Nicolás y los taxistas

Ay, Nicolás, que vida...

NICOLÁS Y LOS TAXISTAS

Nicolás fue en taxi hasta su casa con una mujer que había conocido esa noche en un bar de alterne. Al llegar, el taxista pidió un precio exagerado por la carrera y Nicolás, enfurecido, salió del auto sin pagar, dispuesto a buscar un policía. En ese momento, el taxista arrancó y se alejó a toda velocidad con la mujer dentro.

Nicolás estuvo esperando en la puerta de su casa a que regresase la mujer. De vez en cuando, sigue asomándose a la ventana con la esperanza de verla.