Necesitada de sexo (4)
Cuarta parte de mi necesidad de sexo.
Cuarta parte del relato.
Después de lo ocurrido la ultima vez, necesite un tiempo para recuperarme, ya que me hicieron mucho daño en mi culo.
Pero a pesar que en realidad lo que ocurrio fue una doble violación, no sentia desprecio por ellos, al contario cada vez que pensaba en lo que ocurrio, conseguia calentarme tanto que no tenia mas remedio que masturbarme para saciar mis ansias.
Estuve unos dias sin ir al trabajo, no solo para recuperarme fisicamente, sino que a pesar de todo el placer que ese viejo habia conseguido darme, intente dejar de verlo, no podia seguir con aquello, me habia convertido en su puta, y aunque en realidad eso era lo que mas me excitaba, no podia consentirlo.
Decidi que no volveria a verlo,no volveria al trabajo, asi no tendria que aguantar las tentaciones de volver a repetir.
Un dia mientras limpiaba un poco la casa, sono el timbre de la puerta, solo llevaba mis braguitas y una bata, me la abroche bien para taparme y fui a abrir la puerta, ante mi sorpresa alli estaba Diego, intente cerrar la puerta, pero rapido la aguanto y me empujo hacia dentro y entro.
-Hola cariño, que sucede, porque no vienes al trabajo?
-Se termino Diego, no voy a volver, y no va a pasar nada mas entre usted y yo-.
-Estas segura?
Y diciendo eso, me agarro fuerte. Intente soltarme, pero con un movimiento brusco, me arranco mi bata, dejandome solo con mis bragas frente a el.
Hui hacia mi habitación, pero sin poder dar dos pasos, senti como sus manos me agarraban hacia el, me empujo contra la pared, aplastando mis pechos y mi cara, y por detrás su cuerpo aprisionandome, no podia soltarme.
-Dejame cerdo, ya no más-.
Pero Diego no hacia caso a mis palabras, y pude notar como su mano se deslizaba por mi espalda, llegando hasta mi culo. Pasaba su dedo por mis bragas, pasandolo por mis nalgas, llegando a mi coño.
Entonces la resistencia que le ofrecia iba disminuyendo, estaba volviendo a dejarme hacer por ese viejo, porque me estaba excitando demasiado.
Notaba su dedo acariciar mi coño, notaba como lo presionaba contras mis bragas, que entraban junto con su dedo en mi vagina.
Ya no me resistia, solo disfrutaba de sus caricias.
-Ves como te gusta zorrita-.
Sus comentarios me excitaban todavía mas, estaba muy mojada, a punto de tener un orgasmo. De repente dejo de tocarme
-Ya vale puta-.
-No, no pare, siga, siga por favor-.
-Que puta eres Anabel-.
No queria que se fuera, necesitaba que terminara lo que habia empezado, me sentia de nuevo entregada a aquel viejo.
-Se que tu marido no llega hasta tarde, asi que si quieres mas, pasare esta noche por aquí de nuevo.
Y sin dejarme decir nada se marcho. Me habia dejado muy mojada, decidi terminar yo misma, y tuve un orgasmo espectacular.
Lo peor de todo es que estaba deseando que llegara la noche,y que Diego viniera a mi casa.
Todos aquellos pensamientos de no volver a verle y no repetir, se habian esfumado de golpe, solo con sus caricias habia vuelto a convencerme que era su puta,y solo pensarlo me ponia a mil.
Asi que decidi, que iba a comportarme como una verdadera puta. Cuando llego la hora, me puse unos de mis camisones de tirantes,cortito a mitad de muslo, de color azul, sin sostén y con unas bragas a juego con el camisón.
Me sentia una verdadera puta vistiendome asi para el, pero eso queria ser,y eso me excitaba, queria que ese viejo me viera asi para el.
Sono el timbre, y al abrirle la puerta, de nuevo otra sorpresa, Pablo venia con el. No dije nada, entraron.
