Niki - Que calor, que calentura

Ayude a mi vecina Niki. Su casa estaba super caliente y ella tambien!

Niki era una vecina nuestra también. Casada con Daniel, contaban apenas con 22 anos. Se habían conocido en la Universidad y al graduarse se casaron inmediatamente y compraron una casa pequeña en nuestro barrio.

Daniel y Niki no eran de lo más apuesto. Ambos lucían un cuerpo más bien llenito. Su estatura era regular, al igual que sus facciones. Ninguno de los dos se considerarían ‘caritas’. Eso si, tenían personalidad de sobra. Niki, la protagónica de este relato, tenía un buen par de tetas que eran más grandes de lo que su cuerpo requería. Mi mano abierta no seria suficiente para cubrir una de estos maravillosos melones. Su estomago no estaba tan plano como otras mujeres del barrio pero tampoco estaba inflado; solo lucia llenito. Sus caderas igual, estaban anchas pero manejables aun.

Las piernas de Niki eran su mejor aspecto corporal. Eran en buen proporción a su torso y bien torneadas. Se notaba que el tiempo que pasaba en la bicicleta estacionaria era bien invertido. Estas piernas de buen tono terminaban en un culo que brindaba buen acento al resto del cuerpo. Nalgas medianas pero bien redonditas. No había señas de celulitis a pesar de que no era delgada, como había dicho anteriormente.

Sucede que Daniel se ocupaba en manejar las tiendas de las que su padre era dueño. Esto requería que Daniel saliera de la ciudad por unos días cada mes, pues tendría que visitar las tiendas en los pueblos cercanos, algunos de ellos a más de dos horas de camino. Debido a que un día casi se mata al regresar muy noche a su casa quedándose casi dormido mientras manejaba el auto, decidió que de entonces para acá, mejor se quedaba en cualquier hotel para evitar un accidente más.

Durante uno de esos viajes, Niki hablo por teléfono a nuestra casa. Al contestar la llamada, me informo que su aire acondicionado había dejado de funcionar y quería saber si podría revisarlo porque ella no sabía nada de eso. Esto, en el mes de Agosto, el mes más caluroso del ano. Las temperaturas subían sobre los 40 grados y si la humedad ambiental un poco mas alta de lo normal. Me sentí mal por la muchacha.

Le dije a mi esposa lo que ocurría y me dirigí a casa de Niki. No tarde en llegar. Al abrir la puerta, mi boca quedo abierta. Niki me recibió con un beso en la mejilla y un pequeño abrazo de cortesía. Vestía unos shorts que apenas cubrían parte de sus nalgas y mus apenas tapaban su monte de Venus en su totalidad. Sus pechos estaban cubiertos por una camiseta blanca que dejaba ver, en transparencia, sus aureolas oscuras y sus pezones erguidos por el roce con la camiseta. Sus tetas estaban liberadas de cualquier bra.

Me dijo ‘sígueme, te muestro donde esta el termostato.’

Subió las escaleras y yo detrás de ella. Al subir, sus nalgas se movían en manera seductora. Casi me invitaban a tocarlas pero resistí mi deseo. También note que los labios de su vagina estaban engordados; tal vez por lo caliente que estaba la casa. Su panocha se dibujaba en esos shorts en su totalidad. Note que su raja se dibujaba en lo que parecía humedad entre sus piernas…seria solamente sudor, o seria que su panochita ya venteaba jugos?

Debo confesar que yo no tengo ninguna habilidad mecánica. Me había prestado a esta situación simplemente para verificar que el aparato de aire acondicionado funcionaba o no. Verificaría que el termostato estuviera programado para enfriar la casa y checaría que los fusibles del aparato no estuviesen quemados…Eso era todo.

Descubrí que el termostato si funcionaba bien. Algo sucedía con el aparato. Le comente a Niki que yo pensaba seria algo con los fusibles o el compresor. Para eso, tendría que salir al patio de la casa para verificar. Antes de salir me dijo:

Bueno, si tienes que salir, déjame ofrecerte una cerveza porque afuera esta que arde!

Si te la acepto, dije. Aunque aquí adentro también esta calientísimo, no crees?

Lo había dicho con doble sentido, claro.

De acuerdo. No se si sea la temperatura o el hecho que Daniel no se encuentre, pero yo me siento mas que caliente.

