Nace Agustina

Hace un año ya nos conocíamos por chat, el era muy tierno y dulce, aunque no por eso poco masculino, mucho tiempo planeamos nuestro encuentro, ya que nos amábamos y el amor a distancia es muy difícil, me moría por tenerlo conmigo, abrazarlo, besarlo, mimarlo, hacerlo sentir tan bien!

Hace un año ya nos conocíamos por chat, el era muy tierno y dulce, aunque no por eso poco masculino, mucho tiempo planeamos nuestro encuentro, ya que nos amábamos y el amor a distancia es muy difícil, me moría por tenerlo conmigo, abrazarlo, besarlo, mimarlo, hacerlo sentir tan bien!

La verdad yo nunca había estado con otro hombre, y me ponía un poco nervioso pensar en eso, pero lentamente en el chat fuimos tomando confianza, nos mandamos fotos, jugamos por cámara web y micrófono, eso ayudo bastante a desinhibirnos. Con él aprendí que me gustan los hombres, y que por dentro soy una nenita sumisa, que busca complacer a su macho.

Como vivía con mis padres se me hacía difícil tener ropita de mujer, y ni hablar juguetitos, tengo un hermano y una hermana, ambos mayores que yo, a veces le robaba la ropa interior a mi hermana para ponérmela, ¡Increíble cómo me excitaba! Ver esa ropa interior tan pequeña y delicada, e imaginarme si no tuviera mi verga esa minúscula ropa interior podría cubrir sin problemas todo mi sexo. Imaginaba como debía sentir mi hermana al usarla, y al hacer el amor, a decir verdad siempre envidie a mi hermana, quería ser como ella, usar ropa de mujer, arreglarme, tener novios, seducir hombres, arreglarme el cabello, maquillarme, en fin, muchas veces desee ser yo la mujer y ella el varón, pero no se crean me siento mal por lo que soy, me gusta mi verga, y me gusta ser como soy, me gusta vestirme de mujer y complacer a mi macho.

En fin, el tiempo pasó, y finalmente pudo juntar el dinero y vino a mi ciudad, el también es de Argentina, pero otra ciudad a unos 1000 kilómetros de aquí. Los nervios empezaron a correr, el miedo, la ansiedad, pero también la felicidad. Sería raro poder ver cara a cara, a N. (Así lo llamare). Imagine tantas cosas, como sería él, su olor, como serian sus labios, y por supuesto, como sería su verga. El me conocía bien, sabía todo de mi, y siempre me decía, cuando venga me traería ropita, para poder jugar con él, ¡esa idea me encantaba!

Por el chat arreglamos mucho, el horario, el día, la estadía, en fin, como yo vivía con mis padres así que él se quedo en un pequeño hotel, ya que solo estaría 5 días, mis padres obviamente creían que era solo un amigo.

Paso el tiempo y llego el día, era muy temprano y hacia un poco de frio, pero fui a buscar a N, por suerte me dejaron ir solo. Su autobús no se retraso mucho, y ansiosamente espere que bajara, lo reconocí al bajar, y me vinieron muchos nervios, pero por fin pasó… nos encontramos, y nos abrazamos fuerte. Fue tan lindo, por fin podía sentirlo. Me abrazo fuerte pegándome a él, me sentí tan protegido y feliz.

Hablamos mucho, lentamente nos relajamos, y fuimos a mi casa, donde desayunamos y hablamos un poco más, el conoció a mi familia, y luego almorzamos, bastante normal el día. Luego llego la hora de la siesta, mis padres durmieron, y por fin quedamos "solos", vimos televisión un rato, pero no tomo mucho tiempo para que nos conociéramos más, él se acerco a mí, y lentamente me beso, fue hermoso, nuestras lenguas jugando, la una con la otra, estuvimos así mucho tiempo, pero me pareció tan poco.

Estuvimos esa tarde jugando, besándonos, explorándonos, por primera vez sentía los labios de un hombre, y me encantaban, me ponían a mil. No paso mucho para que mis padres se despertaran, así que fuimos a su hotel dando la excusa de que iríamos al Shopping. Yo sabía lo que me esperaba en el hotel, mi ropita, y me puse súper nervioso, N lo noto, y sujetándome la mano me dijo "Cálmate, no pasara nada que no quieras que pase" y con una sonrisa me tranquilizo, yo le devolví la sonrisa y continúe caminando a su lado.

Finalmente llegamos al hotel, y fuimos rápidamente a su habitación, apenas N cerró la puerta se abalanzó sobre mi y caímos sobre la cama, podía sentir su cuerpo, pesado sobre mí, sus fuertes manos recorrían todo mi delgado y delicado cuerpo, yo aun estaba algo nervioso, cuando N dijo:

"Tengo un regalito para vos, Agus"

Sabía que era mi ropita, ¡la deseaba tanto!

  • ¿Mi ropita? – Pregunte tímidamente
  • Así es, espérame aquí chiquita.

Dijo, y acto seguido saco una de sus maletas y se puso a revolver, yo asentí con la cabeza. Me trato de mujer… Me encantaba que haga eso, él sabía que el nombre que me gusta es Agustina, por eso me llama cariñosamente Agus, ¡y me encanta cuando lo hace!

No paso mucho tiempo y de su maleta saco una linda falda blanca, y una linda camisa rosada con dibujitos de corazoncitos muy lindos, también unas medias largas blancas muy sexys, una tanguita negra súper pequeña, lápiz labial y rímel, ¡estaba súper feliz! ¡No podía esperar para mi transformación!

