Mujer mayor: robada y desvirgada

Tres ladrones entran en una casa, roban y violan a una mujer de 60 años frente a su esposo.

Mujer mayor: robada y desvirgada

"He escrito este relato a solicitud de una persona que me dice que es verídico, espero que sea de su agrado"

He estado hablando con mi vecino y poco a poco me ha ido confesando una tragedia por la que pasaron el y su esposa.

Don Manuel es un señor de 70 años, del tipo normal tranquilo y aun fuerte para su edad, que ha base de trabajo llego ganar lo suficiente para mantener a su esposa Doña Juana y a su hija, así como para poder subsistir en estos su últimos años.

Doña Juana es una señora de 60 años, bastante pasada de carnes y que tiene un inmenso culo, tal ves en su juventud debió de a traer la mirada de más de varios por la calle, pero ahora si bien uno la mira es por el morbo que puede causar ese gran culo, que lucha por mantenerse equilibrado dentro de la silla cuando doña Juana se sienta en alguna.

Pues bien, como decía si no son ricos, si viven con algunas comodidades que pueden llamar la atención y que desgraciadamente para ellos, lo hicieron, y por su edad y el hecho de vivir solos, ya que su hija radica en otra ciudad, son un blanco fácil para algunos pilletes.

Eran aproximadamente la una de la mañana cuando don Manuel se levanto de su cama, por causa propias de la edad, debía levantarse dos o tres veces al baño durante la noche, su esposa acostumbrada no reparo en esto, el baño se encuentra en el segundo piso, a unos pasos de la recamara, por lo que el trayecto no presentaba mayor dificultad, sin embargo al salir del baño, escucho algunos ruidos en la planta baja, esto le preocupo mucho ya que su oído no estaba en las mejores condiciones y para escucharlo debió ser algo muy fuerte.

Con el mayor sigilo posible bajo las escaleras para verificar de que se trataba, pese a no tener ninguna luz encendida la luz de la calle permita ver con relativa claridad. Recorrió la sala, el comedor y al no encontrar nada extraño se tranquilizó, solo le faltaba la cocina así que aprovecho para entrar y buscar un vaso de leche, al abrir la puerta sintió un fuerte golpe en plena cara que lo hizo caer de espaldas, sintió como era levantado fácilmente y colocado en una silla, algo pegajoso en sus manos le impidió separarlas, lo mismo que ató sus pies.

Aun mareado por el golpe, trato de distinguir tres personas, que se movían de un lado a otro cerrando las cortinas, abriendo cajones y encendiendo luces, ya con las luces encendidas pudo distinguir claramente a los tres vándalos:

Uno moreno, con barba y una gran panza al que después supo que llamaban "Gordo" y que pesadamente verificaba que nadie del exterior pudiera ver lo que ahí pasaba, el "tuerto" delgado y lampiño que iba y venia de un lado a otro checando cajones, puertas y todo lo que se encontraba. Y finalmente un negro alto y corpulento, con la cabeza rapada y una llamativa barba de candado que lo sujetaba con una mano, mientras terminaba de amordazarlo y a quien llamaban "Gorila" y por sus características y color no podía tener algún mejor calificativo.

Pues nos descubrió este pendejo, dijo el gorila, ya sabia que el pinché gordo no debía venir, si hicieras más ruido tendríamos a toda la policía aquí.

Oh, chinga, pues te dije que no movieras tanto la lámpara, pero con eso de que te sientes el jefe haces lo que se antoja, cabron!!

Bueno pues tal vez sea algo de suerte, a ver piche ruco, canta de una vez y dinos donde guardas el dinero y todas las cosas de valor, dijo el gorila, mientras zarandeaba bruscamente a don Manuel.

Nnnnooo, no tenemos nada, todo essstttta en el ba.. ba.. banco, lo único es lo que tengo en la billetera, serán doscientos pesos llévense lo que quieran pero por favor no NOS hagan daño.

Doscientos pesos, me lleva la chingada pues que nos estas viendo cara de limosnero o que, no queremos lo que "sea tu voluntad" pendejo, es un asalto y si no ‘cantas’ te va a llevar la chingada

y a tu esposa, completo "el tuerto", se me había olvidado la cerda esa.

Don Manual por el susto dijo no NOS hagan daño, palabras que surtieron efecto en el "tuerto" por lo que recordó a su esposa, que estaba tranquila durmiendo en el segundo piso.

Tráiganla, dijo el "gorila", y el "tuerto" y el "gordo" obedecieron rápidamente.

