez se alejaba más de mí,

S —yo por el contrario intente librarme de ellos pero venían más,

S —al final tu hermana se había distanciado demasiado, así que empecé a molestarla para que te pidiese ayuda, pero ella jamás te conto nada,

S —un día esos dos me convencieron para lo del video y el resto ya lo sabes

Toda esa historia me pillo se sorpresa, parecía creíble y sobre todo lógica, jamás hubiera imaginado la posibilidad de que Susana no fuera la culpable de todo, esto me dejo trastocado, lo cierto era que todo cuadraba y se explicaba solo por lo que no lo dude. A mediados de la ultima hora todo comenzó a tomar un rumbo muy extraño para empezar se escucharon las sirenas de la policía venir al insti. Los nervios me mataban, no podía evitar recordar aquella frase (tendrá noticias de mi abogado), la idea de que vinieran a por mí me asaltaba, cuando acabo la clase salí despedido para averiguar que había ocurrido, de camino me encontré con mi hermana con una bolsa en la mano, dentro su móvil (la imitación) como si un camión le hubiese pasado por encima.

M —¿Qué a pasado?

L —ha sido Susana, al acabar el recreo fui a clase y la vi estampando mi móvil contra el suelo como un animal, además ha sacado la tarjeta de memoria y la partió en dos.

M —pero quee… ¿Dónde está ella?

L —allí en el centro con la poli

M —¿Qué a ocurrido con la poli?

L —no lo sé, solo sé que llegaron 30 minutos después de que yo saliese del despacho del tutor

Me abrí paso entre la multitud y me encontré a Susana con sus padres, otro profesor y los policías haciéndola preguntas mientras ella lloraba desconsolada. ¿Pero qué coño pasa aquí? Tras un rato buscando me fije en que en el coche patrulla había alguien, pero no lo distinguí, tras un rato empujando y siendo empujado conseguí llegar a primera fila, allí estaba un viejo amigo que me lo resumió enseguida.

A —al parecer han pillado a pedro el profesor barbudo ese que nos dio clase en 3º violando a esta niña que al parecer va a su clase. Se lo llevan a comisaria pero por lo que tengo entendido lo pillaron por los gritos de la niña justo cuando terminaban así que las pruebas son completamente irrefutables por lo que ira derecho a la cárcel

Me quede mudo, una voz, no una frase se repetía sin fin en mi cabeza: tendrá noticias de mi abogado, tendrá noticias de mi abogado, tendrá noticias de mi abogado, era cierto lo que Susana me había contado o aprovecharía para acusarme a mí también, sé que no estuve presente en la violación, pero en su garganta aun encontrarían restos de lo del recreo y yo no estaba seguro de las intenciones de esa cría, estaba desesperado no sabía que hacer

A —he, he, marco, tío, ¿estás bien?

M —no, para nada

A —¿qué te ocurre? ¿qué pasa?

M —nada, nada, es demasiado largo para contártelo

A —bueno va, ya me lo contaras, ahora deja que te saque de aquí para que te del aire.

L —marco ¿estás bien?

M —si tranquila, pero una pregunta ¿ha sido Susana alguna vez amiga tuya?

L —¡cómo! pero si lleva machacándome desde que paso su primer mes aquí

No puede ser, se lo ha inventado todo, ella se inventó esa historia tan convincente y ahora iba a ir con la policía, tenía que hacer algo o si no acabaría con pedro en la cárcel.

L —hermano, ¿estás bien? ¿Te pasa algo?