Te aseguro, Niki, que yo hare todo lo posible por quitarte esta calentura.

Abrió el refrigerador y se agacho para agarrar unas cervezas. Lo hizo sin doblar las piernas, quedando su culo paradito frente a mí. El short se corrió algo, dejando más de sus nalgas al descubierto al tiempo que decía.

Te parecen mejor claras u obscuras?

Como sea me gustan.

Que tal te parecen? Me dijo ofreciéndome una botella

Me encantan. Están maravillosas!

Se dio cuenta al fin que hablaba de sus nalgas.

Que ocurrente. Hablo de las cervezas, no de otra cosa.

Ah, bueno, la cerveza también esta muy buena.

Mientras tomamos la cerveza, platicamos de cosas sin importancia. Los viajes de Daniel, mi trabajo, los quehaceres de la casa. Me atreví a decir:

Perdón, Niki, pero con tanto viaje de Daniel…tiene que ser duro, no?

Al contrario, dijo. Quisiera que hubiera mas duro, ja ja ja.

Si, te comprendo. Es verdaderamente una pena que tus encantos no sean apreciados como se debe.

Tú crees que estoy bonita?

Más que bonita. Tu cuerpo es para enloquecer a cualquiera. Como le haces para aguantar tanto?

Miguel, a veces no puedo aguantar. Me apena decírtelo pero, muchas veces lo tengo que hacer sola yo

Como?!? Tu solita?

Para entonces, mi verga tomaba una dureza que empujaba mis shorts y se hacia notar. Niki ya había mirado hacia allá en varias ocasiones. Me acomode la verga dentro de mi short para hacerlo menos notable y fue cuando ella dijo:

No te molestes que yo ni en cuenta. Si tu pene esta excitado yo lo entiendo. Se ve que tienes buen paquete.

Perdón, Niki. Es la conversación

Fue entonces que se acerco a agarrar dos cervezas más. Se volvió a agachar, dejando su culo en el aire y ya no me aguante. Me levante. Me pare directamente detrás de ella y le hice sentir mi verga en su culo. Se sorprendió solo un poco. Se quedo paralizada por tres segundos y sin mirar hacia mi, comenzó a mover su culo sobre mi verga, dándose placer al tiempo que a mi, me hacia sentir muy bien.

Se levanto sin cervezas, se paro frente a mí y con una mano agarro mi verga sobre mis shorts. Con la otra se levanto la pequeña camiseta que llevaba puesta dejando expuestas sus tetas frente a mi cara. No tuve que pensarlo dos veces. Baje mi boca a su teta izquierda y empecé a besarla y a lamer su pezón erguido con círculos pequeños. Su cabeza se echaba atrás con ojos cerrados.

No había dado más que unos chupetones a la teta cuando empezó a gemir. Una de mis manos empezó a sobar su raja que si estaba más que húmeda mientras la otra le apretaba una nalga. Como pude, metía mis dedos sobando su culo al tiempo que le masajeaba su panocha.

Miguel…no se si deba…ayyyy! Se siente tan rico. Mmmmm! No se si deba

Preferirías hacértelo tu sola? Si quieres, aquí paramos.

No, sigue Miguel. Tú te sientes rico. Más rico que cualquier juguete que yo pueda usar. Asiii! Asiiii! Ayyyy! Creo que me voy a correr.

En un solo movimiento le baje el short, la levante por las caderas y la senté sobre la mesa. Quedo sentada con sus piernas colgando. Me arrodille y enterré mi lengua en su agujero mientras ella gemía.

Ahhhhh! Ahhhh! Cabron, que bien lo haces. No sabía que tú eras un experto. Ahhhh! Sigue, Sigue que me corro.

Mi lengua seguía entrando y saliendo. Luego la deslice por su raja hasta llegar a su clítoris inflamado por la pasión. Le di lengüetazos y después le chupe como si fuera un pezón. Eso fue todo lo necesario para que Niki acabara.

Ahhhhh! Me corro! Toma mis jugos. Son un regalo para ti! Ahhhh! Que alegría. Ahhhh!

Sus jugos, sabor a néctar, lamia con deleite. Que rico sabía esta mujer. Seguí lamiendo mientras su cuerpo se estremecía y arqueaba al tiempo que me seguía gritando Ayyyy!, Ahhhhh!, Asiiiii!