A los pocos minutos Don Manuel escucho varios gritos en seguida vio bajar a su esposa que traía puesta su bata de franela que se abotonaba desde el cuello hasta los tobillos, era una bata blanca con figuras de nubes y borreguitos, al verla parecía un gran costal de galletas o dulces para niños, dando traspiés, producto de los empujones que le obligaban a caminar, doña Juana llego a la sala, cayendo casi a los pies de su esposo. Traía una mejilla bastante colorada y lloraba abundantemente mientras balbuceaba ¿Qué pasa?, ¿quienes son ustedes? ¿Qué quieren?, un seco y fuerte golpe del "gorila" en la otra mejilla la hizo gritar nuevamente, aunque el "gordo" ya preparado, la amordazo, para evitar que sus gritos se escucharan.

El "gorila" nuevamente se dirigió a Don Manuel:

A ver cabron, o me dices donde esta el dinero o a tu pinché cerda se la carga la chingada, y al decir esto mostró la filosa navaja que traía en la bolsa y la cerco peligrosamente al cuello de la señora.

Por favor!, ya les dije que no tenemos más, ¡¡se los juro!!, en el tocador de mi esposa esta una cajita con las pocas alhajas que tenemos y nuestros relojes, es todo no hay más, tengan piedad!

El "tuerto" rápidamente se dirigió al lugar señalado, mientras el "gordo" hacia una nueva revisión, tomando todo lo que consideraba pudiera tener algo de valor. El "tuerto" regresó con la caja en las manos, al revisarla, había algunos anillos, esclavas, cadenas, aretes y demás cosas que si bien no era mucho si resultaron atractivos y parecieron calmar un poco a sus agresores.

Bien parece que la noche mejoró un poco, dijo el "gorila" mientras se acomodaba tranquilamente en el sillón de la sala, te creo que no tengas más dinero, para mantener a esta pinche vieja debes gastar una fortuna, lo que ha de tragar!!

Y de cagar!! Dijo el "tuerto" con ese pinche culote ha de romper la taza cada vez que va al baño, y todos soltaron una gran carcajada,

Pues yo creo que si te la mata pinche "gordo" ha de ser como dos veces tú cabron.

a ver viejito dime algo, dijo el "gorila" quien ahora se acomodaba en una silla frente a don Manuel y apoyaba una bota sobre doña Juana, que continuaba sollozando amordazada y en el piso, como le haces para cogertela? Seguro que no se sube en ti, verdad? Por que si no que chinga llevas!!, y cuando se la metes por el culo si le llegas? O con tanta carne no le encuentras el hoyo?.

Don Manuel no contestaba solo se dedicaba a suplicar que se fueran y los dejaran tranquilos, pero una fuerte cachetada lo volvió a sacudir, ahora era el "gordo",

entonces todavía te la cojes?

Nnoo.

Seguro ya ni se te para pendejo, hace cuanto que tu esposa no recibe verga?

2 meses

Ay güey!! Pues mira no es tanto tiempo, seguro tomas algo y como se la metes

silencio

contesta con una chingada, cómo te la coges ¿por el culo?, ¿te la mama?, habla!! Y un nuevo golpe.

Solo por la vagina, contesto tímidamente

Qué? (golpe) habla más fuerte cabron.

Sólo por la vagina, solo ahí

Bueno eso ahora, pero antes bien que le rompiste el culo verdad y de seguro se trago tus lefa varias veces, no es así?

Nnno, no.

No? Pues qué haces pendejo, por que no?

Mi religión… es pecado… mi dios… solo permite que sea por la vagina, solo eso, lo demás no es para … eso.

Pues mira que güey nos encontramos aquí, entonces nunca has sentido una polla en ese culote, dijo el "gordo" ahora dirigiéndose a Doña Juana,

Doña Juana solo atino a sollozar a un más, un río de lagrimas brotaban de sus ojos. Mientras evadía mirar a su esposo, que también sufría y se sentía humillado ante el tipo de preguntas que le realizaban y que era obligado a contestar, principalmente porque su ahora frágil cuerpo no podría soportar el castigo por mucho tiempo.

El "gordo" parecía cada vez mas excitado, cosa que no era de extrañar ya que por su ‘sorprendente’ físico no se podía decir que tuviera muchas mujeres rondándolo.

Pues esto me esta gustando, nunca he desvirgado a nadie y ahora resulta que esta pinche vieja no ha recibido un buen trozo en el culo y que jamás a probado la leche de macho- dijo- oigan y si como "compensación" de lo que nos llevamos le hacemos el favor a esta vieja para que sienta lo que es tener una buena verga en sus hoyos.