A —está muy pálido, será mejor que os acompañe a casa, total solo me tengo que desviar un poco y si se desmalla tú no puedes cargar con él

L —pues venga vamos, cuanto antes salgamos antes llegamos

M —estoy bien, puedo solo

L —pero tú te has visto, pareces un fantasma moribundo

A —venga déjale que os acompaño por si volca

L —si gracias

M —ya te he dicho que no hace falta, que puedo solo

A —si, ya se ve, antes casi te caes en la butaca, anda no seas tonto, además así me puedes ir contando que es lo que te ha puesto tan malo

Era eso, Álvaro mi amigo, se moría de curiosidad y este es el momento perfecto para que se lo cuente, otro problema más, a ver que le cuento yo ahora a este

A —bueno cuenta que pasa con esa cría

M —luci, no se me ocurre nada

L —CALLA, CALLA, CALLAA no digas nada, cual es el problema

A —¿qué ocurre? ¿Qué pasa? oye cuéntame algo y no se te ocurra mentirme

M —el problema es que creo que esa niña pretende y puede mandarme a la cárcel con pedro

A —¡COMOO!

L —¡pero que!, haber cálmate, recuerda que tengo el móvil en casa como escudo, o es que ahora no sirve

M —tienes razón, el móvil en casa, todavía puedo utilizarlo pero tenemos que darnos prisa

A —como que el móvil en casa como escudo pero si lo tienes aquí hecho pedazos, y como puede llevarte esa a chirona, no entiendo nada me vais a contar algo, o yo aquí sobro

M —sobras

L —sobras

A —ala que finura, de nada, si lo sé no os ayudo

M —venga rápido que cuanto antes mejor

Llegamos a casa a Sprint dejando el ascensor para subir más rápido y eso que era un cuarto, cruzamos la casa a toda prisa sin olvidarnos de saludar por si acaso y luci me dio el móvil desde donde mande un mensaje a Susana

M —te equivocaste de teléfono el verdadero sigue perfecto y con todos sus datos

Eso sería suficiente para evitar el desastre pues en el mensaje dejaba claro el número y tampoco se trataba de alertar a la policía, solo faltaba rezar para que lo viese a tiempo.

L —¿pero qué es lo que ha ocurrido para que te pueda encerrar?

M —ya te dije que no todo salió bien y al final la cosa se desmadro un poco, fue ahí donde ella consiguió armas para atacar y por eso necesitamos el móvil, solo espero que no la de por contarlo igualmente, porque a ella solo la llevarían al correccional y eso no debe ser muy diferente a lo de su casa, Lucy ¿me puedes contar toda tu relación con esa chica desde que comenzó el curso?

L —si pero no hay mucho que contar

M —eso da igual, puede ser útil

L —si insistes. Durante el primer mes era una compañera mas, pero cuando creció los chicos se fijaron en ella y empezó a atacarme.

M —eso es todo, ¿nada mas?

L —que yo sepa no

M —vale, me voy, estoy muy cansado, necesito una siesta

Con las dudas aun en mente me tumbe sobre la cama, estaba muy cansado, llevaba todo el dia muy tenso, además el polvo con ella solo sirvió para cansarme y sembrar mi mente de dudas, miedo, remordimientos, ese estado no me dejaba pensar con claridad, quería descansar un poco, lo necesitaba, pero nada, un atormentador coctel de sensaciones reinaba sobre mi control, será cierto, será mentira, estará Susana enamorada de mí, es todo un plan para librarse de ambos, que me ocurrirá si me acusa, tendrá pruebas, como reaccionaran mis amigos y conocidos, mis familiares, mis padres, mi hermana aaaaaaaaa, ¿qué hago ahora?, ¿que creer?

No puedo soportarlo mas, necesito respirar, la ventana, aire fresco, necesito mas, mas, mas. Aaaaaaaaaaa socorroooooo plasfh.

Posd: Si a alguien no le gusta el próximo capítulo por su estilo, lo siento, pero el motivo fue que cuando iba a escribirle se me bloqueo la inspiración, necesitaba cambiar de aires, por eso me puse con los 3 primeros poemas, el caso es que cuando la inspiración volvió yo aun seguía intentando rimar todo y creo que eso ha bajado la calidad del siguiente capítulo, así que si os pareció peor o no os gusto estad tranquilos que solo es el 4, además agarraos porque ya tengo una idea clara de todo y se aproximan curvas.