Mujer de Todos - La Estudiante

Otra faceta de nuestra protagonista

esta es la mas corta... tratare de hacerlos mas largos... gracias

Nuestra historia comienza nuevamente en la Academia, Huntington… laprestigiada institución universitaria reservada solo para la elite… era la segunda mitad del día de clases, el almuerzo había terminado hace un par de horas… solo quedaban aproximadamente hora y media para salir… Angie se encontraba precisamente en una de sus clases, sin ninguno de sus “amigos” antes mencionados en los demás relatos (recuerden que el sistema educativo americano es tomar clases por diferentes aulas)… en su clase de química para ser exacto… ella se concentraba en anotar el tema (a pesar de todo sus calificaciones la hacían merecedora de pertenecer al cuadro de honor)… su maestro era un gordito cuarentón, medio calvo, de bigote, estatura promedio y mal carácter… su nombre, LanceBurnok… afamado como el más estricto, cabrón y malnacido profesor de la escuela… esto debido a su forma de tratar a sus estudiantes como si fueran nada, si entendiste su clase, bien… si no, ni modo… dice basar sus métodos  como cuando los entrenadores insultan a sus atletas, pero este wey se pasa… incluso muchos creen que es un pervertido, ya que ha habido ocasiones en que parece que sedujera a las jóvenes… ya sea simplemente así… o utilizando su puesto académico incitándolas a “tomar clases particulares” con él para subir sus notas, pero esto nunca pudo ser comprobado puesto que simplemente lo tomaban como un pobre diablo que no valía la pena… en la clase muchos se hacían patos… puesto que casi todos además de odiarlo, iban regular o mal, pero a Burnok no le importaba esto, el solo estaba ahí por el gordo chequezote que le daban… casi al final de la clase pasó repartiendo las tareas calificadas con amenazas de reprobar, sarcasmos y leves insultos… pero cuando pasó en el pupitre de Angie la felicito por otro excelente trabajo (y bien merecido)… cuando Angie vio su hoja, exactamente en la parte superior derecho de esta vio Un dibujo, un circulo como un reloj cuyas manecillas tenían marcadas las 3:30… cuando la chica lo vio una vez más se ruborizó, sin ninguna sonrisa… ya era la hora pactada… ningún alma se le veía por los pasillos de la escuela… con excepción de Angie, por supuesto… al llegar al salón tocó la puerta, cuando le respondieron con un “adelante” y ella obedeció… el maestro estaba sentado en su escritorio.

Llegas tarde

Lamento el retraso, profesor

Olvídalo… ¿lista para tu “tutoría”?

Angie miró cabizbaja y simplemente acertó y se acercó, Burnok quien sonrió maliciosamente y tomó a la chica de forma brusca y la lleva al su escritorio boca arriba donde él le cae encima y empieza a besarla desesperadamente… sin compasión… tal vez sin experiencia de cómo tratar a las mujeres… sin dejar de meterle lengua a su boca fue abriendo sus camisas para encontrar sus senos los cuales apretaba sin medirse, esto le causaba dolor y a la vez placer a la chica quien no daba resistencia alguna, sus senos fueron besados, sus pezones sentían los labios y lengua del viejo… los chupaba, los succionaba… más lengua… más labio… su mano se metió debajo de su minifalda buscando su entrepierna, bruscamente la estimulaba… Angie lanzaba pequeños gemidos… ¿realmente lo disfrutaba?... como llegó a esto… una vez más… su adicción fue la culpable.