Y dicho esto se acerco a doña Juana y de un tirón abrió su bata dejando al descubierto una gran cantidad de carne que luchaba por contenerse dentro de un sostén blanco y unas enormes bragas también blancas.

-No mames (tuerto) a mi me da asco tanta pinche grasa, solo de verla creo que voy a vomitar

Pero al "gordo" parecía no importarle esto y con ayuda de la navaja quito el sostén quedando al descubierto unos gordos pechos caídos, que terminaban en unos pezones grandes y oscuros, posteriormente corto las bragas que dejaron ver una gran mata de pelos negros, que obviamente, cubrían desarregladamente la vagina de la mujer.

Al ver esto don Manuel estallo en furia, y comenzó a gritar desesperado, ¡déjenla, por favor déjenla en paz, llévense lo que quieran pero ya déjenos tranquilos!, y se debatía en la silla tratando desesperadamente de soltarse, pero un tremendo golpe del "gorila" en el estomago, acallo los gritos de este dejándolo sin aire y aun más maltrecho de lo que ya estaba.

Mira pendejo, mejor cállate, que si pensábamos irnos, ahora vamos a hacerle el favor a esta gorda y nos la vamos a coger por todos sus hoyos, le vamos a desvirgar ese pinche culote que tu jamás tocaste, y que ahora tendrás que presenciar como se lo rompemos y cómo ella va a gozar hasta quedar muerta, cabron!

Pónganla en cuatro patas y quítenle el costal que trae puesto, pidió el "gorila", cosa que intentaron sus secuaces, arrancando por completo su bata, era un espectáculo bastante desagradable, ver como intentaban mover ese pesado cuerpo completamente desnudo y lleno de celulitis, lo único que consiguieron fue voltearla, pero solo se mantenía acostada.

Vaya que pesa y no se quiere mantener.

Pónganla en ese sillón, era una especie de silloncito sin respaldo, de tal forma que solo el tronco quedaba en él y su cabeza y sus piernas colgaban, quedando en cuatro perfecto.

Una vez colocada en esa forma los tres se sacaron las respectivas vergas, el "gordo" tenia una verga de unos 16 cm pero bastante gorda, con un capullo rojo y pelado, el "tuerto" la tenia un poco más delgada pero también más larga de 22 cm y finalmente el "gorila" mostrando una enorme verga de no menos 27 cm de largo y bastante gruesa, doña Juana al ver aquellos pedazos de carne, abrió desmesuradamente los ojos, ella no conocía más verga que la de su marido, que si bien no era pequeña (parecida a la del "tuerto"), no se comparaba en nada con la del "gorila"

Tomando su cuchillo el "gorila" se acerco a la cara de doña Juana, "escúchame bien puta, tienen que hacer todo lo que te digamos si no quieres que este cuchillo pruebe tus carnes y además se la vamos a cortar a tu marido"

y haciendo una seña al "tuerto", este procedió a abrirle el pantalón a don Manuel y dejar al aire su flácida verga, y acercándole una nueva navaja, ya que al parecer cada uno venia armado con una de ellas.

"Así que te vamos a soltar y no vas a gritar ni hacer ninguna pendejada, además mas a gozar mucho" espeto el "gorila", a lo que sin más remedio doña Juana asintió con la cabeza.

Un vez confirmado le quitaron la mordaza, y de inmediato el "gordo" se situó enfrente de ella y pasándole la verga por toda su cara le dijo "ahora vas a aprender a mamar y lo vas ha hacer muy bien, y mucho cuidado con morderme porque entonces me conocerás"

Doña Juana sin poder disimular el asco que sentía al tener la verga en su cara, cerraba los ojos como si así logrará escapar de la realidad, pero los abrió con susto, al sentir que la cabeza de esa verga presionaba contra sus labios, el "gordo" sin dejar de amenazar le empujaba la pija contra su boja y sujetándola fuertemente con la mano, la obligo a abrirla, apenas consiguió que la abriera un poco, y sin más se la dejo ir completamente, ocasionando que doña Juana tuviera una gran arcada, seguida del vómito, que alcanzó a ensuciar la verga del "gordo",

si serás cerda, so puta, me has vomitado la verga, ahora me la vas a limpiar y seguirás mamando hasta que me canse,

dicho esto volvió e meterle la verga en la boca con restos del vómito que doña Juana tuvo que tragar, y realizando un gran esfuerzo, logro contener el vómito que nuevamente amenazaba con llegar, en cada metida sentía como los huevos del "gordo" chocaban contra su barbilla, y sus pelos se le metían en la nariz, no podía distinguir ningún sabor ni olor, estaba totalmente bloqueada, no comprendía como podían hacerle eso, a ella, a su edad y aun sabiendo que era pecado, pero ahí estaba, con una verga en la boca que le llenaba completamente, y que le producía un asco insoportable, quería alejarse, morirse, no pensar, cuando de momento un fuerte ardor la trajo de nuevo a la realidad, era el "tuerto" que sin previo aviso y ni que decir lubricación, le introdujo de un golpe la verga en la vagina, que al estar totalmente seca le producía un dolor que nunca había sentido, parecía que ni en el parto de su hija había sentido tal desgarramiento de sus entrañas.