Se quedo quieta por un segundo. Se acomodo sobre la mesa de tal manera que su cabeza quedaba en la orilla a la altura de mi verga. Con la mano me agarro la verga, me jalo hasta su cara y bajo mi short. Mi verga salió como resorte. Ya parada, la tomo en su mano y la guio hasta su boca. Beso la cabeza y lamio mis jugos pre-seminales. Luego se la fue comiendo poco a poco hasta que esta se desapareció en su totalidad. Comenzó un mete y saca en su boca y empecé a menear mis caderas como si me la estuviera cogiendo.

Una de sus manos agarro mis huevos y comenzó a darles un masaje. Con la otra me agarro de las nalgas y uno de sus dedos busco mi agujero. Hacia pequeños círculos alrededor de mi culo y esto brindaba sensaciones que antes no había sentido. Me estaba poniendo a mil!

Le anuncie que quería cogérmela antes de venirme. Dejo de chupar. Volteo su cuerpo, bajando las piernas de la mesa. Su culo quedo directamente frente a mi y sus tetas sobre la mesa. Enterré mi verga en su panocha y empecé a bombear. Una mano mía acariciaba su clítoris y ella llego a otro orgasmo.

Miguel, que cabron eres. Me haces que me venga de nuevo. Ayyyy! Me corro otra vez! Ayyyy! Cabron, que bien. Que bien. Ayyyy! Quiero tu leche. Quiero tu leche.

Saque mi verga de su panocha y esta, ya bien lubricada, se dirigió a su otro agujero. La cabeza toco su ano. Niki se quedo quieta, casi paralizada. No dijo nada.

Empecé a empujar lentamente. Su culo cedió el paso a la cabeza que introduje por completo y ella sin hacer ni un ruido. Metí una pulgada más de mi verga en su culo y este ya empezaba a ceder paso al tiempo que se contraía contra las venas de mi miembro. Se la metí toda. Ella dio un pequeño grito.

Que mendigo. Es la primera vez que le doy mi culo a alguien. Pero que bien lo haces. Hazme feliz. Cojéeme Miguel, Cógeme ya, no pares

Mi verga comenzó a disfrutar de aquel culo inexperto. El mete y saca hacia que estuviera por venirme. Ella pedía más. Mi verga quería más.

Niki, me voy a venir. Donde quieres mi leche?

Ayyyy! Me corro, me corro! Decía ella. Déjame probar tu leche. Quiero tu leche en mi boca, cabron. Ayyyy!

Se corrió por tercera vez. Le saque mi verga de su apretado culo y esta vez se hinco frente a mi. De nuevo se comió mi verga con lengüetazos y mamadas y no tarde mucho cuando dije:

Aquí esta, Niki. Es todo para ti. Comete mi leche. Mmmmmm! Aquí te va. Mmmmmm!

El primer chorro dio contra su garganta. Esto hizo que se atragantara un poco. El segundo entro en su boca en la mayoría. Algo quedo plasmado en sus labios. El tercero fue a dar sobre su cachete izquierdo. El cuarto y quinto volvieron a entrar en su boca que ya había atrapado mi verga de nuevo.

La limpio bien y después se limpio su cachete con un dedo, metiéndose el mismo en la boca para también disfrutar del semen que se había estrellado contra su cara.

Gracias, Niki. Ha sido espectacular!

Gracias a ti por ayudar a tu vecina.

Me levante mi short, Salí a ver el aire acondicionado. Un fusible estaba quemado. En la misma caja eléctrica había nuevos. Tome uno y lo remplace. El Aire acondicionado empezó a funcionar inmediatamente. Que suerte. Ante los ojos de Niki, seria un héroe. Volví a entrar a la casa. Niki estaba acostada en un sillón de la sala, con una sonrisa de oreja a oreja.

Aquí esta el culpable, dije mientras le ofrecía el fusible quemado.

Sera la razón de la falla, dijo al tiempo que me agarraba la verga de nuevo, pero esto es la culpable de que me encuentre en este estado de relajamiento total.

Le di un beso en la mejilla y me dirigí a la puerta mientras le aseguraba que podía contar conmigo para cualquier ajuste que fuera necesario…a su casa o a ella misma. Mi cara se voltio para decir un ‘hasta pronto’ y note como ella sonreía. Estaba seguro que me llamaría de nuevo para ‘ayudarla’ en algo