  • ¡Es hermosa! Muchas gracias N… eres tan genial
  • De nada preciosa, ahora ve y cámbiate, yo te espero aquí, me pondré cómodo

No lo pensé dos veces, tome mi ropita y me metí al baño, me saque todo, y quede desnudito, me puse primero la tanguita, muy ajustadita, que como mi verga ya estaba a full, tuve que pegarla a mi cuerpo, luego las medias, luego la falda, mi camisa, finalmente el lápiz labial, rímel, y me arregle el pelo, también me puse perfume. Al mirarme al espejo como iba cambiando paulatinamente me volvía loquita! Ahora parecía una nenita, yo soy delgado y con un culito no grande pero lindo y bien femenino, y al verme así al espejo parecía una nenita púber, ¡me ponía a mil! ¡Esa imagen de la nenita púber a la cual la esperaba un macho caliente era yo! Me quede haciendo poses y viendo como me quedaba mi ropita un tiempo, y luego volví a la habitación. N me esperaba desnudo sobre la cama.

  • Ya sabes que hacer Agustina – Me dijo moviendo su verga con su mano, llamándome a chuparla

Sin hacerme de rogar camine lo mas femeninamente que pude y me subí a la cama, nunca antes había tenido una verga tan cerca, y a decir verdad era bastante más grande que la mía, su olor tan masculino me embriagaba, la toque, estaba dura. La masturbe un poco y lo que N comenzó a dar pequeños gemidos, saque mi lengua y lamí su glande, tenia liquido pre seminal, lo cual le daba un rico gustito saladito a su gran verga. Me metí todo lo que pude a mi boquita, pero no pude metérmela toda, era muy grande, en ese momento pensé que me dolería cuando me haga mujer, pero no me importaba, la idea me ponía aun mas excitada.

N sujeto mi cabeza fuertemente y me obligo a metérmela aun más, no pude meterla toda pero entro un poco más, yo comencé a hacer un mete-saca, sentía su líquido pre seminal, su verga palpitante y dura y sus gemidos, lo cual me excitaban mas.

  • Mm si así, así Agustina, hoy serás Agustina oficialmente, cuando tomes lechita, y cuando te rompa ese rico culo – Me dijo dominante mientras me obligaba a chupar mas y mas su gran mástil de carne – Serás una hembra, mi hembra, y yo seré tu macho

En ese momento deje de chupar su verga y la lamí, para agregar

  • Ay si, hazme Agustina, bautízame con tu leche, ¡quiero ser una hembra, tu hembra!
  • ¡Sí! Serás una hembra, sigue chupando niña, te daré mi leche

Eso me puso a mil y se volví a meterla en mi boca, me ayude con mi mano para acariciar y jugar con sus testículos mientras chupaba fuerte, quería leche, estaba desesperada, ¡quería ser hembra!

No paso mucho tiempo, siento los gemidos de N cada vez más fuertes y cortos, se que se está por venir, ansiosa espero su leche de macho, con su verga bien dentro de mi boquita, me sujeto y se corrió abundante dentro de mí, intente tragar toda pero se escapo un poquito por la comisura de mis labios, su sabor era fuerte, y me encanto, la trague toda.

  • Así… las nenas buenas toman toda su lechita
  • Mm… soy una nena buena – Digo mientras termino de saborear su semen y limpio su rica verga

Luego de limpiársela, me subí a él, como una Cowgirl, y frote mis nalguitas con su verga ya algo blanda

  • Espero también me des lechita por ahí – Le digo con un tono bien femenino y seductor, el mejor que pude
  • En donde quieras, chiquita – Respondió

Lo abrasé y comencé a besarlo, podía sentir su verga lentamente endureciéndose entre mis nalgas, ¡se sentía tan rico!

  • ¿Quieres cabalgar a este macho? – Pregunto dominante
  • ¡Sí! – Respondí, dando pequeños saltitos, con cada salto sentía su verga aun mas, N sonrió levemente
  • Bien, espera – Dijo N preparando el lubricante, lo alcanzo y se puso un poco en su verga y en mi culito, corriéndome mi tanguita y metiendo un dedo, ¡que me volvió loca!

Tome su rica verga dura con mis manos y lentamente me senté sobre ella, su glande presionaba mi culito cada vez más, hasta que cedió, y entro

  • ¡Ah, Está entrando! – Grite de emoción
  • Sigue chiquita, sigue – Ordenó

Cada centímetro de su palo de carne dolía más y más, ¡pero un macho me estaba penetrando! ¡Era yo ya una hembrita con todas las letras! Me vi vestidita, arreglada, cabalgando un macho, y me excite como loca, comencé a moverme, a lo que él respondió con lindos gemidos.

  • ¡Bautízame, dame de tu leche, dame más de tu leche! – Rogaba ya desesperada
  • Tranquila pequeña – Me dijo – Te hare hembra, ¡Mi hembra!
  • ¡SI! Tu hembra, dame leche

Pedía leche desesperadamente, N me sujeto, me acerco a él y comenzó a moverse, mi culo sentía ahora su verga entrar y salir a una velocidad muy superior, me volvió loquita, por todo el morbo ya no aguantaba mas

  • Ah, Ay.. ¡SI! Que rico, me vengo… me vengo
  • ¡Ahora sí, tómala toda!

Se corrió dentro mío, me lleno mi interior de su tan preciada leche de macho que yo tanto pedía, yo me corrí sobre su pecho. Luego de nuestro orgasmo lamí mi propio semen de su cuerpo mientras le daba besos, podía sentir su leche caliente en mi interior, y su verga más suave aun dentro, solo me recosté en su pecho y descanse, el me abrazo y acaricio mi cabello, diciendo

  • Muy bien Agustina, muy bien

¡Espero les halla gustado ;)! Ya saben mi mail es izumi.desu@yahoo.com me gusta hablar de estas cosas y jugar rol y por cámara, son todos bienvenidos a agregarme

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