Ahora estaba así con dos vergas al mismo tiempo violándola a placer y produciéndole cual más un infinito sufrimiento físico y si es posible aun más: moral.

a la madre, como duele, pero si esta puta esta completamente seca, pero no importa parece que hace tiempo no te cogen por que aprietas como una buena puta, decía el "tuerto" mientras comenzaba con un rítmico mete y saca, que en ocasiones detenía al sacar casi completamente la verga de la vagina que ya mostraba unos restos de sangre, producto del desgarramiento, y procedía a metérsela nuevamente de golpe.

Mientras tanto el "gordo" aceleraba el bombeo y sintiendo cerca la eyaculación, medio al fondo de la garganta la verga para terminar en varios chorros de semen, que doña Juana no tuvo más remedio que tragar completamente.

para ser tu primer mamada, no estuvo nada mal, mira que guarra has salido, si casi me dejas seco y nos has desperdiciado nada, decía el "gordo" mientras sentía como su verga se reducía dentro de aquella boca recién desvirgada.

Me corro puta,!!! Te voy a preñar!!, vas a tener un hijo-nieto!!!, gritaba el "tuerto" al momento que le inundaba la vagina con su semen, producto de la corrida que estaba teniendo.

Así ya dos habían terminado, don Manuel, no daba crédito a lo que acababa de ver, su esposa era follada por dos partes a la vez y los dos habían terminado dentro de ella, algo que ni en sus peores pesadillas había ocurrido, y lo aun faltaba por venir; él ya no tenia fuerzas para luchar, estaba agotado, y solo se limitaba a llorar mientras que rezaba en silencio, ya que la mordaza puesta no permitía que ningún sonido escapara de su boca.

ahora es mi turno, dijo el "gorila", mientras se acercaba a ella por detrás, ahora vas a saber de lo que te has perdido durante tanto tiempo, y vas a lamentar haber desperdiciado ese culo tantos años.

Y al decir esto introdujo de golpe uno de sus dedos, doña Juana pego un respingo, aquello le produjo nuevamente un dolor, pero distinto, aunque no menos intenso, pues claro esta no se había lubricado.

Sin esperar más el "gorila" introdujo un segundo dedo, que comenzó a meter y sacar rápidamente, al parecer la paciencia no era cualidad de este tipo, y sin verificar si había una dilatación, escupió dos veces la cabeza de su enorme pene, comenzó a meterlo con el estrecho y virgen ano de doña Juana, quien ahora se sentía desfallecer y buscaba por todos lo medios de librarse de esa tortura que le partía el culo en dos sus gritos podrían haberse escuchado a kilómetros de distancia, de momento sintió desfallecer y por unos breves segundos se desmayo, pero solo había entrado la punta de la verga así que ya acomodado el "gorila" le dejo ir casi la mitad de su miembro, el dolor fue mucho mayor, aunque parecía imposible que así fuera, iba en aumento de tal manera que la hizo volver de la inconsciencia a doña Juana con un segundo grito, que aprovecho el "tuerto" para meterle la verga por la boca, ya que como resultado de la escena se encontraba nuevamente erecta, llegándole a la garganta, y nuevamente le produjo una arcada, esta reacción la hizo saltar hacia atrás lo que el "gorila" aprovecho para meterle la verga hasta que los testículos rebotaron en las nalgas de su victima, a pesar del tamaño de la verga que tenia en el culo, apenas y estaba de acuerdo al volumen del cuerpo obeso de doña Juana, comenzó el mete saca, taladrando cada vez con mayor fuerza el recién desvirgado culo, y causando en cada embestida un mayor dolor.

A pesar de lo incomode de la postura de doña Juana, el "gordo", no quiso quedar fuera y busco la forma de meterse debajo, para introducir su verga dentro de la vagina, que aun tenia restos de semen y sangre, para que de esta forma, doña Juana fuera violada por los tres hoyos, al mismo tiempo, al momento que le entraba cada verga sentía como chocaban en su interior y el dolor se mantenía, si bien su vagina se encontraba un poco más lubricada, el ano le ardía horrores, además de la sensación de tener lleno el intestino y que en cualquier momento tendría que evacuarlos, no había forma de disminuir el dolor, que pensaba que ya era mucho mayor que la humillación.