Hace un par de meses, exactamente a esa misma hora, Angie se encontraba en el baño de damas… masturbándose… así es… ella estaba encerrada auto explorándose… ella misma se decía “esto está mal”… se decía que la descubrirían si seguía así… se contradecía a si misma… pero su cuerpo decía otra cosa… estaba en el punto máximo del placer… sus gemidos eran minimizados por la paredes del lugar pero no eran suficientes para darle privacidad a la joven… fue aumentando el ritmo de sus caricias cuando por fin tuvo su orgasmo haciendo que lanzara un gemido de placer mientras mojaba el piso… en ese momento la puerta del baño se abre, una luz le lastima los ojos… cuando logra ver de nuevo su rostro se llena de horror… ya que había sido burnok con un rostro malicioso quien la había descubierto… y aun peor… le tomó una foto con su celular en el estado en el que se encontraba… después de eso esa misma tarde y en ese mismo momento Burnok hacia que le diera una mamada, el rostro de Angie mostraba incomodidad una vez más, pero no se resistía… “pequeña puta”, fue lo que el degenerado le dijo a la chica mientras ella estaba totalmente nerviosa boca arriba en la taza, con las piernas al aire sosteniéndolas desde los muslos… entonces el gordo la penetra… se la metía con ganas, sin piedad haciendo que Angie lanzara quejidos… y a lo último Angie estaba de rodillas encima de escusado, mientras era culiada por el perverso maestro, Angie nuevamente estaba totalmente perdida por el éxtasis, solo gemía y gemía por cada embestida que el maldito le daba, hasta que Burnok ya no pudo más y se corrió dentro del culo de la chica, haciéndola gritar… Angie se encontraba en el suelo, con su rostro bañado en semen… y sus partes mojando el piso con sus fluidos y semen combinados… en ese momento Burnok la amenazó que si no se convertía en su puta privada subiría las fotos a internet… Angie simplemente asintió con la cabeza… así que cuando se le antojaba, Burnok simplemente le daba el dibujo antes mencionado y si era posible el de un auto, refiriéndose a que lo vería en el estacionamiento… o una casa refiriéndose a que la esperaba en su departamento… esto último normalmente los fines de semana aunque no eran frecuentes… Burnok será un maldito pero no era estúpido, Angie tenía que encontrar la forma de acomodar su horario con el de los demás… ya sea por su hermano, su “novio” o su amiga… o incluso por sus padres (solo para no levantar sospechas)

De vuelta al presente, Angie estaba desnuda, mamándosela al enajenado profesor, succionando sus huevos, usando sus labios, pasándole la lengua… le ordenó  que usara sus melones de puta y ella obedeció… puso ese plátano entre sus dos frutas haciendo un titjob… moviéndolas de arriba abajo… sacudiéndolas… y sin dejar de comerse esa “fruta” (¿o carne?)… Burnok acariciaba sus cabellos viendo a su “perrita”, diciéndole cosas sucias, burlándose de ella en especial hablando de su posición social y de su familia, pero Angie ni se inmutaba, ella seguía concentrada en “sus estudios”… “abre la boca” fue lo que le dijo el calvo y ella obedeció recibiendo dosis de leche que salían disparados de ese falo, manchando el interior de su garganta y todavía un poco en su rostro… Burnok le ordenó acomodarse boca abajo en su escritorio y ella obedeció… la tenía con el culo paradito, Angie temblaba pero no se quejaba.

Eres una niña muy sucia, ¿verdad?... responde

mmm… si… soy muy sucia

¿La quieres?... ¿quieres mi pene dentro de ti?

Ahh… si… lo quiero dentro

¿Qué tanto lo deseas?

… mucho

¿Ehh?... no te escuche… quiero escucharte decirlo

… ¡Quiero que me la meta toda!

Una malvada sonrisa se dibujó en rostro del perverso profesor… y la tomó de su hermoso trasero y llevó su tranca hacia su vulva mojada… primero la roso para mojar su punta… jugaba con ella… Angie solo lanzaba leves gemidos… esperando… pero Burnok no tenía prisa alguna, también la rozó por su agujerito y le metió la puntita masajeándole el ano con su glande, Angie se estremecía por esto… Burnok finalmente decidió metérsela por la concha, fuertemente, cada embestida lanzaba un quejido, sexo rudo para la chica sucia… sin piedad le daba fuerte mientras con su pulgar le masajeaba el ano… dos por el precio de uno, Angie se perdía en su frenesí de placer carnal creando garras con sus manos en el escritorio…

¿Te gusta, puta… ehh… así es como te gusta?

¡Mmm, siii… me guustaaa!

¡Eres una puta sucia!

¡Siii… lo soooyy… aahh! .

Más fuerte, más rápido, más duro… no había piedad para esta chica… no lo quería, ella quería ser satisfecha… quería sentir ese placer del cual se había vuelto adicta… no le importaba como, solo lo deseaba… Burnok pacería que se le iba a subir encima, Angie tenía el rostro pegado al escritorio… estaba totalmente excitada, gemía de placer, gritaba… todo el frenesí estaba a punto de llegar a su fin cuando Burnok se corre dentro de ella, al igual que Angie, mojando todo el escritorio… Burnok ya se estaba vistiendo y preparándose para irse… a diferencia de Angie quien seguía acostada boca abajo, desnuda, sudada, manchada y chorreando de su entrepierna… con su rostro de felicidad por haber llegado al éxtasis una vez más.

Excelente sesión de estudios, Angie… nos vemos luego

… si…

Y ahí la dejo… abandonada a su suerte… otro tonto que cree tenerla para sí mismo… para su deleite.