Navegar

...alimentar falsas expectativas...

NAVEGAR

alimentar falsas expectativas

En la nave candente de tu cuerpo embarcaré mi sueño marinero para encontrar un océano despierto, pletórico de amor, de Enero a Enero, en el que echar a fondo mi ancla quiero una vez conseguido entrar al puerto.

Pero el puerto de marras es riesgoso, difícil, engañoso, aventurado, muestra un paisaje encantador, hermoso y esconde un sentimiento devastado que logra que me sienta traicionado y me zambulla, frágil, en el mar furioso.

Con esta forma de pasión esquiva es imposible navegar mi anhelo por las olas procaces y furtivas en las que, ingenuo, yo mordí tu anzuelo y noche a noche contemplo, con desvelo, tu sonrisa burlona y fugitiva.