A cada perforación, sentía como era partida, como su ano se desgarraba y su cuerpo se cuarteaba completamente, como su mente llegaba al borde de la locura, por no comprender el por qué le estaba pasando esto a ella, siendo no más que una masa de carne sin voluntad, sin fuerzas sin… alma.

El "gorila" después de un intenso bombeo comenzó a incrementar la velocidad para finalmente empujar a fondo su verga y terminar en una tremenda corrida, que inundo el interior de doña Juana y que sintió tal potencia que pensó que le saldría por la boca, si esto fuera posible.

aahhhh!! Puta madre!!! Pinche gorda, de verdad que eras virgen, nunca había cogido un hoyito tan apretado ¡pero que sorpresas se lleva uno! No le volveré a despreciar a nadie después de esto. Decía el "gorila" mientras retiraba su miembro del culo de doña Juana que quedo exageradamente abierto. Tanto que con facilidad podían entrar tres dedos.

Mira como le he dejado el culo a tu puta esposa, por ahí se puede ver que ha cenado hoy, dijo a la vez que soltaba tremenda carcajada.

Mientras tanto el "gordo" dejo la vagina y paso a ocupar el culo de doña Juana, que si bien estaba bastante dilatado y ya un poco lubricado por el semen y sangre de la cogida anterior, el grosor de su verga ocasiono nuevamente un dolor en es culo, que por lo menos era bastante menor que la primera vez.

El "tuerto" estaba terminado dejando su corrida el la boca follada y dando paso al "gorila",

  • ahora como pago por haberte roto el culo, me la vas a chupar y a dejar bien limpia, metiendo la verga en la ya adolorida boca de doña Juana, y pese a los intentos del "gorila", la verga no entraba completa, era demasiado grande, por lo que tuvo que conformarse con meter solo la mitad de esta.

Pasados 20 minutos los dos terminaron casi al mismo tiempo, llenando nuevamente la boca y el ano de doña Juana de blanca y viscosa leche.

Por fin la dejaron y esta cayo totalmente desmadejada sobre el piso, rodando hasta casi los pies de su inconsolable marido, daba pena ver esta escena, la pobre mujer desmadejada, denuda con restos de sangre de su vagina y su culo, la boca chorreando semen, los ojos secos de llorar y la mirada perdida.

Tanta actividad me ha dado hambre, busquemos algo de comer- dijo el "gordo"- no pensé que cogerme a esta puta fuera tan agotador,

Los otros dos apoyaron la idea y se dirigieron a buscar algo para cenar en la cocina, una vez que tuvieron lista la cena, pasaron al comedor, y el 2tuerto2 tuvo una idea.

No me parece justo que nosotros cenemos y estos dos se nos queden solo viendo, así que tu pedazo de puta también vas a cenar y consolar a su marido, y como ya aprendiste ahora a mamar.

Diciendo esto puso a doña Juana en el regazo de su marido y empujándole la cabeza pego su cara a la verga de don Manuel, que solo atinaba a mover en forma negativa la cabeza, cuchillo en mano el "tuerto" obligo a doña Juana a meterse la flácida verga de su esposo en la boca.

cuidado con sacarla porque ya sabes lo que te espera, tiene que chuparla mientras terminamos de cenar, y por tu dios no te preocupes al ver como has gozado te perdonará, y si no nos veremos nuevamente en el infierno.

Hecho esto se sentó a cenar mientras muy a su pesar don Manuel sentía una erección, producto tal vez del morbo de haber presenciado como era violada su mujer, y también de la mamada que esta le estaba realizando, y contra todos sus esfuerzos y sentimientos, terminó eyaculando dentro de la boca de su esposa, que ya resignada se los trago completos, pero como aun no concluía la cena, continuo su labor por un rato más dejando limpia y brillante esa verga que nunca había probado a pesar de estar juntos por tantos años.

Los tres maleantes terminaron de cenar, recogieron lo robado y se fueron de la casa, no sin antes amenazar de muerte a sus victimas si decidían denunciarlos. Cuatro horas duró esta pesadilla.

A pesar de ser conocidos, no se realizó la denuncia por temor, ambos quedaron muy afectados, sobre todo doña Juana quien ahora esta en tratamiento y vive con su hija en otra ciudad, don Manuel pronto espera alcanzarla, solo mientras consigue comprador para su casa y tratar de borrar esos recuerdo para buscar sobrevivir en paz los últimos años de su vida.

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