-Estas muy guapa cariño-.y los dos sonrieron.
No proteste, estaba tan excitada, que me daba igual que hubiera venido tambien Pablo.
-Anabel,hoy Pablo no viene a mirar, viene a follarte tambien.
En lugar de decir algo, me calle, aceptando, en realidad no lo hice porque me daba igual, si para saciar mi calentura tenia que follarme a los dos viejos, lo haria, no podia creer que pensara eso, y menos que estuviera dispuesta a hacerlo, y con tantas ganas.
-Arrodillate,y chupale la polla a mi amigo-.
Asi lo hice, me arrodille frent a Pablo, le saque su polla, y la chupe, lamiendo con fuerza, rapidamente se le puso dura.
-La chupa bien verdad?jaja-.
Pablo asentia con la cabeza, me sentia muy puta y a la vez muy excitada. Las manos de Pablo agarraban mi melena con fuerza, incluso haciendome daño, pero no podia parar de mamarsela,estaba como loca,chupandosela.
Pablo se sento en el sillon, y seguia mamandole la verga a cuatro patas. Mientras tenia ese trozo de carne en mi boca, Diego levantaba mi camisón por atrás, y estiraba mis bragas hacia arriba, haciendo que se metieran entre mis nalgas. Las movia de arriba abajo, haciendo que se rozaran con mi vagina, cuanto mas las movia, con mas ansia se la chupaba a Pablo.
-Anabel,eres una buena putita-.
Me excitaba mas que me dijera eso.
-Folleme Diego,lo necesito, necesito que me folle de una vez.-.
Pero ante mi sorpresa, se cambio el sitio con Pablo.
-Chupamela a mi, el te follara-.
Me daba igual quien lo hiciera, solo necesitaba sentirme penetrada, que me follaran de una vez.
Segui a cuatro, chupandole la polla a Diego. Pablo se desnudo, se arrodillo tras de mi, subio mi camisón, y me bajo las bragas hasta las rodillas, y torpemente intentaba penetrarme, sentia la punta de su pene buscar mi entrada sin conseguirlo.
Esas torpes caricias al intentar penetrarme me ponian mas cachonda si cabe, al final consiguió acertar, y me penetro con fuerza de una vez.
-Toma puta,toma,te estoy follando como una perra-.
Pablo me excitaba diciendome eso, porque asi me sentia, era una verdadera puta, a cuatro patass, con mi camisón subido, mis bragas hasta las rodillas y siendo follada por un viejo y chupandosela a otro.
La polla de Pablo entraba y salia con fuerza , al igual que la de Diego entraba y salia de mi boca, estaba a punto de tener un orgasmo,justo cuando note como Pablo descargaba dentro de mi coño, y senti su liquido caliente inundar mi vagina,y resbalar por mis muslos,en ese mismo momento tuve mi orgasmo, no pude reprimirme:
-MMmmmmmm,si cabron-.
-Sigue chupandola zorra-.
Lo hice, y unos segundos mas tarde senti el semen de Diego chorrear por mi boca, tuve que tragar un poco para no ahogarme. Chorreaba semen por mi vagina y por mi boca de esos dos viejos. Habia sido uno de los mejores orgasmos de mi vida.
-Y eso que no querias repetir eh Anabel, sabes que eres mi puta,y no te puedes resistir.
Tenia razon, y estaba dispuesta a continuar siendolo, porque esa humillación me excitaba. Se marcharon los dos y me dejaron alli, chorreando de semen, medio desnuda.
Mi excitación era tanta, que me masturbe, metia mis dedos,sientiendo el semen de Pablo escurrirse por mis dedos, y entrando de nuevo en mi vagina junto con mis dedos, recordando lo que habia pasado minutos antes con aquellos dos viejos, y volvi a tener otro orgamos fabuloso.
Ahora si lo tenia decidido, ya no a iba a resistirme más, iba a ser la puta de ese viejo, con todas las consecuencias, lo necesitaba.
Continuara